Partida Rol por web

[P.L.1] Policía Local de Llanura del Buenpaso.

Capítulo 7. Algún día del Mes de Junio.

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05/12/2018, 16:23
Narrador

Lo cierto era que ya llevaban algunas semanas de convivencia y la verdad es que hacían una pareja perfecta. De no ser porque a ambas les gustaban los hombres, casi podrían ser pareja de hecho, pero no era así. Al menos de momento. Habían tenido suerte la una con la otra. Pese a que sus caracteres eran bastante diferentes, compartían algunos hobbies y en general se llevaban muy bien. Por otra parte, en los ratos que necesitaban intimidad, se respetaban la una a la otra. La casa era lo suficientemente grande para ambas.

Eran una sociedad perfecta. En lo que una fallaba, la otra lo compensaba y viceversa. Una cocinaba bien y era muy ordenada, mientras que la otra era una manitas y le quitaba mucho trabajo a los operarios que estaban reformando su casa. Sobre todo detalles, instalación de alguna lámpara, pintura en las paredes o cubrir algunos agujeros de la pared con masilla, eran cosas que Aina sabía hacer y que además disfrutaba haciendo.

Coincidió en que la semana libre de María y Aina trabajaba de mañana. El viernes de esa semana se celebraba una reunión en el club al que la familia de Aina solía ir. La madre de Aina le había dicho que no podía faltar y casi le había obligado a que fuera con un vestido de gala que le regaló unos días atrás. Se había puesto muy pesada y aunque Aina no tenía demasiadas ganas de asistir, parecía imposible encontrar una excusa perfecta.

Se lo comentó de pasada a María la noche anterior. Estaban jugando al Call of Duty tras cenar de pizza y ver la última de Starship Troopers, en concreto la sexta entrega. Mucho mejor que las cinco anteriores películas, pues tras unos años sin sacar nuevas entregas, en el 2020 y ahora en el 2024 habían sacado dos nuevas películas con mucho mayor presupuesto, mejor rodadas y con un reparto y un director de mayor calibre.

María le dijo de broma de acompañarla al Club de Campo. Ambas se rieron al momento, pero lo que en principio nació como una simple broma entre ambas, fue cogiendo fuerza hasta convertirse en una opción muy real. Ropa adecuada a María no iba a faltarle, el armario de Aina estaba lleno de modelitos que su madre año tras año se empeñaba en regalarle. De hecho iba a ser una buena oportunidad para que María conociera a la familia de Aina y también a alguno de sus amigos.

Notas de juego

Ahí os lo dejo... Con esta excusa podéis rolear bastante acerca de vosotras.

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05/12/2018, 22:20
Aina Vallespir

Sí, María lo había soltado como una broma, pero a Aina se le iluminaron los ojos.

Si ella viene será mucho más llevadero 

Esta idea cruzó por su mente y decidió que sí, que Mami iría con ella a aquella fiesta. 

-Vamos, te dejo escoger el vestido que quieras. Si yo he de ir con tacones tú no te libras.- Le agotaban aquellas fiestas, además estaba segura de que su madre no se cortaría en darle consejos o intentar emparejarla con alguno de los chicos socios del club. Maldita manía La quería, pero prefería mil veces el carácter de su padre al de su madre.

Llegaron al cuarto de Aina y llevó a María hasta el amplio vestidor. Allí habría de todo, zapatos, vestidos, bolsos... algunas prendas parecían muy caras, pero a Aina no parecía importarle en absoluto que María hiciese uso de ellas.

Algunos de estos vestidos eran:

Notas de juego

Algunos de los vestidos (pero puedes escoger uno que quieras tu por internet si ninguno de estos te convence)

 

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09/12/2018, 00:19
Maria Mabel Miranda

Hacia tanto tiempo que no salia a una fiesta y no recordaba haber ido sin mi familia que aquello era todo una novedad. Al final me sentia algo avergonzada y fuera de sitio pero ella asintio quien era yo para negarme.

No tenia ropa ni zapatos pero Aina tenia todo lo que podia necesitar asi que despues de darme un baño de Reina comenzo el desfile de vestidos:

 

Al final escogia siempre el negro sencillo. No queria destacar mas que ella y no me hacia ver gorda.

Consegui un par de zapatos que hacian juego con el bolso y luego unos pendientes y estaba lista.

- Cabello suelto o recogido?

Ahora dudaba de haber escogido el gris, pero la falda era mas corta y era mejor el negro. Si claro que si.

- Mira que hace montones de tiempo que ando en tacones asi que no te me alejes mucho porque si bebo me vas a tener que cargar.

Y asi pasamos el dia probando y bromeando.

- Seguro que en esa fiesta encontramos el amor de nuestras vidas. Que crees, jamas podria revelarle que fui con un vestido prestado, que pena!!!!

- Bueno, si tu madre o alguien te quiere emparejar con algun ricachon de dentadura postiza entonces le dices que somos pareja y ya, ja ja ja ja, ya me imagino el alboroto en la fiesta, de seguro que seras el centro de atraccion el resto de la noche, ja ja ja ja ja...

Luego bromee un poco mas porque entre ser su pareja y ser su cocinera, preferia ser su pareja y ahora que lo pensaba en estos ultimos dias estabamos subiendo de peso.

- Creo que tendremos que hacer mas ejercicio amiga, aunque me encanta cocinar creo que estamos subiendo de peso, Dije al final preocupada pero bromeando.

- Nunca dejaste algun novio por ahi suspirando por ti?

Aina era muy reservada en contar sus cosas aunque por lo general yo tampoco dejaba de preguntar y no me importaba si no me respondia directamente o salia con evasivas. Tarde o temprano se abriria contarme todos sus secretos y entonces podria ganarle en el PlayStation.

Sonrisa mental diabolica.

Notas de juego

Perdon por la demora pero queria poner algo consistente y como somos nosotras dos...  =P

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09/12/2018, 02:27
Aina Vallespir

Era la primera jornada de chicas de su vida, de aquellas en las que se dedicaban a arreglarse, y lo cierto es que no había sido tan desastroso como había imaginado. Gracias a que iba a acompañarle María le puso más empeño, contratando a dos trabajadoras de peluquería para que les hiciesen las manicura y pedicura, con el esmalte de uñas incluido, y para que las peinasen también. Sabía el nivel que se gastaban en el club de Campo, y aunque a Aina le encantaba provocar no quería que  María se sintiese incómoda.

-¿Podría ser algo entremedio? Ni recogido ni suelto del todo. ¿Salvaje pero sofisticada?- Estaba segura de que María causaría sensación en la fiesta, y no solo por ser novedad, si no también porque nunca antes Aina había llevado a nadie. Además MaMi tenía estilo, estaba segura de que iba a divertirse.

-Por los tacones ni te preocupes, si nos apetece nos los quitamos y vamos descalzas- Sonrió muy levemente, con una de esas expresiones que tanto confundían a todos, pero que María ya estaba aprendiendo a identificar como que había más verdad que broma en aquella afirmación, pero que por algún motivo Aina disfrutaba divertida imaginando aquella situación. 

Ante la broma del vestido y lo del amor de sus vidas... bueno, Aina imaginaba bastante bien a quienes iban a encontrar allí. Sus padres, como no, tal vez algún familiar más, los habituales y tal vez alguno de los que no acudían a todas las fiestas, como ella en esta ocasión.

-¿El amor de nuestras vidas?- Negó para si misma - Tal vez - Dijo, aunque estaba segura que no sería el suyo propio -Si lo encuentras no le digas lo del vestido, pero cuidado, a las doce se convertirá en calabaza... - Y rió un poco mientras miraba el modelito de su compañera -...El chico, por supuesto- María estaba despampanante, el negro le sentaba fenomenal. Aina por su parte había escogido el vestido rojo. 

Cuando MaMi le dijo que podía decir que eran pareja a Aina le brillaron los ojos y sonrió de un modo que a María le pondría los pelos de punta ¿lo estaría valorando de verdad? -No todos llevan dentadura postiza. Aunque algunos además de los dientes también llevan pelo postizo - De todo había, viejos chocos, mujeres polioperadas, pero también jóvenes apuestos.

Se cogió la barriga entre los dedos, pinzándola para valorar cuanta grasa había allí alojada. - Bueno, no te preocupes, comeremos más verdurita...- comentó mirando de reojo a Mami, pues en ella fiaba mucho a la hora de elaborar los menús -Y además, dónde están empezando ahora las obras irá un gimnasio- los ojos le brillaron, claramente ya tenía ganas de que lo terminasen, era una adicta al ejercicio. - No será por facilidades, entonces- Y le dio un toquecito con el puño en el hombro a su amiga, sonriendo. Sin embargo, al preguntarle por algún corazón roto que dejase en un pasado, el rostro de Aina perdió aquella animosidad, bajó la mirada al suelo y volvió a ponerse seria. No respondió nada a aquello, simplemente se dedicó a introducir en su bolso todo aquello que creía podría necesitar. -Mierda, siempre los hacen tan pequeños que a penas te caben las llaves de casa- Cambió de tema.

Después de pelearse con el sistema de cierre del bolsito, y de decidir dejar algunas cosas que en un prinicpio había prentendido llevarse, un asunto de pura física, si no cabía no cabía, volvió a mirar a María. -Estas deslumbrante. ¿Lista?- 

Realmente no le había explicado demasiado sobre el Club ni de la gente que allí había, no quería sentar prejuicios en MaMi hacia nadie, después ya verían si estaban de acuerdo en las impresiones de cada una.

Notas de juego

Tranqui, la espera vale la pena ;)

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09/12/2018, 23:19
Maria Mabel Miranda

Habia sido un tiempo agradable que no habia compartido con nadie mas y casi podia esperar a nuestra proxima salida juntas para volver a pasar por esto de nuevo. Que te atendieran como una reina con peinado y manicure era algo que nunca habia hecho en casa y me asegure de que Aina no pagara por todo.

Luego vi como brillaban los ojos de Aina cuando.... y sonrei extrañada. Tal vez habia visto algo que no esperaba o sentido algo que tal vez.... sera???? No no podia ser... Y si???

Bromeamos sobre los invitados y demas, hasta que llegamos a mi pregunta indiscreta y supe que habia metido la pata. Aina se introvertio mas si eso era posible. Siempre tan seria y cuando lograba abrirse de esa manera me hacia feliz porque conocia a la verdadera a Aina y entonces venia la Maria la indiscreta con su preguntadera.

- Lo siento Aina. No tienes que decirme nada y te prometo no volver a preguntar, soy medio loca a veces y preguntona. Entonces la abrace para asegurarme de que estabamos bien. No queria que se dañara el dia por una tonteria y me asegure de cerrar la boca asi que mantuve el abrazo hasta que senti que me correspondia. Era extraño pero agradable como se fundian nuestros cuerpos.

Cuando nos separamos ella comenzo a pelear con su bolso.

- Verdad!!! Casi lo olvido... te compre algo, bueno para las dos.

Saque del bolso dos paquetes de una piezas de encaje.

- Tienes que ver lo que son, son una maravilla.

Saque una de su empaque y me la coloque en el muslo para luego poner la identificacion e incluso el movil.

- Que tal??? Esta es para ti!!!

Ahora podiamos llevar un bolso mas pequeño y ser discretas. Despues de eso estaba lista para salir.

Notas de juego

Pregunto. Es esta escena la van a llevar los master, es decir podran suceder cosas inesperadas o sera enteramente de nuestra creacion o podemos incorporar cosas?

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10/12/2018, 01:14
Aina Vallespir

María notó su evasiva a aquella pregunta y la abrazó. Aina se quedó como un palo una vez más, desde luego no estaba muy acostumbrada al contacto y, aunque se iba acostumbrando a las muestras de afecto de su compañera, todavía le pillaban desprevenida casi siempre.

-No.. no.. no es culpa tuya. No has hecho nada malo...- Apretó los labios. Tal vez algún día sería capaz de rememorar todo aquello sin que le doliese tanto. Tal vez en alguna ocasión fuese capaz de reconocer lo que había significado para ella y lo que conllevaba para su vida. - No tienes que cambiar por mí- Dijo a María mientras sus hombros se relajaban. ¿Qué derecho tenía ella de hacer que María no fuese ella misma? Eso era precisamente lo que algunas personas pretendían hacer con Aina, y no estaba dispuesta a parecerse a ellas en ese aspecto, en absoluto.

Cuando María sacó aquellos dos paquetitos creyó que se tratarían de medias, nunca recordaba aquello de que era importante llevar un par de repuesto, pero de hecho siquiera se las había puesto, hacía demasiado calor para su gusto como para ponerse unas medias. Después comprendió lo que era, cuando MaMi se puso una, porque jamás antes había visto nada parecido.

-¡Joder, eres una chica preparada!- exclamó sorprendida y curiosa por la novedad - Es un gran invento. Gracias- Y sonrió con sinceridad a María, parecía incluso feliz, algo que pocas personas podían decir que hubiesen provocado en Aina. Se puso aquella pieza de encaje, que le recordaba tremendamente a un liguero, pero de serlo era propio de una espía. Encajó su móvil contra su muslo y asegurándose de que estuviese de modo que no se marcase en el vestido. -Genial- Ahora podía llevar más cosas, a pesar de disponer de un bolso miniatura. ¿Por qué estarían mal vistos los bolsos grandes en los eventos de alto copete? Porque podría robar los ceniceros rió para sí misma.

-María, te voy a dejar mi juguete más preciado. Ruge, vibra, y si te van las máquinas te va a dar un orgasmo- sonrió de medio lado imaginando lo que podía estar imaginando su amiga. Entonces le tiró unas llaves de coche, un Audi - Mi padre cambia de coche más que mi madre de bragas, son su debilidad, qué se le va a hacer. Así que el año pasado le pedí que me diese el viejo, en vez de venderlo- Llegaron al garaje y allí un precioso Audi TT RS Roadster, gasolina, les esperaba. Era de color gris y estaba limpio como una patena, cuidado, se veía nuevo. -A la vuelta lo llevaré yo, así puedes beber lo que te apetezca. ¿Estás de acuerdo?- 

Solo por venir al Club ya te lo has ganado, más si vas a ser mi novia.

Una vez dentro del coche, el cual solo tenía dos plazas, Aina le explicó lo necesario para que María pudiese llevar el coche. Al arrancarlo ya sentiría su motor, el cual no hacía falta que cogiese mucha velocidad para que diese un subidón de adrenalina.

 

 

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10/12/2018, 01:39
Aina Vallespir

Notas de juego

Algunas imágenes del coche, para que te hagas mejor la idea si cabe. Lo he tenido que poner en otro post pq la web me ha dado algunos fallos.

 

En cuanto a lo de la escena, yo creo que los másters nos irán diciendo cosas. No creo que sea solo para que hagamos y deshagamos nosotras, aunque supongo que aportar cosas sí (si los jefazos no opinan lo contrario). Yo de hecho no veas lo que me invento xDDD dentro de que vaya acorde con mi pj y su transfondo, claro, o lo intento. ¡Si me paso dadme una colleja sin problemas!

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10/12/2018, 02:02
Maria Mabel Miranda

- UN TT!!!! Grite de emocion al verlo.

Aquello podia ser equivalente a una niña entrando a Disneyland.

Me quite los zapatos para acomodarme en el asiento y encender el motor. Antes habia pensado que Aina bromeaba y ahora me daba cuenta de que tenia razon. En lo que tomara una curva con ese auto iba a tener un orgasmo.

El TT era ya 4x4 asegurandote un agarre y respuesta de transmision unico, pero la serie Roadster era superior, con una disminucion en altura y mejor aerodinamica te aseguraba respuestas en curvas muy superior a autos de mayor cilindrada. Era una delicia y me di cuenta que ibamos a llegar tarde a esa fiesta porque no habria fueza humana posible que lograse que me bajara de ese auto.

- Cierra los ojos... Y acelere a fondo exprimiendo todo el poder de ese motor.

Era el momento de enseñarle al mundo quien era Maria Miranda.

- Yujuuuuuuuuu.... no vayamos a la fiesta Aina, quedemosnos a vivir en este auto.....

Al final nada duraba para siempre y aunque pasamos un par de sustos logre controlar el auto y es que no habia forma de perder el control. Ese auto era unico. Adoraba ese auto desde que lo habia visto hacia mas de 15 años y nunca habia podido tomar uno en mis manos.

Si dios queria llevarme al cielo ese dia me daba por servida.

Finalmente llegamos a la fiesta y tuve que peinarme un poco pero no me importo.

- Aina, tengo que cambiarme las bragas, estoy empapada, nunca me habia excitado tanto. Gracias a ti....

Aun sentia los brazos temblorosos sosteniendo el volante, y es que no queria soltarlo.

- Sacame de aqui Aina, y hazme beber porque si regreso yo conduciendo no llegaremos a casa, tendran que irnos a buscar a Portugal o mas alla, no se. Fuuuuuui! Que delicia.... Lamento si te despeine! Dije para ayudarla a peinarse y que la sangre circulara de nuevo por mi cuerpo.

- Gracias Aina, no sabes cuanto te lo agradezco y a tu padre tambien, por supuesto no le dire nada, pero si le dijo suegro no se molestara verdad? Ja ja ja ja, vamos, que quiero tomarme algo o regresare al auto.

Y le entregue las llaves despues de ponerme los zapatos de nuevo.

Notas de juego

Un TT por Dios!!! Ese auto es maravilloso, a veces creia que estaba sola en el mundo hasta que te conoci, no puedo creer que te guste el TT y juegues Playstation. Ya no estoy loca. Solo equivoque el pais!!!

Ja ja ja ja, puedes poner todo lo que quieras sobre el TT, es un auto divino y que adoro. Nunca conduje uno, solo en video juegos y es excepcional de verdad. Gracias por recordarmelo.

 

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10/12/2018, 10:55
Narrador

A medida que se acercaban al lugar de encuentro vislumbraron desde lo alto de la colina por donde discurría la carretera, lo que era el complejo del club de campo. María quedó ilusionada con aquella primera imagen. Se trataba de un lugar de estética rural, pero se intuía el lujo que luego confirmaría. Desde allí pudo observar varios edificios, una zona de terraza con varias mesas y una piscina en la que apetecía bañarse.

Aina le explicó que a parte de lo que se veía a simple vista, el club contaba con caballerizas, una zona de monta y hasta una pista de polo. El señor Zanjofer, presiente del club y principal sustento económico del mismo, organizaba cada año varios eventos para amigos suyos procedentes de Alemania, Gran Bretaña y otras partes del mundo. En septiembre, cada año se jugaba en el club, la copa Zanjofer de Polo, en lo que era un evento multitudinario de ricachones de toda Europa.

Llegaron al club antes de las 21 horas. Sin embargo, como había pronosticado MaMi, llegaron tarde, pues la madre de Aina le había dicho que tenían que estar sobre las 20 horas, pues era cuando llegaba el señor Scpencer, socio de su padre y quería que estuviera allí para preséntaselo.

Cuando accedieron al recinto del club, todavía era de día y hacía un calor bastante asfixiante. Por suerte el aire acondicionado del audi TT de Aina, cedido amablemente por su adinerado padre atenuaba esas molestias estivales. Sin duda y aunque a Aina le costase admitirlo, en ocasiones era bueno ser una “niña de papá”. Todos aquellos lujos, la casa, el coche y la ropa, eran cosas que sin ir más lejos, nunca había soñado su ahora compañera de casa.

En la entrada de la finca Son Coll, donde se encontraba el exclusivo club al que pertenecía la familia Vallespir desde su fundación, se encontraba un mozo vestido de etiqueta. Aina y María se bajaron del vehículo en la entrada y sería aquel empleado quien aparcaría el audi en el aparcamiento del club. Las dos chicas con radiantes como el sol con sus lujosos vestidos se internaron a través del arco del muro exterior hacia el interior de la finca.

Enseguida accedieron a la terraza con mesas que habían visto desde la carretera. Allí se encontraba gran cantidad de asistentes. Todavía no habían empezado a cenar. La gente acababa de llegar y estaban con los saludos. De vez en cuando pasaba algún camarero portando bandejas de aperitivos y montaditos de lo más cool, a parte de con copas de vino, champange y ofreciendo otro tipo de bebidas espirituosas en una barra. 

Allí se agolpaba todo tipo de personas. Hombres trajeados discutiendo de política o negocios, mientras aguantaban una copa. Parejas charlando de sus asuntos. Grupos de chicas jóvenes aprovechando el photocall. Algunas mujeres de mayor edad luciendo modelitos y operaciones de cirugía estética. Incluso algunos de los asistentes se encontraban en el centro de la pista y habían empezado a bailar. 

  

   

Aina conocía a todas esas personas, al menos a la mayor parte de ellas. Todas simulaban una simpatía extrema, todas reían y hacían broma con el resto de asistentes a los cuales no soportaban. Acababa de recordar, el porqué de que no acudiera tan a menudo como a su madre le gustaría a ese tipo de eventos. Fue entonces, cuando Aina estaba enfrascada en sus pensamientos, cuando fue asaltada por detrás y dio un respingo al escuchar una voz conocida.

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10/12/2018, 11:42
Marta Quetglas

¡Oooh! - Escuchó el ulular familiar que su madre llevaba a cabo para tratar de empatizar con el resto de "pavos reales" que se arremolinaban a su alrededor.

Allí estaba su madre. Maquillada hasta la saciedad. Lucía unos pendientes de diamante a jugo con una gargantilla. Por supuesto ella también había pasado por la peluquería. Lucía un vestido sencillo, de color granate hasta los pies y unos zapatos de tacón a juego. Pese a lo sencillo de su indumentaria, la tela era de extraordinaria calidad y el corte exclusivo. Sin duda alguna, por un vestido muy similar encontrado en zara o mango, habría pagado diez o quince veces menos. Pero aparentar era importante en aquellos círculos donde la señora Quetglas se movía.

¡Has venido! - Exclamó. - ¡Ya empezaba a dudarlo! Veo que te has puesto un vestido muy discretito. Es bonito, me gusta. ¿Te lo regalé yo? - Entonces simuló como si acabara de ver a María, pero sin duda alguna, ya la había detectado de una legua. - ¡Ooooh! ¿Y esta debe ser tu amiguita, no? ¿María, verdad? Soy Marta Quetglas, madre de Aina. ¡Me ha hablado tanto de ti! Cocinas bien me ha dicho.

Se acercó a María y le dio dos besos, pero sin llegar a tocar piel con piel. No quería que su maquillaje se estropease. El mismo procedimiento siguió con su hija, aunque a esta también le abrazó suavemente.

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10/12/2018, 11:50
Jordi Vallespir

- ¿Cómo estás, Aineta? - Preguntó su padre a la joven reluciente que acababa de irrumpir en la fiesta junto a una "plebeya". - Encantado... - Le dijo a María con una sonrisa y le dio un apretón de manos.

Jordi vestía con bastante sobriedad. Conjunto de pantalón y chaqueta azul marino oscuro, camisa clara bajo el mismo y corbata. Lo que se esperaba de un hombre como él, en una fiesta como aquella. Eso no impedía que aquel hombre sintiera calor, pues hacía mucho y sudaba. Los chorros de agua vaporizada que caían del techo ayudaban a bajar aquella temperatura, pero para nada eran suficientes.

¿Cómo va el trabajo? - Se interesó Jordi.

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10/12/2018, 16:28
Aina Vallespir

No pudo evitar sonreír cuando María descubrió el Audi y se emocionó tanto. Decidió no romper la magia del momento con palabras, simplemente siguió a María mientras se acercaba al coche, lo abría, contemplaba y admiraba su exterior, su interior... Sí, a Aina también le había gustado y por eso a su padre le había pedido que no se deshiciese de él con extraños. Su padre solía tener siempre dos coches, uno para divertirse y otro más serio. Estaba claro de qué tipo era el TT.

-¡Yuuuuu!- Gritó levantando los brazos en algunos tramos donde podían correr más. María era como una brisa fresca, tan alegre, jovial, incluso algo inocente quizás. El paseo fue divertido, pero debían aparcar. 

-Te dije que era un subidón- Reconoció a MaMi mientras ambas se recomponían el peinado. Después Aina se peleó con el vestido - Te juro que estuve pensando venir en tejanos hasta que decidimos que venías conmigo- Lo soltó mientras se estiraba la falda hacia abajo, con el ceño fruncido y refunfuñando por lo bajo como si estuviese forcejeando con los siete infiernos. 

-Mi padre no diría nada si le llamas suegro- sonrió un poco -es bastante enrollado, la verdad. Pero a mi madre igual la matas del infarto. Por el coche no te preocupes, si un fin de semana podemos nos iremos de ruta por toda la isla.- Y lo decía en serio. Hasta ese momento solo había compartido el coche con su amigo Daniel, otro loco de los motores, pero había que reconocer que María sabía moverse con el volante, además, por primera vez disfrutaba con la compañía de una chica.

Entró al Club de campo seria, algo tensa, como si algo allí pudiese darle cierta alergia.

-Si te tocan los huevos, tienes mi permiso para mearles los zapatos- Dijo a su amiga en un tono que daba a entender que era totalmente cierto.

Y ante el "Oooh!" de su madre primero puso los ojos en blanco y después forzó una sonrisa, algo tan poco natural que casi parecía una mueca algo terrorífica. Pues sus labios sonreían, pero sus ojos parecían odiar a la mitad de la humanidad.

-Hola mamá, pues claro que he venido, has sido tan insistente...- Se miró el vestido a si misma, parecía que al final había logrado recolocarlo en su sitio, no es que fuese sentada muy femenina en el coche. - Sí mamá, sabes que yo no me compro estas cosas...- Los dos vestidos que llevaban eran regalo de su madre, y poco le importaba si le molestaba que hubiese prestado algo tan caro. 

Después su madre pasó su atención por un instante a María y Aina dejó que interactuasen. María no solo sabía cocinar, además era mucho más encantadora que la pequeña de los Vallespir. Correspondió el gesto de los besos al aire de su madre, sabía cómo debía hacerlo y el leve abrazo pareció ablandar sus defensas. -Estás muy guapa, mamá- dijo con sinceridad.

En el saludo a su padre se mostró más efusiva, estaba claro por cual sentía preferencia, aunque más bien era que se parecían más. - ¡Hola papá!- Y le dio un abrazo al tiempo que lamentaba que los hombres hubiesen de ir así de abrigados en pleno verano. -Calor ¿e? A nosotras nos toca depilarnos.. a cada uno su tortura-  bromeó susurrándole para que su madre no le oyese. 

-El trabajo bien, al menos por ahora. Todavía estoy adaptándome a los compañeros. Por ahora todo tranquilo, pero tiempo al tiempo- Dijo asintiendo mientras miraba a su padre a los ojos, como si hubiese algo entre ellos que escapaba al resto.

-Con María es distinto, creo que nos compenetramos bien- Y le dio un leve toquecito con el codo en el brazo a María, un gesto poco glamuroso, pero era su forma de ser.

Notas de juego

Jajajaj, es muy chulo este coche. En general los Audi me gustan. ¡Aunque me gusta más la PS! xDDD

No es tan fácil entre chicas encontrar a otras con gustos así, pero haberlas hailas. De coches, por eso, ¡creo que tú sabes muchísimo más que yo! No soy muy apasionada de conducir, hay cosas que me vuelven más loca, pero un buen coche es un buen coche xD. Por cierto, tampoco he conducido nunca ningun TT xD ni subido, algún día tal vez.

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11/12/2018, 00:01
Maria Mabel Miranda

Luego de adecentarnos en el auto no aguante de reir mientras Aina luchaba con su vestido.

- Pero mujer que no es una faja, dejalo caer. Y la ayude a acomodar la falda.

- Listo, ya estas preciosa de nuevo, mira que si te desarreglas no vale de nada el peinado y lo demas y seguro tu madre dira que soy una mala influencia.

Ya esperaba que lo dijeran igual de todas formas. Aina parecia ser la oveja negra de esa familia, o tal vez el patito en el lago de los cisnes.

Habiamos entrado y los padres de Aina era lo que se esperaria de los padres de Aina. La madre con una formalidad principesca se movia alrededor como si la nobleza fuese una aura que la mantuviese bella y joven. Y tal vez era asi.

- Mucho gusto Señora, que pena lo que habra oido de mi, pero me encantaria cocinar algo para usted cuando usted disponga aunque de seguro habra probado manjares mejores, de seguro que si.

Luego su padre, mucho mas natural y accesible correspondio mi saludo como se espararia. En general eran una pareja dispareja y tal vez por esas diferencias tendria sentido. En todo caso Aina habia sido producto de aquella relacion y al final podria alegrarme de ello.

- Aina es una compañera estupenda, no dudaria un segundo de poner mi vida en sus manos como lo hacemos en nuestro trabajo cada dia, se nota que han hecho un buen trabajo con ella y deberian estar orgullosos. Y la tome de la mano mientras decia mi comentario siendo lo mas honesta posible.

Por ahora deje que la familia terminara de conversar. Ya tendria tiempo de interactuar con ellos si era necesario o de salvar a Aina que estaba segura que ocurriria tarde o temprano. Mientras miraba el club y sus alrededores. Definitivamente un lugar muy bonito que no me imaginaba haberlo conocido en otras condiciones.

Era bueno que Aina fuera mi amiga, me sentia muy a gusto con ella.

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11/12/2018, 08:36
Aina Vallespir

La mayoría de socios ya estaban por allí, algunos con acompañantes que no pertenecían al club, como María, otros de forma individual y la mayoría con sus esposas, maridos o novias formales.  Todavía iban llegando algunos, los que siempre llegaban más rezagados.

Ya en el interior del club, en su zona de estar al aire libre, habían dispuesto aperitivos en distintas mesas. También había una barra en la que un camarero iba cortando jamón al momento, otra con sushi que también iban preparando delante de los asistentes y una tercera en la que servían las bebidas, tanto refrescos como vino o cerveza, también mojitos y demás bebidas espirituosas.

Aina atrapó una croqueta de una de las bandejas que una camarera que pasó por allí, dispuesta a reponer lo que iba gastándose de las mesas. Se la comió de un bocado, esperaba que su madre no viese a María tan solo como una cocinera, valorando a su amiga como una empleada, cosa que molestaría bastante a Aina. 

Notas de juego

Te pongo imágenes del club, que no te había puesto ninguna.

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11/12/2018, 09:26
Director

Notas de juego

He cometido un fallo calamitoso de master principiante! No marqué vuestros nombres en el post en el que llegabais a la fiesta. Por eso o había fotos ni nada parecido. ¡Grrrrr! Me fustigaré por ello. Si queréis mirar un poco más arriba, como unos seis posts atrás, veréis de lo que hablo. 

Disculpad a un pobre master inútil...

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11/12/2018, 09:41
Marta Quetglas

¡Oooooh, Martha! - Aina escuchó a su madre alzando la voz de aquella manera, a su parecer tan irritante. - ¿Ya habéis llegado? - Le preguntó. 

Sí, parecía que era el momento de más presentaciones. Aquellos "ohs" de su madre no eran dedicados a todo el mundo. Sin duda aquella mujer era una tipa importante. De no ser así, el importante era su marido y en especial su cuenta bancaria. Lo cierto era que dedujo aquello por el vestido que lucía aquella mujer hiperoperada.

Se trataba de un vestido envolvente de manga larga, confeccionado en un tejido ligero y colorido, que presentaba dos de los elementos clave de la temporada. Lucía un estampado de lunares sobre crepé de seda y detalle de volantes en las mangas, el escote y el bajo. Se trataba sin mucho lugar a dudas de un Louis Vuitton. Su precio rondaría los 3.000 euros. Para una feitsa como aquella más que suficiente.

Aina odiaba saber aquello con una sola mirada. Años y años de estar al lado de su madre le habían otorgado aquel extraño e inútil don. Desearía que su super poder hubiera sido encaminado hacia otro lado, pero no pudo elegirlo. Y como bien sabía todo el mundo, un gran poder conlleva una gran responsabilidad. Por suerte, al menos bajo su criterio, aquel era un poder de mierda.

- ¿Dónde está Trevor? - Le preguntó interesada.

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11/12/2018, 09:43
Martha Scpencer

- ¡Marta! - Soltó un alarido de lo más teatral, la tal Martha.

Ambas se llamaban igual a excepción de por un hache intercalada, dos mujeres florero. Por alguna razón aquellos hombres con largas cuentas bancarias, siempre elegían ese tipo de esposa. O quizás era la vida que les ofrecían la que las convertía en lo que eran ahora las dos martas.

¿Cuánto tiempo hace que no nos veíamos? - Exclamó mientras se acercaba a la madre de Aina. Ambas se dieron un beso en el aire cerca de las mejillas y fueron con mucho cuidado de no derramar sus copas sobre sus vestidos de precio prohibitivo para la mayoría de los mortales. - Está saludando aquí y allá. Ya sabes... - Soltó una risotada. - ¿Sabes a quien vi el otro día cenando en una pizzería del puerto de Soller? ¡A Donna Richards...!

Por suerte el tema de aquella mujer, la tal Donna, distrajo la atención de la madre de Aina sobre su propia hija. Aina dejó en ese momento de escuchar sobre todo aquello de lo que su madre estaba chismorreando. Vergüenza ajena era lo que sentía en ese momento de ver a su madre y a aquella otra mujer haciendo aspavientos y cacareando como dos gallinas sobre chismes y habladurías baratas.

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11/12/2018, 09:58
Alex

Alguien tocó a Aina desde la espalda haciendo que se sobresaltara y que casi derramara su copa. En otra ocasión, un año atrás quizás su bebida hubiera acabado en el suelo, pero si de algo le había servido la academia de policía, era para estar preparada contra ese tipo de sustos. Aina se había curtido y se había convertido en una mujer mucho más templada. Lo mismo le había pasado a María, aunque ella seguía siendo bastante más expresiva de lo que lo era su compañera de casa.

- ¿Qué susto, no Aineta? - Dijo una voz conocida. La de su buen amigo Alex. - ¡Oye! - Dijo admirando de arriba abajo a María. - ¿Con quién has venido? ¡Ésta si que es una novedad! ¡Aina con otra chica! - Y soltó una risotada.  ¿Quién eres tú?

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11/12/2018, 15:15
Aina Vallespir

Si algo no soportaba era lo fácil que resultaba a la mayoría de aquellas mujeres criticar a otras. Más si no estaban delante, porque de tenerlas seguro que le sonreirían y halagarían, pareciendo grandes amigas. Toda aquella apariencia que percibía como profunda falsedad, le hastiaba. 

Donna Richards no sabe la que le está cayendo, la van a despellejar viva...

Y eso, por otro lado, le ofrecía la oportunidad de alejarse de las vívoras con María, sin embargo, antes de poder dar un paso alguien le tocó la espalda de forma inesperada. Se giró con cara de pocos amigos, pero al ver de quien se trataba sonrió.

-¡Y que lo digas Alex! Yo que tú no me la jugaría tanto ¿No has pensado que podría reducirte como a un niño pequeño?-  Vaciló al chico mientras le guiñaba un ojo de modo divertido. Era cierto que nunca antes había ido con una chica, sus amigos eran pocos, y varones, podría decirse que María era ahora la joya de la corona de Aina, por así decirlo. - Pues ya ves- afirmó a la novedad volviendo a estar algo más seria -Ella es María. Y él es Alex- Los presentó a ambos.

Notas de juego

Sin problemas máster. A todos nos puede pasar. 

Si quieres edita mi otro post, o borralo, o dejálo, lo que mejor te parezca xDDD 

De máster inútil nada ;)

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11/12/2018, 19:03
Maria Mabel Miranda

Yo estaba fascinada y como novata en el mundo de las elites prodigiosas no dejaba de admirar todo a mi alrededor aunque mantenia mi compostura. Por supuesto cambiaria todo ello por un Audi en un segundo pero como no estaba manejando podria disfrutar de aquello.

Los vestidos de las mujeres eran espectaculares, al punto que me hicieron sentir que estabamos mal vestidas tanto Aina como yo e incluso llegue a preguntarme cuanto costaba el vestido que tenia puesto. Gracias a dios que un par de copas de champagne alejaron esos pensamientos dejandome disfrutar el resto del lugar.

Aina se movia con desenvoltura pero estaba claro que no estaba comoda con su madre y no pensaba dejarla sola asi tuviera que ir corriendo al baño.

A veces hablaban de personas o lugares que no conocia. No tenia porque y tampoco me senti ignorada por ello aunque luego tendria que preguntar a Aina quien era Trevor y quien era Donna Richards. Tenia nombre de artista. Tal vez podria encontrar a alguien de la television o incluso del MasterChef. Ya no lo veia tan seguido porque llevaban demasiadas temporadas y a Jordi se le notaban los años aunque siempre me encataron sus ojos.

Hummm.

Entonces llego Alex.

Ver la reaccion de Aina me hizo sentir extraña. Algo celosa tal vez, porque me di cuenta que se sentia bien con ese joven y siendo ambos de la crema y pura casta de la isla pues quedaba yo como sobrante.

- Hola! Dije con timidez. - Maria Miranda. Y extendi mi mano.

Porque aun se hacia eso no? De extender la mano. Ya me gustaria ver a Aina reduciendo al muchacho con ese vestido, y lo peor es que sabia que era capaz y de seguro no se despeinaria.

Notas de juego

Excelente master, no debes preocuparte, yo he hecho cosas peores como master, ja ja ja ja.

Ademas la partida esta muy bien. Ojala Alvaro y Fernando fueran mas activos pero no importa. Con esta escena con Aina tengo para rato.