Partida Rol por web

Nebula

"Obsesivo objetivo, patética épica" ||Primela||

Cargando editor
09/04/2019, 06:17
Svetlana Kozlov

Un monstruo sin ningún igual. Aún cegada y visiblemente molesta, con sus colmillos más que expuestos y su cara contraída, no como la de Aoko que le llegó más cerca y tiene menos experiencia en resistir la luz, pero aún así claramente afectada, Svetlana se salía de su cómodo puesto y levantaba tras tambalear apenas, en una elegancia infinita y una maldad indubitablemente inmensa. Muy "in-" la cosa en contraste con los "-or"s de Norman. Aoko aún yacía medio echada en el piso y con el efecto del flashbang, el cual tú pudiste superar antes por verlo venir, sab-verlo y, aún si se lo hubieses contado a Aoko, no ser de su sub-especie vampírica débil a la luz solar y ser, claro, la creadora de este artilugio tan chachi. Avanza entonces, jadeando, y os mira.

Ahí, en el palco, en la tarima, un charco de... Sangre, supones, donde estuvo Norman. Pudiste ver/sentir de reojo como las cinco o seis sombras o las que sean que faltaban aparte de la que primero atravesó a Norman fueron mandadso un segmento de segundo antes que la Canica Solar estallara directamente, empalando a Norman y aniquilándolo sin restos de sí mismo, instante en el que él te mandó ese mensaje mental. Pero algo no calza, bastante obvio, aunque sin que haya tiempo para eso.

- Tú... Norman te usó astutamente como siempre hace con todo y todos. Nada mal.

Miró hacia los ghouls de Norman y sus propias ghouls. ¿Acaso no le importaban? Y miró a Aoko, más preocupada por ella que de nada, pero sin perderte vista de reojo. Alzaba sus dedos y movía sombras que parecían tener que decidir donde ir, un paso en falso y perdía, a pesar que sabías que tú misma no podrías, bajo ninguna circunstancia, ganarle en un uno a uno. ¿Donde estaban las otras Canicas Solares? No, si ya vió el truco... ¿No te matará antes que intentes siquiera usarlas? Si una fue puesta arriba, la otra está en tu theremin, aún ahí, al lado de los restos de Norman y la otra... No sabes. ¿Contigo, al parecer? Ambiguo.

- ...Algo debió haberte hecho, o a Aoko, él nunca se queda con dudas. Pero me sorprende, lo que hiciste saber por la red mental de los Malkavian era cierto. ¿Acaso no te han...?

Te miró de manera fija y algo exaltada pero se calmó luego, como silenciando algo que no era necesario decir.

- ...No puedo permitirlo.

Su mano se dirigía a que una de sus sombras o tomara tu espada, o quizá alejara a Aoko, no sabías, pero según las instrucciones finales de tu sire, o tocaba ponerla el sopor y ganarla como material de intercambio en guerra o hacer que te mordiera para llenarla con vínculo hacia tí misma. ¿Qué te hizo Norman? Poco a poco la "+" se va yendo y queda una de sus últimas apariciones dramatúrgicas para actuar en el ahora y el aquí que Norman decidió con sus urdires mal (¿o bien?) puestos. Paso por paso, un ajedrez infinito jugado entre dos vampiros viejos, sus chiquillos y sus sirvientes.

Al parecer algunas de sus sombras pretenden secuencialmente a posterior ir y matar a los ghouls de Norman, y al parecer igualmente está ignorándote y menospreciándote más allá de la espada que tienes que te pasó Norman antes de ser mutilado en mil trozos o hacia una pila de masa jugosa. O está pretendiendo hacerlo. Tú sabes que las mujeres son más astutas.

¡Ahora es nunca!

Notas de juego

Y bueno, así va la cosa. Por partes:

- Lo que sea que pasaba con Norman y su cuello, es algo que a Aoko le afectaba o le importaba por X motivo. No dispones de Dominación de ningún nivel como para leer su memoria pero si fuerzas tu Auspex a nivel 4 o casi-4 podrías intentar leer o haber leído su mente entonces para saber qué sucedía y luego saberlo ahora hacia el presente.

- Igualmente, supones que Norman consideró la idea de atravesarte con la espada para poder estocarle el corazón directo a Aoko y generar un jaque contra Svetlana, pero no lo hizo. ¿Compasión por tí? ¿Algo más? No sabes.

- Lo que sea que Norman estuviese manejando y la incongruencia de sus mensajes finales con su estado actual, pues ya dirás tú.

- Tienes derecho, claro, a actuar en cualquier momento (siguiendo más o menos la temporalidad de forma directa como ha ido pasando) y detallar o preparar/intervenir con cosas fuera de las que han sido demasiado súbitas e impactantes, como el duelo rápido entre los ghoulses, aunque igual podrías haber puesto algo o hacer algo, qué se yo.

- Tu especialiad de [Crear Material Químico Rápido] para tu Taumaturgia de Conjuración ya está en activo, así que puedes usarla, especialmente si lo que dijo Norman de la espada es cierto, o de otro modo que veas. ¿Sabe acaso o sabía y lo notó antes de ser aniquilado? Ni idea.

- Tu situación actual con el monstruo en cuanto a poder (y más) que es Svetlana es posiblemente el momento más potente para probar la habilidad o el deseo diplomático de Primela. El cockblock de no dejarte salir y lol ganar fácil es algo que tenía planeado no solo por trama lol plot sino por los ghouls y manipulaciones de ambos vampiros mayores. Si es que nada Norman siguió tu juego y dejó salir a los humanos para hacerlo más fácil(mente sangriento y menos Mascarádicamente rupturante).

Cargando editor
18/04/2019, 16:59
Primela

Qué recuerdos. Cuando escuché esta canción por primera vez, ya me había tirado por el Empire State, y décadas torturándome para que aprendiera trucos de magia. La radio había sido una gran fuente de inspiración en aquella época. Los mensajes de paz y amor, de vivir en armonía y resignarse al desamor como una constante vital (o no-vital, ya hemos hecho demasiadas veces esta broma, asdfghj) fueron una fuerza que me animaba a refugiarme en el proyecto calabaza. Un poco egoísta por parte de los artistas, eso de animarte a trabajar por la paz sin darte ningún método claro de actuación... pero no dejaban de tener razón. Cierto: uno más uno son dos. Y adentrándome en metáforas para-mal-interpretables: one and one and one is three. El enunciado más cierto jamás pronunciado en una canción pop. 

Apagué mis súper-sentidos en el momento que Norman se puso a tocar de esa manera. Siempre encontraba nuevas maneras de torturarme. No puedo negar que me estuviera gustando, y ese era precisamente el problema. Supongamos que te violo, eso es horrible. Ahora supongamos que te violo, y además te da placer. Eso es todavía más horrible. La anulación es peor aún: no solo te han forzado a hacer algo que no querías, también te han forzado a que te guste. La confusión, el asco, la culpabilidad estigmatizada, todo se maximiza hasta confines y sinfines que acabarían con la psique de cualquiera. Ojalá te violen. Y ese fue el último pensamiento de la Primela+, o al menos a partir de ese pensamiento la Primela+ empezó a decaer. Lo malo de las drogas no es que sean malas para la salud, o que sean adictivas. Lo malo es que, inevitablemente, conllevan un bajón posterior. Incluso si fueran perfectamente sanas, o hasta buenas, para la salud, mientras pasa el efecto de una droga, notas como baja el efecto de la droga. Notas como estás cada vez peor, hasta que lo que antes era "sentirse normal", ahora es "sentir que mis ánimos han caído del todo". Y eso te hace sentir que estás peor de lo que realmente estás. 

Aunque yo nunca estoy bien. 

Volver a ser la de siempre es incuestionablemente una mierda. Volví a sentir la fragilidad temblorosa de mis pies sobre el suelo, la inmensidad del mundo, de la habitación, del poder de mi sire y sus enemigas, todo devorándome. Incluso habiendo apagado los súper-sentidos, volvía a notar la música como una presencia agresiva, pizarras contra uñas y papel arrugándose contra mi piel. El miedo a las arañas, a sus telarañas insondables envolviéndome desde las entrañas hasta el infinito. Miedo, miedo, miedo. Miedo a Norman, al placer - ¿por qué nunca puedo tener yuri libre de peligro de muerte? -, a la muerte, al dolor... La confianza era agradable, pero mientras se iba, el vacío que dejaba se iba llenando de consciencia de todo lo horrible que podría pasar. Y la consciencia era útil, pero desagradable. 

Tonta, no iba a ser tan fácil... Al menos no moriría ningún humano. Pero, por supuesto, como se me había pasado por la cabeza, Norman no iba a dejar que me fuera a pasear por Madrid. ¿En qué estaba pensando? Tonta, idiota, inútil. Si Norman quería luchar a muerte, antes drenarse para meter sangre en todas las bebidas de un bar, que camiar de opinión y no luchar. Seguro que era por una estupidez. Seguro que le había robado un libro a la LaSombra, o una receta, o dinero, o se habían peleado en una de esas reuniones en las que no me dejaba hablar, cualquier tontería. Al final, todo lo que quería Norman era una excusa para extender sus telarañas y probar que eran las mejores del mundo. Eso es reduccionista y simplista.... ¡tonta! 

Se supone que ya hubo alguien que se creyó mejor tejedora que los dioses, y acabó perdiendo toda su humanidad. Noreman iba por el mismo camino, y sin necesidad de dioses. Norman siempre quería superar a alguien o a algo. Eso es más o menos una virtud. Más o menos.

Notar tanto movimiento orquestado por Norman daba mucho más miedo que cualquier cosa. Ya daba verdadero pavor notar que se moviera él sin nada ni nadie que lo acompañara, y sentir acompañantes en su telaraña era horrible, era presagio de bomba atómica en mi estómago. Y entonces sucedieron cosas.

Demasiados sentimientos arremolinados cuando vi como lo apuñalaban. No puedo negar que una parte mi de bestia interna, y otra de la externa, y otra de mi sin bestia, había deseado y fantaseado con ver eso. Pero, en el momento de la verdad, para bien y para mal, yo seguía teniendo empatía. Seguía siendo una persona con la que convivía. Cierto, me torturaba, y me hacía vivir con miedo, y que me enseñara cosas no compensaba, y que estuviera dispuesto a romperle la columna vertebral a quien me subestimara en los politiqueos no me gustaba, me daba aun más miedo. Pero me había acostumbrado a su presencia. Síndrome de estocolmo, no lo niego, pero apego al fin y al cabo. La perspectiva de perderle dejaba un vacío, confusión, estaba perdida. Pero, por supuesto, el hijo de imbécil no se iba a morir tan fácilmente.

De repente, fuegos artificiales, y una espada. Todo pasó tan rápido y tan nítido, que no alcancé a hacer más que cubrirme la cabeza. Qué piel. Un poco de pena, incluso en esa situación, me dio que de repente Aoko ya no estuviera muy muy cerca... Qué quieres que le haga... cuando el hambre aprieta, ni las peleas de no-muertos se respetan. Y por supuesto, miedo miedo miedo. De repente tenía una espada en la mano, un castigo seguro anunciándose dentro de mis pensamientos, como corroborando que mi no-vida no era mía en absoluto, tiros, cortes, muerte y destrucción, la decisión de matar o dejar que alguien muera, o colaborar a que alguien muera... ¡Ah! ¡Ah! ¡Ah! De repente me estaba balanceando adelante y atrás con cara de crisis nerviosa, notaba demasiado mi propia cara, mis manos, aaaaaah aaaaaaah aaaaaaaah aaaaaaaaah. Si en algún momento le había parecido realmente atractiva a Aoko y no había sido solo por un tema de negocios, la fantasía de estar con la chica popular se desvaneció junto con la Primela+. 

E incluso en ese estado, mi mente saltó a algunas conclusiones irrelevantes. Aoko había dicho 

mi amada sire

Eso es algo que yo jamás diría. Bueno, jamás diría con sinceridad, a lo mejor lo diría si Norman me obliga. Sin duda, mi perspectiva de sires era terriblemente sesgada, y eso afectaba, pero en el fondo de mi mente había una cosa nueva sobre las nuevas formas de relación que estaba descubriendo. Cierto, Norman me torturaba y me castigaba y me hacía vivir en constante miedo, pero nunca había intentado convencerme de lo contrario. Nunca había buscado que yo lo amara. Nunca había intentado hacerme creer que él era un ser amoroso y bondadoso. Nunca había buscado nada de eso. A lo mejor las LaSombra no tenían una relación patriarcal y abusiva y todo eso como Norman y yo, pero... cuando Marx escribió el capital y el manifiesto, salvó al capitalismo. Les dio la clave: la clase obrera trabaja sin cesar, para producir cosas que no consumirán, porque no tienen el capital necesario para hacerlo. Conclusión: dales cosas frívolas a consumir, y gastarán el sueldo que tanto les ha costado conseguir en enriquecer a quien los mata a trabajar por ese sueldo. No hagas que los obreros teman rebelarse, haz que deseen el sistema que los oprime, y podrás oprimirlos indefinidamente. Haz que digan cosas como "mi amada sire", haz que digan "mi jefe es bueno", haz que digan "vivimos bien", haz que digan "suerte que tenemos comida", "suerte que tenemos tranajo", y como cereza del pastel, que piensen "tenemos que ayudar a esos pobres en África", es mucho más efectivo que hacerles decir "tenemos que rebelarnos contra el patrón". En el fondo, Aoko estaba mucho más dominada y anulada que yo. Y mucho más abajo en la pirámide. Concretamente, en el suelo. Por mi parte, yo tenía una espada y estaba de pie. ¿Ves lo que digo?

Mientras el caos de los flashes se sucedía, mis instintos de científica saltaron. Estaba claro que si no iba con cuidado me atravesaría una sombra puntiaguda o algo, pero, espada en mano, corrí hacia Aoko. Activé todo el auspex que pude, y corrí con miedo en el cuerpo, sin la elegancia de la sire LaSombra, más bien con la patosidad de un pato rodando colina abajo, olvidando que tiene alas, pero corrí. Cuando estuve a una distancia amenazadora para Aoko, arrojé la espada en dirección a la sire. Sin apuntar mucho, más con la intención de que Norman se planteara reseguir el movimiento para transformarlo en un ataque, que con la intención de darle realmente. Lo que quería con la finta, era conseguir un poco de tiempo. Tiempo, claro está, para castear. Acerqué mi mano a la abatida Aoko, me agaché, y conjuré... me moría de ganas Cesio. No había necesidad de decirle a Norman lo que era, confiaba en que supiera distinguir el Cesio y sus propiedades.

Pero no simplemente un bloque de Cesio con cualquier forma. No, claro que no. Podía ser Cesio, pero yo seguía siendo una persona con un proyecto: calabaza. Invoqué una versión en miniatura de mi querido y archiconocido laboratorio-iglú-habitación, una versión hecha de Cesio que envolvía mi mano, parte de mi antebrazo, y el torso de Aoko. Lucía como una especie de hormiguero esférico: una bola metálica con abundantes agujeritos. Siendo un metal tan inestable como es, su brillo inicial iba palideciendo mientras se oxidaba. Si mi cuerpo fuera capaz de producir cosas como sudor, eso ya habría explotado. Sabía que Norman entendería, pero desconocía si la otra sire tenía conocimientos de química. Hablé como toda una científica asocial, miedosa, temblorosa, con dificultades para todo. E-es cesio. E-e-exp-plota fácil. Norman debía notar que, en ese momento podía ver-tocar-leer su aura. Lo miré. S-si haces a-algo, explotaré. E-escuchad, o morimos las dos. También miré a Aoko. No te muevas.

Dejé un instante de silencio.

Traduzcamos:

No teníamos suficiente
pretendimos ser de carne
huesos y piel y sangre
Pero solo somos dos canciones
que no pueden escuchar
Solo somos canciones.

No sabíamos más
pretendíamos ser valientes
hasta quedar atrapados
donde nunca se pone el sol
donde nunca llega la noche.

Y sé
que nunca
he sido
capaz
de haber callado
como para oírte bien.

Solo somos canciones
en el eco de un valle
en el círculo polar.
No podemos callar
pero aquí ya no hacemos nada
más que resonar.

Solo somos canciones
en el eco de un valle
en el círculo polar.

 N-no q-queréis que muramos... pero nos arrastráis a v-vuestras peleas... Me armé de valor. Y de miedo. ¡Sois tontos! ¡Tontos! ¡Tontos! ¡TONTOOOS! Temblaba, y mucho. Deberíais colaborar. Quiero que colaboréis. 

Y el momento de la negociación extrema había llegado. Miré a la sire ajena. Ha-hagamos un intercambio. Y-yo me voy contigo, e-ella se va con Norman. Hasta que solucionéis vuestros problemas sin matar a nadie. Sí, eso dije. Si le hace algo, tú me lo puedes hacer a mi. Miré a Norman. Y al revés. Y hasta con el miedo a que dos monstruos desalmados decidieran aniquilar tal irrespetuoso idealismo, me permití un comentario arrogante. Así aprenderéis.

Notas de juego

Me desactivé todo el auspex en el momento que Norman toca acompasadamente con mis ultra-orgasmos vampíricos provocados por Aoko, si me permites un poco de inconsistencia narrativa, dado que afectaría a los dados en el momento de percibir cosas. Si no, pues bueno, figúrate que me los fui desactivando poco a poco junto con la caída de la Primela+. Osea, lo desactivé en ese momento más por un tema de "no quiero sentir esto", que por practicidad, luego lo vuelvo a activar TODOOOOOO!!!!!

Sobre la conjuración: a parte de por lo romántico, conjuro una maqueta de mi maqueta-iglú-laboratorio por lo de que se supone que como más familiar es algo, menos te cuesta de conjurar. La amenaza de explotar, supongo que conjuraría hielo, es básicamente que Cesio+agua explota, y el Cesio es extremadamente inestable, así que solo con la superfície húmeda del hielo que conjurase, explotaría el cesio en contacto con mi mano, que aumentaría un poco la temperatura del hielo de alrededor, que haría explotar más cesio, que haría que salieran disparados cachitos de hielo, que harían explotar más cesio... básicamente, si hago eso, Aoko y yo nos comemos varias explosiones en toda la cara (una por molécula y enlace de la maqueta, concretamente). Si no, busco por aquí qué otra cosa hace explotar al cesio, y listo XD. Sobre el tamaño de la maqueta de Cesio que conjuro, he leído que se supone que no puedes conjurar nada más grande que el conjurador mismo... aunque creo que es un poco irrelevante. Con unos pocos gramos ya te puedes quedar sin dedos, así que seguro que he conseguido conjurar una cantidad amenazadora. Y también la idea es tener a Aoko semi-inmovilizada. "Semi", porque si se intenta levantar muy probablemente pueda, pero está la amenaza de que explote y eso alrededor de su... torso.

Luego: vuelvo a tener TODOOOOOOO el auspex posible activado. Si detecto el más mínimo deseo de apartarme de Aoko, matarme o matar a Aoko, si noto a Norman intentando desconjurar, dominarme o lo que sea, ya sea por sentidos o por aura, realmente me hago explotar, y a Aoko conmigo (o al menos, lo intento). En tal caso, ya te diré qué hago para intentar sobrevivir a la explosión, porque esa parte aún no la he pensado :3 .

Y mi intento de negociación es ese: que accedan a intercambiarse las hijas. Tal cual. La idea es que den por terminada esta batalla, yo me voy con la LaSombra, Aoko se va con Norman. Me estoy usando a mi y a Aoko como moneda de cambio, y como ofrenda de paz. 

Dicho todo esto, la enteridad del plan se basa en que haya conseguido llegar hasta Aoko y conjurar el Cesio heheee :3 . Si no lo he conseguido, intento la diplomacia igualmente, pero nunca existió la amenaza de hacernos explotar (porque no tendría sentido). Si no sale bien lo del Cesio, simplemente estoy cerca de Aoko e intento la misma diplomacia (y si ni siquiera consiga estar cerca de Aoko, pues estoy lejos, y si me mataron... yatusabe). En cualquier caso, sí he tirado la espada como distracción, así que no la tengo ahora mismo.

Cargando editor
07/06/2019, 23:12

Paz.

¿Qué es si no la guerra esperando a ocurrir o recién acabada? Muy como la noche es el día que dejó de ser y esperando ser de nuevo, y viceversa, el intermedio entre las tinieblas del espacio visibles son lo que se llama día cuando el sol se posa encima de algún costado de la piedra no-mágica en la que viven los sí-mágicos zombies malditos cuyas bromas sobre no-vida/muerte nunca deben faltar por mucho que las hayamos repetido ad cansancium. Aquí en esta parte me pongo a hablar sobre estar más cerca de liches que de zombies, y el meme de que Jesús es un liche entre otros sub-memes asociados más todo el tema este judeocristiano de los vampos mismos, pero omito tal payasada para enfocarnos en esa cosa importante... ¿Cómo se llamaba? Ah, sí:

Trama.

Pusiste en un stalemate o un jaque a todos, presentes. Y sin embargo no era un tablero igual. Tus palabras iban hacia alguien que pronto verías su estado. Norman había sido convertido en un queso suizo, infinitamente peor que las balas que las ghouls aquellas visiblemente pudieron resistir por su sangre sobrenatural aún siendo humanas, hoyos completos de tentáculos asesinos uno tras otro y poco a poco se iba derritiendo en algo: ¿Sangre? ¿Alcanzó un nivel en que se podía volver sangre? No, es más como una masa grotesca y sin forma, ploma o verduzca, amorfa, y él mismo, su rostro dejando ver sus últimos gestos. ¿Orgullo? ¿Fascinación? ¿Todo esto de que su conveniente tesoro hubiese demostrado agallas con o sin producto de la droga que él mismo le puso a dicha con su dominación borrándole la debilidad psíquicamente re-alterando/recuperando sus memorias? ¿Qué tal era siquiera la línea entre crueldad y generosidad? ¿Cual era el punto plomo externo a dos lados en una balanza de maldad incomprensible y bondad excesiva? Ninguna idea. Solo notabas un último gesto de "Ahí tienes", dándote la batuta literal con filo envuelto antes de volverse una poza cuando terminaste.

Y es entonces que el escenario se retuerce, o re-retuerce. ¿Si algo se retuerce doblemente se endereza? No, alguien tóxico referenciando a alguien tóxico no hace a esta última persona saludable, en absoluto. Ya "lo" dijiste, no tú, pero sí, anda, acuérdate, sí, exacto. Pero volviendo a Primela (tú, obvio, que nunca has dej'áo de ser Primela pó'), ella, em, tú, observa-...s como es que Svetlana no se ve nada contena. Cuando moviste la espada pareció pensar que acuchillarías sin piedad a Aoko y entonces le cayó la espada a los pies, la cual no solo logra recibir sino que mueve la misma mesa donde estaba sentada ella y Aoko antes con gran velocidad-potencia en un único y preciso movimiento haciendo que la espada caiga cómodamente sobre esta, sin dejarla chocar con el piso ni tocarla directamente. Es como si el veneno de Norman envenenara a sus enemigos (y aliados, y a todos) con su propia paranoia y neuropsicosis.

- No puedo permitir eso. Aún si Norman te entrenó tan bien como esperaría de él. Te eligió ciertamente... -Paró entonces, suspirando un segundo.- Tengo que cerrar mi boca. Y actuar.

Sonrió maliciosamente entonces y movió las manos. Técnicamente "no se movió" al mover la mesa ni al hacer esto: Apuntar dos de sus sombras directo hacia los ghouls de Norman para empalarlos como a él con resultados seguramente fatales, porque iba hacia sus nucas. Fue entonces que tu cerebro intentó pensar y sin embargo, tus sentidos le ganaron, porque notaste cosas: Primero, ahí donde estaba Norman justo tras el piano, no habían cenizas, ni una sola, solo sangre... Y la máscara, intacta. ¿Por qué? ¿Qué significaba eso? Tus rodajes intentan clicar pero no pueden, no en plena guerra de segundos. Tus sentidos de nuevo notaron que los ataques hacia Palomino y Spukov, los sirvientes y soldados de Norman eran fintas, muy como la tuya con la espada, porque se redirigieron hacia la pared y se clavaron ahí. Al mirar hacia Svetlana, viste una mesa siendo atozada en tu dirección de forma que alguien la aventaría para que todo su diámetro al ser puesta de lado y arrojada hacia adelante tapara, digamos, como un gran escudo volador, tu visión. Tu habilidad de tacto supremo podía evadir lo que sea a costo de una instancia de dolor... ¿Pero si no podías esquivar el área y estabas posicionada? La mesa fue reventada contra tí impidiendo que sintieras y vieras como entre los restos de objeto arrojado con tan ridícula potencia que parecía que alguien había lanzado un frisbee de plástico o papel algo decenas de veces más pesado y grande, aparecía la punta de, sí, la espada con el aluminio reforzándole. Fue así como el miedo no te impidió hacer más que... Soltar. Soltar hielo, soltar una chispa de la Senda de las Flamas Encantadas que ni siquiera habías aprendido pero, por ser de Norman y haberla vista de él infinitas veces más poseer el poder de la Taumaturgia existía latente potencialmente en tí, no lo sabes. ¿Ha sido literal acto de reflejo e instinto o genuino abandono de tu propia diplomacia y tregua lo que ha hecho esto? "Sueltas" tu cosa sobre Aoko para proseguir todo el inuendo sexual que tú mismo invocaste para con ella y específicamente con la creación del Cesio, asegurando su destrucción entonces y empezando a explotar encima de la chiquilla dominada por un amor tóxico y esclavizante. Comunismo de Norman contra Capitalismo de Svetlana, a pesar de que sus nacionalidades/etnias estaban dadas vueltas, cómico, casi.

Y en instantes, esa potencia normal de los LaSombra, que no consideraste por ser el poder más común de todos los vástagos, vampiros, malditos, cainitas o como quieras llamarles, hizo que Svetlana te atravesara el corazón hasta el fondo, en un doble acto sexual, confirmando que todo yuri tuyo, consensual o no, implica el peligro hacia otras o tí misma, siempre, uno más de muchos memes de esta historia. Aún cuando el Cesio evaporándose/liquificándose logra disolver algo del aluminio de Norman por el costado casi poéticamente, la madera sigue siendo suficiente porque Svetlana retuerce el arma con tanto poder que destroza tu órgano, sus astillas saltando como balas, una pequeña explosión en tu torso. El miedo pasa a dolor y rápidamente a desesperación resignada, fatalidad final. A medida que pasa, te sientes rara. Mucho, más de lo normal.

Su mirada paralizante, la más cruel que haya visto, distinta de la Norman en ese "medidor" sobre tí deja claro que ha vencido, dándote unas últimas palabras, semejantes a las que dijo antes, pero complementarias:

- Nunca acepté el trato, temo, pequeña. Pero te agradezco por la idea, la usaré contra él. Estáis perdidos. -Sonrió entonces a medida que miraba de reojo hacia los ghouls de Norman y simultáneamente ibas... ¿Deshaciéndote? ¿No cenizas? Svetlana miró y por tus sentidos aguzados escucharías lo que normalmente alguien muriendo no escucharía en el clásico tropo de perder los sentidos y no escuchar ese elemento clave para la trama, pero como soy un hack sucio y digno de Terrible Writing Advice narrador astuto y dedicado, lograré hacer algo al respecto:- Lo sabía, eras, después de todo... самозванец. -En tus últimos instantes y al ir deshaciéndote entonces, sentiste y notaste dos cosas más: Primero, que ese coso aglutinado en tu cuello que Norman puso en algún momento, borboteó en tu cuello e hizo algo. ¿Pasó a Svetlana? Lo segundo es lo otro que dice Svetlana ya cuando asumes que esa palabra en ruso que te dedicó le hizo considerarte una goner, en inglés, ida, del todo:- проклятый, Где настоящие?

Mentí, claro, porque soy un hack, un sucio narrador indulgente y despreciable, no, perdón, dezzprezziable como habría dicho el Pato Lucas, ya que mencionaste patos antes. Percibiste una única cosa más, y es que donde el Cesio debería haber detonado a Aoko a tí, a Svetlana por haber hecho esa distancia de varios metros en nada gracias a su inmensa inteligencia, haciéndola una enemiga absurdamente formibable y digna de todas la precauciones que ha tomado (y que entenderás pronto en su totalidad en un poco más) Norman, usando su básica disciplina de incremento de poder puro vampírico-físico para atacarte, pues no pasó nada debido a que usó sus sombras de verdad para envolver por completo toda la explosión, haciendo que todo tu iglú-Cesio reventara dentro de una gran esfera oscura, gastándole decente concentración. Y eso la hizo multitaskear causando algo más. Ahí llegan tus sentido porque moriste, o te deshiciste al menos por completo. ¿Recuerdas que eso pasó? Sí, porque...

...







¡Súbito, explosivo, dinámico!

Y pacífico. Paradójico.

¿Qué? ¿Cómo?

¿No que...?

Oh mierda, oh mierda. Ohmierdaohmierdoahmierdoahohamiehrosahdmihaihodhaierdoha ya, basta. Paz.

Ohhhhhhhh mieeeeeeeeeeeeeeerdaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa.

Te miras. Te encuentras en alguna habitación de estas típicas de bodega o de camerinos que tienen los lugares como este, seguramente conectada con un pasillo en la parte posterior oculta del local frontal donde estabas, típicos lugares de trasbambalinas y tales que tenían lugares como este, algo ostentoso incluso pero... Esta eres la "tú" real, y la otra, como dijo Svetlana que creíste vagamente entender, era una impostora. Ahora entiendes por qué Norman no dejó cenizas, ni esa tú que fue matada a sangre fría, nunca mejor dicho de forma no-metafórica y a la vez sí.

Porque eras un clon. Y Norman igual.

Algo se hizo ahí y ese "algo" extra que tu sire estaba haciendo era manejarse o interactuar mediante nexo con el sí real, afuera, donde sea, allá en Madrid. Tú no recuerdas ninguna Senda ni Ritual siquiera Taumaturgicos que pudiesen hacer tal barbaridad, no a la perfección. ¿La instancia final y más refinada de tu Conjuración: Crear Vida? Pero incluso esa versión no dura demasiado y no tiene poderes extras ni permite crear zombies mágicos, a menos que hubiese una forma de crear homúnculos perfectos, réplicas hasta la médula, literal. Super-cienciomagia. Algo como...

Sí, como tu Canica Solar.

Todo empieza a hilarse en esos grotescos hilos de araña de (in)coherencia. Perpleja, supones que Svetlana que sigue ahí adelante o arriba (si esto es un subterráneo y no (solo) una trastienda, debe estar buscándote o por hacerlo tras haber reconocido esta... ¿Tecnología? O lo que sea. A este punto, Palomino y Spukov deben estar muertos, seguramente, Svetlana es poderosa, conocedora del enemigo y con una astucia y reflejos ridículos así como uso de sus poderes, un ser que podrías comprender por qué Aoko adoraría como a un dios voluntariamente. ¿Donde empieza la esclavitud y donde empieza el deseo? Tu explicación hizo entender bien el mundo actual, pero... Ah, la (in)humanidad.

Y ahora, aquí estás, está lleno de cosas y con luz tenue, como si Norman hubiese previsto cada molécula de evento, a un nivel absurdo. Veamos qué pasa ahora. Tiremos los dados y eso, como la narración improvisada y sacada del culo que somos. Y con eso quiero decir dedicada, planificadora y considerada, pst, obvio, o sea plis.

Tu mano tiene, directamente en su palma una cuarta Canica Solar (ya que la tercera, como recuerdas, no sabes donde está) que se ve distinta, con un activador propio colocado a un costado, un diseño claramente más tosco pero funcional en extremo, digna de un genio en su propio calibre y distinto a tí misma en tu propia Iron-Womanidad de Primela Stark. El "Stark" mayor seguramente vió tu modelo al ayudarte con las maquetas y al ver los planos logró deducir como hacer su propia versión portátil, pero una sola que supones, te servirá. Además de eso, aquí mismo hay muchísimas cosas, cloro, soda cáustica, agua, metales en forma de tubos y otros elementos. Joder, hasta hay un kit medicinal standard bastante decente y completo así como un kit de herramientas. Debe ser una habitación que se debe usar medio para estar y medio para depositar y no se han decidido de ambas. Nada como tu propio taller pero ciertamente un lugar para hacer "MacGyvers", o sea, improvisar tecnología en estos segundos dorados en que no te han pillado y... Reviviste o mejor dicho nunca moriste, sí, como Cristo, el Liche.

Todavía estás algo shockeada, porque recuerdas todo lo que vivió tu clon pero eres tú. Es completa bullshit, pero es. Aquí estás. Apenas te estás re-acostumbrando a tí misma pero supones que es bueno no morir. ¿Qué gracia tiene el miedo si el peligro es removido completamente? ¿Qué sentido tiene el esfuerzo y el dolor si las reglas no valen en absoluto?

Tú dime.

"T", otra vez.

- Tiradas (5)

Motivo: Astucia {Primeros 3 dados} | Autocontrol {Siguientes 4 dados} [Svetlana]

Dificultad: 8

Tirada (7 dados): 3, 2, 4, 9, 10, 4, 10

Éxitos: 3

Motivo: Tirada previa: Repetición {10's} (Especialidad)

Dificultad: 8

Tirada (2 dados): 1, 10

Éxitos: 0 Fallo

Motivo: Tirada previa: Repetición {10's}: II (Especialidad)

Dificultad: 8

Tirada (1 dados): 4

Éxitos: 0 Fallo

Tirada oculta

Motivo: Retcons {Norman cosos varios}

Tirada: 3d100

Resultado: 76, 66, 29 (Suma: 171)

Tirada oculta

Motivo: No-Retcons {Cosas para Primela y otros/extras}

Tirada: 3d100

Resultado: 64, 66, 41 (Suma: 171)

Notas de juego

Y así se empieza a desvelar el misterio de "Nebula". Originalmente pensaba legit dejar que Svetlana aceptara tu pacto por lo bien formado y roleado del mismo, pero quise más DRAMA y no dejar a Lana como una perdedora además de recordar, ya sabes, QUE ES DEL JODIDO SABBAT y eso, pero últimamente todo lo demás va acorde a plan. :YagamiIntensifies:

Juro que no soy un hack. Preguntdudas por el coso de personaje, Discord u off oculto, como siempre'.

Cargando editor
01/07/2019, 12:04
Primela

¿Difuminarse? Las percepciones se iban saturando mientras se acercaba mi muerte. Probablemente por la... ¿adrenalina? ¿Yo tengo de eso? Por lo que fuera, las percepciones se quemaban en el éter y se transformaban en sensaciones incandescentes en mi piel, en mi carne, en mis huesos, en mi vacío. La masa informe de sangre a la que había llamado Spider-T me irradiaba con su perpetua... ¿Satisfacción? ¿Control? ¿Control-satisfacción? Con aquella sensación que era como ponerme un collar que se iba cerrando él solo, aquella sensación de que no importaba lo que hiciera, siempre estaría siguiendo su plan. Aunque estaba... ¿muerto? ¿Acaso eso era posible? Sentí miedo. El miedo me pateó el diafragma. Espera... Estaba segura de que sus cenizas me estaban ensuciando los poros de la piel, pero entonces me di cuenta... eso me lo estaba imaginando. Eso me lo había imaginado tantas veces... pero como siempre, eso no estaba pasando. La máscara seguía ahí, nada de cenizas. ¿Qué estaba pasando? ¿Nos estaría genjutseando a todas las presentes? Apreté bien la mano, hice lo posible para no mirar a Aoko a los ojos - siempre es más difícil hacerte explotar con alguien a quien miras a los ojos -, pasara lo que pasara, yo me ceñiría a mi plan y... ¿Ghouls? ¿Mesa? ¡Hazte explotar, tonta! L-lo siento...

Lo intenté. Juro que lo intenté con todas mis ganas. Hielo, fuego, hice todo lo que pude. ¿Quizás por eso saqué algo de fuego? Ni me lo planteé. Quizás por eso. Pero no pasa nada: igual me iba a morir. Por fin. Por fin

Claro que tenía miedo y todo eso, pero por otro lado... paz. Por fin. Ya había vivido mucho más que la mayoría de humanos, y la situación actual me confirmaba que lo que me quedaba no iba a ser bonito. Como decía la guía del autoestopista galáctico para cuando estás a punto de morir sin posibilidad de ser salvado: si tu vida ha ido bien hasta ahora... ¡alégrate! Y si no, cosa probable tieniendo en cuenta tu situación actual... ¡alégrate, por fin te dejará en paz! Deshacerte es una sensación muy rara, y más cuando la experimentas con súpertacto. Miré bien a la otra sire, una imagen poderosa que, de haber visto antes, probablemente se habría colado en mis alucinaciones de otras posibles realidades. ¿Una realidad en la que la Primela oscura es sire de Norman y frienemy de la otra sire? ¿Por qué no? ¿Una realidad en la que Aoko y yo estamos intercambiadas desde el principio? Di que sí, inconsciente. ¿Entendí lo que dijo en ruso? Entendí lo que quería decir, podría decir. Hasta pude decir, mientras mi boca acababa de transformarse en salsa de tomate Спасибо. Quizás lo había oído por ahí, quizás mis supersentidos me dijeron exactamente lo que tenía que hacer para transmitir gratitud a la otra sire. Por fin se había acabado la pesadilla.

Por fin.

Sentí miedo una vez más, solo una vez más, y nunca más.

Descansa en paz, inútil.

Algo en mí sonreía. Estaba claro que no podía ser algo corpóreo... pero algo en mi sentía el terrible alivio de por fin estar muerta. La muerte era toda negra, y aun podía notar mi cuerpo por alguna razón. De hecho era curioso, a parte de estar todo negro, mis sentidos seguían siendo más o menos igual. Sentía mi propio cuerpo tan intensamente como siempre, mi eje de verticalidad removiéndome el sentido del equilibrio con cada pequeño movimiento y todo eso. ¿Sería que mi supertacto había estado en mi alma todo este tiempo? ¿Implicaba eso la existencia del alma? No importaba tanto, fuera lo que fuera, yo ya había muerto, y por ese motivo dediqué unos segundos a disfrutar del supertacto. Se podría decir que me autodrogué balanceándome de un lado a otro, en círculos, hasta me activé la disciplina que hace que tus sentidos sean droga dura muy alucinógena, y en ese momento... ¿Espera... Palpé el aire, los materiales típicos de una habitación del mundo de los vivos se dibujó en las vibraciones de mi piel... no quería creerlo... morir era impresionante, pero no haber muerto era aun peor... No quería, pero finalmente... abrí los ojos.

La diversión se fue. Si hubiese tenido esa capacidad, me habría puesto a vomitar de... pánico, creo. ¿Qué estaba pasando? ¿No había muerto yo, tan tranquilamente? ¿No había hasta agradecido mi muerte? Me mareé, intenté hacer algo así como seguirle la corriente a mi mareo, perseguir el punto de fuga travieso, ¿qué pasaba? ¿Me había teletransportado? No, recuerdo perfectamente que me deshice. Norman se deshizo. No es así como morimos. Piensa imbécil. Me balanceé adelante y atrás, rítmicamente, abriendo mucho la boca, como si me sirviera de algo respirar. Piensa imbécil. Trátame bien porfa. Piensa Primela. Gracias. Me pellizqué la nariz, y me dolió tanto que me retorcí como un perro persiguiéndose la cola, y llegué hasta el suelo, y ahí seguí provocándome espasmos. Piensa. Nos vi morir. Pero no había ceniza. Luego me desperté aquí. La otra sire... Nos vi morir. Y estoy aquí. Me fui incorporando, poco a poco me iba sentando, sin espasmos ni nada, como una niña grande. Ergo, no fue yo lo que murió. Tampoco debía ser Norman lo que murió. ¿Qiuen murió? ¿Qué murió? 

Tuve un momento de silencio mental. Murieron cuerpos que no eran nuestros cuerpos originales. ¿N-Norman puede hacer eso...? Me sentí infinitamente pequeña. Era infinitamente pequeña. Como se suele decir en los shonens, estaban en otro nivel. ¿Había dado un jaque a los dos sires? ¿Y qué? Un niño que apenas sabe mover las piezas puede darle un jaque a un gran maestro del ajedrez, pero eso no hará que el gran maestro no lo masacre y humille de tal manera que el niño acabe dejando el ajedrez para siempre. Yo era ese niño, evidentemente. Los grandes maestros dispuestos a masacrar a un niño... eso. Cerré los ojos, apreté bien toda la cara para que el dolor en las arrugas de cara de bebé llorando me concentraran. ¿Qué no pueden hacer? Ahí sentada, me balabceé un poco más. Daba la sensación de que hiciera lo que hiciera, podrían romper y estrujar mis planes de cuatrocientas maneras diferentes. ¿Norman puede hacer clones? Ni siquiera entendía como podía funcionar eso. Solo intentar deducirlo me hacía doler la cabeza y el mundo. ¿Palomino y Spukov muertos? ¿Norman los sacrificaría así como así? ¿No serían también clones? Concéntrate. Tu puedes. Me mordí un poco el labio. Mucho antes de hacerme daño físico real, me dolió. Me sirvió para concentrarme. Me di ánimos. Casi lo consigo. No sirvió para nada. Ok, casi me di ánimos. Algo que sí podría hacer un niño contra un gran maestro del ajedrez es salir corriendo. No rendirse, no renunciar, no dejar que el gran maestro gane la partida, sino, literalmente, salir corriendo. A lo mejor hasta tirarle unas cuantas piezas en la cara. 

Huir es la prioridad. Si Norman había estado afuera todo ese tiempo, quizás aun quería salvarme, pese a mi insurrección. Me castigará mucho... no pienses en eso. Seguía viva o algo así. Abrí los ojos. Observé qué cosas había a mi alrededor. Huir, solo huir. Y mientras palpaba mis alrededores a distancia... ¿Que hay en mi mano? Apenas me había dado cuenta. Otra canica solar. Había conseguido hacer la suya, confirmando que esa gente podían hacer cualquier cosa que yo hiciera sin problema alguno. Al menos me la había dado...  ¿Como lo hace Erzsebet? Ella estaba constantemente en este tipo de situaciones, según daba a entender... todo lo que hacía... al menos que yo supiera... Y entonces Erzsebet me dio ánimos: si ella puede, yo también. Cierto que no éramos iguales, probablemente no éramos ni parecidas... pero Erzsebet sí estaba en mi liga. Ella tiraba piezas a la cara de grandes maestros todo el rato, y allí estaba, asqueroseando al mundo constantemente... Gracias Erzsebet. 

Erzsebet no parecía entender nunca nada, o no del todo, o no de la manera en la que el resto del mundo diríamos que se entienden las cosas. Y ahí estaba. Creo. Nunca se sabe con mi hermana... Yo puedo huir. Apreté mucho las manos, una contra otra, intentando que todos mis sentidos se concentraran en esa única sensación por un momento. Extendí mis sentidos todo lo que pude. Si podía triangular mi posición, mejor. Y si podía adelantarme un poco, un poco mejor. Ya había perdido mucho tiempo. Rápido, Primela. Rápido y sucio, como Erzsebet. 

Noté un spray para el pelo de entre las cosas. Recé mentalmente para que fuera inflamable. Vamos vamos vamos... Me abalcé sobre el susodicho, me lo acerqué a la cara. Habría llorado de emoción: efectivamente, tenía la etiqueta de ojo que quema. Y... ¿Un mechero? Ya empezaba a tener ideas. Rebusqué, y encontré cosas interesantes. Botellitas de agua, pote de jabón, pajita, palito, spray inflamable. Y, muy importante: un mechero. No era mucho, pero quizás era suficiente. Dejé los materiales en fila, delante de mi. También deposité la otra canica con los otros ingredientes, como para decirme que contara con ella. Me faltaba algo con lo que lanzar la mezcla. Algo que me salvara la vida. Algo que lo viera, y dejara de tener ganas de haber muerto. Entonces recordé cierta golosina antidepresiva que había hecho para alguien muy especial... ¿por qué la sensualidad es tan peligrosa...?

En mi cabeza, la piruleta antidepresiva se fue volviendo más ligera, elástica, revolviéndose sobre ella misma, bailando en círculos, como divertida, hasta que...

Sostuve la imagen en mi mente. Sentí como se iba desinflando en mi mano, y a medida que se desinflaba, me drenaba, e iba ganando... existencia. Cuando abrí los ojos, ahí estaba mi globo (supongo, sigo la narración suponiendo que ahí está). Lo dejé junto a la otra canica. Agarré el palito hueco que había encontrado, y después de ablandarlo un poco con el fuego del mechero, le di un poco de forma cónica usando la punta de los cordones de mis zapatos. Adaptador hecho, proseguí a juntarlo con la pajita. Metí la punta del pote de jabón en la boca del globo, y apreté para que cayera bien adentro. Lo mismo con el agua. Finalmente, metí la pajita hasta el fondo del globo, y procedí a apretar. Vaya. No había mucho gas inflamable, pero qué se le iba a hacer. Apreté la punta del globo tanto como pude, con cuidado de no hecharlo todo a perder ahora que ya casi tenía mi coso fabuloso escupe-yuri on fire, y agité para mezclarlo bien todo y que quedara una espuma apetitosa. Solo quedaba un paso antes de inflar: el ingrediente especial. Tiré la otra canica dentro del globo, y soplé tanto como una zombie-liche-cosa media muerta podía soplar. Con cuidado de no apretar el activador sin querer, hasta usando movimiento mental si lo viera necesario, le di unas cuantas vueltas, suavemente, al globo, acabando de mezclar, y asegurándome de que no se me caía la mezcla en un descuido. No era mucho, pero quizás era suficiente, y tenía sorpresa. Me aseguré de estar agarrando la boca del globo con fuerza. Me guardé el mechero en el bolsillo con la mano la otra mano.

Ahora... ¿Donde estoy? Escudriñé el espacio con mis sentidos aumentados... 

Notas de juego

Me di el lujo de saber decir "gracias" (al menos lo que google translator me dijo que es gracias) porque pensé que es solo una palabra, y supongo que puedo saber decir gracias, por lo mismo que puse en la narración, o bien lo sé de haberlo escuchado por ahí, o cosas vampíricas random XD.

Me activo auspex para extender sentidos, y auspex toca-auras, que no me pillen desprevenida.

Todo el parágrafo que hay después de la imagen del globo (dame algo por el callback a la piruleta antidepresiva porfa XD) es descripción de como se hace el experimento, que es tal cual lo mismo que en el video de la espuma de fuego, pero dentro del un globo. Lo único que ha cambiado es que en el paso en el que usa la punta de la tijera para darle forma al palito, uso la punta de un cordón. Yyyy:

también tiro la canica dentro del globo. Mi idea es apretar el activador con movimiento mental cuando lo vea útil. Osea, puedo, no? Es solo pulsar un botón, supongo que puedo. Y si no puedo, pues tengo un problema y ya me problemearás al respecto XD. A parte de hacer el globo escupe-yuri on fire, me he activado auspex de sentidos aumentados y auspex de auras, y intento saber donde estoy.

Cargando editor
17/07/2019, 21:38

Muchas referencias, veo, me vas a hacer explotar la cabeza... Tal como Svetlana te hizo estallar el corazón.

Malas y agrias bromas aparte, efectivamente notas que eres de nuevo, como dije en el post anterior, cero respecto por la cuarta pared, rota hace rato, por falta de presupuesto para repararla cada vez que es hecha pedazos, que es prácticamente siempre. Tienes por entendido que tú misma, en la fase final o maestría de tu propia Senda principal de Taumaturgia, muy como para Norman es su hechizo clásico de "Hervir Sangre", lo es para tí "Crear Vida", pero aún con eso... ¿Cómo? Sabes que él es poderoso pero ya lo dijiste, su poder está por sobre los nueve mil, y no tienes un scouter visual para romper en rabia ante la realización. ¿Quizá los lentes de Norman? Que quizá estaban entre esa... Pila o pudín raro de esencia, no sangre, no carne, masa... ¿Qué? Masa de clon, pero todo, todo este tiempo te sentiste tú y fuiste tú, Norman igual en su hijoputismo de granmaestro o sire. ¿Los clones estos estaban conectados psíquicamente con... Ustedes? Si el Norman no-clon está y estuvo afuera... ¿Qué estaba haciendo? ¿Por qué dejó a tu yo-real aquí mismo? Esto es demasiado más castigo del debido, pero "justo" o "injusto" no aplica con alguien como él.

Pero algo que sí aplica es, como bien pensaste, un tacaño que siempre quiere que todo salga a su puta pinta, y que no botaría recursos tácticos como tú o como sus dos soldados y asociados así nada más. Algo recuerdas... Que dejó tu cuerpo-clon (sí, las referencias a Naruto, genjutsu, clones de no-sombra, son muchas, esto ya es demasiado) con algo como un 'extra' con su Senda de la Sangre para hacer que Aoko te mordiera o tú a ella y así vincularla directamente. Por otro lado, crees, como en un flashback que podría hasta llamarse un retcon (¡hack! ¡maldito hack! -cara de TWA aquí.-) recuerdas que el Norman-clon enmascarado y toca-piano hizo un último gesto antes de/durante su momento de ser des-hecho. Por lo demás, claro, Spukov existe y le habrás escuchado decir un "Gracias" común en ruso alguna que otra vez, sumado al rush e iluminación de la (falsa) muerte del momento que te permitió hablarle con esa palabra única a pesar de no entender nada de lo que ella dijo en su propio idioma.

Todo lo que encuentras y hallas te sirve para hacer lo que los humanos modernos llaman "MacGyvering", crear tecnología elevada y útil de tonterías caseras, tal cual. No has podido crear una cabeza nuclear, lástima, pero sí un exprimidor rápido, directo y absurdamente poco amenazan que si bien no es un lanzallamas, chorréa sensual y sexualmente con semen-espuma que podría ser activada con una mera chispa e incendiar a la recibidora del bukkake inflamable. Todas estas metáforas son inmensamente anti-feministas... Pero solo porque la enemigo en cuestión es una mujer, tal cual. Tú mismo le dijiste a Norman: "Son muchas mujeres, la tenemos en contra", y vaya si tantito de razón tenías, que Svetlana se le adelantó y bueno, aquí estáis, estás, está-n, pero no, argh, como sea. Y hablando de sexnsualidad, sí, Monsterrat viene a tu mente y, bueno, su adorablidad-sensualidad campestre te inspira a crear el globo, formando la conjuración: "De la nada al algo", como si fueses... Dios, tal cual. Sacrílego, pero que yo sepa nunca te valió mucho eso. Tus padres, los humanos, eran más o menos devotos pero más que eso, pues nada. Tu driada inspiradora, niña-planta-invernadero hace que el globo colorido como la paleta que le diste para que no se cortara literalmente de raíz (ok, ya, basta con las malas bromas mórbidas, joder, Zawa, eres/soy como un viejo idiota que se jura chistoso, enough!) se crée en tus manos y el resto es este cañón en tu mano, con la otra sujetando el encendedor, saliendo de la habitación para ir al pasillo.

Tu mapéo mental es perfecto. Al re-nacer o "volver" a tu yo-real-no-clon, estás en estado de Tabula Rasa, pura de circunstancia y pobredumbre mental, aún con (de nuevo, no sabes cómo rayos, son, imaginas y calculas, muchas disciplinas vampíricas para un solo logro) tus memorias del clon-Primela intactas hasta que moriste y directo a cuando re-volviste. Tus sentidos más la discipl-... Auspex, digámosle así y ya, que ya no eres la maestro musical elegante, sino una vampira joven-vieja sobreviviendo y tal, hacen que sientas todo como un mapa fantasma. Estás en la parte trasera y ligeramente descendida, como un pequeño subterráneo inclinado que permite subir por este pasillo hasta una escalera, no sabes si por elegancia de diseño arquitectónico, pura pretensión o algo más, ni idea. Allá arriba y aparte de otro pasillo ya en el primer piso debería estar Svetlana, tu enemigo, a la cual toca chorrear tal cual con tu espuma altamente yuri. Todo siempre es yuri y nunca no es yuri.

Sabes que la sire de Aoko todavía está donde antes. Algo sucede pero no logras percibir qué, que la tiene fija, quizá el esperarte para ganarte la sorpresa y contra-emboscarte primero haciéndote creer que la tienes, muy como la metáfora del ajedrez que diste. Además, Spukov y Palomino existen y, crées, vivos están. ¿Por qué no los ha mutilado ya? Antes pretendió hacerlo pero solo para joderte, ciertamente, una estratega de categoría. Y Aoko también está, intacta, por como Svetlana absorbió, medio recuerdas, tu explosión de Cs. completa, con sus sombras. Te toca actuar, tal cual.

Y en estos momentos es que piensas: ¿Cómo arremetería Erzsebet a la carga?

Sucio y rápido, supones, sin más.

- Tiradas (1)

Motivo: Astucia + Linguística

Dificultad: 7

Tirada (3 dados): 1, 6, 2

Éxitos: -1 Pifia

Cargando editor
20/07/2019, 15:52
Primela

Si Norman me había dejado escondida detrás de la cuarta pared, una cuarta pared que parece estar hecha de ese papel con el que están hechas las puertas de los animes, es que yo intentando escapar formaba parte de su plan. Probablemente, también de mi castigo, porque nunca hay que desperdiciar la oportunidad de castigarme. Me mordí un poco la lengua, lo suficiente como para tener que esforzarme un poquito para no gritar. Por imbécil, por pensar que siempre merezco que me castiguen. Me castigo por pensar que merezco que me castiguen, sí. Céntrate. 

Sentía que veía el mundo a través de unas pupilas más dilatadas que las de un hippie en medio de Woodstock del 69. Me habría gustado ir a ese sitio, pero estaba castigada. Lo escuché por radio. Norman me castigó por tener una radio escondida. El castigo fue quedarme quieta en medio de dos altavoces enormes mientras sonaban las canciones hippies a todo volumen, haciendo vibrar el suelo, las paredes, y a mi, que estaba en medio y me dolía como si me estuviera vomitando a mi misma mientras sufría un terremoto. A lo mejor no es que "justo" e "injusto" no apliquen para Norman, a lo mejor es que tiene una idea diferente de esas cosas... A lo mejor lo que le permitía sobre"vivir" y/o aprender algo útil era justo y bueno, y todo lo otro injusto y malo, y aplicaba esa misma moral conmigo. A pesar de ser indescutiblemente un monstruo bajo cualquier moral o ética humana, había que reconocer que era alguien de quien se podían aprender cosas útiles para no morir. Claro que él mismo era el motivo por el que me encontraba en una situación que requería de lo que él me había enseñado para no morir, y si él mismo no hubiese decidido transformarme en una no-muerta sin mi consentimiento, ahora yo ya estaría muerta del todo, probablemente en paz con mi vida, porque la vida de los vivos del todo siempre es feliz, fácil, y nunca tienen problemas. Solo hay que ver como está el mundo. "Justo", "Injusto", al fin y al cabo, son palabras. Pero Norman es el más injusto de todos. Lo odio. Mentira, tienes síndrome de stocolmo. Bueno, puedo tener síndrome de stocolmo y odiarlo a la vez, no? No, porque eres imbécil y le tienes demasiado miedo como para odiarlo de verdad. Demasiado complejo para lo que viene al caso.

Todo eso y más pasaba por mi cabeza mientras hacía mis manualidades experimentales con globos escupe-bukake inflamable. Fuera como fuera, una cosa me quedaba clara mientras sentía el aire fresquito circular por debajo de mi piel: Norman había calculado que yo saliera de ahí. A pesar de la espiral de sentimientos mayoritariamente negativos - ¿Eso incluye una minoría de sentimientos positivos? Shhhh calla Primela - , debía contar con que me estaría apoyando. Me había dejado en un lugar en el que era posible realizar manualidades como la que estaba terminando, contaba con que reapareciera con algún cachivache improvisado. Contaba conmigo. Entonces, en pro de la igualdad entre maltratador y maltratada, debía contar con él, ¿no? No, realmente no, porque también era capaz de dejarme a mi suerte como castigo, confiando en que escaparía. Quizás perdiendo todas las extremidades por el camino, y eso formaría parte de mi castigo. Hasta podía imaginármelo: Primela sale disparada de una explosión que la mutila a lo boom-boom wow, y al caer en medio de la calle desangrada, Norman está ahí de pie, con los brazos cruzados, y lo único que dice es

Eso te pasa por desobedecerme.

Así que temblorosa como una mariposa en una telaraña, me dispuse, finalmente, a salvar mi vida. Agité un poquito el globo bajo mi brazo, comprobando que notaba la posición de la canica solar, alejé el mechero tanto como pude del globo, comprobé que funcionaba, temí por todo otra vez, y me puse en marcha. No quiero morir.

Con todo el subidón de confusión, miedo, y auspex que llevaba encima, parecía que cada paso me hundía en una oscuridad blanda y mortal. Mis movimientos estaban llenos de agujas calientes en cada poro de mi piel, que parecían abrirse y cerrarse como si respiraran. Sobreviviré y le daré un... un... abrazo a Montserrat. Estoy triste. Ayúdame Ersebet. No tenía idea de como lo haría ella para hacer las cosas sucio y rápido, pero yo no me atrevía. Después de unos pocos pasos, empecé a pensar cosas como que la sire de Aoko también debía tener un auspex comparable al de Norman, y seguro me notaba a... seguro que ya me había notado. Yo necesitaba un plan, y antes de dar un solo paso más, intenté formular uno. Escapar. Eso no es un plan. Bueno, es un plan muy muy resumido. 

Palpé los alrededores. Tenía un globo escupe-bukake inflamable, un mechero, y la canica dentro. Si ya me estaban esperando para una contra-emboscada, y teniendo en cuenta su fuerza y velocidad, será perfectamente capaz de esquivar cualquier rastro de semen explosivo - como buena lesbiana pura sangre que puede presumir de no estar manchada de la esencia opresora masculina - , a no ser que sea Norman quien la tiene tan concentrada... aunque no podía fiarme de esa posibilidad. A ritmo de babosa malherida, fui caminando por el pasillo, armada con mi... incendiador de mujeres. Sexual. Es más como que la situación en sí es bastante anti-feminista, empeorarlo solo con narraciones que incluyen bromas relacionadas con humillacines sexuales para marcar dominación masculina ni suma, ni resta. Bueno, el caso es que antes de dar un paso, volvía a comprobar la posición de mis enemigas, de mis sombras, me aseguraba de que esa silueta oscura con la que casualmente me podían asesinar no se alejara mucho de mi, hasta rastreaba el mismísinmo aire con mi tacto, procuraba caminar hacia donde me parecía que el aire se llevaba mi sonido al sótano en vez de hacia mis enemigas, iba con cuidado de no mover un músculo más del necesario, estaba absolutamente pendiente de si notaba algún cambio de aura que denotara que se alarmaban por mi presencia, cual metal gear solid observando una exclamación encima de la cabeza de un soldado. Armada y todo, todavía no me atreví a salir. Solo me acerqué un poco, y volví a mapear el terreno. Esta vez, buscando una cosa concreta, y, de ser posible, su posición respecto a la otra sire.

Cables. De los que se incendian así:

Por supuesto, serían menos espectaculares que los de alta tensión, pero hey, un cortocircuito puede quemar una casa, y todo lo que quería era poder salir de ahí. Tenía que notar el característico cosquilleo que producen las arterias eléctricas de los edificios. Si podía hacer la finta de atacar a La Sire para luego cegarla a ella y a Aoko con la canica, y acabar obligándolas a salir incendiando el local, todo lo que me quedaría sería no morir auto-incendiada. 

Me quedé tan quieta como pude, y triangulé cables y sires.

Pongamos una banda sonora adecuada a este yuri mortal que enseñe al narrador a ser anti-feminista como Dios manda, y no esa basura de bromas sexuales. Y de mi patria:

Notas de juego

Pues eso, me lo tomo con calma. Véase:

Intento acercarme sigilosamente. ¿Cuanto me acerco? Pues eso, lo justo como para notar donde hay cables cerca de Svetlana, y me detengo. A continuación intento tactear el ambiente para saber si me han descubierto. Y güeno, si descubro algo más de lo que se cuece por la sala del concierto, bienvenido será dicho conocimiento, pero lo principal para Primela es encontrar algún cable cercano a la sire, y saber si la han descubierto.

Antifeminista dice... ¡aprende a ser un buen machista coño, aprende! 

Cargando editor
21/07/2019, 03:16

Te lo devolvería ya mismo pero tengo que concentrarme, soy cabezahueca, ando con otro OST para permitirme escribir esto de corrido y fluyendo, además de que es un post cinemática, o sea, una conclusión dramática y tal, porque sí, tu arco del duelo contra las LaSombra no fue ni como imaginé la primera vez, ni la segunda vez, y, creo que ni la tercera vez tampoco por el cambiazo que hice con la actitud de Svetlana para no dejarla como una inútil. ¿Hacer a alguien mostrar su aptitud, mujer o no, te hace machista o feminista? Pues no me meto en eso porque sé que si te digo el clásico, nunca menos conocido: "¡No es ni uno ni el otro, es el sexismo el problema!" te va a rebotar como si hubieses ganado Taumaturgia 5 de la nada y caerá en... Zimbabwe, por decir un lugar aleatorio. Con esto, pasamos al proceso y conclusiones variasesas.

Todo indicaba a que había un gran plan que el arácnido hijo de puta de tu sire concoctó desde el momento cero, desde que supo sobre las dos y su plan de atacar desde Japón a puntos en occidente, lo cual implica que vosotros no érais las únicas víctimas, solo meramente las primeras elegidas por ellas. Aquí la única "justicia" o "bien" era ganar y la única "injusticia" o "mal" era perder, como lo pensarían los filósofos y practicantes del utilitarismo... O niños chicos, tal cual. ¿Sueno pretencioso al decir eso? Tampoco importa, de nuevo. Aquí vinísteis a sobrevivir y a ganar, por lo que al final, es al revés para tí al menos, que eres la menos monstruo de ambos: Ganar significa hacer el bien, es lo justo, y promete la supervivencia que te obsesionó desde que supiste sobre este absurdo entramado de eventos ya hace rato y desde kilómetros, miles de estos.

Y hablando de "venir ver a kilómetros", frase más conocida que el pan: Tu avance es... Notable, impecable para alguien tan patosa y llena de miedo. Te lo resumo en tres segmentos y uno extra: Primero, tensa, total, sacudes sin querer tu globo-lanza-espuma-incendiaria y con dicha la canica, que no se activa ni nada y tu mechero (acá en mi patria le decimos "encendedor") en la otra mano igual rebota un poco, más tus pasos como firmes, que intentan ser sutiles pero resuenan, no tanto, pero lo hacen, típico sigilo fallido infantil. El segundo tramo es inmensamente mejor, sin ruido, nada, pero tampoco siendo una Snake real, que los motifs de animales se disparan por los cojones, hostia. En el tercer segmento la cosa sube y coñe, que casi ni haces nada de ruido, tal cual, eres una con el flujo del tacto mismo, las auras, todo, llegas casi al final en donde hay un pasillo más, antes el pasillo de ascenso semi-girado, y ahora el pasillo para llegar al frente. Supones que acá, en este pasillo intermediario estuvieron Palomino y Spukov esperando salir pa' enfrentar a las ghouls LaSombra. Por último, al llegar, miras... Y bueno, es increíble.

Antes sentiste las auras de las plantas, con Montse en su invernadero/granja/etc., y las viste. Luego Normancito te dijo que no solo los objetos inertes tenían aura, sino que podías verlas en tres dimensiones para analizarlas mejor. Todo eso, pum, lo logras de una, pero no es todo, porque tu super-tacto te permite en el instante, no, dirías que es un Planck, una unidad de tiempo nula, 0.00000000000000000000000000000000000000000000000000000000000000000000000000X, tal cual, muchos ceros más, un mínimo, un épsilon de tiempo, en donde percibes con claridad el flujo de los electrones, muy como hiciste cuando creaste la Canica Mk.I u Original, por y hacia donde van, qué buscan, etc. ¿Cuales son? No los del lugar, aún con todo el alboroto, ya que un lugar pirujo tiene buen cableado y todo, y pensarías que los capitalistas en su deseo por ahorrar siempre y ganar máximo profit para explotar y ser malos, cochinos y feos, tendrían algo cagón en su lugar pretencioso y ricachón, pues no fue el caso acá... Sin embargo algo donde ocurrió la acción y que fue rentado fuera de dicho local mismo y su infrastructura si produjo ese estado en los cables, derruídos y llevados al nivel de un cable inflamable:

Nada menos ni más que los de las varias maquinarias de los instrumentos musicales, conexiones del theremin, del piano de Norman que al final fue un teclado, pero sirvió, y los amplificadores dicho fuese. Todo eso cuando la mujer hizo sus multi-tentáculos de tiniebla hizo mucho caos, sumado a que Norman mismo seguro... ¿Previó esto y los dañó un poquito más? Una cosa es que el cabrón sea Kasparov y otra es que sea el puto Dios o Batman en esteroides benditos, tal cual. Pero sí, esos cables están ahí, al lado y frente de Svetlana, tal cual. Tras ella (desde la perspectiva tuya y del escenario donde abundan dichos cables convenientes, más lejos) está Aoko, tal cual, aún caída e inconsciente o algo así, no sabes qué pasa. Aquí el punto es que tienes el ángulo y perspectiva perfecta para poder hacer estallar todo eso con una única chispa inicial del mechero y nada más, lo cual es absurdamente genial.

Y aquí es donde comienza el asunto real. Te decides a ir sucio y rápido, pero uno no cambia porque quiere cambiar, o incluso cuando lo necesita del todo, si no todos seríamos nuestros propio ideales o no seríamos nada, tal cual. Sientes a alguien hablarte, alguien conocida, sus resto, el fantasma apenas visible del "+", muy como esos fantasmas de las auras de los electrones en posiciones convenientes, la materia de los cables corroídos y listos para poder incendiar ni siquiera el local, sino a Svetlana directamente, cosa de chorrearle una buena corrida de tu lefa incendiaria, haciendo que quede en flamas y huya ella, punto pelota, sin más. Tal "persona" o, de hecho, si usamos a Jung, la palabra 'persona' es aún más apropiada, aunque sería más una 'sombra', pero ambas son lo mismo, de hecho. Primela+, tu Bestia Interna tomada forma existe brevemente y toca tu hombro, te da ánimos necesarios.

- No se trata de no tener miedo como el imbécil y hacer todo creyendo que el culo ajeno te pertenece, es superar tu miedo y luego soltar tu squirt encima de la cara de tus objetivos. Superar, no forzar... Ahora ve y chorréales todo tu coraje, niñata. ¡Ya!

No había que esperar. Tus reflejos actuaron y lanzaste el mechero directamente hacia los cables, en la dirección correcta, ni siquiera necesitando movimiento mental. Habías logrado una percepción tan Matrix, tan Jedi, tan Equilibrium, tan [inserte aquí otra referencia pop de cualquier época apropiada] que bastaba con ir, y tirar el mechero con un mínimo de presión de tu mano tacto-poderosa para que, al ocurrir una chispa, pequeña, puntual, directa, el ardor llenara a tu enemiga, la poderosa sire ajena sombría, y listo, pim pam pum, victoria.

¡Pero pero pero!

Nada es tan simple como lo parece. Nunca. "N".

Svetlana no logró darse cuenta cuando llegaste, pero sus instintos animales, quizá su intuición femenina sumada a su inmensa experiencia, su propia inteligencia, su cabronería inherente que le permitió vencer al Norman (clon, pero igual) y hacer que el tipo tuviese desde antes planear como un completo loco (como bien sabes, manejando tu memoria cochinamente y forzando tu maldad interna y odio para que a su vez no arruines su plan para que a su vez puedas hacer lo que estás haciendo... se entiende, ambos entendemos y entendemos que entendemos) hizo que estuviese engrifada, como una gata, inmensa, prehistórica y potente, como una diente de sables directa de hace millones de años atrás, ahora, frente a una, no sé, oveja bebé.

Pero una oveja bebé que acababa de lanzar algo que podría matar a la felina invencible... De no ser porque esta actuó primero. Miraste claramente como ella tensó su mano. ¿Sombras? Demasiada demora. ¿Un objeto? No hay, tomarlo demoraría décimas de segundo. ¿Mi propia potencia y saltar? Me quemará viva y caeré en su trampa, chiquilla del puto Norman, nada menos. Ya lo tengo. Apretó su mano y sí, generó sangre por la pura presión del cuerpo, reventando a pura potencia directa su palma para, con ese set de gotas, un chorrito no mayor a un quinto de centímetro cúbico de sangre que proyectó con su mano misma, arrojando con tal poder, tal precisión, absurdas, irreales, que interceptaron justo al encendedor/mechero en camino a hacer que las chispas dijeran "¡Hola!" y colisionaran con los electrones y semejantes para decir "¡Hola a ustedes!" en la colisión fatal y feliz de amiguitos químicos-físicos-explosivos. Antes que el encendedor pudiese llegar, a cosa de veinte o treinta centímetros de los cables, fue impactado por la... Bola de plasma, de sangre, no solo impactando justo en la boca para impedir que la chispa fuese liberada, sino que llevándolo hasta la pared del fondo del escenario y reventándolo, además la sangre misma emplastándose artísticamente como una capa perfecta de rojo tras haber asfixiado, molido y anulado al mechero del todo. Aquel proceso que viste en cámara cinemática derivó con un par de esas "placas" de "pintura" roja de sangre tras chocar contra la pared salpicar, cuales cuchillos arrojados por el costado de tu cara, que sentiste cortando tu piel aún sin hacerlo, y derivando hacia la pared lateral como meros miligramos de sangre. Svetlana te observó y tú a ella. Su aura...

Su aura decía tres cosas, simples, sin necesidad de visión hippie de plantas ni de objetos ni supercientífica tridimensional ni Normánica, no. Cualquier novato comemierda (o comesangre de burros gordos e inocentes y apestosos a mierda, al menos, como es el caso) podría verlo con un poco de instrucción sobre el aspecto del Auspex en cuestión:

Furia, indicando que estaba por entrar en Frenesí.
Tensión, indicando preparación a la batalla, porque si no te vió, te anticipó al menos.
H a m b r e. ¿Tengo que decir más? Vació casi toda su sangre lo que produjo el punto uno y más.

- Nada mal, chiquilla de Norman. Te liberaré del yugo de serlo. Felicidades.

No sabes si te devolvió el "Gracias" o quería que le agradecieras con razón por matarte, ahora sí. Un bizarro sentido del honor que tenía esta peculiar mujer. Pasó algo más, porque no terminé antes cuando dije que veías cosas y auras y auracosas. Típico de una super-usuaria de Auspex, día como cualquier otro.

Aoko tiene un aura en blanco, casi, lo que indica que ha sido puesta en modo autopiloto por una potente Dominación, el bla bla bla voluntades bla bla bla, hecha seguramente por Svetlana. Solo en la parte más externa de su aura automatizada hay tres colores: Azul concentrado que significa enfoque para máxima eficiencia, un rojo opaco y apagado, metálico, que significa eficiencia de combate y destruir lo que venga sin detenerse y un horrendo negro, puro como puede serlo el color en cuestión, que significa, como imaginarías... Ninguna consideración por nada excepto el objetivo. Te dejo a tí interpretarlo por lo demás.

Atrás, ambos ghouls, de tu lado, Palomino y Spukov con herramientas, como un taladro modificado y granadas de luz normales, estaban por ir por Svetlana, tal cual, pero Aoko les detiene, a ambos con su katana, sin problemas, empujándolas. Al estar sin contemplaciones ni duda, es una máquina que logra fácilmente retener a los dos soldados potenciados, cansados y heridos aún si Norman parece que les bufó o curó antes de "morir", lo que ves en partes de sus auras con segmentos del aura de Norman y un color palpitante, seguramente la Senda de la Sangre del mismo. Svetlana igualmente tiene un parche parecido, pero contrario, como de explosión. En su cuello, que logró bien tapar, Norman, mediante el contacto que tuvo Svetlana contigo, redireccionó lo que pensaba meterle a Aoko con tu sangre como vínculo y lo convirtió en que, cuando Svetlana te matara, se tragara el rico Caldero de la Sangre, hubiéndola hecha recibir una explosión en su cuello y hombro izquierdo justo después de matar a tu yo-clon previa. Aoko retiene a los otros dos y los empieza a hacer retroceder, de hecho, demostrando ser una maestra absurda con la katana. Palomino cochinamente intenta dispararle con sniper de cerca, a quemarropa casi, para pillarla por sorpresa y Aoko usando su poder de sombras, su propio poder vampírico y pura habilidad, le devuelve la bala y revienta el francotirador y lo hace retroceder contra una mesa y la ventana de la pared. Spukov le intentó meter una granada de luz en la cara a riesgo de ser herido y Aoko no solo cortó el objeto justo cuando estaba detonando, sin miedo, sino que además forzó a Spukov a saltar hacia atrás, usando luego la vaina del arma con aquel hilo que tienen o cuerda para usarla como un objeto arrojable, cortarle la cara apenas y devolvérselo a sí misma, volviendo a pose sin demora ni gesto, ambos cagados de miedo y arrinconados. Son humanos después de todo contra una monstruo elevada a su máxima aptitud.

Y tú.

Svetlana se tira contra tí, un ataque de lado, cual zarpazo de felina ya dicha, pretendiendo quizá rajarte con su mano y decapitarte con su físico superior al tuyo y aumentado claramente, lo que ves en su aura como una sobrecarga de aura que contrasta con su hambre cada vez mayor, sed asfixiante. Ni te imaginas como será su propia Bestia Interna, con 200+ años. Tu aptitud del [Super Tacto] te permite palpar el ataque sintiendo como ocurre/ocurrirá, y logras moverte hacia atrás, sintiendo tu cuello aplastado como plasticina, en donde te habría estampado de lado contra el suelo. Segundo, te intenta ahorcar de frente y te agachas, sintiendo una asfixia horrible, donde casi pierdes la consciencia. Dolor, mucho dolor, dolor, dolor que... ¡Argh! Al agacharte te hace una clásica de rodillazo a la cara, sin piedad, que evades tirándote hacia atrás torpemente y tu cara es pudín, puré, tal cual. Ya ni es dolor, es asfixia, es nada, es total desesperación y desposesión. Por su poder, cada uno de sus ataques te gasta dos de tus, em, cómo lo digo sin ser metajuego... "Planos de vitalidad"... "Segmentos de estado corporal"... "Porcentaje parcial indicador de no-vida hasta caer inconsciente"? Aquí queda claro que soy un hack y ni Terrible Writing Advice puede salvar mi hackería, pero bueno, ya estamos algo lejos para tirar pata pa'trás, ¿no? Con eso, te mira y al tenerte cual tortuga dada vuelta hacia arriba, sonríe, rabiosa, indicando que arrojará para devorarte, completa, con sus dientes ya hace rato salidos hacia afuera, que le daban/dan más la idea de una lince prehistórica gigantesca simbólica-literal. Podrías, de tener suficiente "Porcentaje parcial indicador de vitalidad restante" para usar con tu Super-Tacto, girarte, pero no, solo puedes sentir la inevitabilidad de cómo serás devorada, incapaz de moverte bien por el dolor fantasma-real en tu caso (un mérito que es defecto a la vez) y de tu destino inevitable, la derrota, perder. Adiós a Montserrat, adiós a... Todo. A tu invernadero, a tu sueño, a...

- ¡GERÓOOOOOOOOOOOOOOOOONIMOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO!

Un choque, sonido de vidrios rompiéndose entonces y alguien estampando a Aoko con una sola mano, siendo atravesado por su katana hacia adelante y soportándolo como si fuere, de nuevo citando a la cultura memética: "'dis but a mere flesh wound!", de hecho, lo cual para él, podría sí que serlo, el cabrón. Empuja a Aoko tras haber entrado... No sabes cómo ni por qué de ese modo, pero lo hace, y con él entra alguien más que, en tu convalescencia psíquico/física (creo que en tu caso esa separación casi no existe, casi) ves a alguien que, por el odio de Jesucristo y el amor de Lucifer no debería estar aquí, bajo ninguna circunstancia. Pelo desordenado pero liso, bata de científico o técnico al menos, barba ligera y bueno, cara de loco, de MAD SCIENTIST. ¿Por qué él? ¿Por qué con Norman? Sí, ya sabías que los sires no se meten con los contactos de sus chiquillos, es una ley no escrita, pero Norman sabía de Montserrat y de, sí, él, y al final estas reglas nunca se siguen del todo o nunca entre los parásitos zombies-mágicos-liches que érais, malditos todos, literalmente. Jadeando, el humano amigo tuyo y nortemaericano habla.

- Are we... Here? F-fuck, Norman, mistahr, that was fucked up.

- You saved it, kiddo. I owe you, for now let me save... Your friend!

Ni puta idea qué pasó que "él lo salvó y Norman se lo debe", tal cual, pero sí que fue tu sire el que gritó "¡Gerónimo!" al llegar, por lo que deduces que el tiempo que pasaron donde/cuando/cómo sea fue suficiente para que Jude, tu contacto técnico-mecánico-lógico lo infectase con su Okabeismo ilustrado de alta categoría. Siguiendo con tu situación, sin embargo, entre todo el jaléo y evasivas, terminó pasando que al caer, le chorreaste tu contenido del globo, la espuma, a Svetlana en todo el pecho y cuerpo, pero al caer sobre tí ahora, como está (yuri violento, siempre violencia y yuri de la mano) algo de la espuma incendiaria está en tí, tal cual, por lo que si se activan los cables (porque sí, te empujó y quedaron ambos sobre el mismo escenario donde comenzó todo esto, rodeado de los dichosos cables) ambas serán quemadas vivas. Notas como avanza en tiempo record, entonces, en dirección a ambas, momento en que Svetlana, riendo, hace un mero gesto de la mano hacia atrás y con ello, tentáculos ya preparados atacan a Norman, atravesándolo como antes pero con menos precisión, en costados, brazos, uno le roza la cabeza y lo hace sangrar, pero nada, sigue implacable. Al ir hacia ustedes, prepara otros, los últimos que tenía, que le rajan una pierna entera, la entrepierna, tal cual, haciéndolo aguantarse el dolor y el estómago, tal cual. Malherido, la mira y habla, sonriendo... Aún con la herida en ambos lados de la pelvis.

- Mala idea, Lana. Tu sangre ahora es mía, y la de mi chiquilla, no tuya, temo. Fin del juego. Jaque Mate.

Así, apunta a Svetlana y usa su habilidad de Absorber Sangre o el Canal Sanguíneo, haciendo que se vea como fluye el líquido rojo por el aire, saliendo por la herida que le hizo antes en el cuello mediante tí. Le roba toda su sangre y Svetlana pierde poco a poco la consciencia, pero entonces, al ir haciéndolo, entra en Frenesí, su aura tornando un color completo rojizo corrupto, con otros colores como apoyo. Suelta ella tu persona por fin y Norman con su Movimiento Mental te aleja de aquella área, en donde entonces, tus reflejos actúan, no, no son tus reflejos.

Sino la maldición Tremere, la Ley de la Pirámide.

"Activa la flama, incendia los cables"

Leíste su mente como hace un rato leíste la de Svetlana, directamente, pero no entiendes cómo podrías, tomando en cuenta que el mechero fue aniquilado. ¿Buscar otro? ¡Cada segundo cuenta! ¡Eso lo pensó Svetlana claramente! Por la Maldición Tremere no necesita hacerte ni Dominación, ni Vínculo de Sangre directo, solo... Desearlo y lo harás. Tu alma intenta negarse, pero en el fondo ganarás. Dijiste "Nadie muere", pero Norman es al que has querido matar siempre, y te lo está dando. ¿Cómo?

Tus manos apuntan hacia él y... Thanos, tal cual. Un chasquido que hace las cosas, a medias en tu conflicto interno, pero de forma completa en el acto. Imitas la misma técnica que usó Norman para incendiar y prender su cigarro cuando esa ceniza te hizo ver al mini-Norman, inocente, humano alguna vez. Al chasquear los dedos suavemente la chispa del Encanto de las Llamas se proyecta a medida que eres arrojada y así, los cables chasquéan, empezando a quemarse, a quemar todo y... ¿Eh? ¿Tu ropa?

Notas que tu vestido por fue rajado, por Norman seguramente, acto muy violador, pero que te dejó libre de espuma incendiaria, la cual dejó al piso, ahí mismo, a posta, haciendo que él y Svetlana sean rodeados por flamas, ambos. Norman tiembla, teme, en su aura, pero lo aguanta. Svetlana le había ya crujido una parte del cráneo, haciéndole sangar pero el miedo la supera, más la falta de sangre, más todo. Intenta hacer algo pero es difícil, por lo que decide, finalmente, moverse de modo que dobla sus rodillas, pegándole a las del otro, quebrándoselas tan audiblemnte como podrían todos oír ahí, y con lo que le queda de fuerza sobrenatural, intentar meter dos dedos a su corazón, sin llegar a fondo, viéndose como solo entran algunas falanges. Ahí, en flamas, ambos son envueltos y ves como el de lentes, hecho pedazos, logra hablar, aún, tosiendo sangre.

- Primela, exigiste ningún muerto y así ha de ser, pero pagar habrán de. -Chasqueó los dedos, gastando la propia poca sangre que tenía, haciendo que las dos ghouls sufrieran gramos de ardor, de Caldero de la Sangre, diluído al máximo, porque cualquier otra cosa las mataría aún siendo ghouls. Ambas se retuercen, pero quedan vivas, sus auras reducidas al mínimo, milímetros.- Quedarán en... Ugh... Coma, quizá indefinido, es lo más justo que te puedo dar.

Y entonces, aquellos que habían sido anulados por Aoko, no logran decirle a tiempo a su sire, como Aoko va por él, directo, de frente, a aniquilarlo. Norman apenas logra ver, pero te había robado igualmente la canica que él mismo hizo. Aoko, sin tener a las flamas, pero su cuerpo reaccionando ve el flash de luz que la detiene apenas, por su propia Maldición de Sombras. Norman retiene la katana con una mano, sangrando más y más, agotado a tope. Su aura denota que hizo mucho afuera, algo que seguramente... Alguien más hizo. ¿Aoko y Svetlana tienen clones, también? Norman mira los ojos de Aoko y ríe, ya apenas pudiendo hablar.

- Anuló tu mente del todo y seguro se guardó tus memorias para que yo no lo hiciera, brillante. -Jadeando, conjura varias cadenas en las manos, piernas y cuerpo de Aoko, inmobilizándola. Uno de sus ghouls, Spukov, le arroja el taladro y con este, Norman tambaleando apenas, tras haber pasado el fuego, le clava una especie de objeto de madera firme hecho para taparse con metal al final y sellarse en el corazón de Aoko perfectamente tras taladrear, que seguro iba para Svetlana como intentaron antes los ghouls.- Y tú, no puedes morir tampoco. Joder si exige esta niñat-ah...

Norman mueve a Svetlana con su Movimiento Mental a un costado y la hace rodar, rústicamente quitándole todo el fuego. Norman mira a Jude entonces y le asiente. Jude te mira, y mira a Svetlana, cagado de miedo pero concentrado.

- Eeerm, ya explicaré esto, my friend! Ahora, veamos... ¡Acá! ¡A lo que sea!

Jude, con una extraña pistola que sí, podría haber armado él pero se ve extraña, como hecha por otra "marca" pero sin marca visible, dispara a Svetlana, sin matarla ni hacerla cenizas, pero reduciendo su aura igual, dejándola en el mismo letargo que Aoko por la estaca de madera. ¿Nanobots de madera, quizá? Norman finalmente se eleva, apenas, con su propia aura casi al mínimo.

- Ahora tenemos que irn-...os... Primela, tu castigo... Allá en casa, Navarra, tú... Tú has hecho... Un buen trabajo... Pero se te, erm, nos... Juzgará y... Camarilla de Madrid...

Balbucéa cosas que, por tus Auspexes entiendes como: "Serás castigada cuando lleguemos a Navarra", "Has hecho un buen trabajo, por lo que te premiaré igualmente", "Ahora debemos tratar con la Camarilla de Madrid".

- ...Y ahora...

Fue entonces, que el tiempo se detuvo, tal cual.

Norman queda medio parado, inconsciente o a punto de, por haber hecho demasiado. Incluso notas que en algún momento te conjuró ropa directamente en tus manos, gastando valiosa sangre y con lo de mover a Svetlana para no dejarla morir en el caldero de flamas, mientras él era quemado por dichas más los daños que recibió, muchas heridas, quedando así al borde del letargo él mismo por falta de sangre. Al pasar algo que solo tú puedes entender y ver directamente por la complejidad de dicho y tu estado actual, quizá hasta el mal estado ayudando, lo comprendes:

Una lanza de sombras, un tentáculo extra, un último as bajo la manga, que las mujeres guardan como con todos sus trucos más cabrones. Lo tenía preparado de antes y en su último aliento, lo preparó. Notaste, con tu super-percepción, que ella no le hizo un agujero en el corazón. Le metió los dedos y le dejó la uña metida en un músculo y hueso justo para que él no pudiera tirar desde abajo el cuello en pos de agachar o girar la cabeza, tal cual, todo preparado, directamente. Ahora recién ves el dedo con sangre y la uña ausente. La lanza de sombras se conjura a espaldas de un Norman a punto de caerse. Sus ghouls lo notan, y heridos igualmente por la batalla contra Aoko, intentan correr, pero sabes que será demasiado tarde. Jude no sabe qué hacer, ni entiende de qué va, pero parece querer intentar correr a Norman, lo cual, claro, le costará la vida. Norman, con sus rodillas rotas no puede agacharse, moverse, saltar, no tiene sangre para moverse telekinéticamente, no puede girar ni mover su cabeza en un último intento de actuar, y como tal, esa lanza que avanza por el aire lo decapitará por el cuello, sin piedad.

Una voz, no de Norman mismo, no de Primela+, sino de... Alguien más viene. Una voz que de hecho no es mera telepatía, es una presencia del poder máximo del Auspex, la Proyección Astral, la disciplina que proyecta los sentidos al máximo y hace que todo tu ser psíquico esté en otra parte, pudiendo viajar por todo el planeta a velocidad de cientos de metros por segundo. Se trata de un hombre de aspecto elegante, de traje, delgado, con cara de carismático, pelo liso y cuidado pero casual, con un toque de inteligencia social que Norman no tiene, el cual a un lado tuyo te mira y habla, telepatía, si la necesita siquiera.

- Bueno... Tú dirás si quieres que Norman muera o no, niña. Mi mejor y único amigo en el mundo de los no-muertos. No puedo salvarlo ahora porque no puedo afectar ese objeto, pero sí pude distraer a Aoko lo suficiente para que su katana no matara a Norman antes ni cayese ella misma en esa pira de flamas al avanzar. Te queda un último recurso, el que acabas de aprender...

Y entonces, el misterioso hombre psíquico chasquéa sus dedos inexistentes.

Así es, puedes... Inflamar esa lanza de sombras y salvar a tu sire.

O no.

"Y no me digas nada a mí..."
- Tiradas (8)

Motivo: Destreza + Sigilo (Especialidad)

Dificultad: 6

Tirada (7 dados): 6, 1, 8, 3, 1, 10, 1

Éxitos: 0 Fallo

Motivo: Destreza + Sigilo [Parte II] (Especialidad)

Dificultad: 6

Tirada (7 dados): 7, 7, 3, 1, 3, 6, 8

Éxitos: 3

Motivo: Destreza + Sigilo [Parte III] (Especialidad)

Dificultad: 6

Tirada (7 dados): 9, 7, 4, 4, 6, 8, 5

Éxitos: 4

Motivo: Destreza + Sigilo [Parte Final: IV] (Especialidad)

Dificultad: 6

Tirada (7 dados): 4, 9, 2, 7, 10, 6, 1

Éxitos: 3

Tirada oculta

Motivo: Percepción + Alerta (Svetlana)

Dificultad: 6

Tirada (7 dados): 4, 2, 1, 6, 4, 6, 1

Éxitos: 0 Fallo

Motivo: Percepción + Investigación/Alerta {Promedio últimas dos habilidades, redondeado hacia arriba} (Especialidad)

Dificultad: 7

Tirada (9 dados): 9, 7, 3, 9, 4, 8, 10, 10, 10

Dados repetidos: 10, 10, 6, 7, 5

Éxitos: 10

Motivo: Percepción + Investigación/Alerta {Promedio últimas dos habilidades, redondeado hacia arriba} [Repetir 10's] (Especialidad)

Dificultad: 7

Tirada (2 dados): 10, 9

Dados repetidos: 9

Éxitos: 3

Tirada oculta

Motivo: Astucia + Alerta [Gasto 1dFdV] (Svetlana)

Dificultad: 6

Tirada (7 dados): 5, 8, 8, 8, 7, 7, 8

Éxitos: 6

Notas de juego

Y listo, contra-ataco con un tema anti-feminista que muy como el tuyo, a pesar de todo, habla del amor a las mujeres, el peligro del mismo y de temerles como corresponde, de mi propia patria.

Aprendiste, sí, el primer nivel de Encanto de las Llamas, joder, que has sacado 13 éxitos, te has hecho una con las flamas brevemente en ese momento y eso catalizó tu habilidad para poder chasquear los dedos Thanoicamente y plaf, lograrlo. Ahora puedes hacerlo de nuevo e incendiar, supones, esa lanza semi-física de sombras para destruírla o debilitarla. No he dado otra opción porque tu PJ recibió algo así de daño:

[X] Sin Penalizador (Sana)
[X] -1 (Magullada)
[X] -2 (Herida)
[X] -3 (Malherida)
[X] -4 (Malherida)
[X] -5 (Tullida, hecha m*rda)
[ ] (Inconsciente)

Las primeras dos X fueron cuando intentó pegarte el agarrazo (agarrón-garrazo) para pegarte la cara de lado contra el piso y estamparte a los mismos cables que querías usar para quemarla como castigo, que serían "0" y "-1" en penalizadores, hasta "Herida" primer nivel. Luego con el ahorque/asfixia frontal te hizo las sgtes dos X'ses, "-2" y "-3" hasta el primer "Malherida", y con el último ataque del rodillazo frontal que te hizo caer hacia atrás al esquivarlo, las últimas dos X de daño, "-4" y "-5", dejándote a un paso de la inconsciencia. En sí esta propidad de "SuperTacto" no te hace recibir daño, te hace recibir "daño fantasma" de "haber sentido en tacto lo que pasó" a cambio de una esquiva automática, lo cual es cochino tanto en efecto, como en paga, porque si bien esquivas lo que sea, no puedes curarte esos daños fantasmas porque están en tu alma/mente, no en tu cuerpo como el daño normal. Svetlana se subió la Destreza a 7 y la Fuerza a 5 con sangre (su tirada de Astucia + Alerta dió 6 éxitos, dándole esa intuición para poder hacer tal cosa, no escatimar en gastos), de modo que en vez de un daño por ataque, dos, lo que explica por qué estás en un estado tal que puedes apenas hacer eso, es una decisión de sí o si no.

Y sí, podría haber más de este post en contenido pero tenía que agregarle el DRAMA y la DECISIÓN FINAL.

Una vez pase, concluíremos debidamente la post-cinemática.

Cargando editor
21/07/2019, 15:49
Primela

Quien no conoce o no ha vivido el tema, a veces se hace preguntas como "¿Por qué las mujeres maltratadas no cortan la relación con sus maltratadores? ¿Por qué no los denuncian? Las leyes las protegen", y bueno, hay muchas respuestas, pero así en resumen... El patriarcado no es la única estructura social que interviene en estas situaciones. Hay que tener en cuenta, por ejemplo, el feliz casamiento entre el patriarcado y el capitalismo. No es solo que si dejas a tu maltratador este podría enfadarse y asesinarte, es que... ¿Qué vas a comer? A lo mejor tu maltratador es un maltratador, pero si estás socialmente aislada y no tienes trabajo, ¿como sobrevivirás sin él? Añádele que tu maltratador no solo te mantiene a ti, sino también a tus hijos, y la cosa se vuelve realmente delicada. Igualmente, de vez en cuando se producen situaciones que sirven para los que son "ni machistas ni feministas" para decir que cuando una mujer mata a un hombre tiene condena reducida. A veces, la mujer maltratada se despierta en un estado de enajenación mental, va hasta la cocina, hace algo como prepararse un sandwich, vuelve a la habitación, y asesina a su maltratador con el mismo cuchillo con el que preparó el sandwich. A continuación se come el sandwich, y vuelve a dormir. Luego descubren que tiene marcas de palizas de entre años y horas de antigüedad, y efectivamente, le reducen la condena. La condena acostumbra a ser estar encerrada y empastillada en un manicomio, porque suena a que eso es una buena solución para una mujer peligrosamente traumada, seguro que al salir está cuerda y recuperada y no es peligrosa para ella misma ni para las personas a su alrededor. Si quieres aún más ambigüedad de juicio, a veces no solo mata a su maltratador en un estado de enajenación mental, y también mata a los hijos. ¿Por qué a los hijos? Quien sabe, probablemente nunca quiso tenerlos, nunca quiso que tuvieran que aguantar la situación en casa, y, por mucho que le pese, son una carga enorme. Probablemente, si nuestra sociedad se basara en que los niños puedan vivir bien, muchas cosas estarían mejor. Como curiosidad, desde la antropología se asume que las madres que matan a sus hijos en un estado de locura pasajera es un hecho antiquísimo, ya que la mayoría de culturas tienen algo como el mito de la dama de blanco, que es el fantasma de una mujer que mató a sus hijos y se aparece por ahí haciendo sus cosas de fantasma (lo que también indica que la culpa por lo sucedido acecha a toda la comunidad). 

Quizás los humanos tienen su propia bestia interna.

Al menos yo no tenía hijos. Aislamiento social sí mucho, dependencias varias sí muchas, pero si me decidía a... dejar que Norman hiciera un cambio definitivo, habrían consecuencias para mi. ¿Donde viviría? ¿Tendría que defenderme sola de gente como Svetlana y Aoko? ¿Correría la voz de que la chiquilla de Norman está sola, y vendrían hordas dispuestas a torturarme a cambio de conocer secretos que Norman nunca me había contado? Me buscaría la Camarilla de Madrid, y me dirían algo así como "Así que eres una de ese clan que sobrevivió a una batalla que acabó con tu sire, eh... Bueno, supongo que tuviste suerte, puedes irte tranquila, aquí tienes una piruleta de sangre". Y, bueno... ¿Realmente estaba dispuesta a tomar esa decisión? Me había imaginado que podía desmembrarme en una explosión y que Norman me dijera que eso me pasa por desobedecerme, pero ahora la situación era casi al revés. Era yo quien tenía a Norman indefenso y a mi merced. Y si bien es cierto que me maltrataba, abusaba de su poder, me exigía cosas irracionales, me hacía doler mucho, bueno... nunca me había matado. Puede que fuera porque soy una pieza importante en su juego, más que por consideración hacia mi existencia, hasta puede que fuera porque a su manera y dentro de sus posibilidades sintiera lo que podría llamarse afecto hacia mi, entendiendo "afeto" dentro del marco normaniano de los significados, o por cualquier otra cosa que se me haya escapado... pero bueno, nunca me había matado. Y a pesar de estar en muchísimo peligro, tener miedo infinito, de estar viviendo escenas que podrían perfectamente considerarse alucinaciones, yo no estaba en un estado de enajenación mental... eso fue antes, y por lo visto, todo lo que hice fue tocar el theremin. Si Norman terminaba ahí, tenía que tomar la decisión activamente.

Pero falshbackeemos. 

El mismo maltratador que podría dejar de existir al final de esta narración había preparado los cables... ¿a lo mejor mi plan de ir a por los cables no era mío, y estaba siguiendo las instrucciones de la dominación de Norman? A lo mejor, pero seguía siendo un buen plan... Además, parecía que los electrones tenían... ¿intención? ¿Eso era posible? ¿Por qué se me rebelaban conocimientos magicocientíficos en situaciones en las que no me podía poner a investigar? Si los electrones hacían algo como "buscar", si tenían algo así como "intención"... ¿Qué pasaría si usaras dominación en un flujo de electrones? ¿Y con el resto de partículas subatómicas? ¿Eso era posible? Por primera vez me interesé verdaderamente por esa senda que rechazaba tanto. Si sobrevivo, quizás... Me interrumpió el fantasma de la "+", y me sorprendió tanto que casi grité de miedo al percibirla. Pero como sentí toda mi cara moviéndose para gritar "mucho" antes de que eso sucediera, tuve "tiempo" de aguantarme, y seguir siendo sigilosa como el caracol en hora de aventuras. Oh, hablando de fuego, pongamos una banda sonora que siavice la situación:

Todo pasó muy rápido, pero en resumen... ¿¡Con su sangre!? ¿En serio? Podía ver que estaba hecha mierda y hambrienta, y aún así no solo podía realizar aquella hazaña de potencia, concentración, aguante, y puntería, sino que tenía la fortaleza mental como para que se le ocurriera en medio de una situación desesperada. Cuando me dijo que me "liberaría", intenté responder enseguida:

C-cambié... 

                            Esquivo, ¡jfh! de...

                                                          Esquivo, arghf o-opi

         Esquivo, nión...

Aunque estando otra vez ahí, a punto de ser morida del todo otra vez, volví a plantearme lo bonito que podría ser morir. Nadie sabe que hay después de la muerte, o después de después de la muerte, ya que en el caso vampírico, después de la muerte hay la no-vida, como ya hemos dicho bromística y repetidísimamente hasta la saciedad. A lo mejor había algo bonito cuando te morías. O a lo mejor no había nada, en cuyo caso, tampoco había nada que temer. Mientras todo eso pasaba, vi que los fieles Palomino y Spukov tenían sus propios problemas con Aoko y no me podrían salvar, así que esta vez sí, a morir se ha dicho. Aún así, volví a decirlo por si acaso, con el hilito de voz que me permitía la situación de dolor fantasma-cuerpo fantasmal destrozado. Cambié de opinión...

¿Y de qué me servía? Quisiera seguir viviendo o no, ahí acababa todo. Y entonces apareció Norman y...

 ¿¡JUDE!? ¿Que hace él aquí? ¿Por qué se hablan así con Norman? No pienses tan alto, que resuenan las palabras y me duele. 

Todo pasó muy rápido, hubo mucho más fuego del que podría cubrir una banda sonora divertida, pero, en resumen, Jude había aparecido con una carga de subtexto secreto de dimensiones considerables y una pistola inmovilizadora de vampiros, parecía que la lucha through the fire and flames de los sires había resultado favorable para Norman - que había seguido mis términos? Uou - , y Aoko - que estaba en su propia enajenación mental -  había terminado empalada. ¿Habíamos ganado? Yo estaba fantasmalmente hecha mierda, casi ni podía mover la cabeza para tener un mejor ángulo de lo que pasaba, y empezaba a plantearme apagar un poco mis sentidos para apagar un poco el dolor, pero...

¿¡HE CONJURADO LLAMAS!? Y habían otras cosas que me endurecían los ojos de confusión y conflicto, como haberme dado cuenta de que Norman había tenido que rajarme y conjurarme la ropa para salvarme, o que confiara lo suficiente en Jude como para traerlo con una pistola inmovilizadora de vampiros a una situación en la que sabía que podía terminar indefenso. Ese monstruo calculador, que si tuviera un elo de ajedrecista creo que estaría más cerca de motores o redes neuronales como Stockfish o AlphaZero que de genios humanos, ese desconfiador patológico que no parece confiar en nada que no esté perfectamente calculado, controlado, o chantajeado por él, parecía tener ese nivel de confianza con Jude. Y ¿¡LLAMAS!? Como dije, aún hecha mierda por los ataques de Svetlana, lo único que alcancé a hacer fue endurecer los ojos dolorosamente. ¿Y qué estaría pasando fuera? ¿Habrían muerto las ghouls de las LaSombra, o estarían fuera, esperando la oportunidad? Bueno, al menos, habíamos ganado, y no habíamos matado a nadie. Si esta era la cinemática final, podía considerarse todo un éxito.

¿Pueden... "programar" lanzas de sombra? ¿Había hecho la estrategia de la uña, aún en ese estado bestial? En serio, ¿qué no puede hacer esta gente? Lo más increíble de todo, es que no parecen el tipo de op al que vencerías con el power of friendship, es que nunca sabes como de versátiles pueden llegar a ser sus habilidades, siempre hay algún dato que se te escapa, pueden planear a varios niveles con ellas, y la parte de habilidad que sí entiendes porque son habilidades que compartes, están potenciadas por siglos de experiencia. Vi a Jude corriendo, el tiempo se paralizó, y yo me paralicé, no sabiendo qué sentir en ese momento. Fue como si mi cerebro, mi alma o lo que fuera, en un intento preventivo de supervivencia emocional, me sacara por completo de esa situación. Estaba entrando, al fin, en ese estado de despersonalización y desrealización extremo, la ansiada enajenación mental. Simplemente contemplé. Incluso dejé de preocuparme por la camarilla y el castigo, simplemente no estaba.

Pero algo... alguien me sacó de esa enajenación. Mientras aquella presencia psíquica se me acercaba, yo iba volviendo. Volví a la realidad, volví a mi, volví a mi mente, y escuché. Muy atenta. Cosas que pasan cuando vuelves, y te das cuenta de que no estabas: te das cuenta de que ahora sí estás.

No sabía quien era, pero por lo visto, Norman tenía un amigo. ¿Sería un vampiro, o... otra cosa? Porque... ¿Por qué había especificado "en el mundo de los no-muertos"? Sería que esa inteligencia social que le faltaba a Norman le había permitido salir de la esfera a la que yo me había acostumbrado, ¿o otra cosa? Recordé la conversación telefónica que había intentado espiar antes de ir a visitar a Montserrat, intenté llenar vacíos que conectaran a Norman, Jude, y esta tercera presencia. Aunque había una manera mucho más simple de interpretar esa presencia y esta situación: la religiosa. Asumamos que ese hombre era el ángel de la guarda de Norman. Todos tienen uno, hasta los asesinos en serie, ¿no? Había hecho todo lo que había podido, pero su protegido estaba igualmente a punto de morir, así que recurría a alguien del mundo físico, tal y como dicen los mediums que pasa con los espíritus que les piden favores para proteger a alguien. Había dicho que eran amigos, así que lo que le movía a actuar era... ¿Amor? ¿Eso existía en las relaciones que construía Norman? ¿No sería más "amigos" tipo conveniencia mutua? Pero acababa de ver que Norman confiaba muchísimo en Jude, y Jude estaba corriendo, arriesgando su vida para salvar a Norman...

Y estamos donde empecé, antes del flashback. Asumo que puedo considerar que el tiempo está pasando a velocidad anime y que por tanto me dio tiempo a reflexionar sobre la Biblia, la vida, el universo y todo, hasta llegar a la conclusión de que la respuesta es 42. 

Tanto emocional como racionalmente, tenía muchísimos motivos para asesinar a Norman. Además, yo no seguía las enseñanzas de ningún libro sagrado, así que no me valía el tema de que si ves a alguien pecar y no haces nada, tú también pecas por omisión. Si decidía no intentar salvar a Norman, hasta podía argumentarme - hasta creerme - que no era capaz de conjurar llamas, y librarme emocionalmente de cualquier responsabilidad o culpa. Cierto que no había conseguido esa preciada enajenación mental que me permitiría contemplar la muerte con el mismo desapego que hacia un sandwich, pero Norman sabía que podía acabar muerto contra Svetlana, y había decidido seguir adelante con lo que fuera que había provocado la disputa. Sin duda, si Norman moría hoy, una parte importante de la responsabilidad sería suya. Y es más, la mayor parte de la responsabilidad sería argumentablemente de Svetlana, que era quien estaba a punto de atravesarlo con una lanza. Tal y como le pasó a Cristo luego de que lo crucificaran... coincidencias de esas.

A lo largo de los años, me he encontrado con alguna que otra persona religiosa que me ha caído bien. Fueran de la religión que fueran, coincidían en una cosa: Dios es Amor. No es que estuvieran intentando venderme que me sumara a su religión porque es la más amorosa de todas, la más mejor y todo eso, de hecho eran personas críticas con la parte estructural e institucional de su religión, es que me estaban diciendo, literalmente, que creen en el Amor incondicional como base de cualquier cosa. Todas esas personas coincidían en que "creer en Dios" no es creer en una imagen, un concepto, una palabra, una doctrina, ni nada de eso, sino que se trata de vivir sintiendo agradecimiento por la vida, y dando amor. Y que eso de "dar amor" es, simplemente, cuidar a la gente, respetar, aceptar, cocinar rico para los invitados, defender a quien lo necesite, descansar cuando lo necesitas, dar un abrazo cuando apetece, escuchar, y bueno... la conclusión es que hay que "vivir en el momento presente" porque no hay una fórmula de que es "vivir en amor", no hay más remedio que ir improvisando intuitivamente sobre la marcha. No hay más remedio que fijarse y decidir qué hacer en cada pequeño instante. Curiosamente, la mayor parte de luchas sociales coinciden con esas bases, y se centran en algo en concreto. ¿Hacer a alguien mostrar su aptitud, mujer o no, te hace machista o feminista? Pues... depende de como, cuando, a quien, por qué, para qué, en la cultura de donde de qué época, de si es una referencia y por tanto diálogo con una obra anterior, de a qué público va dirigido, de qué público acabó recibiéndolo mayoritariamente, del diálogo entre ese gesto y el resto de la obra, de, en caso de ser machista o feminista, si esa ideología está configurada consciente o inconscientemente, de si esa o cualquier otra ideología configurada en la obra está bien encajada en la obra, o es un simple mecanismo capitalista para intentar ganarse un público concreto, de... muchas cosas. No hay una fórmula, así que no tienes mucho más remedio que fijarte en cada caso. 

¿Es machista o feminista que mate a Norman? ¿Es mi maltratador, no? ¿Es feminista matar a tu maltratador? ¿Es justificado? Pues diría que a veces es... lo único que se te ocurrió. Lo único que te sentiste capaz de hacer. Estuvieras o no en un estado de enajenación mental, sentiste que debías llegar al extremo de matar a alguien. Teniendo en cuenta la situación de maltrato, diría que es un mecanismo de autodefensa. Creo que llegado el punto de un largo período de sufrir constantes abusos, constante miedo, constante dolor, constante sufrimiento, llegas a una zona de tu cerebro que hace lo que cualquier animal: sobrevivir. Destruir la amenaza. Pero yo no estaba en ese estado. Ya habíamos ganado. El último tentáculo era eso: el último. Yo tenía que decidir como una niña grande, como toda una científica con power-up, como todo un maestro aire ante el hitler de su mundo en el último capítulo.

¿Se lo merecía? Creo que siempre hay que distinguir entre el problema emocional y el problema racional del mal. Emocionalmente se lo merecía muchísimo, claro está. Y con eso me refiero que Norman había hecho suficiente como para que cientos de Primelas desearan su muerte. Suficiente como para hacerme sentir que quiero que se muera, y cualquiera que conociera mi situación sería capaz de empatizar conmigo. Pero eso, racionalmente, ¿me daba el derecho a decidir su muerte? Bueno, que sea posible empatizar con las mujeres que asesinan a sus maltratadores, realmente, no es un argumento para hacer o dejar de hacer nada. Es simplemente eso, que si conocemos la situación podemos empatizar. Y las leyes, nos guste o no, están basadas en emociones, no en lógica. ¿Hay algún motivo racional por el que no deberías matar a alguien viejo, enfermo, que sufre, es una carga para todos y lo sabe, y quiere morir? No, es solo que la idea de matar a alguien nos tira más patrás que la idea de hacerle sufrir. ¿Tenemos derecho a decidir sobre la vida y la muerte de alguien? Yo que sé, supongo que depende de cuando, como, por qué, para qué... Nadie ha nacido por elección propia.

Norman tenía un amigo, confiaba, por lo visto, mucho en Jude, tenía, si eso era posible, una comunidad que lo rodeaba. Una parte que tira patrás del discurso feminista, incluso, a veces, a personas de dentro del movimiento, es que los maltratadores no son monstruos. Casi al contrario: son personas normales. Sí, maltrataba y acabó asesinando a su mujer, pero era amable con todo el barrio, ayudaba a la vecina del quinto a hacer la compra porque estaba vieja y le costaba llevar las bolsas, le daba monedas al mendigo de la esquina, y tenía una madre que lloraría si su hijo se muriera. Hay un médico forense español que es famoso por ser uno de los pocos teóricos hombres feministas. Es importante resaltar que era médico forense porque, por casualidades de la vida (y sobretodo, precariedad laboral), acabó trabajando haciendo autopsias de mujeres muertas. Lo que descubrió le hizo hacerse feminista de golpe: todas, todas las mujeres asesinadas por sus parejas, tenían marcas de maltrato físico desde mucho antes del asesinato. Uno no se despierta un día y asesina a su mujer. Una mujer no se despierta un día y deja que le peguen una paliza sin hacer nada. Es un tema gradual. El principio debe ser algo así como que después de tirarle el pelo a María cuando tienes cuatro años, todo se soluciona con una disculpa forzada por el adulto, y un beso que ni María ni Juan querían darse, pero que hay que darse porque están aprendiendo que cuando alguien te hace daño, se pide perdón, y das un beso, un abrazo, la mano, o lo que sea, aunque no le apetezca a nadie, y eso pasa al olvido. Si de verdad nos preocupáramos por los niños, cambiaríamos muchas cosas.

O quizás empieza antes. Acabas de nacer, y ¡paf! Dolor en la oreja. Tienes un pedazo de metal en la oreja que te marca como mujer. Acabas de aprender que tu consentimiento no vale nada, que otros pueden decidir por ti qué hacer con tu cuerpo, y que estás absolutamente indefensa ante el dolor. Y eso que solo acabas de nacer, y tus padres te aman, los médicos se preocupan por tu salud, y todo está hecho desde el... ¿amor? Desde la normalidad, al menos.

Nos sorprenden esos asesinos "que siempre saludaban", porque no nos damos cuenta de que nuestra sociedad crea asesinos. Los maltratadores son normales, son gente normal... que maltrata. De vez en cuando se les va la mano, y asesinan a su mujer. Pero hay que entender que no son necesariamente malas personas. No para justificarlos, sino para entender que "ser mala persona" o "ser buena persona" es, simplemente, irrelevante para el caso. Como siempre que decides encasillar a personas bajo una sola característica en común, habrá de todo.

¿Norman se preocupaba por mi? ¿Norman tenía amigos? ¿Norman había aceptado mis términos? Eso es irrelevante a la hora de valorar su maltrato. Querer mucho a alguien y hacerle muchos regalos no justifica el maltrato, ni compensa, ni tiene nada que ver. Es como si a lo de "Hitler era vegetariano" respondieras "ah, pues entonces no pasa nada porque haya matado a seis millones de judíos!". Como cereza del pastel, hasta acababa de decirme que me castigaría al llegar a Navarra. Y que me premiaría. ¿Ves lo que te digo? ¿Que nuestras figuras de autoridad hacia niños y niñas como padres, madres, profesores y profesoras, etc, funcionan exactamente así? ¿Ves lo que te digo?

Eliminar la amenaza de Norman, desde un punto de vista extramoral, era, simplemente, natural, entendible, algo que cualquiera podría llegar a hacer en mi situación. Pero, por otro lado...

¿Y yo? El motivo por el que sentimos despersonalizaciones tan graves que nos llevan a la enajenación mental en momentos como asesinar a tu maltratador, o a un animal indefenso, y el motivo por el que los judíos de los campos de concentración estaban todos numerados y documentados para que los funcionarios nazis "trabajaran" con ellos como con números, es porque nuestro cerebro, de forma natural, se aleja de la culpa. La culpa no es útil para sobrevivir, y nuestro cerebro de animal se aleja de lo que no nos ayuda a sobrevivir. Si de verdad de verdad tienes que hacerlo... pues bueno, lo mejor que te puede dar es hacerte sentir que no estás ahí, lo mejor que puede hacer es que le puedas echar la culpa a la enajenación mental, a que cuando trabajas con números despersonalizas a los judíos y no es tu culpa porque los nazis ya lo habían planeado así para manipularte, etc. Pero yo podía decidir.

¿Yo que quiero? Yo trabajaba por la paz, para que todos tuviéramos comida gratis, y usaba el conocimiento y la técnica para conseguirlo. Últimamente, hasta estaba formando una alianza con mi Bestia. Otra cosa que hace nuestro cerebro, es intentar hacer siempre lo mismo. ¿Por qué? Bueno, si estás viva, eso es que los patrones de hasta ahora te mantuvieron viva, así que a repetirlos hasta la muerte. Decir que no me gustaba mi situación actual era poco, pero como ya he dicho al principio de la narración, la dependencia hacia Norman era absoluta. Eso no es, por supuesto, un buen motivo para decidir nada, pero, de nuevo, para qué quieres buenos motivos cuando vas a tomar una decisión poco o nada racional, hacia donde sea que caiga la moneda...

De la misma manera que las luchas sociales y los religiosos simpáticos, yo intentaba traer algo de Amor al mundo. Decidiera lo que decidiera, sabía que me sentiría culpable, que daría mil vueltas durante milenios, que me comería la cabeza, y que si Norman no me castigaba porque estaba muerto, yo tardaría mucho tiempo en dejar de castigarme a mi misma. Literalmente, no solo "castigar" en un sentido psicológico medio metafórico y bastante literal, también, sabía, pasaría tiempo pegándome a mi misma y haciéndome doler en general. Además de todas las situaciones de las que Norman me protegía, como sería el inminente encuentro con la Camarilla, que probablemente tendría algo que decir por todo el "ruido" que habíamos causado... No parecía que hubiera una decisión más "amorosa" que la otra... 

No parecía que importara si me creía con derecho a decidir sobre la vida y la muerte, no parecían haber motivos racionales o emocionales que me decantaran a una cosa u otra... Pero algo tenía que hacer o no hacer. ¿Quizás el hecho de que me podía enseñar cosas hacía peso en un lado de la balanza? Acababa de demostrarme que podía aprender por otros medios. ¿Quizás el qué dirán? Pertenezco a este clansiempre dirán lo que les convenga más para sus planes individuales, independientemente de lo que pase. 

Al final, el único argumento válido es que no hacer nada es menos esfuerzo que hacer algo.

 

 

 

 

 

 

 

 

Y el tiempo

                              volvió
 

 

                                                          a la

                      "normalidad"...

 

 

 

 

Me medio incorporé como para darle impulso al chasquido, tan eficiente, rápida, y dolorosamente como pude, y chasqueé con toda mi energía, probablemente de forma menos épica y más patética que el fabuloso Roy Mustang, pero el gif quedaba bien. Durante el proceso de ese instante, en mi mente apareció la llama, intensifiqué la visualización del fuego quemando las sombras hasta que sentí las fucking llamas quemándome el cerebro, intenté recordar la primera vez que lo hice, la vez que Norman encendió su cigarro, intenté recrear las sensaciones de esas veces, seguirlas mentalmente hasta hacerlas realidad. Exprimí mi cuerpo y mi mente tanto como pude. En ese pequeño gesto, hice todo lo que pude para quemar la lanza de sombras. En ese instante pequeño y limitado, hice todo lo que pude para salvar a Norman.

¿Por qué? Pues porque sí... o porque por qué no...? 

Realmente, no lo sé. Pero eso hice.

Quizás es que Norman es un niño.

Quizás yo soy una niña.

Traducción:

Esta es una canción
para antes de ir a dormir
para que descanses convencida
De que eres feliz de estar aquí.

Que haces bien dejando salir
tus comentarios espontáneos
y que tienes razón en dejar los males
olvidados en el subterráneo.

Corre, salta, brinca, vuela
y ves por la calle cantando,
yo también fui pequeñita un día
y se me estaba olvidando.

Corre, salta, brinca, vuela
y ves por la calle cantando,
yo también fui pequeñita un día
y se me estaba olvidando.

Ahora todavía eres pequeñita
y no entiendes bien lo que te digo
Porque como eres pequeñita
Seguro que ya lo haces así.

Pero cuando crezcas, si tropiezas
O alguien te rompe el corazón
Prométeme que seguirás siendo
la que no le teme a nada.

Corre, salta, brinca, vuela
y ves por la calle cantando,
yo también fui pequeñita un día
y se me estaba olvidando.

Corre, salta, brinca, vuela
y ves por la calle cantando,
yo también fui pequeñita un día
y se me estaba olvidando.

Esto te lo digo, supongo,
para que no te pase como a mi
Que, en algunos momentos al crecer,
Me olvidé de ser así

Yo lo que quiero es que tus ojos dulces
Brillen siempre como tesoros
y que duermas bien tranquila
y sin preocupaciones.

Corre, salta, brinca, vuela
y ves por la calle cantando,
yo también fui pequeñita un día
y se me estaba olvidando.

Corre, salta, brinca, vuela
y ves por la calle cantando,
yo también fui pequeñita un día
y se me estaba olvidando.
 

- ¡hola!
- hola hola... hola hola... A ver, ¿qué más podemos decir...? ¡Yo soy pequeñita!

- ¡YO SOY PEQUEÑITA!
- hihihi... ¡Yo también!
- ¡Pero tu eres grande, Ana!
- ¿Yo soy grande?

Notas de juego

Sálvolo :3 . O al menos, intento salvarlo.

PD: la última canción es una de las canciones que más me hacen llorar en el mundo, magdalena al salir de la ducha style XD

Cargando editor
16/09/2019, 02:34
Norman Thessius
S

n

a

p

.


Un vampiro 'normal' debería haber caído tras todo el absurdo daño recibido, un cráneo parcialmente roto con visibles interiores en el agujero que dejó Svetlana donde lo golpeó a cabezazos y él simplemente aguantó, mientras inflamado por el semen inflamable compuesto espumoso incendiario que creaste y él usó contra la rusa sire sacrificialmente, mientras debiendo sacarte de ahí, mantener la concentración para hacerlo, combatir contra ella y lograr detenerla lo justo para poder usar su poder propio sin fallar una micra en el castéo de su Taumaturgia, todo a la vez. Agotado, sin vitae o sangre vampírica en su propio cuerpo, tambaléa a medida que logra quedar de pie, entrando en un letargo por daño y por pérdida de vitae, a un milímetro de caer cual borracho oscilando hacia adelante directo en el precipicio de la Muerte Definitiva, que os afectaba a los Malditos, de la cual no había regreso, solo cenizas. Tu chasquido que permitió canalizar la Senda del Encanto de las Llamas aprendido por aquel momento en que alcanzaste una conexión cuántica, mística, Zen, super-científica y como quieras llamarlo con las mismas chispas de los electrones y el momento en que la combustión ocurre muy como una versión a escala de una Nova o Sol naciendo (o muriendo, más bien) hizo que la Lanza de Sombras ejecutada por la misma Svetlana en su último momento de negarse a perder, de completa obstinación insana y respetable incluso, se deshiciera en un fractal, como un vómito de arte, pintura negra hecha de substancia inexistente, material e inmaterial, energía, gases, restos, formas reflejadas en algo muy... Muy hermoso, bonito, bello. Algo que hace al Sujeto Proyectado Astralmente hablarte:

- Muy bien. No solo una decisión tomada correctamente sino que un hermoso elemento a observar y replicar para mi arte. Oficialmente, te debo un Favor Vampírico, Primela Thessius, Chiquilla de Norman Thessius.

Asintió agradecido demostrando clara carisma, tacto, etiqueta y sociabilidad muy superiora la de Norman (lo que te hace preguntarte por qué rayos es amigo de él) y se deshace, moviéndose muy, muy rápido para prácticamente teleportarse y volver cruzando medio mundo desde aquí, en la mitad exacta de España hacia el este de Estados Unidos, desapareciendo.

Y al hacerlo, y apenas, pero apenas pasa eso, Norman hace un último movimiento, antes que logres oír en tiempo y sonido real así como en cámara lenta a Jude tratando de decir. "Heeeeeey Priiiiiim, aaare you okaaaaayyyyyyyyyhhhh?", con la deformación de cara y todo al ir hablando, memética, ya sabes, imagínala tú misma, esa misma, porque el lapso temporal es demasiado súbito y solo tú y el ejecutor de este movimiento pueden percibirlo a la misma escala temporo-espacial-perceptual.

Abre los ojos, súbitamente, mirando en tu dirección, resultando probablemente lo más desgarradoramente aterrador aún con todo lo que te ha pasado en estos días/horas y cuando logra mirar y que lo mires a los ojos, ocurre.

Genjutsu time, it's happening.

Notas de juego

Sigue.

Cargando editor
16/09/2019, 03:10
·

Abres tus ojos... ¿O no? ¿No que acabas de ver a Norman y chasquear tus dedos? ¿No que hiciste flamas de la nada y estas, sumadas a un poco de vapor del semen inflamable que estaba dando vueltas en el aire ya que Norman caminó en aquella dirección, dejando rastros de dicho, hizo que pudieses detonar y aniquilar la sombra en forma de lanza? Y luego...

Ah, claro, Norman te miró directamente a pesar de que te dije que estaba entrando en Letargo, tal cual. Usó la voluntad, el espíritu, la incansable determinación autista y obsesiva de donde fuese para poder actuar aún con todo lo que hizo, y te metió en... ¿En qué? ¿Qué técnica o Disciplina Vampírica es esta? No, lo entiendes mejor al ver donde estás exactamente.

Se trata de un salón cerrado, el mismo tipo de salón a lo FBI de interrogatorio y el "interrogatorio avanzado" también que le estaba haciendo la Primela Adulta al hacerle comerse una roca de uranio al Norman joven. Sin embargo no es igual, pero tampoco es tan distinto. Supones que es una versión como la de Norman, pero que mezcló con la tuya al ser el mejor "lugar" donde "hablar". ¿Qué hizo? Lo entiendes, crées, él está...

Maldito enfermo. Solo alguien como él podría pensar en trucos tan descarados y rebuscados, o al menos, usarlos en momentos tan... Apropiados (inapropiadamente). ¡Lo que ha hecho no es más ni menos, ni más de nuevo que usar Dominación para afectar tu memoria, pero en vez de alterarla, crear una memoria en la que "hayan estado hablando" dentro de tu mente, como algo que pasó pero nunca pasó en primer lugar! Hay una silla a cada lado de la mesa, el lugar es agrio y descuidado pero no sucio, no alcanza, solo desaliñado, mostrando la psique de Norman dentro de tu lugar mental como ya dicho, una sobre otra, reposición o suplantación cuántica, supones.

Norman, en este recuerdo-implantado-real-falso-súbito, te habla.

- Toma asiento, Primela, tiempo no nos sobra, a mí al menos, que estoy por entrar, no, entrando en torpor, o letargo, joder... Me costó mucho eso. Francamente, sin tu extraño compuesto inflamable no habría podido hacerla arder y ganarle, me habría matado sin dudarlo. Más encima borró la memoria de su chiquilla y la puso en modo auto-piloto combatiendo. ¡Hija de p-...!

Impactó la mesa con un golpe doble de puños pero como que lo contuvo, no siendo tan fuerte, calmándose a medio camino, sabiendo que debía conservar energías. Te miró y te hizo un gesto apuntando con la cara de "Ea, a sentarse allá, vamos, ale!", tal cual.

- Te contaré lo único que importa ahora, aunque primero, te diré lo que sucederá: Al caer yo, deberás responder, pero no por mí, dado que eres libre de culpa y se te exigirá una audiencia más bien como una víctima y expectadora de lo ocurrido, dándosete perdonación por haber asistido en proteger Madrid de un desastre. A quién deberás enfrentar en esto es ni a más ni menos que a un ser llamado Thorn, el Príncipe de esta ciudad y de todo el centro de España, Madrid y alrededores, Camarilla. Solo puedo decir que no es un sujeto fácil, así que te lo deberé confiar. Ni decir, ajustaremos cuentas debidamente cuando volvamos a Zugarramurdi.

Tomó aire, un suspiro innecesario y gesticulado, pasando a lo que importaba. Te miró fijamente a los ojos con los suyos. Aquellas dos líneas o marcas en su cara, como meras cuñas delgadas, ahora, no solo se habían abierto como un par de heridas de garra, sino que sangraban y sangraban sin parar. En este plano de mente-sueño-algo, no estaba tan herido como en la realidad, pero se le notaba afectado. Otro suspiro y... Plot bomb:

- Nébula.

Al oír ese nombre, esa palabra, muy redundantemente hablando, tu cerebro se nubló, tal cual. ¿Qué...? ¿Qué decía? Pero tu mente, astuta, rápida, se movía cuales manecillas, enhebrando rápidamente todo lo que tenías como piezas. Aquella pistola de Jude que le dió Norman, el cómo Norman tenía un "su mismo" lejos que en realidad era el real y el que estuvo de "Spider-T" como el pianista fue el "falso" todo este tiempo. Instintivamente, la palabra que dijo Kozlov, la Sire LaSombra te resuena: "Impostores", tal cual. Clones. ¿Pero cómo...? Todas esas inquietudes te van resonando y Norman parece notarlo, pero no te da tanto tiempo para hacerlo, sabes bien que él jamás para.

- Nebula es un grupo. Apareció hace poco, de la literal y absoluta nada, sin aviso ni advertencia, y hacen ciencia. -No pretendió rimar, por lo cual tosió para sonar serio tras el verso sin esfuerzo y prosiguió apurado.- Ciencia vampírica, por bizarro que suene... Pero no. -Apuntó hacia donde estuvo tu propia Canica Solar hecha por él, tal cual, sonriendo levemente y volviendo a la seriedad.- Lo que tú haces es, literalmente, lo que hace Nebula pero ha hecho por mucho tiempo. Ellos experimentan con la Vitae de los Malditos y sus poderes, reforman sus estados, su condición, etc., para ellos el Proyecto Calabaza, por ejemplo, es vital, tus Canicas Solares, también. Osaría decir que cuando Svetlana supo del mensaje mediante la Red Malkavian que hiciste mandar, se emocionó y quiso venir a no solo comprobar que muy como ella, yo usé servicios de Nebula, sino que pretendía saber si tú eras parte de su grupo.

Paró. Sabía que esto era jodido, complicado, pero notabas, sinceramente, que él confiaba en tu inteligencia. Eso nunca, jamás, lo dudó. Te pudo llamar inútil, basura, maltratarte, decirte incompetente, pero jamás, jamás en casi ya cien años, te ha dicho tonta. Nunca de forma real, nunca de forma determinante. Siguió antes de que se perdiera el momentum.

- Yo dejé la Canica Solar que faltaba en mi propia máscara, que por cierto, diseñó el mismo sujeto que ayudó a traer tu Theremin desde Nueva York hasta acá intacto, mi mejor y único amigo, dicho sea. -Norman no sabe que técnicamente, ya lo conoces.- Haciendo creer a Svetlana Kozlov que permitiría a Nebula tomarla como muestra y replicarla, pero al final vine para recuperarla. ¿Que qué estaba haciendo cuando dije "Jerónimo", que por cierto, fue idea de Jude? Pues peleando con la Svetlana clonada, siendo la real la que estuvo en el pub todo este tiempo, claro, y que pretendía desde uno de sus aviones lanzar un pulso electromagnético encima de Madrid sin tapujos, desde el aire y tras haber viajado desde Japón nada menos. Logré impedirlo por poco y sí, rapté a Jude, ya sabía de él, mis disculpas, pero no dejé que le rasparan ni una célula y como viste, está intacto... Y su locura es contagiosa, para un humano.

Tomó un "cigarro" por instinto pero recordó que esto era un plano falso, no servía de nada. Hizo un "tcht" con su boca, chasqueándo la lengua y siguió.

- Un gesto de confianza nunca sobra. Te mostraré algo que hice cuando mi yo clonado estuvo en Japón hace unos días, lo cual explica como supe todo lo que supe y sé sobre ellas, porque ya sabía de todo esto que iba a pasar. Contempla.

Y así, cual Inception, otra memoria dentro de una memoria que es un evento ocurriendo mostrando un evento que ocurrió antes... ¡¡¡¡Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!!!!!

- Supongo que en algún momento clave recordarás todo esto, haré que lo olvides de todos modos.

¿Quién? Su rostro, su aspecto, lo tienes, lo conoces. Al estar ahí, en ese momento y a la vez en este momento, doblemente, es confuso y un tanto aterrador, pero... ¿Quién es? Lo conoces, sabes que lo has visto. Entonces, era/es la primera vez que lo ves/habías-visto, pero para la tú que está viajando al pasado para haberse hecho recordar, es alguien que esta Aoko con información privilegiada (como toda buena capitalista, dígase) conoce perfectamente, le ha visto en una foto, es su objetivo principal.

Toma un cigarro y lo fuma entonces, soltando el humo a un lado y mirándote. Ojos opacos, lentes, pelo poco ordenado pero corto, aspecto poco destacable, camisa, ropas no desaliñadas pero con nada de estilo, como un profesor universitario o un erudito engreído y que piensa estar por encima de la sociedad. Y claro, su mayor rasgo aparte de sus ojos desalmados y frios, una cicatriz en un costado por sobre uno de dichos ojos y tras sus lentes, en forma de dos cortes como cuñas, como costras grandes pero no tanto, rojizas.

Norman Thessius, en persona, el fósil, el sire de Primela.

- Mi trato es como te lo acabo de decir, por si no te lo has creído la primera vez. Primela... Primela se está cansando de mí, tengo claro, casi del todo, que pronto buscará traicionarme, alejarse, algo hará, lo sé. Y prefiero preveer eso. Conozco tus, em, tendencias. -Dijo con un tono disimulado pero machista que imposible era ocultar, al hablar obviamente de tus, sí, tendencias. Era una actitud despectiva clara, pero velada.- Si últimamente Svetlana, en dos días, me mata, y/o la mato a ella o nos matamos a la vez o algo así, supongo que podríamos hacer un negocio, algo para que Primela pueda existir en comodidad, sin ser presa del asqueroso Sabbat y pudiendo hacer lo que prefiere. -Caló otro poco y soltó el humo a un lado, prosiguiendo luego.- Es la mejor opción tengo, porque sé que aún con tus asuntos, tienes los recursos para mantenerla lejos de cualquier amenaza que niegue su gran potencial y aptitud.

Suspiró.

- Siendo realistas, nuestro encuentro en dos días en Madrid será una masacre, solo considerando mi facción, léase, mis ghouls, Primela, tus ghouls, tú y Svetlana que no sé con qué podría salir pero me hago una idea. A eso no estoy agregando múltiples posibles factores externos, el hecho que estaremos en pleno terreno Camarilla y que por mucho que tú y tu sire jodan no saldremos hasta que vengáis a por nosotros, y así. Honestamente, es mi mejor opción, el trato que te ofrezco. Por supuesto, tienes la opción de negarte y que la sangre se derrame por montones en dos días, no me molesta.

Os encontrábais en un café como si nada. ¿Cómo rayos Norman Thessius vino a Japón sin más? Algo no estaba bien.

- Sé que dije que no pondría un pie en Japón, y sin embargo aquí me tienes. Si lo desease podría convertirte en puré, y luego Svetlana me convertiría en puré a mí, o tus variados recursos humanos y monetarios irían por mis refugios y... Sería un fiasco, te causaría problemas, me causaría problemas, nadie ganaría. -Se encogió de hombros.- Pero tampoco estoy ofreciendo una paz vacía, sino más bien un cese al fuego táctico. Aunque eso... Poco posible lo veo con tu sire. ¿Nunca has pensado en...?

Y entonces mostró su horrible sonrisa torcida, de hijo de puta controlador, parando en seco lo que iba a decir de tu sire. Todo este tiempo supones que estuviste bajo su propia doblegación de voluntad, porque de otro modo tal reunión no habría podido suceder de manera tan "tranquila". ¿Cómo?

- Y eso sería. Si consideras mis palabras y las implicaciones que tienen o ramificaciones que podrían tener, actuarás en consecuencia en dos días, asumiendo, repito, que recuerdes esto. ¡Ahora, a dormir, toc toc~!

Y entonces, chasqueó los dedos haciéndote olvidar, al menos hasta justamente el ahora en el que estás teniendo esta visión de haber conversado con Thessius directamente. ¿Cómo rayos sabía o sabrá lo que sucederá? Por lo que dijo e implicó, o supo por su cuenta o alguien le dijo, pero saber con tal exactitud es difícil, absurdo. Al momento de mirarte y ejecutar el mismo poder que bien conoces y acabas de anularle, logras mirar sus ojos malignos, y luego, nada.

O mejor dicho, algo.

Ahora, el presente.

Primero esta parte es de la perspectiva de Norman. Te deja claro que... ¿Él ya sabía tus pensamientos de hace mucho? Y que claro, la desventaja iba en que los ghouls del lado "propio" o "local" eran de Norman y las ghouls "visitantes" eran de Aoko, ergo, un tanto más débiles, no demasiado, pero con menos experiencia en tiempo y entrenamiento, aún si preparación y todo. Y aún así lograron molestar y debilitar bastante a Palomino y Spukov, dejando que eventualmente Aoko casi los mutilara sin esfuerzo algo al entrar en "modo máquina" cuando Svetlana le hizo el borrado cerebral.

Y ahora viene la parte de Aoko:

Fuera lo que fuera, cuando pudo notar mejor la apariencia de la fuente de dicha voz, la vampiresa no tardó demasiado en reconocer a la persona... su objetivo, aquel cuya existencia debían de erradicar, de eliminar por completo como así lo deseaba su querida Svetlana. Y aún así... ¿qué hacía allí? ¿Por qué estaba con ella? ¿Estaban en un bar acaso? ¿En Japón? ¿Cómo?

Todas aquellas preguntas no tardaron en responderse por sí mismas, en el instante en el que Aoko pudo recordar. El bastardo había jugado con su mente, y no sólo eso, sino que también la había manipulado con suma facilidad. Hijo de puta. Alguien se había atrevido a manipularla, a jugar con ella como Aoko jugaba con sus preciosas muñecas, y no sólo eso, sino que también se había atrevido a establecer un cierto trato con ella... ¡Con condiciones! Bastardo. ¿Cómo se atrevía a hacer eso con ella? ¿Acaso no conocía su propio lugar? Lo peor de todo, era que éste pensaba que podía amenazarla, o asegurar que su querida mentora moriría cuando los dos se enfrentaran. Aquello no era más que absoluta insolencia, un insulto en todo su rostro, y la princesa de las sombras no deseaba que nadie le dijera lo que debía de hacer, ni mucho menos. Cabreada, la vampiresa no dudó en clavar su mirada asesina sobre aquel maldito viejo inútil, quien prefería aferrarse a tiempos pasados. No era más que un iluso.

- Oh, no te preocupes. Yo cuidaré bien de tu pequeña... le aseguraré un buen futuro con mis recursos, como ella se lo merece. ¿Es por eso que probablemente te odie, verdad? Debes dedicarle el mismo amor a tus queridas posesiones, para que éstas te quieran de la misma forma que deseas. Pobre, tan simple... pero está claro que no has leído mucho a Maquiavelo. El temor es importante, como bien lo dice él, pero eso no quiere decir que puedas usarlo todo el tiempo. Si abusas del mismo, te costara tu propia vida. Sólo puedes usarlo una vez.... dos como mucho, en momentos decisivos. Además, no puedes usarlo así como más... hay una condición... ¡Ah!... pero no te la diré, no. Eso le quitaría la diversión. - Bromeó con total tranquilidad, en el momento en el que optaba por interrumpir al maldito dinosaurio, mientras intentaba alterar las memorias del bastardo en su propio juego. ¿Quería jugar con su mente? Pues ahora debía de atenerse a dichas consecuencias. En una delicada red, que podía ser alterada de manera constante, y era ella quien ahora deseaba jugar con él, no sólo diciendo lo que tenía para decir, sino también agregando ciertas cosas para su propia conveniencia.

- Mm déjame comprenderlo mejor. Como has dicho, te cortaras la cabeza, el día en el que lleguemos a tu asqueroso país, todo para evitar una guerra innecesaria, y evitar que todo lo que has construido se vea arrasado en una guerra inútil, en la cual probablemente nosotras obtendremos la victoria. Sabes, que tu pequeña te traicionara, y antes de que eso suceda, prefieres acabar con tu propia vida, y darle la oportunidad a tu preciosa criatura, de que tenga un mejor futuro. - Se expresó con aquel tono suave, delicado, un tanto divertida con todo lo que iba trazando en su mente, mientras forzaba aquellas memorias artificiales, con la intención de que éstas afectaran a su receptor, de hacerle creer que eso era exactamente lo que éste había decidido, esas habían sido sus condiciones, su declaración de derrota incondicional, a cambio de que no tocaran sus juguetes ni a su pequeña muñeca adorable.

- A cambio, quieres que no toque tus juguetes, que deje tu herencia, tu legado en pie, para que tu memoria no se desvanezca. Estás cansado de este mundo que ha cambiado tanto que ya casi no puedes comprenderlo. Deseas la muerte final, pero también deseas asegurarte que tu pequeña tenga un futuro y eso... puedo asegurártelo. Le daré un hermoso futuro a Primela. Es tan dulce, tan encantadora, tan deliciosa... deseo tenerla bajo mi ala. La verdad es que no quiero destruirla. - Le aseguró, aún intentando crear aquella telaraña de mentiras, falsas memorias de lo que el bastardo jamás había dicho pero que pretendía que este pensara que así lo había hecho, que estuviera seguro de su decisión, y que se arrepintiera en el vacío del abismo por haber intentado jugar con ella de esa manera. Nadie jugaba con su mente, nadie atentaba a su voluntad. A cambio, tomaría a Primela para ella, jugaría con ella como lo hacía con sus muñecas, haría que ésta sonriera de felicidad al poder tener todo lo que no pudo tener con su mentor. - Sólo recuerda... cumple con tu promesa, acaba con tu vida, y a cambio, todo seguirá en pie, no habrá necesidad de tanto caos innecesario. - Aclaró con un tono frío, mientras intentaba ignorar la ira del momento luego de que éste hubiera sugerido aquello con ese silencio tan perverso. La mera idea de acabar con su mentora... con su verdadero amor... era ridículo. Realmente esperaba que su juego mental hubiera tenido éxito.

La visión borrosa al estar en una memoria en otra memoria viendo todo te impedía ver, aún en la visión directa de Aoko, qué gestos ponía Norman ante las palabras que la Chiquilla LaSombra decía, pero creías... ¿Sentir algo? Con tu super-tacto aún en un distante recuerdo superpuesto, pero real como podía serlo. ¿Pálpitos? No, no podía ser, todo era ciertamente nebuloso, sin más ni menos. Ahora entiendes que, primero, Aoko es una maestra en la disciplina que tuerce y comanda la voluntad ajena lo cual le permite, aún con la diferencia de poder vampírico y antiguedad en escala como en tiempo directo entre ambos, haber afectado a Norman, lo cual hace que todos esos momentos cuando se rascaba el cuello o como Svetlana sabía de esto y en vez de apuntar a la cabeza, apuntó al cuello con ea lanza final de sombras, para decapitarlo y eso le impidiera bloquear o negar el ataque producto del condicionamiento de Aoko. Ahora, sin embargo, se viene. Notas a Norman jadear, de verdad, soltando sangre por la boca y su herida sangrando con abundancia, sujetándose de la mesa y parándose a medias, mirándote.

- Nebula no trabaja para nadie y asiste a todos, lo hizo conmigo, lo hizo con Svetlana, a sabiendas de nuestro conflicto, me niego... ¡Argh! ¡Me niego a que Calabaza, tu proyecto, quede en manos de ellos! ¿Qué carajo haría el puto Sabbat con Calabaza, eh? ¡Ni de coña! Fuck it!
-Mezcló sus dos idiomas principales.- ¿O los Seguidores de Set, o los Assamita con su ya habitual tendencia a corromper la sangre misma? ¡NUNCA! Yo... Yo no tengo derecho a negarte si Nebula busca reclutarte, pero... No quiero que passe. Cumpliré todos... Mis objetivos, aún si deba pisotear este mundo y ser pisoteado por el mismo.

No logró aguantar más y su mano, movida como por Dominación, cual títere jalado forzosamente, apuntó su cuello, mirándote, y soltando la bomba, un regreso al primer post de todos, al primer MacGuffin y Chekov's Gun simultáneo, tal cual.

- Úsalo, el Collar Auto-Asfixiante. Ahora.

No te lo dijo con dicha Dominación, pero el Vínculo Tremere te hacía querer hacerlo, y tus propias emociones acumuladas, por décadas, pero... Todo lo que supiste ahora... ¿Qué hacía pensar? Si lo hacías meramente en esta memoria... ¿Moriría decapitado? ¿O era para decapitarlo en su mente y poder cumplir las condiciones y no hacerlo en su cuerpo real, o sucedería simultáneamente? Tu Fobia por el mismo Clan Tremere y su maldad se acentuaba. Sentías algo más que miedo, tu Frenesí podía estallar ahora, aquí, en sueños y pensamientos, en este Mangekyou Sharingan hecho por un Itachi nada noble, ni apuesto, pero sí casi tan cabrón como dicho y con líneas de algún tipo alrededor de sus ojos, ambiguamente.

Tu [+] estaba ahí, no podías oírla pero su mano, apenas existente, tocaba tu hombro. Y tu colgante estaba ahí, en tu corazón no palpitante. Norman se retorcía entonces medio de pie y esperando tu sentencia, primero salvarlo... Y ahora matarlo.

Todo esto porque hace mucho, él optó por algo que muchos consideran que es más difícil que la destrucción, pero aún así, es infinitamente más aparatoso y semejantemente crudo como la misma. Al darte el Abrazo para conservar tu inteligencia y chispa creativa durante las epocas, él se arriesgó y puso bajo ese yugo, solo por hacer aquel acto:

Creación.

Notas de juego

Listo.

Los dos cosos son literalmente copiados y pegados del rol/tema de Aoko cuando todavía era jugadora. Por eso se leen así en segunda persona de narrador de rol.