Partida Rol por web

Mundos de sueño y pesadilla (Hentai +18)

Capitulo 1: Camino onírico

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31/08/2018, 10:05
Rubi Myers

El mundo onírico se desplegó ante sus maravillados ojos, como el óleo gigantesco pintado con una paleta colores verdes y azules. Rubi sintió que sus labios se entornaban en una exhalación de asombro. Era una pasada. Sobrecogedor, precioso y …enorme. Jodidamente enrome. Si de verdad todo aquello lo proyectaba su subconsciente, llevaba a una gran paisajista dentro.

Encontrar esa jodida gema va a ser como buscar una aguja en pajar. Y esa pécora lo sabe…

Esbozó una mueca de concentración al acercarse a curiosear las cajas, con los brazos convertidos en un nudo marinero. Tenía la desagradable sensación de estar tomando un regalo envenenado. Nunca había tenido problemas con sentirse mimada, pero en cuanto pusiese las manos sobre esa caja habría sellado el pacto con el diablo. Ya no había vuelta atrás.

Un bastón. Unas orejas de gato.

Frunció el ceño. Si de verdad esa tropa le iba a intentar quitar la gema no habría nada más terapéutico que un buen garrotazo para convencerles de lo contrario, claro. Pero tenía serias dudas de tener el valor y, sobre todo, de que hubiera un bastón desplegable ahí dentro. Sería un gran invento, pero no.

Entonces torció el gesto hacia la siguiente caja, sintiendo un pálpito extraño cerca del costillar. Era una firme defensora del amor a primera vista y de no pensar las cosas más de dos veces. Tres a lo sumo, si la situación es a vida o muerte. Con una rápida flexión de piernas, se encorvó sobre la caja de las orejas de gato. Le echó una mirada llena de fingida solemnidad a Selene mientras apretaba su regalo contra el pecho.

- Espero que dentro no haya un gatito muerto… -le susurró, mordaz.

- Si es verdad que es muy generosa, aunque una pista de por donde empezar a buscar sería de gran ayuda... -escuchó a sus espaldas. 

Rubi asintió con vehemencia.

- La pelirroja lleva razón -afirmó, convencida- Seamos justos, Señora de las pesadillas.

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31/08/2018, 11:57
Selene, señora de las pesadillas

-Sois unos malcriados, no voy a daros nada pero me estáis empezando a enfadar. -Seguía sonriendo pero por un momento sus ojos se cubrieron de un aura negra y dio una ligera palmada. -Así aprenderéis si...que a la dueña de vuestro destino no se la exige, divirtámonos, el tiempo que os quede.- La imagen de Selene se fue difuminando cada vez mas hasta que al igual que apareció delante de vosotros había desaparecido pero por alguna razón os sentíais observados.

Las cajas que no habíais escogido se desvanecieron de la misma manera pero de las cajas que si habíais escogido se abrieron y pudisteis ver sus contenidos. Reisa encontró lo que parecía ser un collar con una gema blanca justo en medio, era bastante bonito a decir verdad porque la cadena era de plata fina y la figura del collar era como un ojo con la gema en medio. Hagiwara pudo coger de la caja lo que parecía ser una cantimplora y al agitarla podías escuchar que había liquido dentro. Pero los cambios mas grandes los había recibido tanto Tina como Ruby.

Dentro de la caja de Tina había una especie de polvo verdoso que en cuanto se abrió la caja salio volando hasta el rostro de Tina, era un aroma de lo mas dulce y empalagoso, al principio no sentías nada pero luego sentías como si tu cabello pesara mas. El cabello de Tina se lleno de flores verdes y por mas que te las quitaras volvían a brotar como si fueras un césped muy bien fertilizado, el aroma de tu cabello ahora era frutal.

Como se había podido imaginar, Ruby vio lo que parecía ser una pequeña gata en la caja que en cuanto te vio levanto las orejas y soltó un largo maullido dulce, era una gata manchada, con el pelaje blanco con unas manchas blancas alrededor de su cuerpo, por el momento no parecía tener nada de especial, de hecho se estaba lamiendo una de las patitas.

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01/09/2018, 03:08
Hagiwara Kazuhiko

Se quedó mirando su cantimplora, agitandola suavemente para escuchar el liquido moverse. Quería pensar que no se trataba sólo de agua, porque si ese era el caso no podía decirse que le hubiera salido muy bien la elección, pero el resto...

Parpadeó. Reisa había conseguido un collar que, aunque parecía muy chulo, no podía decirse que fuera muy útil en apariencia. Tina tenía... ¿Flores en el pelo? ¿Como si fuera una ninfa? Y por último Rubi... Un gato. Lo cual podría decirse que era más una responsabilidad que una ventaja. Y para colmo, Selene ya no estaba, de modo que con esos regalos y con el pijama que llevaban puesto tenían que apañarselas.

Volvió a mirar en todas direcciones. No sabía dónde estaba la gema y, por lo tanto, tampoco tenía ni idea de exactamente dónde quería ir.

- ¿Qué teneis pensado hacer? - Preguntó mirando al resto, alzando la voz, demostrando que todavía estaba algo nervioso al cambiandose la cantimplora de mano varias veces - No tenemos ni idea de dónde está la gema, y por lo que ha dicho sólo puede salvar a uno. No sé si viajar juntos nos ayudará de mucho, pero al mismo tiempo seremos presa fácil si vamos solos.

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01/09/2018, 18:19
Reisa Hatanaka

Reisa encogió el gesto ante las peligrosas palabras de Selene, como si esperase que ocurriese algo terrible ante su relativa cólera, pero respiró aliviada al ver que no pasaba absolutamente nada. Cuando desapareció, miró seriamente su caja, y como si fuese a abrir la caja de pandora y un monstruo fuese a devorarla, destapó su caja para sonreir al ver la joya que dentro había.

Oh, que bonito! ¡Nunca había tenido nada asi!- dijo, mientras la examinaba mejor al sol. Se había imaginado una cosa completamente distinta, pero el ver un collar así le había alegrado bastante, parecía de verdad un regalo amable y no algo macabro como parecía. Se lo coloca alegremente alrededor del cuello mientras mira a los demás para ver que tenían, quedándose pasmada ante el pelo de Tina y las flores que le habían empezado a crecer. Lanzó un pequeño grito ahogado y le preguntó con una mezcla entre timidez y preocupación: ¡Oh! ¿Estás... Estás bien?

Cuando el chico preguntó sobre sus planes, y se puso un poco nerviosa, pensando en la idea de que no podía confiar en ellos si los 4 querían la gema, y menos aún si el chico era tan violento como había dicho Selene...

Intentó quitarle hierro al asunto de la gema, intentando no mostrarse como una amenaza al objetivo que los 4 perseguirían: Esto... Por allí parece que hay un pueblo, creo que es mejor que vayamos allí e intentar buscar respuestas... ¿No os parece?- Intentó no mirar a nadie en concreto, pero no pudo evitar poner sus ojos lastimeros hacia Rubi, ya que era la única que había mostrado algo de amabilidad

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03/09/2018, 10:42
Tina Mitchel

Tina torció el gesto al oír como empezaba a exigir y hablar de cosas justas la chica de la gorra. ¿Acaso no era evidente lo mucho que disfrutaba aquella mujer ostentando su poder y como podía hacer lo que quería? Si lograban algo de ella no sería exigiendo. Aun no sabia si adulandola llegarían a algún lado, pero tampoco parecía muy dispuesta a darle una oportunidad de averiguarlo.

Lo que en principio pensaba que seria algo de comida, resulto ser algo mucho mas extraño. Extrañas flores brotaban de sus cabellos,. lo que le producía una sensación de lo mas siniestra, y por un segundo temió que los tallos se hundieran en su cráneo, aunque por suerte nada de eso sucedió. Al menos el olor era agradable.

Cuando la extraña desapareció, dejandoles a solas, la otra chica se acerco a ella interesándose por lo que ocurría en su pelo, así que esbozó una sonrisa algo amarga antes de responder.

- No siento nada, salvo el olor que no es desagradable, así que supongo que si. No es lo mas extraño que me haya pasado últimamente... aunque se acerca.

La pregunta del chico si que era importante y por un segundo aguardo a que se dijera algo al respecto.

- Creo que llegar hasta un lugar donde informarnos es una buena idea antes de tomar la decisión de seguir juntos o por separado. Tal vez el resto de las personas de este sitio sean... normales.

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03/09/2018, 22:56
Rubi Myers

Rubi observó como aquella adorable bola de pelo lamía sus patitas, haciendo alarde de un desenfadado francamente envidiable. Por un momento lo sostuvo, observándolo a la distancia que le permitían sus brazos extendidos. No estaba segura si tomarse aquello a broma o no.

Y mientras estaba intentando decidirse, el gatito maulló en un tono que habría enternecido el corazón del mismísimo Belcebú. Rubi derramó una sonrisa por su cara.

- No sé qué pensaréis vosotros, pero diría que mi regalo es el mejor -decidió, desenvuelta.

Recogió al minino contra su pijama, arrullando aquellas orejitas de truhan conquistador. Era tan suave que le estaba costando horrores seguir el hilo de la conversación.

- Creo que llegar hasta un lugar donde informarnos es una buena idea antes de tomar la decisión de seguir juntos o por separado. Tal vez el resto de las personas de este sitio sean... normales.

Rubi no pudo retener una risita.

- Ya me dirás tú si ha habido algo normal hasta ahora -murmuró, tras lo que se encogió de hombros y se recolocó la gorra con esmero-. Pero ¿por qué no? Manchas y yo nos apuntamos a la excursión.

Hizo un gesto exculpatorio señalando al gato.

- Lo sé, lo sé. No es muy original, pero mi mente está agotada después de abandonar mi cuerpo físico y tal -y, sin más, empezó a caminar a pasos vivarachos, solo deteniéndose un momento para echarles una mirada por encima del hombro-. Venga, chicos. ¿A qué estáis esperando?

Manchas se arrulló en su pecho.

Voy a salir de esta… como sea.

- Soy Rubi, por cierto -declaró. 

Y la marcha se emprendió de nuevo. 

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03/09/2018, 23:03
Narradora

Notas de juego

Yo os estoy mirando, no intervendre hasta que no me digais donde vais, os explique un poco los alrededores o mas bien lo que veiais, debeis darme una direccion o varias si es que os dividis, podeis hacer mas de un post sin problemas.

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04/09/2018, 00:26
Reisa Hatanaka

Puso una cara de alivio al escuchar a Tina decir que estaba bien después de aquello tan raro en el pelo, y fue entonces cuando se fijó en el gato de Rubi y en la forma de cómo lo cogía, sin dejar de pensar en lo mono que era. Le sorprendió su repentina marcha siguiendo la idea que ella misma había propuesto.

-¡Ay, espera!- Dijo tras lanzar una mirada hacía los otros esperando ver que hacían, para caminar intentado alcanzar a la chica y al gato. No pudo, aún así, evitar ir un poco más lento por el miedo que le producía adentrarse en los desconocido, llevándose una mano inconscientemente a su nuevo collar, mientras pensaba si de verdad podría ayudar en algo.

Notas de juego

Perdón por el post corto, pero no se que más decir

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04/09/2018, 00:41
Hagiwara Kazuhiko

Se fijó en Tina, que ahora destacaba sobre el resto con esa cabellera tan particular, y asintió con la cabeza. No le parecía mala idea, especialmente, porque sabían de al menos un sitio que resultaba familiar: El puerto. Si había edificaciones, tenía que haber algún tipo de civilización, fuera más o menos parecida a la que ellos conocian.

- En dirección al mar, entonces - Comentó, apoyando las manos en las caderas, y aunque se dispuso a iniciar la marcha, la que terminó por presentarse como Rubi y su gato se le adelantaron. Se encogió un poco de hombros y siguió la marcha, dando pasos largos para no quedarse atrás. Se presentó lanzando una mirada a cada una de las tres - Yo Kazuhiko. Diría que encantado, pero dejando de lado el gato todo esto es muy poco encantador.

Miró su cantimplora mientras caminaba y la agitó un poco, torciendo el morro, y por instinto miró el cabello de flores de Tina. Relajó un poco el ritmo para ponerse a su lado.

- ¿Seguro que no sientes... nada? - Preguntó, ladeando la cabeza - Tu "regalo" - hizo las comillas con los dedos - es el más pecular de los cuatro. Pero si nos los ha dado... tiene que ser por algo, ¿No? Tienen que tener alguna utilidad más allá de lo aparente.

O también podía ser que sólo hubiera querido reirse de ellos un poco. Esa idea también le rondaba, amargamente, la cabeza.

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05/09/2018, 17:57
Narradora

El camino al sur era largo, podíais ver el mar si pero no estaba solo a una hora de distancia, el camino os iba a llevar gran parte del día si es que en aquel lugar existía tanto el día como la noche. No hacia sol propiamente dicho, podíais sentir algo cálido por encima de aquellas nubes que emborronaban todo el cielo, como si estuviera nublado pero sin ser de forma exagerada, de momento lo seguro era que sol no había.

El frio os fue acompañando, era una brisa fresquita y lo poco que teníais, pijamas, eran mas que suficiente para daros calor, pero no sabíais hasta que punto aquello era bueno, teníais que vestiros cuanto antes pues el tiempo podía cambiar rápidamente o no, quien sabia. Por mas que agitara Hagiwara la cantimplora, esta solo indicaba que había liquido dentro y pesaba como si hubiera liquido, mas o menos estaba llena hasta un cuarto de la cantimplora por lo que llevarla en la mano no era incomodo, no tenia adornos era exactamente como si hubieras ido a una tienda y hubieras comprado la primera que hubieras visto.

Durante el camino, Manchas la nueva gata de Ruby consiguió zafarse de ella en algún momento solo para empezar a corretear alrededor vuestra, parecía una criatura inocente, se tumbaba mas adelante, se os quedaba mirando, maullaba y después de eso os seguía, no se separaba demasiados metros de Ruby aunque se pusiera a sentarse o tumbarse, conforme ella se alejaba el animal la seguía. Eso si, si alguno intentaba cogerlo, bufaba enfadada, pero si la acariciabais se dejaba minimamente pero se escapaba rápidamente de vuestras manos, solo la podia atrapar de momento Ruby.

Notas de juego

Aun tardareis unas horas en llegar al puerto, aprovechad para hablar entre vosotros, si no quereis decir nada ponedme en notas que solo caminais y ya esta.

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05/09/2018, 18:04
Tina Mitchel

Tina caminaba algo aturdida, procurando demostrar normalidad, como si aquello fuese de lo mas habitual para ella y nada le afectase. pero lo cierto era que estaba aterrorizada y no sabia muy bien como actuar. Por suerte para ellos, especialmente para ella, la temperatura era buena, así que no pasaba frío, lo cual no quitaba que no llevaba el atuendo mas adecuado para ir por ahí deambulando.

El chico se acerco a ella para interesarse por las flores, que ella ya había dejado por imposibles, y se encogió de hombros antes de responderle.

- Si le encuentras alguna utilidad, no dudes en decírmelo. Por el momento lo único que hacen es seguir saliendo por mas que las quito.

Y como demostración arrancó una de ellas y se la tendió para que la examinase y viese que no era mas que una flor sin mas. Mientras tanto el gato actuaba como un gato, así que por el momento optó por no acercarse a él. No deseaba llevarse un arañazo sin motivo.

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06/09/2018, 17:56
Reisa Hatanaka

Notas de juego

Reisa camina cautivada por la naturaleza y no dirá nada por vergüenza hasta que alguien se refiera a ella directamente

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07/09/2018, 00:07
Rubi Myers

Bastó con un movimiento de prestidigitador para que la flor desapareciese entre los dedos de la pelirroja.

Rubi, triunfante, se acercó aquel aroma dulzón a la nariz y aspiró sonoramente.

- Pues oye, a mí me gustan. ¿Te has planteado hacerte florista? Tendrías la vida solucionada -bromeó con una sonrisa ladeada.

Jugueteó con el tallo, haciéndolo rodar entre los dedos en un ademán distraído. Su indiferencia hacia lo posible por aplastar aquella voz que, en su interior, protestaba con indignación. Aquella tropa tenía razón: si los regalos de verdad servían de algo, estaban lejos de descubrir para qué.

Echó una mirada por encima del hombro a esa criaturilla callada y pusilánime. Se inclinó un poco hacia ella. Al menos había dejado de llorar.

- Y tú tienes una pasada de collar -sentenció-.  Diamonds Are a Girl's Best Friend, como diría nuestra querida Marylin. En el mundo del espectáculo seguimos siendo sus fans incondicionales. O yo por lo menos. 

Puso una mueca irónica. A sus espaldas, Manchas dejaba ir maullidos de miel. 

- Aunque me da que Marylin no va a salvarnos el pellejo esta vez, ¿no crees?

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07/09/2018, 00:16
Hagiwara Kazuhiko

Abrió la palma de la mano y miró las flores con cara de póker. Las flores en sí mismas, estaba claro, no tenían mucho uso. ¿Pero y si las flores eran síntoma de algo...?

- Estamos en una especie de mundo formado por sueños, ¿No? - Preguntó mientras todavía jugueteaba distraidamente con los pétalos en la mano - En los sueños las cosas no suelen ser lo que aparentan. ¿Quizá van por ahí los tiros? Ahora mismo me recuerdas a una dríada. Puede que en realidad haya cambiado más de lo aparente - Sonrió socarrón - Y si no es así y necesitas que te rieguen, tienes la suerte de que tengo una cantimplora justo aquí entre mis manos.  Siempre se puede negociar.

Aunque bromeaba, de verdad que quería pensar que había mucho más de lo que aparentaba haber. Incluso en su triste cantimplora, que a primera vista era el regalo más simplón. Alzó un poco una ceja al escuchar a Rubi.

- ¿En el mundo del espectaculo? ¿Es que eres actriz?

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07/09/2018, 17:46
Reisa Hatanaka

La caminata para Reisa no estaba siendo especialmente incómoda. Hacía años que no tenía oportunidad de volver a la naturaleza, y parecía incluso feliz de estar rodeada de verde y no de edificios, a pesar de las extrañas condiciones del lugar.

Rubi le habló, dando entonces Reisa un pequeño salto para atrás por el susto, aunque sonrió ante su halago: -¿Tu crees que es un diamante? Nunca había tenido uno... ¡Aunque tu gato también es muy mono!- Dijo con una sonrisa incómoda, por miedo a que le dijese algo sobre la disparidad en los regalos- Marylin...- se quedó pensativa- ¿Esa es la actriz rubia americana de hace tantos años? Nunca... he visto nada de ella- admitió tímidamente, aunque no pudo evitar abrir la boca de par en par cuando Hagiwara recalcó sus palabras- ¡¿Act-Actriz?! Eso es... Wow...- Parecía que se lo había creído sin siquiera esperar confirmación por su parte, y aunque parecía que quería preguntarle más por el tema, por su tono y postura estaba claro que le daba vergüenza y algo de miedo preguntar

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10/09/2018, 09:27
Tina Mitchel

Tina no podía menos que asombrarse de la enorme capacidad de adaptación que tenían la chica de la gorra y el chico que no paraban de bromear ante una situación tan extraña. Aquello la hizo dudar de nuevo de si realmente eran personas de verdad o fruto de su imaginación en el sueño mas delirante que había tenido jamas.

Al parecer el tema de conversación seguían siendo los regalos y buena parte sobre sus flores.

- Te aseguro que no siento ningún cambio en mi, a excepción de las flores que salen de mi pelo. Al menos no están creciendo del interior de mi cráneo, lo que me preocuparía bastante mas, por que eso si que seria raro... bueno, mucho mas raro. Y por el momento no hace falta que me riegues.

Era evidente que el chico bromeaba, pero había tratado con demasiados chicos que les gustaba hacerse los graciosos para impresionar a una chica y acababan metiendo la pata hasta el fondo.

- Desde luego la ilusión de mi vida siempre ha sido ser florista en un mundo de sueños - dice con un suspiro de frustración y cierta dosis de amargura por lo inútiles que resultaban todas aquellas elucubraciones que no les conducían a nada -, o ninfa... sea eso lo que sea.

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11/09/2018, 16:38
Narradora

Estuvisteis caminando por un par de horas, el tiempo no acompañaba mucho pero tampoco iba muy mal, ademas de que por fortuna el camino que estabais siguiendo no os hacia demasiado daño en los pies porque estaba cubierto de césped, pero claro no había que olvidar que estabais en pijama, no estabais preparados para ninguna travesía. El puerto fue acercándose mas y mas a vosotros, el sonido del mar parecía de lo mas real, escuchabais incluso el sonido de las gaviotas y del gentío. Pero, durante todo vuestro camino, tanto en el momento que habíais llegado, como en los momentos previos, aunque escuchabais el sonido...no había ningún animal en el cielo ni tampoco habíais visto ninguno en la tierra.

La ciudad portuaria era muy parecida a una ciudad medieval sacada de un videojuego o de un manga, al menos bajo vuestra vista, las casas y pequeñas edificaciones estaban echas de piedra blanca, una pequeña muralla rodeaba la ciudad para que se pudiera defender llegado el momento, podíais ver tiendas, casas particulares, establecimientos de comida...aunque no podíais leer lo que ponía, las letras eran totalmente diferentes a los idiomas que cada uno conocíais.

Lo mas sorprendente de donde estabais, sin duda, era la gente, si es que se la podía considerar gente. Nada mas entrar, pasando por unos guardias enteramente echos de metal, lo primero que visteis fue una figura enorme, peludo y con una armadura de cuero que le cubría casi todo el cuerpo salvo las piernas que eran cascos y la cabeza de toro. Luego altas mujeres esbeltas con las orejas picudas...incluso hombres árbol que se movían con libertad. Unos pasos os hicieron mirar hacia abajo y mas pequeños que niños correteaban hombres y mujeres rata hacia sus destinos, todo el lugar estaba plagado de personajes de fantasía, minotauros, elfos, ents, no había una gran diversidad pero si que habían las suficientes como para que os dierais cuenta de donde estabais.

Lo que decían, lo entendíais, pero no podíais leer, ademas de que había algo fundamental...no teníais nada de la moneda de allí que estaba como identificada con una “C”. A parte de vosotros, no había humanos normales y corrientes, así que destacabais bastante, sentíais las miradas en vosotros.

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11/09/2018, 22:01
Rubi Myers

Rubi escogió la sonrisa más angelical de su registro y se encogió de hombros.

- Oh, bueno. He hecho cosillas, sí. Alguna obra de teatro por aquí, algún que otro anuncio por allá… Varias sitcoms, además -sacudió la mano, como espantando unas moscas invisibles para quitarle importancia-. Es algo muy americano, no creo a que a vosotros dos os suen-…

Y, a pesar de que tenía material del que charlar durante horas, entonces tuvo que callar. El sonido del mar, las gaviotas y el murmullo ajeno los habían envuelto y sumergido en un cuadro da fantasía medieval dantesco y... 

Imposible.

Rubi decidió que habría que reinventar esa palabra.  Intentó luchar contra su mandíbula, que se había descolgado cual puerta sin bisagra mientras no paraba de girar sobre sí misma, en un intento de condensar esa nueva realidad en los parámetros de su mente. 

Por un momento, pensó que se había tropezado y caído de bruces contra un libro de C.S Lewis.

- Vaya -susurró, casi sin aire. No se atrevía a pestañear. Puede que por miedo. Puede que porque no quería permitirse perder ni un segundo de vista-. No tenemos nada que envidiar a las Crónicas de Narnia, por lo visto… Estáis viendo lo que yo, ¿no?

No está de más asegurarse...

 

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12/09/2018, 20:52
Reisa Hatanaka

Aunque le encantase la naturaleza, Reisa no era una chica acostumbrada al ejercicio, por lo que acabó bastante agotada de la caminata hasta el puerto. En cuento vio a los guardianes de las puertas, lanzó un grito ahogado, y los señaló desde la lejanía para asegurarse que los demás los veían, pero los comentarios de Rubi lo confirmaron. Ahora si que esto parecía un sueño.

-¿E... Eso es un mi... minotauro?

Se colocó nerviosamente detrás del grupo, intentando esconderse entre ellos. Se fijó en que no había otros como ellos, y comenzó a taparse el lado izquierdo de la cara inconscientemente con el pelo, tratando de ocultar de paso el collar que llevaba al cuelo, por miedo a que se lo robasen. Intentó buscar alguna señal o algo que les dijese a donde ir, pero no tenía ni pajorela idea de lo que ponía, lo cual le puso aún más nerviosa.

-Se os ocurre a donde... ir?- Intentó ver si había algún tipo de edificio especial, más grande o más lujoso, pero con toda la gente y los nervios, no consiguió fijarse en nada en concreto. Por una parte se sentía emocionada, esto parecía una película, pero por otra lo real que parecía todo empezaba a asustarla.

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12/09/2018, 22:25
Hagiwara Kazuhiko

Estaba alucinando.

No había otra forma de decirlo: El estudiante japonés no podía creer lo que veía. Y eso no era necesariamente malo. Si se olvidaba durante un moment de las consecuencias, podría haber dicho que esa situación era, literalmente, un sueño hecho realidad. Claro que todo eso de poder morirse conseguía que la experiencia resultara un poco más amarga. Miró un poco a todo, aunque lo hizo, como quien dice, dentro de los margenes de la educación, sin aguantar la mirada más de la cuenta a nadie. Lo último que quería era mosquear a una de esas criaturas que, juzgaba a primera vista, bien podrían partirle en dos si les apeteciera.

- Bueno... - Respondió, al principio quizá algo más cortado que antes después de ver lo que estaba viendo, pero después recobrando su energía habitual: No podía encarar la situación con miedo, aunque lo tenía. Fingirlo hasta conseguirlo y todo eso - Tiene que haber una... ¿Posada, no? Una taberna. Por lo general tienen una jarra dibujada en un cartel, o algo así.

Con "por lo general" se refería, por supuesto, a la única comparación que se le había ocurrido: Con las típicas ciudades de videojuego de fantasía. Pero tampoco es que fuera del todo ilogico.

- Y allí podríamos preguntar por más direcciones. ¿Os parece? Quizá hay más de una, pero buscaría o lo que parezca una calle principal o... quizá al nivel del agua, por el puerto.