Partida Rol por web

Hola. Dijo Miguel mientras se ponía en pie y miraba con un gesto serio a todos los presentes. Mi nombre es Miguel. He estudiado la carrera de INEF y después he realizado un curso de monitor de actividades y tiempo libre. Además soy un aficionado a la escalada, la pesca y todo tipo de aventuras. En verano suelo trabajar aquí, pero no paso demasiado tiempo, tan solo unas semanas. Dijo mirando al resto de monitores. Soy el más mayor de todos ellos, dijo aunque era algo que resultaba evidente, y soy el jefe. Así que cualquier problema que tengais con cualquiera de ellos, no dudéis en decírmelo. Yo trataré de resolverlo.

Las actividades que realizaremos fuera del campamento correrán de mi cargo, e igualmente las del espacio multiaventura. Por lo demás, deciros que todos nosotros estamos alojados en el bungaló más grande y que está abierto las veinticuatro horas del día. Mostró una gran sonrisa y se volvió a sentar. Luego se puso de nuevo en pie. Y bueno, cualquier duda hacedla ahora, o quizá será mejor que vayamos yendo al comedor y allí lo vamos hablando. Se nos está haciendo tarde. Dijo mientras se volvía a poner en pie y trataba de ir dando por finalizadas las presentaciones.

El director miró al jefe de monitores, y en ese momento una de las monitoras se fue a poner en pie. Pero Luis la interrumpió soltando un chiste malísimo.

Miró directamente a Ana y le dijo: ¿pacense? ¿eso qué es, qué eres una vaca? ¡Pacense significa que paces en el campo! ¡Tú mejor que no duermas en un bubgaló! Tú mejor podrás dormir en el establo. Dijo haciendo esos comentarios con muy mal gusto.

¡Ah, no! Que has dicho que si necesitamos un cura te llamemos a ti. Espera... dijo levantando la mano, ¿das misa de doce? ¡Avísame para que venga a tiempo!

La mirada de Marta de "cállate la boca no pasó inadvertida para nadie, quizá solo para Luis. Aquellos chascarrillos no eran nada agradables para nadie, pero ya sabía que a veces era mejor callarse y no levantar problemas el primer día de convivencia. Marta se puso en pie para mirar directamente a Luis y hacer que así se callara, y entonces comenzó su presentación.

¡Buenos días, chicos y chicas! Dijo emocionada y contenta. Mi nombre es Marta, y soy la segunda al mando. Guiñó un ojo a Miguel y continuó. Yo me encargaré de las actividades de interior, me encantan los juegos y los pasatiempos. Así que cualquier sugerencia o actividad que querais hacer, comentádmela porque seguramente podamos pasárnoslo muy bien. ¡Si fuera por mi estaría aquí siempre! Esto es muy divertido y ya veréis como os lo pasais en grande. ¡Pero vamos! ¡Animaos! Tenéis unas caras muy largas. ¡Parece que no hubierais venido aquí a disfrutar! Su presentación se vio interrumpida por un fuerte rugido de sus tripas.

Jodé, ¿no tenéis hambre?

En cuanto se sentó Marta, Javier se quedó mirando a Sandra, no sabía si le tocaba a él o no hacer la presentación. Al ver que ella no se decidía a ponerse en pie, lo hizo él con algo más de timidez. Bueno... dijo rascándose la cabeza y algo avergonzado. Yo soy el más novato de todos, hoy... dijo haciendo una pausa, hoy es mi primer día y vosotros sois mis primeros... no sabía como definirlos así que prefirió cambiar de tema, soy el ayudante de Miguel y estaré con él en casi todo momento, y... bueno, no sé qué más contaros sobre mi. Espero que no sea demasiado torpe y que os lo paséis bien conmigo.

Gracias.

Concluyó su presentación algo avergonzado por las palabras tan tontas que había dicho.

¡Hola! Dijo poniéndose en pie Sandra. Yo soy Sandra, soy la encargada del mantenimiento de la granja y cualquier actividad que realicemos con animales. Dijo mirando a todos. Era bastante seria la chica y no parecía que quisiera tener mucha simpatía con los recién llegados. Es como si nada de todo aquello le importase, como si lo que estaba haciendo lo hiciera solo por el dinero y no le interesase nada más.

Me encantan los animales, tengo muy buena mano para ellos y si a alguien le gusta que no dude en venir a visitarme a la granja. Por lo demás, dijo mirando hacia el comedor y hacia el director. ¿Qué tal si nos dejamos ya de estas tonterías de niños pequeños y nos vamos a comer? Preguntó de forma retórica pues no esperó respuesta alguna para dirigirse hacia el comedor.

Sara se queda mirando al director bastante sorprendida cuando hace esa broma que le parece de bastante mal gusto, le mira y niega con la cabeza, entonces mira a la chica que lo habia dicho lo de que era pacense y lo del cura y le dice meintras guiña a la chica y en tono de broma dice:

- Señor director lo siento mucho pero son misas para chicas, asi que no tiene permitida la entrada asi que se tendra que quedar con las ganas

Guiña exageramente y se pone de pie acercandose a Ana y le dice:

- Entonces que, te vienes a comer y planeamos la reunion solo de chicas?

Mira al director y hace un gesto de lo siento 

Idris en cualquier hueco que pilló se presentó como pudo contando a sus compañeros con un acento británico bastante fuerte que era de Londres, que trabajaba como empleada de un sitio de comida rápida muy conocido allí y que estudiaba para magisterio. No dijo demasiado porque le daba algo de vergüenza y no sabía expresarse mucho mejor así que se sentó para una vez dieran la señal de salida al comedor dirigirse a él.

La pelirroja esperaba que dieran permiso para dirigirse al comedor y llevarse algo a la boca, estaba tan cansada que había prestado poca atención a las presentaciones de los monitores.

Anabelle escucho a la chica inglesa, Idris creyó escuchar que se llamaba, cuando esta se sentó después de presentarse de forma breve pero notable se acerco a ella y dijo en ingles:

-por aquí hablan tan rápido el español que casi no les entiendo, creo que nosotras nos entenderemos perfectamente, yo también soy de Londres y Kaley también- señalo a su acompañante rubia que miraba al director de forma extraña porque el director estaba haciendo una broma, Anabelle también le miro así debido a que no lo entendío. Si ya no les entendemos bien cuando hablan rápido, sus palabras pueblerinas menos aun…

Ana se quedó blanca cuando el director le dijo todo aquello, como un hombre que tenía un negocio podía tratar así a sus clientes??? además, que alguien de Madrid no supiera que pacense era el gentilicio de Badajoz, pase, pero estábamos en Hervás. 

Se puso de pie algo nerviosa y notablemente colorada. Quería aclarar aquello, no estaba dispuesta a pasar por idiota y que el resto del personal pensase que se había llamado así misma vaca.

Perdone señor director aclaró su garganta algo nerviosa pero pacense es el gentilicio de Badajoz, no soy una vaca.

La chica parecía molesta, y estaba claro que no le había hecho gracia.

y mejor no vengas a pedirme una cura......

imbécil, subnormal, que tío más tonto, vete ya!!!

Y si lo había hecho con intención de hacer una broma, le había salido bien mal, porque Ana era muy estúpida para las bromas. Aunque dudaba que esto le hiciera gracia a alguien.

Le sonrio a Sara agradecida cuando dijo aquello.

Si, mejor vámonos! Le respondió. No tenía ganas de ver más al director, y esperaba impaciente a que se marchara de una vez del campamento.

Madre mía, este director está para llevarlo al club de la comedia. Vaya manera de pasarse con la pobre Ana.

Sumido en estos pensamientos sigo al grupo hasta el comedor porque siento cómo el estómago pide a gritos que le eche algo dentro.
 

Sara sale acompañada de Ana mientras dice en susurros:

- Bueno comamos algo, por cierto un placer, soy Sara, parece que esto lo dirige un perroflauta no?

Y le sonrie de forma complice

Brandy había dejado de escuchar tras la última intervención del director, fue vagamente consciente de la presentación alegre de la monitora rubia, el monitor novato le causó ternura y se prometió a sí misma ser buena con él, y si podía, ayudarle en lo posible, Miguel y Sandra le transmitieron fuerza y le cayeron bien, sobretodo Sandra, se identificó con su actitud y con su carácter decidido. 

Sin embargo, sus ojos negros y algo rasgados permanecieron fijos en Luis. Algo se había removido en su interior al escucharle dirigirse de aquel modo hacia la chica enfermera. Una parte de ella se preguntó si estaría colocado, quizá sí; No era propio de alguien al cargo de un lugar como aquel comportarse de ese modo ¿Esperaba que sus comentarios hicieran reir a los allí congregados? ¿Qué coño le pasaba a ese tío?

Lo que sí debía ser cierto es que los monitores más veteranos no eran ajenos a aquellos exabruptos, la rubia reaccionó con una mirada bastante expresiva, dándose prisa en hablar como para desviar la atención sobre las absurdas palabras del jefe del cotarro.

De pronto todo el mundo estaba de pie y listos para marcharse, y ella se descubrió con la espalda recta, las manos convertidas en puños cerrados y la mandíbula tensa debido a que tenía los dientes apretados. 

"Cálmate" se dijo relajando los hombros y poniéndose ella también de pie, intentando aparentar normalidad "El tipo debía querer gastarnos una broma, no estaba riéndose de la chica, ni burlándose ¿Por qué iba a hacer algo así? Bah, déjalo correr, quizá solo sea un borracho, cosas más raras has visto."

Como para quitarse el asunto de la cabeza, paseó la vista por los demás, y buscó entre el grupo a Ana "pacense", cuando la encontró y sus miradas coincidieron, le dedicó una media sonrisa y un guiño cómplice, no se conocían, pero con ese gesto pretendía expresarle que estaba con ella y que la gilipollez que Luis acababa de soltarle no había más que eso: la cobardía de un abusóncon el que consideraba más débil el primer día de colegio.

Luego se giró hacia la puerta y se dispuso a salir junto con los demás dirección al comedor.

Tras él, sólo dos más se presentaron antes de dar paso a los monitores. El primero fue Miguel, intentando dar una buena impresión, aunque el tufo del señor no-desodorante llegó hasta Germán, que movió la nariz para evitar tapársela con toda la mano.

Aunque para tapar algo con la mano, hubiese sido mejor la boca del director. Alzó los ojos y los puso en blanco al escuchar tanta gilipollez unida, como si fuese algo natural. ¿En serio todavía sigue viva gente así? pensó, aunque en el fondo le hacía gracia. La falta de tacto y la poca inteligencia dejaba claro que uno de los puntos débiles del director era su cabeza.

Se levantó tras las últimas palabras de Sandra para evitar escuchar más tonterías. Se fue directo al comedor, que también tenía hambre.

Anabelle salio del salón para ir hacia el comedor con su nueva amiga Idris y Kaley que había estado distante durante las presentaciones de los monitores. sera por el hambre, debe estar muy cansada penso mientras se dirigía al comedor.

Ana sonríe agradecida a Brandi, cuando trata de transmitirle su apoyo.

Y se rie cuando Sara le hace el comentario del perroflauta. Al menos había gente maja allí, piensa.

Sale con todos del salón para dirigirse al comerdor.
 

Después de que todos se presentaran, Kaley fue al comedor junto con Anabelle e Idris,pese a que aún no había hablado con esta ultima pues estaba agotada y sólo quería que salir de allí cuanto antes.

Viendo como todos camino hacia el comedor, Tom no tuvo mas remedio que seguirlos, no era algo que le molestara tampoco. Luego de solamente haber ingerido la mala comida del autobus, esperaba encontrar algo que realmente sea agradable a sus papilas gustativas. Podia sonar un poco presuntuoso tal vez, no se podía esparar mucho de un campamento tampoco pero no perdia las esperanzas.

Marta salió del comedor hacia el salón principal jugueteando con su lengua entre sus dientes. Le seguía Tobías que seguidamente se marchó y salió de allí. La muchacha se quedó buscando a Tom y a Diane que aún no habían pasado al comedor. ¡Vamos chicos, que no os van a dejar nada! ¡Que se lo comen todo! Animó a sus compañeros para que entraran en el comedor, o se perderían las conversaciones que se estaban teniendo allí.

Mientras hablaba con ellos, Manoli, y después Sandra y Luis, también salieron del comedor hacia el exterior.

- Si mejor vamos - Estaba tan atenta en observar el entorno y a las personas con las que pasaria el proximo me que Diane se quedo un poco en su mundo, tambien había que decir que hacia bastante que no podia relajarse y desde que había llegado a España sentia que al menos tendria un mes de como ella decia "momento kit kat" es decir un parentesis para todo.

Finalmente salio del salon principal poniendo rumbo al comedor.