Partida Rol por web

Ya bajo el agua y que éste refrescara su cuerpo, Wendy reflexiona sobre lo que debe hacer hoy. No sólo es encontrar a sus hermanos y hablar con Peter, también es recuperar sus recuerdos como Antye para comprender qué ocurre, pues siente que hay información que se le escapa, como los datos que había investigado de Storybrooke y que no le pareció raro haberlo recabado, ella misma lo habría hecho.

Trata dr apurarse lo más que puede, así que en 15 minutos sale del cuarto vestida con unos jeans gruesos negros, unos tenis de suela ancha para caminar cómodamente, un abrigo largo blanco que llega a sus muslos y una bufanda oscura que cubría su cuello; además, aprovecha para preparar un bolso con las llaves de la casa, el libro, una libreta con los datos y la nota, cartera con dinero y el móvil.

Más tranquila y con la mente relajada, la pelirroja llega al comedor y se sorprende con lo que Zack preparó. Esperaba algo más sencillo, pero aquél desayuno es variado y su estómago ruge aclamando algo de alimento. La joven se acerca al chico para darle un beso en la mejilla y se hunde en sus hombros.

-Gracias... anda, vamos a desayunar juntos.

Wendy se sienta y cuando Zack ya comenzara, ella también para disfrutar lo que se preparó. No se remuerde por el hecho de estar sentada y degustar la comida, es consciente que debe estar bien para lo que le prepare el día y no le hará mal estar acompañada. Cuando termina recoge los platos y los lava, de ahí va a cepillarse loa dientes y se queda en la sala, esperando a que el chico termine de estar listo.

Desayunáis más o menos deprisa, no hay mucho tiempo que perder. Una vez ya estás preparada, ambos salís de la casa para poner rumbo al orfanato. La densa niebla sigue cubriendo las calles del pueblo y no puedes sentir un escalofrío. Por su parte, vez como Zach se emboza con la bufanda.

-Queda más o menos una hora para que empiecen las clases. Así que si alguno de tus hermanos está en el orfanato quizás podamos verlo antes - se mete la mano en los bolsillos de la sudadera, mientras aprieta el paso- por cierto, la directora es un tanto... especial. No creas que por darle pena te dejará verlos o sacarlos de allí. Es una mujer muy estricta. Ya se nos ocurrirá algo, no te preocupes.

Seguís caminando hasta que ves un edificio blanco, con un letrero en su entrada en el que pone "Orfanato de Storybrooke". Tiene pinta de ser un edificio viejo y algo destartalado. Entráis a la recepción donde veis a dos mujeres hablando. Una de ella es más mayor y a diferencia de la otra, no viste con un babero infantil*. La mayor os mira extrañada -¿os puedo ayudar en algo? - entonces cuando mira a tu compañero, ves como le suelta una sonora colleja, que hace que el chico se queje*

No sé que formato o calidad necesitas asi que te he filtrado esta para tu uso y disfrute.

Elsa se sobresaltó al ver alguien en la habitación y por un momento volvió a quedarse medio dormida pensando que era un sueño, pero la puerta al cerrarse y el murmullo fuera le hizo ver que no era un sueño. Se sentó en la cama, y tal y como estaba se fue hacia la puerta para poner el oído con suavidad contra esta y escuchar de quien se trataba. No consiguió oír nada, por lo que abrió la puerta para ver que pasaba o quien era ese chico.

No ves a nadie y tampoco nada extraño. Das una rápida ojeada por la casa y te aseguras de dos cosas. La primera que Eileen sigue dormida y no se ha enterado, la segunda es que parece que no han robado nada. Te acercas a una ventana y ves que ya ha amanecido. 

Tras ver que ya ha amanecido vuelve hacia el dormitorio de Eileen y se acerca a la cama poco a poco para no asustarla y le mueve un poco el brazo para despertarla. — Eileen... Eileen.. — Susurra poco a poco.

Wendy se mantiene en silencio mientras se dirigen a ese lugar, pues medita sobre qué decir cuando llegaran al Orfanato. No puede llegar diciendo la verdad, y más con la situación que se suscita en el pueblo. La pelirroja se limita a asentir con lo que dice Zack, indicando que ha prestado atención aunque no comentase alguna respuesta o complementación.

Al arribar al sitio, la joven se estremece ante la idea que sus hermanos se encuentren ahí, pero es el primer sitio al que deben buscar y eliminar por si ellos no están. Ve a las mujeres que parecen ser las recepcionistas y hace una mueca con sus labios cuando una de ellas le da un coscorrón* y se aguanta las ganas de sonreír, pues probablemente lo conocen desde hace tiempo y le tienen esa confianza. Mira a las mujeres y esboza una sonrisa cordial.

-Buenos días. Mi nombre es ... Antye Tausch y mi compañero ... Zackarias Bell. Estamos buscando a dos niños en particular... -procede a describirlos lo mejor que puede, tanto su personalidad como apariencia física-... Queremos... ayudarlos.

Ya había mentido ayer, por lo que no se siente cómoda al decir la verdad a medias. Sólo espera que no hagan muchas preguntas, mas mientras responden ella sigue ingeniando alguna respuesta por si llegan a cuestionar sus intenciones.

La mujer te mira con ambas cejas arqueadas y una expresión de cansancio - Jessy, después hablamos, voy a atender a la señorita y a... - frunce los labios, os hace una señal para que la sigáis. Entráis a lo que parece ser un despacho, algo pequeño y decorado con fotos de los que supones que son los niños del orfanato. Se sienta en una y suspira cansada. Antes de decir nada, se fija en ti con los ojos entrecerrados durante unos pocos minutos, como si mirase dentro de ti - bueno, creo que eres buena chica... - dice al fina mientras se deja caer en el respaldo. Después fulmina con la mirada a Zacharias, que este se hace el distraído mirando las fotos - soy Alicie Lewis, un placer querida. Me gustaría saber antes que nada a que te refieres a que quieres ayudar a esos niños... - entrelaza los dedos de las manos y te mira expectante, como si te estuviese haciendo un examen. 

La pelirroja realiza una reverencia cordial y sigue a la mujer con Zack a a su lado. Mira de reojo al chico conforme avanzan esperando que le brindase ayuda, pero él se muestra evasivo y opta por guardar silencio.

Al llegar, Wendy examina las fotos por si reconoce a sus hermanos y algún personaje de los cuentos que ha leído,pues John y Michael no son los únicos que podrían estar en dicha situación. Cuando se presenta y realiza la pregunta, la joven agradece que ella sea una mujer reponsable que no deja entrar a cualquiera y decide no mentirle... mucho. Deja escapar un suspiro para relajarse y le mira a los ojos.

-Un placer... señorita Lewis. Perdone mi atrevimiento, pero... ¿Alguna vez se ha sentido fuera de lugar, como si no perteneciera aquí? ¿E igual que quisiera dar vuelta a la página, pero no sabe cómo? ... En nuestra escuela... nos encomendaron ayudar a otros como un proyecto. Zack y yo decidimos venir aquí y auxiliar a esos niños como parte del programa. No nos dijeron sus nombres porque... es nuestro deber descubrirlos.

Guarda silencio apenada por mentir. Le gustaría decirle la verdad, pero no sabe si ha "recuperado" su identidad o parte de los recuerdos. Mira a Zack cuando el haya regresado su atención pidiendo ayuda sin hablar.

Al decir esa "mentirijilla" las reacciones de ambos son peculiares: Zacharias te mira y se lleva una mano a la cara y resopla; Alice arquea las cejas y sonríe divertida -no tenía ni idea de ese proyecto, supongo que tendréis algún permiso o algo - suspira y te das cuenta de que esta cansada, muy cansada - mientes peor que él- señala durante un momento a Zacharias- la escuela siempre nos avisa de cosas así, voluntariados y proyectos con los huérfanos... Pero sobre este no tenía ni idea y además que tu amigo Zach no vendría aquí por un trabajo de clase - chasquea la lengua y sonríe - no quiere oír mi sabios consejos, que desagradecido- oye como lo dice "lastimera".

El muchacho suspira y se cruza de brazos, molesto - en cualquier caso, ¿ hay algún chico que últimamente actúe raro? Que diga que tenga sueños extraños o que no es de Storybrooke... - tuerce el gesto, esperando la respuesta de la mujer.

Esta se acaricia la barbilla, algo pensativa - Bueno... algo así, hace unos días nos trajeron un muchachito. Tiene unos 8 años de edad y estaba asustado y perdido. Su nombre es Michael Darling, pero no hay ningunos Darling ni aquí, ni en los alrededores. A parte de que es bastante fantasioso, dice que viene de Nunca Jamás o algo así... - suspira y os mira con ojos cansados e impacientes - ¿a eso te referías? si queréis verlo está en la planta de arriba, en la habitación 102. No tardéis mucho... a ver si vosotros le animáis, el pobre está muy decaído. Pero que conste que es un favor personal, 5 o 10 minuto, nada más. 

Zach antes de que pudiera decir algo más la mujer, te coge de la mano y tira hacia la puerta - muy amable Alice, siempre un encanto - dice esto último con algo de sarcasmo, mientras te saca del despacho y el sale detrás de ti cerrando la puerta. 

Al final no habíamos podido hablar mucho y me había quedado dormida, eso sí, con la caperuza roja. Le había preparado la habitación de Zac y ambas nos habíamos quedado fritas después de cenar.

Buenos días le dije, aún adormilada. como has dormido?? te parece que prepare algo para desayunar? Me levanté y me dirigí a la cocina.

Una vez allí preparé algo de café. te gusta el café? para desayunar tengo tortitas, tostadas, cereales, que te gusta? le pregunté con un tono cordial tratando de ser amable.

Por cierto, al final ayer estábamos tan cansadas, que nos fuimos a dormir sin ni siquiera hablar un ratito, pensarás que soy muy mala anfitriona. jejejeje.  Que te ha hecho venir a este pueblo? le pregunté sin quitar la sonrisa de mi cara.

Las mejillas de Wendy se colorean por el descubrimiento de la mentira. Es demasiado obvio que esa mujer sabría que no era la verdad, pero respira mejor cuando Zack intenta desviar la atención hacia él y al escuchar el nombre de Michael se sobresalta, llevándose una mano a la boca Y bajando la mirada para que no viesen su reacción.

Es jaloneada por Zack, pero antes de salir del despacho logra decir un gracias sutil, apenado y feliz. Otro día se disculpará mejor con ella, pues no alcanza a decir algo por la sorpresa y salida rápida de ello e igual por notar cansancio en el rostro de la mujer, tal vez por trabajo y estrés.

La joven no habla en todo el camino, preparándose para lo que ocurra cuando lo vea. Mira a Zack y se colorea más por la metida de pata que hizo hace unos instantes. Será buena en la escuela y cuidar niños, pero mentir es otra cosa.

Ansiosa, Wendy recorre el camino a prisa para llegar rápido, solo tienen unos minutos.

Llegas a la habitación indicada y abres la puerta. La habitación es blanca y sencilla, con pocos adornos. Hay un sencillo escritorio, totalmente despejado y un pequeño armario a uno de los lados. Entra bastante luz natural de la ventana que hay al fondo de la habitación. Al otro lado hay una cama de niño, aún desecha. Sobre ella hay un niño sentado, cabizbajo, mirando a sus pies. 

Cuando oye que entráis, alza la cabeza y abre mucho los ojos al verte. De un salto se abalanza hacia ti para abrazarte. hunde su rostro y puedes escuchar como comienza sollozar. 

Al ver a su hermano menor, Wendy no puede evitar que su nariz se irrite, la garganta se le haga nudo y sus ojos se humedezcan: Michael está en Storybrooke, triste y sin que nadie le comprendiese.

Abraza al infante con tanta fuerza que comienza a llorar un poco por la emoción de volver a verlo. La sangre llama, y ella agradece que esté bien y no abandonado o con malos padres.

-Michael...-su voz es quebrada y débil, sus lágrimas le impiden articular de manera correcta-¿Estás... bien? Perdón por.. no estar... contigo... Oh, Michael...¿Qué pasó?

Iba a preguntar por John, pero considera no sacar a colación que desconoce su paradero. Voltea hacia atrás para mirar a Zack y cob su rostro enrojecido por el sollozo le agradece con los labios.

Me despierto sudando y alterada sin saber muy bien donde estoy, así que me cuesta asimilar que sigo en aquella mansión, con Erick. Me incorporo y me pongo de rodillas, intentando guardar cada recuerdo de mi sueño.
Entonces, recuerdo por el motivo que estaba en ése lugar ¡Zack! Miro a todos lados ¿Qué hora sería? ¿Podría bajar ya o aún no?
Comienzo a pensar entonces en Eileen ¿Qué sería de ella? Cojo mi teléfono y sin siquiera fijarme en la neblina que había fuera, marco su número de teléfono.

Escuchas la llamada de tu teléfono móvil. Cuando miras de quien se trata, ves que es Dylan. 

Zach sonríe y sale de la habitación para dejaros a los dos solos. Michael levanta la cabeza y te mira con ojos brillantes, llenos de lágrimas. Escuchas como intenta hablar pero sin querer empieza a hipar- Wen-dy ¿d-d-dónde estabas? - se pasa la manga del jersey que lleva por la nariz, ya que esta empieza a moquear - ¿dón-de estamos? - coge un poco de aire para intentar tranquilizarse y poder hablar sin soltar pequeños hipos - estábamos en Nunca Jamás y tu y Peter desaparecisteis y otros niños perdidos también. Ahora John es el nuevo Peter Pan... pero- empieza a arrugar la nariz intentando no llorar más- Nunca Jamás sigue muriendo y... y... algo pasó y me desperté en un bosque y alguien me encontró y me trajo aquí...- vuelve a abrazarte con fuerza, temiendo que volvieses a desaparacer.