Partida Rol por web

Disparo con mi ballesta al goblin 4, no se si le doy, por si acaso he tirado daño.

Noa y uno de los acólitos que se han quedado sacan sus respectivas ballestas mientras que Athinjeris saca su espada. Cremok se lanza contra uno de los goblins y le abre la tripa de un hachazo mientras la criatura cae al suelo formando un charco de sangre.

Uno menos, quedan al menos cinco...

Véis cómo Cremok destripa a uno de los goblins con su hacha. Parece que su aspecto ha cambiado ligeramente... Diríais que sus rasgos se han afilado, su boca parece más grande y puede que se haya vuelto algo más peludo. Cuando el cadáver del goblin cae al suelo, Cremok lanza un aullido al cielo, preparado para cargar contra el siguiente bicho.

El goblin que acabó con la vida del perro carga contra Noa y le abre un feo corte en la pierna.

Amiga perro...

Y se ríe de forma nerviosa.

Cremok ha bajado las defensas y cuando otro de los goblins se le acerca no puede esquivar el golpe que le da en plena tripa sangrando de forma abundante.

De los dos que están más al norte uno mira hacia uno de los puestos y se lanza sobre él y empieza a llenarse los bolsos de comida.

La última de las criaturas se lanza a correr contra Athinjeris con su tajaperros en la mano y consigue hacerle un rasguño considerable.

Nieruk, sin pensarlo dos veces, carga contra el goblin que acosa a Noa, desenvainando de la espalda su larga espada mientras corre con largas zancadas, pero su apresuramiento y sus ojos cegados por las lagrimas hacen que el filo pase por encima de la sonriente criatura. Mientras, se le escucha decir:

-Hijo de perra, ella solo tenía 3 años, y le sacasteis los ojos mientras todavia vivia...-

Doy un paso hacia atras y le disparo al goblin que me ha herido.

Deivon se arrepiente de disparar tan pronto como sale el virote de su ballesta. El goblin se encuentra peleando con unos humanos y teme lastimarles con su disparo. Así que deja su ballesta y coge la maza y el escudo para encaminarse al combate.

El acólito carga su ballesta y dispara. Su disparo sale bastante errado y deja caer la ballesta.

Nieruk se lanza a la carga contra las pequeñas criaturas pero parece que su golpe pasa por encima del goblin que se ríe de forma maníaca.

Mientras tanto, Noa se retira de los goblins, saca un virote, recarga la ballesta y dispara al goblin que le hirió. El disparo es difícil porque Nieruk se ha puesto delante y está enzarzado con la criatura, pero el goblin está desestabilizado y Nieruk es capaz de quitarse de la trayectoria del disparo de Noa y el virote se clava en el hombre del goblin que parece no reír tanto.

Athinjeris mientras tanto aprovecha el descuido del goblin que le hirió para clavarle la espada en las entrañas. Mientras la extrae del cuerpo de la criatura se dirige a ayudar a Nieruk intentando no acercarse demasiado al goblin.

Mientras tanto, Hamnet sigue disparando al goblin que se ha dedicado a llenarse los bolsillos y consigue impactarle en el pecho.

Cremok blande su inmensa hacha y trata de rajar al goblin que se encuentra justo enfrente suyo. Cuando está a punto de dar el golpe definitivo, una ráfaga de dolor sacude su torso; parece que la herida le ha afectado más de lo que parecía, y su golpe de hacha resulta calamitosamente lento.

El goblin sigue riendo... Pero no por mucho rato.

Jijijiji dice el goblin mientras esquiva divertido el hachazo de Cremok y le vuelve a clavar el sajaperros entre las costillas.

El goblin del puesto de comida, se mete un trozo grande de salmón en la boca y se lanza a la carrera contra Hamnet mientras el camino queda espolvoreado con migas de salmón. Hamnet intenta esquivar el golpe pero la brutalidad del mismo se lo impide y el goblin consigue abrirle un corte considerable en la pierna.

En cambio, el otro goblin se dispone a acuchillar a Nieruk cuando golpea al suelo y lo único que le queda en la mano es una empuñadura.

¡Bah! Con los dientes...

Viendo que el combate parece controlado, Deivon decide coger tranquilamente su maza y su escudo, mientras evalua el combate que se desarrolla ante sus ojos para decidir cual será su próximo paso.

Nieruk agarra con las dos manos la espada larga y larza un ataque bajo hacia el abdomen del goblin, insultandole salvajemente y riendose de él cuando se queda sin arma.

Nieruk coge su espada con las dos manos y lanza una poderosa estocada contra el goblin que ahora está más atento y esquiva el golpe no sin dificultades.

Noa vuelve a recargar la ballesta y dispara pero en esta ocasión al intentar no acertar a Nieruk erra el tiro.

Athinjeris viendo que el goblin que ataca a Nieruk está desarmado se dirige a ayudar a Hamnet y con un hábil golpe consigue meter varios kilos de acero en el estómago de la criatura que lo único que puede hacer es caer al suelo mientras escupe una mezcla de sangre y migajas de salmón.