Partida Rol por web

La observo. Pensativa. ¿Me arrepentía? No estaba segura que no. Gracias a ello había conocido a muchas personas. Pero me preguntaba si mi padre estaría bien.

-No... No me arrepiento... es solo que... Muchas veces me pregunto como habría sido mi vida si no hubiese venido aquí... Conocer a un hombre...tener mi familia...compartir con mi Padre... Muchas veces lo extraño... Me pregunto si estará bien...si no le faltara nada... No lo se... Muchas veces me siento confundida...-

Me siento de frente a ella observándola. Siempre había sido una chica callada. Los mas cotillas eramos Any y yo. Me daba cuenta lo poco que conocía a mi compañera a pesar de los años. Le sonrío tranquila.

Aayla mira a Miraka fijamente, en silencio. ¿Tener una familia...? Para lo que somos entrenados es mucho más importante, mucho más... trascendental que el hecho de tener una familia. Su voz suena casi a reproche, como si le pareciera despreciable o... sospechoso que alguien pensara lo contrario. La voluntad de la Fuerza es que nuestra vida sea ésta. Para nosotros es un honor llevar esta vida.

Frunce el ceño y observa a su compañera durante varios segundos. Finalmente, suelta un mecánico y tajante, Ahondar en esos sentimientos te encamina al Lado Oscuro.

La observo frunciendo el ceño ¿Que le ocurría? ¿Acaso no podía tener una conversación civilizada? ¿Nunca había tenido esos pensamientos antes de ser una jedi? Era injusto y tonto de su parte ponerse así.

-Solo dije lo que pienso Aayla... No voy a irme al lado Oscuro por ello... Y se que es un honor llevar esta vida, no me arrepiento ni me quejo... Pero pareciera que tu jamas has tenido vida fuera de la Jedi... No se para que me molesto en hablar contigo...-

Le respondo de mala manera. Estaba molesta. Y eso que costaba hacer que me molestara. Me saco el cinturón y me alejo de allí. Dirigiéndome a cualquier parte de la nave, lejos de donde esta ella y los demás. Lo mejor era estar sola para calmarme.

 Al salir de la cabina y cerrarse la puerta tras de ti, tropiezas con algo grande, sonó a metalico, miras arriba y era el maestro Felron con una ceja alzada.

-Pareces algo molesta Miraka, ¿ha ocurrido algo en mi ausencia?

Tuerce el gesto curioso por saber porque su padawan estaba alterada. No queria que sus pupios estuvieran enemistados, y menos ahora que todo estaba tan sumamente mal en la galaxia. No podia haber rencores, ni disputas entre los guardianes Jedi. Seria caer ante los sith sin mostrar resistencia.

-¿Em...?mejor sientate, llamaré a tus compañeros, saltareoms en breve ala hipervelocidad

Lo observo con el ceño fruncido. No me gustaba estar molesta. Pero aquellos comentarios realmente lo había hecho.

-Es solo que... Estaba hablando con Aayla... Y le pregunte algunas cosas y le dije que a veces me sentía confundida... y su ultima respuesta fue bastante tajante y me molesto... y yo le conteste mal también por que estaba molesta...nada mas...-

Le digo en tono bajo mirando al suelo. Con las manos en los bolsillos de mi pantalón. Me sentía horrible después de la pelea. Era algo a lo que no estaba acostumbrada.

 -Bueno has de comprenderla Miraka, Su vida no fue tan facil como la tuya, mi joven padawan. Tu tuviste mas posibilidades que ella, mejor posicion. No se lo tomes en cuenta, ya sabes que se rige por las normas, y todo lo que es pensar, en amor, familia...es contrario a las leyes Jedi.Ella lo lleva a rajatabla pequeña. Asi que no os enfadeis por banalidades, el enemigo puede aprovechase de eso. No debeis tener debilidades ant ellos, ninguno! seria vuestra perdicion, lo entiendes verdad?

Le miraba de nuevo serio y preocupado, amaba demasiado a sus padawans como para perderlos tan jovenes.

Sus manos se apoyan en los hombros de Miraka mirandola fijamente a los ojos.

-Deja de lado tus dudas, tus rencores y tus molestisa Miraka, se mas comprensiva y mas tolerante, o caeras en el lado oscuro, y no quiero que eso ocurra.

Tras sus cabilaciones, Any-Wan decide regresar a la cabina de mando.

Lo observo fijamente unos momentos. ¿Como no podía dudar? A veces en mi cuarto me sentía tan insegura y sola que me daba miedo salir de la habitación. Le sonrío levemente, algo triste.

-Tiene razón... Lo intentare...-

Le digo en tono bajo, mirando al piso nuevamente. Todavía con las manos en los bolsillos. No quería preocuparlo mas de lo que estaba. Había sido egoísta de mi parte aquello. Con el y mi compañera. Seria mejor que luego me disculpara con ella.

 -Tranquila, ahora ve donde quieras, pero os llamaré cuando vayamos a entrar en hipervelocidad, no querras caerte en mitad de la nave verdad?

Sijo intentando quitar algo de Yerro al asunto, para luego dar unos golpecitos en sus hombros y dirigirse a la cabina, abriendo la puerta y cerrandose tras él, quedando sola en el pasillo.

 Caminas por los pasillos pero no llegas a la cabina de mando, algo sientes en su espinazo, que te hace darte la vuelta sobre tí....no ves nada.

Oyes una risita nerviosa de mujer...la sigues...no ves nada.

- Any....aaanyyyyy

Tu nombre, de nuevo la risita nerviosa, te estabas poniendo nervioso ante eso. Tus pasos al final te dirigen a una sala que sabias era la enfermeria, los tubos de bacta estaban vacios, no los habiais utilizado demasiado, y no recuerdas que tu hubieras estado dentro de alguno alguna vez, aunque si habias visto al Maestro Felron, malherido.

Los tubos atraviesan la estancia, la risa alli era mas notable.

-tanto tiempo....te esperaba.....

Lo observo alejarse, bajando la vista y dirigiéndome a mi cuarto.

 La puerta se abre tras de ti, el Maestro felron aparece en ella y te dedica una sonrisa.

-Estas bien Aayla? Se de tu conversacion con Miraka

Él la conocia muy bien, y sabia cmo era su forma de pensar, y ella sabia que él aprobaba su accion de antes.

-No debes preocuparte por algo asi, pequeña padawan. Todo se calmará, ademas Mirka es mas efusiva que tu, aun le queda mucho que aprender sobre el comportamiento Jedi, cosa de la que stoy realmente orgulloso de ti. Captaste todo ala primera, y me hace feliz ver lo que has madurado en tan poco tiempo

Mientras lo deica se dirigia a su sitio, para empezar a preparar la hipervelocidad, abrochandoe su cinturon.

-¿No tienes ganas de estirar las piernas? - dice sin mirarla.

"¿Qué diablos pasa aquí?" - Any-Wan trata de buscar en su cabeza una respuesta razonable, mientras mira fijamente hacia los tubos.

- ¿Quién eres y por qué me esperabas?

 Una chica sale de entre los tubos de Bacta, su grisacea piel, sus rojizos ojos y su oscuro cabello le daban una salvaje y especial belleza. Sus rasgos finos tentaban al joven padawan de lanzarse contra ella, pero no para matarla sino para satisfaccerla. Su cuerpo recorria la estancia como si la conociese como la palma de su manos, y con una siseante voz, habla en otro idioma, un idioma que no sabes porque....entiendes.

- Tanto tiempo te estuve buscando pequeño muchacho

La verdad es que no parecia mayor que tu, pero esos ojos, los habias visto antes, era ella...¿la sith? ¿pero porque no te deba mala espina?, ¿porque caerias en sus brazos sin dudarlo?

- Se que me has visto antes, pero no soy quien buscas, aunque se donde encontrarla.

Acaricia con sus largos dedos los hombros de Any, haciendo que éste se estremeciera. Y sus jugosos labios se acercan a la oreja de Any-Wan.

- Me vas a crees?¿Me buscaras?¿Me encontraras?

Any-Wan es incapaz de articular palabra alguna, se encuentra con sentimientos e ideas confrontadas. Se debatía entre su deber como aprendiz de jedi y los deseos que le incitaba aquella chica.

- Qui... ¿quién eres? - apenas logra articular

 La joven se acerca mas al joven Padawan con una sonrisa tranquila pero picarona.

- Mi nombre es Dirneele Kell, bien concida soy, aunque mi cara nunca ha sido vista por nadie, soy la verguenza de aquel a quien llamais enemigo, el odio le consume por mi, necesita encontrarme, pero no me entregaras verdad?

Sus labios casi rozan los de Any-Wan. Pero aquella informacion no le llevaba nada en claro, parecian palabras llenas de significado..¿Pero cual? ¿Como diablos habia entrado aquella joven alli?

Kell...Kell...no te sonaba, a nadie que conocieras.

- Buscame, Any-wan, buscame....

Palabras que no tenian sentido. Buscarla cuando le tenia delante....Ese extraño idioma seguia saliendo de los labios de la joven.

Any-Wan analiza mentalmente las palabras en la medida que puede...

- ¿Intentas... intentas decirme que eres enemiga de la sith responsable de la masacre de mi planeta y que va detrás tuya? - Any-Wan se lleva la mano a la cabeza tratando de reflexionar - ¿Para qué quieres que te busque, si estás aquí en la nave? ¿Y por qué querría entregarte a los sith, si son mis enemigos?

  - No, no soy enemiga de ella, solo se donde se encuentra, la buscaras, la mataras, caeras...

La joven susurraba las palabras al joven Any, como si lo hipnotizara.Atrayendolo hacia ella.

-Yo no estoy aqui Any, ahora despierta....debes ir al compartimento de pilotaje...

Algo extraño ocurria tus ojos se ven nublados, y sobresaltado despiertas en la sala de los ventanales, agarrando tu corazon con fuerza, jadeante. y se escucha en el intercomunicador...

- Any, ven a la cabina de mando, saltaremos ala hipervelocidad en breve

 Al poco de estar en tu habitacion, el intercomunicador de la nave hace un ruido extraño, y la grave voz del Maetro Felron suena.

-Chicos, saltaremos a la hipervelocidad en breve, venid ala cabina y abrochaos cinturones.

Any-Wan se apresura en entrar en la cabina de mando ante la advertencia por intercomunicador.

- Ya voy, ya voy...