Partida Rol por web

 La luz cegó a Ikki y aunque Amina lo sujetó la fuerza de succión hizo que se separaran. Sunshine fue chupada cuando intentó rescatar a su compañera Amina de esa fatídica suerte. Ambos: Ikki y Sunshine cayeron por una especie de embudo de luz violácea durante segundos pero que parecían muy largos. Cayeron sobre un suelo de césped. 

Y el embudo se cerró.

Ahora estaban en una especie de pradera. Era el mediodía y la tierra estaba cubierta de flores. 

Un río discurría tranquilamente cerca de ellos y solamente algunas nubes tapaban el cielo, que por lo demás era límpido como una sábana celeste.

 Me refrege los ojos culpa de la conmocion.. 

Que paso?.. dije mientras me sentia algo perdido.. 

Reconoces este lugar?.. Le dije a la muchacha que se encontraba conmigo. Realmente ni siquiera le habia prestado atencion. Ya que por lo visto no se destacaba en hablar. 

Espere pacientemente a que me contestara.

Desperté en un lugar totalmente perdida, no recordaba los sucesos anteriores. Miré el lugar algo asustada al comienzo, pasado unos minutos comencé a retomar la seriedad.

Recuerdo haber actuado impulsivamente tratando de salvar a una de las chicas de aquella rafaga. Y lo demás es muy difuso.

No muy lejos, detrás de mi, estaba aquel caballero del fénix. Sus preguntas fueron directas y se podia ver que estaba tan desorientado como yo.

No, creo que no lo sé. Estoy tan aturdida como usted. - Decia mientras mi cabeza dejaba de a poco de dar vueltas.

Parece ser una especie de pradera, podriamos estar en las afueras de la cuidad. Lo mejor será que busquemos algun sitio elevado para ver los alrededores. ¿No crees?

 La pradera se extendía por mucho tramo. Las flores, algunas violáceas, decoraban el lugar. No se sentía el cosmos de ningún caballero o sailor cercano. Los pájaros piaban y sucaban el azul cielo. 

De no ser porque ambos sabían que no estaban para pasarlo bien, sería el sitio ideal para pasar un rato.

Algo demasiado hermoso en un momento en donde el caos reinaba.

A lo lejos se divisaba un edificio antiguo. 

Del otro lado, había una especie de pueblo, muy pequeño.

 Ikki se rasco la cabeza todo eso parecia una cita.

Su.. Supongo que deberiamos ir hacia alli verdad?. Dije mientras señalaba al pueblo. 

Tal vez encontremos algo en especial alli. Exclame con calma.

O algo que nos diga donde estamos. Dije terminando ya de sentenciar una idea que era la unica que se me ocurria. 

Comenze a caminar, las flores me rodeaban era realmente un paramo hermoso. Mire a la sailor cuando ella no me miraba. Por alguna razon habia cierta tension en el aire indescriptible semejante a cuando algo incontrolable podia estar por suceder. 

Vaya caballero, se supone que actuaba tan maduro y decidido.

Si, si. Supongo que habrá que ir. - Decía agitando mi mano en forma de "Te hago caso", mientras seguía entumecida en mis pensamientos.

Tiene cara de engreido y su pelo parece al de un pájaro muerto.

Suspiré hacia la nada y comencé a caminar mordiendome los labios de los nervios.

Odio tener que llevar el cargo de una Sailor... quisiera estar en mi mansión de Londres comiendo Uvas.

Ikki y Sunshine siguieron caminando un tramo más. Una fresca brisa les llegaba del oeste. Ambos no parecían demasiado comunicados entre sí: el fénix guardaba un silencio poderoso y la joven no parecía tener demasiado que comentar.

Entonces el viento comenzó a hacerse más fuerte.

Las violetas se movieron al compás del mismo y, entre los sonidos del aire, una voz declaró:

-¿A qué venís aquí?

Nada se veía cerca.

 Me puse en posicion de combate Y me puse de frente de donde crei que venia la voz. 

No lo se.. Solo caimos aqui por un problema con una sacerdotiza.. Muestrate.. 

Dije friamente.. Poniendome en pose de combate.

Sunshine miraba aquella flor algo riéndose. Una flor parlante. Si claro, ahora falta que venga Eliot y me muestre el espejo de los sueños.

Sunshine da un paso adelante, pero el flamante caballero de los pelos en forma de tridente se le adelanta.

Calma, calma... ¿No ves que es una pequeña flor indefensa que no puede hacer nada? Se adelanta Ustedes siempre buscando la forma de pelear contra todo ente viviente del planeta.

Se agacha y comienza hablar con la flor.

haremos las cosas pacificamente. Dime donde estamos, que eres y como llegamos aquí, y no serás victima de un mar de fuego sobre tus dulces petalos que iré arrancando uno por uno con mis manos y luego te arrojaré al rio para que vagues sin rumbo eternamente por la deriba de la corriente...- Sunshine estaba hablando normalmente.

Una voz surge entre el viento.

-Ya que necesitan tanto que haga mi presentación, no hace falta que me esperéis más.

Un hombre aparece frente a los guerreros. Viste una armadura dorada y negra y su cosmos indica gran poder.

-Soy Amosis, servidor de Amon y lamentablemente para vosotros, debo matarles.

Sonríe, con ojos fríos.

-¿Tenéis alguna última voluntad?

El hombre le hace acordar a Ikki a Afrodita de Piscis, por su aire femenino aunque es un varón. Quizás no sea casualidad que hayan caído en un sitio lleno de flores. Pero fenix también recuerda que el caballero de Piscis era mortal con sus rosas... quizás las flores que por cierto Sunshine está tocando...

 Con complejos movimientos mi cuerpo se encendio en llamas y suspendido en el aire dije las palabras... 

El calor de las llamas surgio de mis manos. Y el frio caballero de un grito de combate exclamo..

Ave Fenix!.. Un expectro flameante con forma de fenix ataco a mi rival de manera rapida y fortuita. 

Un guerrero que no sabe aprovechar las ventajas no es mas que un hombre muerto... 

Exclame  preparado para pelear.

Cuando la flor hizo su aparición retrocedí hacia atrás unos pasos, sorprendiendome un poco por la inesperada presencia. A los segundos reaccioné:

-Así que eres un siervo del Jamón- Se cruza de brazos - Pues no tengo idea que es lo que estamos haciendo aquí, pero si nos impides el paso, tendremos que tener una plática muy drástica. ¿No crees? . Sonríe.

Sunshine estira su brazo y a su costado aparece su cetro, alargado color naranja en su extremo superior aparecía el simbolo solar, lo toma y se prepara para la batalla.

Sunshine comienza a dar unos gilos, mientras el cetro concentraba una cierta cantidad de luz Sentirás la verdadera luz de la justicia... 'Por el poder de la luz radiante del sistema solar' ATACA.- Un estallido de luz en forma de cometa se propagó hacia el enemigo.

El golpe de Ikki impacta en Amosis y lo hace retroceder unos cuantos pasos. Lamentablemente Sunshine no tiene tanta fortuna.

-¿Crees que están jugando con un niño?

El Guerrero eleva sus manos y su cosmo se eleva hasta formar una pirámide enorme tras de él. Arroja sus manos hacia adelante y lanza una enorme cantidad de rayos violáceos que caen sobre el Caballero de Athena y la Sailor que lo Acompaña.

-Rayos Violáceos!!!

Los mismos impactan con fuerza en ambos jóvenes. Sunshine incluso cae a tierra y un trozo de su traje de Sailor es arrancado. La armadura de Ikki soporta mucho mejor.