La misión de la fundación Nameless "NMS1" Transcurrirá el la Chicago de los años 20 y el jazz es el tema y la banda sonora de la aventura.
Tras un par de meses de descanso, la Fundación precisa de vuestros servicios otra vez. La información de la misión es poca, pero tienen entendido que en la ciudad de Chicago ocurrirá algún fenómeno fuera de lo común. En particular en la Sala de fiestas "El cielo Azul".
Tras un par de días en avión, transbordo incluido, para cubrir la distancia entre Boston y Chicago por fin llegáis a la ciudad de vuestro compañero Harry Lee.
En el aeropuerto recogéis un auto reservado a vuestro nombre y por la hora que es, tenéis el tiempo justo para ir al Hotel , dejar vuestras cosas y partir para la sala de fiestas. Ya que vuestras invitaciones indica que el espectáculo musical empezará en un par de horas.
Harry os comenta que para ir a este conocido "speakeasy" de la ciudad hay que ir de etiqueta. Casualmente en vuestras habitaciones del Hotel os esperan unos smókings con vuestras medidas.
Una vez el grupo de investigadores estuvo equipado con sus mejores galas, este se interna en la fría noche de Chicago puntuales a su cita.
Sir Percy ya tenía su propio traje de galas preparado por lo que no necesita usar el smoking del Hotel. En el camino se intenta enterar si habrá multimillonarios en el baile puesto que sigue pensando en montar una expedición de exploración a tierras colombinas... con el permiso de NAMELESS.
Por poco que preguntéis o el mismo Harry lo sabe, "El cielo Azul" es el club nocturno más importante de la ciudad donde sirven alcohol. O "speakeasy", se crearon debido a la Ley Seca que entró en vigor en 1920.
Y por descontado este es regentado por gente muy influyente. Los requisitos de acceso son tremendamente exigentes. Pasar la noche en el club cuesta 20$ y las copas cuestan 2$. Los hombres deben ir de esmoquin y las mujeres de traje de noche.
Hogar "dulce" hogar
Pensaba Harry al llegar a Chicago. Tan brillante y a la vez tan oscura. El sub mundo del vicio y corrupción era la vida que había vivido Harry a lo largo de su infancia. Muchas cosas que había vivido ese niño y adolescente antes de llegar al lugar donde se encontraba ahora hubieran aterrorizado al más duro, pero aquí estaba, bajo la tutela de Nameless. Harry había cambiado el rumbo de su vida, ahora trabajaba para una asociación con muchísimos recursos en busca de conocimientos ocultos, criaturas extraplanareas y a saber qué otros misterios... Y encima en compañía de eruditos en la parapsicología, medicina y arquelogía.... ¿Pero qué diablos estaba haciendo él con estos individuos? Harry apenas había tenido formación, pero a veces la calle formaba mucho más que las universidades o las bibliotecas y ahora estaban todos en un entorno que él conocía y controlaba en la ciudad de Chicago, el club "El cielo azul" o no...
Señores, espero que hayan traído lo que hay que traer para poder entrar en "El cielo azul"...
Espero que Alec vaya vestido mejor esta vez...
Alec es un Militar en servicio, que tiene un permiso. que mejor traje y más elegante que el traje de gala de los Gordon´s Highlanders.
A no ser que sea imprescindible yo llevo traje militar de oficial de los Highlanders. Si quedaba bien en las guerras Boers mejor en el Chicago de los 20.
Aparte va a juego con el rifle mataelefantes.
Ahí, ahí, con falda y sin gallumbos, claro. Uno que no pasa el "face control". Habrá que colarlo por los baños. ;_-O
Desmond Willburn se prepara para la noche. Se pone el esmoquin, su revolver del 32 en la cartuchera sobaquera queda totalmente oculto, y su bastón le da un aire altivo. Hacía tiempo que no viajaba, y se da cuenta que lo echaba de menos.
Le entusiasma y aterra la idea de seguir descubriendo este nuevo mundo de seres y poderes extraños. Esta noche espera poder aprender algo nuevo.
Se acercaban las 8 en punto de la noche y el grupo de investigadores llegó al salón de baile "Cielo Azul". Tras un breve trayecto en coche, los miembros de Nameless ataviados con sus mejores galas se apearon frente a una puerta azul sin ningún letrero.
La puerta estaba flanqueada por un par de "gorilas" que tras comprobar las entradas que entregan los investigadores y un exhaustivo repaso al escocés, no dando crédito a sus ojos, les dejaron pasar
.
Como os puede haber comentado "Harry", El Cielo Azul se trata de un Club nocturno en el que se sirve alcohol ilegalmente, de manera que los clientes están infringiendo la ley al entrar en él. Los hombres deben ir de esmoquin y las mujeres, de traje de noche, a no ser que prefieran que los sienten detrás de las palmeras que hay cerca de la cocina.
Este garito para la alta sociedad está protegido y tanto la policía como los "gangsters" toman partido en cualquier alboroto que se produzca. Este es el "speakeasy" de más prestigio de la ciudad, así que la música es buena, la compañía excelente y la bebida es genuina de importación. El club permanece abierto hasta el amanecer.
Esta aventura será muy musical y os iré añadiendo links de jazz para que os vayáis ambientado.
Una vez superados los "gorilas", unas escaleras con alfombra azul suben hasta el salón de baile, que está dispuesto de manera muy parecida a la de los cines de la época. De fondo se oye música, la canción "Doctor Jazz" interpretada por la Banda "5" Estrellas, como pueden leer en un cartel con todo el programa de aquella noche.
El salón es bastante grande y a lo largo de la parte derecha se extiende una opulenta barra, en la que puede verse a los camareros medio tapados tras las filas de botellas. Enfrente de la barra, hay un escenario en el que se encuentra la banda, y el resto es la pista de baile con la zona de pequeñas mesas a continuación. Cada una de las mesas dispone de una pequeña lámpara para lograr una iluminación más íntima.
El encargado sonríe cuando los investigadores pasan a través de las puertas batientes hacia el área principal y les hace una señal para indicar que lo acompañen. Los camareros no se detienen ni para respirar, el jazz y el zumbido de las conversaciones llenan la sala por completo.
El cielo azul es un lugar famoso al que acuden financieros y actores de teatro de Neoyorquinos, estrellas de Hollywood, políticos honrados y otros que no lo son tanto, hombres de negocios y gangsters, magnates de los automóviles de Detroit, futuros herederos de compañías navieras o ferroviarias de San Francisco, o de las petrolíferas de Texas y Oklahoma, los ricos y los astutos, y también gente corriente de todo el mundo. Todos suelen venir aquí cuando pasan por la ciudad de Chicago.
Esta noche la música la proporciona la banda de las "5 Estrellas". En el garito, son negros los camareros y sus ayudantes, los chicos y las chicas del coro, los intérpretes y los ayudantes de cocina. Mientras que la clientela, la dirección, los guardas y los dueños son blancos.
Las banda de Jazz de los años 20, especialmente, las que tocaban en los clubes grandes, estaban formadas por más integrantes que las que conocemos hoy en día. Los instrumentos podían incluir trompetas, trombones, saxos, clarinetes, cornetas, percusión, contrabajo, banjo o guitarra rítmica y un piano. Se probaban todas las configuraciones posibles pero, como no existía amplificación, hacían falta, al menos nueve o diez instrumentos para llenar un local. Y las bandas de menor tamaño tocaban en salas más pequeñas.
El encargado os pide disculpas por la muchedumbre y os busca sitio en una gran mesa en un rincón cercano a la barra. Al llegar veis como un desconocido ya está ocupándola y, aunque asiente con la cabeza para daros a entender que os podéis sentar, pone la mano sobre la silla que hay justo a su lado, ya que espera a alguien.
Vuestro acompañante de mesa no dice palabra y no parece muy interesado por la música, como indican los nerviosos golpecitos que da sobre la mesa con la yema de los dedos. Es un hombre de constitución pequeña, y con un semblante muy ratonil. En comparación con la estridente muchedumbre, su comportamiento resulta tenso y remilgado.
El desconocido contempla la banda para evitar mirar al grupo de investigadores y no parece que esté escuchando la música.
Tirada oculta
Motivo: psicol. alec
Tirada: 1d100
Dificultad: 30-
Resultado: 6 (Exito)
Tirada oculta
Motivo: psicol. desmond
Tirada: 1d100
Dificultad: 70-
Resultado: 97 (Fracaso)
Tirada oculta
Motivo: psicol. harry
Tirada: 1d100
Dificultad: 5-
Resultado: 89 (Fracaso)
Tirada oculta
Motivo: psicol. percy
Tirada: 1d100
Dificultad: 5-
Resultado: 26 (Fracaso)
Tirada oculta
Motivo: descubrir. alec
Tirada: 1d100
Dificultad: 70-
Resultado: 1 (Exito)
Tirada oculta
Motivo: descubrir. desmod
Tirada: 1d100
Dificultad: 59-
Resultado: 33 (Exito)
Tirada oculta
Motivo: descubrir. harry
Tirada: 1d100
Dificultad: 60-
Resultado: 76 (Fracaso)
Tirada oculta
Motivo: descubrir. percy
Tirada: 1d100
Dificultad: 80-
Resultado: 61 (Exito)
Paradójicamente el tosco médico castrense es el único que se percata que el desconocido está nervioso. Y todos los investigadores menos Harry detectan que tiene la cara cubierta de sudor.
Nada más terminar de interpretar "Doctor Jazz", la banda se lanza a tocar "Clarinet Marmalade"
Sir Percy tampoco está muy interesado en la música puesto que como británico no entiende el gusto por esa música que aún no ha llegado a sus tierras y como arqueólogo tampoco le apasionan esos instrumentos tan modernos, por lo que empieza a hablar con el desconocido* a la vez que levanta una mano para avisar al camaero para que les sirva unas copas.
-Encantado, soy Sir Percy Manley, Arqueólogo y buscador de Sponsors para realizar una nueva expedición. ¿Con quién tengo el gusto? le comenta mientras le muestra una afable sonrisa y le tiende su mano casi delante de su cara para que se gire hacia ellos para estrechársela.
(*) A pesar de ello se le mete el ritmo en el cuerpo e involuntariamente mueve ligeramente los hombros al ritmo de la música.
Si el desconocido entabla conversación con él, Sir Percy le preguntará si conoce multimillonarios que le puedan sufragar el viaje y tambíen le preguntará a quién espera. También introducirá al resto del grupo por sus nombres sin dar más detalles sobre ellos (sobre todo por no tener que explicar a qué se dedica Harry).
Si le ignora llamará de nuevo al camarero e intentará que les sirvan unas copas. Se ofrecerá a pagar al desconocido una copa para ver si así se anima.
Yo pido un Wiski escoces. Y espero a ver que sale de las preguntas de Sir Percy. Si veo que el desconocido entra en el juego de Sir Percy y empieza a hablar me añado a la conversación e intento descubrir de donde es, en que trabaja y que hace en nuestra mesa.
Si no habla me limito a vigilarlo estando muy atento a lo que pasa en la sala. O a cualquier comportamiento extraño.
Sin dar demasiada importancia al compañero de mesa Harry se empieza a animar con el ritmo de la música. Oteando la sala de baile en busca de alguna jovencita lo suficientemente atractiva como para que no llame demasiado la atención por su belleza pero a su vez que se la vea tan animada como para querer bailar con el primero que se lo pida.
Visto un objetivo de estas características Harry se levanta y se acerca a ella confiado de su capacidades de elocuencia.
Permítame que me presente, mi nombre es Harry y soy... investigador. Me preguntaba si le gustaría bailar esta canción... Le dice a la señorita ofreciéndole la mano para salit a bailar.
Motivo: Charlatanería
Tirada: 1d100
Dificultad: 55-
Resultado: 15 (Exito)
Tiro charlatanería?
Si acepta me pongo a bailar con ella
Desmond saluda por cortesía al caballero sentado en su mesa y ocupa una de las sillas.
El jazz no es la música que más le agrada, ni bailar, así que se queda observando la sala, y al caballero sentado en su mesa.
Me extraña mucho que en este lugar abarrotado de tanta gente pueda ocurrir algún fenómeno fuera de lo común, aunque en cierta manera, para mi, estar en esta situación ya es estar fuera de lo común.
Desmond sonrie, pensando en lo rídiculo de sus deducciones.
El personaje que compartía mesa con vosotros casi ignoró las palabras del Sir. Y de refilón cruzó unas breves palabras.
Disculpe caballero, pero no estoy buscando conversación. Estoy esperando a alguien. Pero para no pecar de descortés....soy Pete Manusco y si tiene algún problema contable yo puedo solucionarlo. Te alarga una tarjeta de visita y este se vuelve nervioso mirando a todos lados, impaciente por la llegada de su invitado.