Partida Rol por web

- ¿Has encontrado ruta de huida Yusmi?

El clerigo se despista un poco, se acerca al cuerpo de la clerigo muerta, le da una patadita para comprobar si esta viva, y concentra su mirada en ella.

Los Pathfinders se prepararon para abrir una puerta más ¿lograrían encontrar al responsable del ataque a la ópera y de la muerte de tantas personas?.

Lográis llegar a la enorme sala de detrás del escenario, decenas de cajas con ropajes y elementos del decorado se encuentran tiradas aquí y allá, dos puertas abiertas permiten acceder al escenario, pero afortunadamente uno de los muchos telones os oculta a la vista.

Dos enormes escaleras llevan a los subterráneos debajo del templo, donde vuestro compañero pathfinder estaba excavando con el clérigo de Iori y donde tendríais que colaros para buscarle según vuestra misión principal.

Así que aqui está la entrada... eso suponía.

Bien compañeros, creo que antes de bajar ahi a dar con el origen del problema, deberíamos intentar liberar a esta pobre gente, o al menos mitigar la amenaza. O que se encierren en una de las zonas seguras que hemos dejado atrás. Sí, creo que eso será lo mejor. Después ya podremos bajar a dar con el origen del problema, y eliminar a quién se encuentre detrás de este desastre.

Si os parece, Tyr, Stilgur y yo podemos cubrir esta zona, mientras Aaronvir les indica a los nobles donde deben quedarse y Yusmy se asegura de que nadie pueda abrir la puerta que quede abierta. ¿OK?

- Podríamos distraer a una parte de ellos, los suficientes como para que tengamos ventaja numérica y que puedan subir al escenario sin que los zombies sean una molestia- comentó Viento pensativo.

- El plan es el siguiente- dijo meditambundo-, Yusmy vuelve a la sala donde encontramos al Magistrado y a los primeros nobles. Allí abre la puerta y grita a los muertos para que se acerquen. Cuando lleguen a la puerta la cierra. Luego. Hace lo propio con la siguiente puerta que dé al salón, abriendola llamando la atención de los muertos y volviéndola a cerrar. Así Hasta llegar a la antesala del escenario, donde estaba la primera cortina, en la que cerrarás la puerta que da a la sala de las columnas de mármol y la alfombra color púrpura.

- Mientra nosotros ayudaremos a matar y a subir al escenario a todos los que podamos, ¿os parece?- comentó el elfo mirando a los presentes.

Estooooo... Yusmy empezaba a temerse que el motivo que le hubiesen asignado a esa misión no era su habilidad si no el ser capaz de preveer peligros más allá de la siguiente baldosa. ¿Somos conscientes que alguien poderoso está controlando esta situación, que aún como un tercio de templo señala las puertas a la izquierda en el que no sabemos qué ocurre y eso por no hablar de los sótanos?

Es decir se explicó habiendo medio centenar de zombis, y subiendo, no creo que más de dos o tres se giren a buscarme con el juego de las puertas propuesto por Aaronvir, os seguirían quedando cuarenta y pico para vosotros... salvo que queráis prender fuego al salón central y esperar que los nobles corran más que los no-muertos. sugirió.

El enano meneo la cabeza, contrariado.

- Mierda ... Yusmi tiene razón ... salvo que nos ocurra algo... esos nobles estan muertos pero aun no lo saben. Tal vez la unica forma de acabar con esto es hayando al culpable. Y tengo la sensacion de que nuestra mision esta de alguna forma conectada con todo este caos ... con los subterraneos. Es horrible ... pero el bien de la mayoria, prevalece sobre la minoría. Esto puede ser el principio de algo mayor si no lo atajamos.

Tyr tardo un instante en decidirse, miro su varita y luego clavo la mirada tras la pared.

- A mi los nobles me importan mas bien poco, la verdad. Pero me encanta destrozar no vivos... ademas, la reputacion de la Sociedad de exploradores aumentaria, y quien sabe si alguno de esos nobles pudiera ser mecenas de la sociedad. Demosles unos minutos a esos desgraciados. El plan de Toshiro es bueno, vamos a ello - dijo agarrando la varita - y si alguno no sale vivo de alli, que Asmodeus tenga a bien no llevarle consigo.

Tyr no tiene ni idea acerca de la naturaleza de la poción que ha saqueado de la cultista... aún así la lleva en su poder, junto con gran parte de las pertenencias de los cultistas... alcanzarán un buen dinero en el mercado... y hay muchos usos para el oro.

Los pathfinders avanzaron rápido por el resto de las salas de la ópera a la vez que Yusmi cerraba todas las salas que daban al interior del edificio. Las única que daba al exterior, en una sala de granito con una sucia alfombra blanca estaba totalmente cerrada.

Para la decepción del grupo el resto de las salas solo eran mohosos almacenes de pertrechos y pequeñas celdas donde en tiempos inmemoriales, vivirían los clérigos de Aroden, ahora estaba claro que no tenían una función definida, salvo para que descansaran los actores o como lugar secreto de reuniones... y ni siquiera eso, porque en los últimos días lo único que deberían haber contenido serían unos cuantos zombies prestos para salir siguiendo las órdenes del culto a Zyphus.

En seguida pudisteis contemplar que nada de lo que había allí os ayudaría.

- Es duro decirlo, pero hagamos que su sacrificio no sea en vano. Descubramos de donde demonios ha surgido toda esta corrupción.

Yusmy se dirigió a la escalera que quedaba más al norte, la que les quedaba más cerca al regresar de revisar el templo.

Miró a Toshiro y a Tyr. ¿Tenéis una antorcha? Algo me dice que ahí abajo todo no va a ser tan luminoso con en la zona que ve el público...

Yo no tengo... ¿Tenéis vosotros? ¿O algún conjuro de luz?

Tyr todavía estaba disgustado por el cambio de decisión repentino de Toshiro. Creía que el samuray era un hombre de honor. Le dolió descubrir que no era muy diferente de cualquier otro guerrero. Asmodeus no estaría contento con el. El clérigo toco su propio escudo y dijo "luz". Del arma brotó un torrente de luz que disipo la oscuridad que se había abierto delante de ellos.

Yusmi encabezó la marcha alumbrado por la luz del escudo de Tyr. No es que hiciera demasiada falta porque todo estaba bien iluminado por lámparas de aceite, que ardían lentamente.

Os encontrásteis en un enorme sótano lleno de cajas repletas de disfraces y decorados viejos. Panfletos de obras pasadas, sillones a medio reparar y otros enseres necesarios para una ópera se desperdigaban por aquí y por allá. Sin embargo, lo más curioso era la enorme excavación en el muro Oeste del sótano, en la que se había cavado en la mismísima roca y que daba a una serie de túneles, uno que avanzaba en dirección Noreste y otro en dirección Sureste. Pero luego aparentaban converger.

Los túneles estaban asimismo bien iluminados, y se apreciaba que habían sido excavados siguiendo algún tipo de antiguo sistema de túneles, ya derribado. Útiles de excavación como picos rotos y carretillas estaban desperdigados en la entrada.

Sin embargo, al acercarse pudieron comprobar que gotas de agua se filtraban por las grietas del techo dejando el suelo de los pasadizos bastante resbaladizo.

Las maquinaciones de Viento se esfumaron al instante, cuando sus compañeros decidieron bajar por las escaleras, dejando a su suerte a los nobles que luchaban en el patio de butacas.

Echando una última mirada al telón tras el cual los nobles luchaban por sus vidas, profiriendo desgarradores gritos cuando eran devorados por los muertos vivientes, el elfo bajo junto con sus compañeros las escaleras que les llevarían a los sótanos.