Partida Rol por web

Nunca sigas a las Hadas... 2: El Sendero Rojo

Escena de Zaina

Cargando editor
27/11/2018, 15:05
Jess

Seguía yo pendiente del misterioso ruido, que nadie más parecía escuchar. eso era lo que más me intrigaba de todo.

-Por supuesto, tú eres la que nos tiene que demostrar cosas aquí -dije por fin ante la pregunta de Zaina-. No vamos a fiarnos de tí porque pongas carita de buena. Bastante nos han hecho ya tus amigas, como para que nos fiemos. Demuéstranos que quieres ayudarnos. Sabes que somos más, y también podemos hacerte daño sin problema. Así que no juegues con nosotras...

Sonaba a amenaza y lo era, porque ya a esas alturas lo que quería era terminar con todas ellas y volver a casa con mis abuelos. Cero tonterías. No iba a permitirlo más.

Miré ya descaradamente hacia donde sentía ese ruido extraño, aprovechando mi enfado. Quería saber qué era.

Cargando editor
05/04/2019, 22:45
Narrador

Antes de que Anette pudiera decir nada, Jess notó un extraño escalofrío. Quizá fuera su sensibilidad especial respecto a las brisas y al viento, después de todo sus poderes siempre tomaban esa forma cuando los invocaba... pero por algún motivo, sabía que había una corriente de aire cerca. Y entonces tuvo un presentimiento. Algo estaba a punto de pasar.

No supo por qué, pero antes de girar la cabeza hacia la fuente de aquél sonido, se agachó y se preparó. ¿Qué iba a...?

¡BAOUM!

Hubo un destello cegador y las tres niñas se cayeron al suelo de culo. A unas decenas de metros en la oscuridad, algo acababa de explotar. Después todas pudieron escuchar claramente el sonido de una fuerte corriente de aire, como un torbellino. Duró unos cuatro segundos... y luego todo quedó en silencio.

Cargando editor
05/04/2019, 22:51
Anette

Anette, tumbada en el suelo frío, se cubrió la melena sucia con las manos.

¡Aaay! —chilló—. ¡¿Qué ha sido eso?!

Miró en la dirección de la explosión, pero ya no se podía ver nada. Sólo oscuridad.

Cargando editor
07/04/2019, 22:34
Zaina

El culetazo dolió mucho, pero lo que la había dejado sin respiración era el ruído de la explosión y sobre todo, aquella luz cegadora. Zaina se frotó el culo sin levantarse. 

–O es esa asquerosa o...– Zaina achinó los ojos tratando de entrever algo. Si fuese el hada naranja habría fuego, no una luz repentina. Eso debía ser otra cosa. La niña miró los círculos que había dibujado y por los que tenía pensado huir y luego al lugar de la explosión– Quizás sea Ander, que haya llegado hasta aquí. La Sacerdotisa nos dijo que podíamos llegar hasta él, así que él podría llegar a nosotros. Podemos acercarnos con una de las cerillas de Anette. A no ser que sepas algo que no sepamos.

Zaina acercó la nariz a la carta donde estaba la reina e intentó poner cara de mala, para que se sintiese amenazada. No le salió muy bien...

Cargando editor
09/04/2019, 15:20
Jess

Susto, susto, susto... me toqué el corazón, bueno... No de verdad, sino poniéndome la mano sobre el pecho como cuando corro mucho, y parece que se me va a salir desbocado él. Ahora lo sentía igual, el miedo me hizo quedarme paralizada y escuchar los latidos de mi corazón en las orejas.

Respiré un par de veces hasta que se me pasó el efecto.

-¿Pero eso qué fue? ¿Ander? Ojalá... Pero no creo. Seguro que esta tonta lo sabe -dije refiriéndome a la carta de Zaina.

Cargando editor
10/04/2019, 20:39
Reina Hada

Las niñas volvieron la vista hacia la carta en la que estaba encerrada la Reina Hada, pero esta parecía tan sorprendida como ellas.

No, no tengo ni idea de qué ha sido eso —dijo ceñuda—. Pero si tanto os interesa... ¿por qué no vais a averiguarlo?

Se cruzó de brazos y les dirigió una sonrisa burlona.

Cargando editor
10/04/2019, 20:41
Narrador

Justo después de que la Reina dijera aquello, pudieron oír algo en la dirección de la que había venido la explosión y el torbellino de aire. Parecían pasos...

Cargando editor
11/04/2019, 06:04
Jess

-¡Eh! ¡Escucha! -por fin se me había calmado el corazón del susto, y ahora escuchaba claramente-. Se oye que alguien... ¿se aceca? Espérate a ver quién viene, a lo mejor son nuestros amigos.

Ojalá, ojalá...- pensé. Echaba de menos saber de ellos, y sobre todo saber que están bien. Habían pasado demasiadas cosas, y además de volver a casa y que acabase la pesadilla, también quería que regresásemos todos bien. Sin duda nos lo estábamos ganando a pulso.

 

Cargando editor
11/04/2019, 14:07
Zaina

–No es un hada– susurró muy bajo– porque vuelan, y si andase tampoco haría ruído. 

La niña hizo un gesto para que el resto se escondiesen, dentro de las posibilidades. Anette tenía el chubasquero, que era oscuro y con el podría pasar inadvertida, de modo que al menos una de ellas tenía altas posibilidades de no ser descubierta. Zaina, aunque seguía pensando que era Ander, se revolcó en el polvo y se tapó un poco con la tierra. A la vez, estaba atenta al sonido de los pasos, intentando averiguar la dirección y distinguir si era de alguien grande o pequeño, uno o varios.

Cargando editor
12/04/2019, 12:58
Narrador

Acababan de terminar de ocultarse lo mejor que pudieron, cuando una figura pequeña llegó caminando con paso cauteloso. El casco de juguete que llevaba no dejaba lugar a dudas. Era Ander.

El chico se sintió aliviado al comprobar que el puntito de luz que había visto no era algo malvado. Otra vez estaba junto a Zaina y Jess, rostros conocidos al fin. Quizá tuviera un respiro después de todo lo que acababa de pasar...

Cargando editor
14/04/2019, 16:39
Zaina

–¡Te fastidias, estúpida! Es Ander.– espetó a la Reina Hada– No es ningún amigo tuyo. A tus súbditas les está persiguiendo La Otra. Ahora qué, ¿nos ayudaras? A tí te viene tan bien como a nosotras vencerla.

Aunque desde el principio había creído que ese ruido eran los pasos de Ander, Zaina se sintió aliviada. Ahora solo quedaba volver a la realidad y todo estaría solucionado. Zaina miró los círculos que había trazado y el corazón le dio un vuelco. Ahora eran cuatro, no tres. Ya no podrían salir por allí. Dejar a alguien atrás no era ninguna opción. Con el pie borró el dibujo del suelo y saludó a Ander con la mano que tenía libre. La niña tenía un montón de ganas de saber todo lo que le había pasado, pero antes había que asegurarse de que todo iba bien.

–¡Psss! No hay peligro. El hada amarilla que estaba conmigo salió huyendo ¿y la tuya?– Zaina sonreía. Había dejado el grueso chubasquero a Anette y tenía el pelo más revuelto que de costumbre, hasta el punto de parecer un león electrocutado. Además de una herida en el hombro, que parecía una quemadura muy fea.

 

Cargando editor
15/04/2019, 09:57
Jess

-¡Ander! -qué alegría, casi me caigo al suelo de la emoción - ¡Ya estamos empezando a juntarnos de nuevo! - porque estaba segura que del mismo modo que apareció Ander, aparecerían también los demás.

Le dí un abrazo cariñoso, ¡yo! que la abuela siempre decía que era como un cactus a la hora de demostrar afecto... Pero una cosa son los saludos a gente que te importa menos, y otra ésto, ver a alguien a quien no sabías si volverías a encontrar.

-¿Qué te ha pasado, de dónde vienes, y los demás...? - las preguntas se me agolpaban en la cabeza, pero intenté serenarme para no agobiar a nuestro amigo recién llegado.

Cargando editor
25/04/2019, 23:57
Ander

Ander se lanzó sobre Zaina y Jess nada más verlas, y se fundió con la niña rubia en un abrazo fuerte. El casco se le torció y estuvo a punto de caérsele, pero el niño consiguió sujetárselo a tiempo. Dos gruesos lagrimones de alivio rodaron por sus mejillas.

¡Jess, Zaina! —sollozó mientras notaba cómo la tensión acumulada le hacía temblar. Por fin había dejado de estar solo—. No... no sé dónde están los demás... Después de que la escalera se rompiera me quedé solo en la oscuridad y... y luego me encontré con una cosa oscura enorme que me hablaba... y hacía que la cabeza me doliese. Pero un Hada naranja me ayudó y me escapé...

Las palabras salían de la boca de Ander casi atropelladas. Le habían pasado tantas cosas raras que contarlas todas de golpe era complicado.

¡Entonces llegué a la nave de 2001! ¡Y HAL estaba dentro y casi nos ahoga a mi y al Hada naranja! Pero llegaron unos aliens grises y uno hizo un agujero en la nave con la pistola y... entonces me quedé otra vez solo... el Hada desapareció.

Se fijó en la herida de Zaina.

Hala, Zaina... ¿quién te ha hecho eso?

Notas de juego

PNJtizado

Cargando editor
26/04/2019, 17:16
Zaina

Zaina no sabía a que se refería Ander con el tal Hal, pero tenía nombre de señor mayor. Lo único que había visto de 2001 un día que la pusieron en la tele era la escena de los monos, que había hecho que la niña cayese completamente dormida. Sin embargo no dijo nada, asumiendo que sería algún personaje de cuento.

–Fue el hada naranja. Quería matarme, me lo dijo antes de transformarse en un ser de fuego y atacarme... pero el mago que salió de la carta cuando encerré a la Reina Hada me ayudó. Esa hada es mala. Peor incluso que las hadas rojas. Y quiere matarnos a todos. A nosotros, a las Hadas Buenas y a las Hadas Malas.

En ese momento, Zaina cayó en cuenta: Ander no sabía nada de que había conseguido atrapar al Hada Roja. Sin poder evitar cierto orgullo por lo sucedido (aunque le aterraba recordar como había empezado a sangrar por los ojos) le mostró la carta donde estaba encerrada la Reina.

–Cuando me quedé encerrada con Anette ella apareció, pero liberé al Mago de la carta. Lo dejé salir para encerrarla a ella. 

Cargando editor
26/04/2019, 20:32
Ander

- ¿E... está ahi? - dijo señalando la carta un poco incrédulo. 

- ¿Y para qué la quieres?

Cargando editor
26/04/2019, 21:14
Zaina

–No la quiero. Pero si la dejo tirada o la rompo puede escaparse y nos atacaría–. respondió la gitanilla mirando fastidiada a la Reina Hada–

Cargando editor
28/04/2019, 01:25
Jess

-¿Hall9000? ¿La de la peli del espacio? -siempre me había gustado esa computadora respondona con nombre de aspirador- ¡Qué pasada!

Era impresionante la magia que nos traía aquí, y la que nos hacía encontrarnos con todas estas cosas y personajes. Aún así, yo echaba de menos mi (aburrida) vida normal, y sobre todo estaba preocupada por mis abuelos. Si no fuese por eso, quizás hasta podría quedarme a vivir en un sitio tan loco como este... 

Por un momento me escuché a mí misma pensando eso. Y me quité el pensamiento de la cabeza. NO, NO, NO... ¿Quedarme aquí? Ni de broma. Estas hadas malas eran de lo peor, y su jefe o quien sea... ese ser siniestro. Aaaaaajjjjj... no me quedaría aquí jamás.

-Cada vez estamos más cerca. Ya nos estamos reuniendo todos de nuevo, y unidos somos más fuertes. Las hadas bicho no van a tener ninguna oportunidad contra nosotros.

Cargando editor
28/04/2019, 02:15
Reina Hada

La Reina Hada no pareció demasiado contenta cuando Zaina le enseñó la carta a Ander. Frunció el ceño desde su celda plana y miró al niño con una mueca de desdén.

Mira, pero si es el renacuajo llorón —se burló—. ¿Todavía no te has hecho pipí encima, Ander?

Pero por algún motivo, dejo ahí las burlas y resopló, cruzándose de brazos.

En fin, ¿qué vais a hacer ahora? Habéis encontrado al crío, pero seguís aquí atrapadas... —sonrió con malicia.

Cargando editor
28/04/2019, 15:08
Zaina

–¡NO-TE-ME-TAS-CON-AN-DER!– Zaina agitó la carta para que el hada se marease, como si esta fuese una mosca en un tarro. Cuando paró miró los dibujos que había hecho para salir. Ahora eran cuatro, no servía.– Antes dijiste que sabías como salir. Si nos lo dices te ayudaremos a acabar con el hada naranja. También quiere mataros. Y sin nuestra ayuda, lo va a conseguir.

La niña sabía que de alguna forma tendrían que salir de allí, y el hada en la carta podía ser una de sus bazas. Quizás no podía romperla o abandonarla por miedo a salir, pero podía ponerle las cosas  muy difíciles.

–Ander, ¿tu casco tiene linterna?

Cargando editor
29/04/2019, 12:45
Reina Hada

La Reina Hada miró a Zaina y su sonrisa burlona se esfumó.

Sí, sé cómo salir de aquí —dijo—. Pero ya puedes esperar sentada si crees que voy a decirte nada. No te necesitamos, ni a ti ni a ninguno de esos mocosos. Antes o después, las mías me liberarán, y entonces nos ocuparemos de esa traidora. Vosotros, buscaos la vida si tanto apego le tenéis.

Se cruzó de brazos y no dijo nada más.