Partida Rol por web

Darra recuerda que puede tener bombas dentro y aunque lo haga a lo burro tampoco le pega, solo fuerza la cerradura.

El doctor comenzó a reír estridentemente -¿Suicidio? La decisión de huir o luchar son iguales al final, aquel rey marino ha sido impactado por dos cañonazos y la explosión del otro barco, y aun tiene energía para continuar-

Mira al Mint y al Gyojin -Es bastante simple decir a tus compañeros que bajen, sin estar dispuestos ustedes mismos a hacerlo, es simple lo que propongo- alza su voz -Si vamos a luchar, todo aquel que pueda sostener un arma debe bajar, eso claro me incluye y esperemos por nuestras vidas, que su panza no sea morada-

Se pone en pie y empuña su pequeño bisturí quirúrgico -De otro modo nos arriesgamos con el mar y echamos a la suerte nuestro futuro-

- Oh, síiiii - con una sonrisa muy satisfecha me hice con un par de bombas saqueando el cuerpo inconsciente de Rathy - te los devuelvo luego, Rathy, ahora tengo algo que hablar con el cangregito - mi mirada fue hacia la puerta de la bodega.

- Me voy a la bodega a ver si queda algo del trovador y, de paso, a mirarle la panza al cangrejo. Ese bardo aún me debe mi melodía, no morirá antes de que me lo haya tocado. Oh, pero antes...

Cogí el cofre y lo aparté de Darra.

- No, Darra, mala, dentro hay bombas, ¿quieres romper mis preciosas bombas? - dije echándole la bronca - ¡Ayrina! Siempre nos echas la bronca a Rathy y a mi por hacer explotar las bombas en cubierta. ¡Bronca para Darra! - dije señalándola.

Después, eché a correr hacia la bodega dejando el cofre en la entrada de la bodega.

- EY... quiero abrirlo... - la sigue a la bodega, a ver que quiere hacer la niña con eso.

Con una más que posible explosión evitada por la maestra de los explosivos Rin Flare al volver a recuperar para sí misma la caja con las armas de fuego y las bombas que ella había colocado ahí dentro, la jovencita artillera bajó las escaleras hacia la bodega y muy cerca de ella, fue Darra Mael.

Ya que dos personas se habían aventurado a bajar por su propia cuenta no parecía que hiciera falta que nadie bajara obligado, algo que alivió a todos los presentes, o al menos al maestro de las bestias que se dirigió directamente a la puerta de entrada hacia las escaleras y por tanto la bodega y la bloqueó con una tabla.

-Por si acaso se arrepienten. De ahí abajo no volverán si no cantan el color. -Comentó mirando al resto de los presentes- Y ahora, hablemos del nuevo capitán. Creo que yo soy la mejor opción. Y puedo explicarlo: 1. Si no me votáis os lanzo por el agujero con forma de cangrejo. Y listo.

-PUES YO NO SECUENCIO AL MOCION, LA CAPITANA DEBERIA SER MARI, QUE CLARAMENTE ES DE LAS MAS VALIENTES DEL GRUPO.

Grito Sylphie desde arriba del carajo.

-O KAZE SI SIGUE VIVO, QUE TOCA LA MUSICA QUE ME GUSTA.

Me incorpore de mala manera, ay ay, esto duele. Dije con un tono de voz inestable y lamentero. Me apoyé contra una pared, cuando me vi todo golpeado y magullado. Supongo que el cangrejo me derribo, ¿Qué ha pasado con el cangrejo? Pregunte lleno de dudas.

Suspiro resignado al ver a sus compañeras bajar, pero luego vio el comportamiento del sapo y su amenaza, respondió con una sonrisa en la cara -Bien, pues tendrás que arrojarme abajo, porque no estaré a las ordenes de una babosa cobarde- no se inmuto ni un poco por sus palabras -Mari es sin duda la mejor para ser nuestra capitana, la mayoría corrió al enfrentar a la bestia y ella se quedo para asegurar su retirada-

Luego miro a los presentes -¿Quién de ustedes está de acuerdo con las palabras y actos de esta alimaña?- continuo hablando empuñando su arma y esgrimiendo su sonrisa.

Si uno de ellos no va a seguir mi mando, entonces no me importa luchar para dejarle bien claro quien es el jefe aquí. Relamiendome los labios me pongo en posición defensiva a la espera de que Victor Steiner haga el primer movimiento y si no lo hace, no dudaré en hacerlo yo.

-Si quieres ir abajo, te tiro abajo ya mismo. -Comenté sin dudar.

Una vena se hinchó en mi frente -EH?- aquél maldito cobarde iba a irnos de listo después de abandonarnos a nuestra suerte en el barco Marine? y encima se hacía el chulo? NOS ESTABA tomando el pelo??. Como se atreviese a tocar a alguien, de un puñetazo con mi guante modificado al traidor cobarde lo tiraba por el agujero.

-Pues ven por mí, pero te advierto si caigo abajo vuelo el barco- le sonrió y preparo mi ataque -no temo a la muerte-

    Aunque un arranque de derrotismo absoluto me había entrado hasta la medula, las palabras de mis compañeros poco a poco me fueron devolviendo las energias de seguir viviendo y con ello, el orgullo Deepsea.

    C-con que así es que piensas mancillar el orgullo de la banda de Belleville, d-dejando a su suerte a tus compañeros... intentando robar la tajada mas grande del pastel - mientras poco a poco me iba levantando, usando aquella espada flamífera casi como un bastón la cual dignamente levantaba a modo mas como símbolo que de arma en realidad - si...siendo la peor c-clase de alimaña que puede habitar estas aguas... una Criatura sin lealtad.

   Girando levemente hacia señor Bigotes.

   T-te-tengo l-la cabeza s-suficientemente vapuleada como para no poder calcular bien, pero... s-si le damos de comer al cangrejo a este señor, ¿ c-cuanto tiempo nos daría c-como para llegar a los botiquines y s-suministros?.

    Q-quizas n-no sea la mas fuerte.... ni la mas d-diestra -  ondeando mi cabello al viento, el cual parecía dibujar una bandera totalmente ondeada -  pero prometo como la capitana Interina que a quien me ayude a sacrificar a Wip, le dejare hacer TT sin asco - mientras mantenia una determinada mirada, que combinada junto a la postura y la escena, no importaba que tanto me hubiera dañado la vida, el nomble y descastado encanto Deepsea seguía tan imponente como se podia esperar.

Sylphie aplaudio desde lo alto.

-SIIII LARGA VIDA A LA CAPITANA INTERINA MARI, NO ESTOY DE ACUERDO CON SACRIFICAR A COMPAÑEROS, PERO QUERIA HACERSE CAPITAN POR QUE SI, DESPUES DE HABER HUIDO, ESO ESTA MUY FEOOOO BUUUUUU

Abucheo a Whip desde su palco particular, si hubiera tenido algo, seguramente se lo hubiese lanzado, y seguramente hubiese fallado estrepitosamente...

Mientras Victor Steiner se quedaba relegado a ver qué hacían, Ayrina Prya no parecía tener tanta paciencia como para tolerar a un abusón. Por lo que esta se dispuso a darle un potente derechazo para zanjar las cosas de una vez.

Por desgracia para esta, y por suerte para el atacado, William Wip fue capaz de dar un poderoso salto con sus ancas de rana y evitar por completo el ataque que le habían lanzado a traición.

Ellos habían empezado a atacar así que no tuve ningún remordimiento para atacar de vuelta a ellos, centrandome en Ayrina Prya que había sido la primera en venirme a atacar, luego me centraría en atacar al resto de ellos si es que después de terminar con la chica pollo aún querían seguir luchando.

-¡Tu caerás primera!. -Grité mientras mi lengua salía contra ella para golpearla como un látigo.

La lengua de William Wip dio un quiebro en el aire cuando Ayrina Prya estaba a punto de bloquearla, esquivando así por completo aquellos guantes mejorados que tenía la joven Skypiean, y terminando por impactarle de lleno en el rostro tirándola al suelo.

Las heridas que Victor Steiner le habían tratado se volvieron a abrir, por lo que volvía a estar en peligro de desangrarse si nadie hacía nada. Aunque podía aguantar un poco más, al menos hasta terminar el combate.