Partida Rol por web

Durnak recibe un hachazo, pero no evita que vuelva a atacar al hombre que tiene delante (Thug 1).

- ¡Acabemos con esto de una vez! - dice exasperado.

Sin embargo, es consciente de que la herida que le hace no es muy grave. Lo que, unido al hecho de que el ataque por parte de los hombres es sin provocación alguna, lo irrita sobremanera.

El jefe de los hombres vocifera algo en su lengua y asesta un hachazo a Ethelnir. El elfo sangra por varios sitios y su resistencia está menguado todo se le nubla y podría caer en cualquier momento.

 Ethelnir aprieta los dientes en un esfuerzo por permanecer consciente.

- Clarissa ...

Mareado por el esfuerzo de permanecer en pie, no acierta a decir nada más.

Clarisa se aleja con intención de canalizar energía postiva y curar a sus compañeros.

 La ola de energía positiva es sin embargo, muy débil

En una nueva intentona, el filo de Lorik volvió a desviarse de su trayectoria. El guerrero estaba completamente frustrado, pero no conseguía atinar a su enemigo.

 Ethelnir siente un repentino y cálido halo de energía gracias al hechizo de Clarissa.

Su vista se aclara y eleva la cabeza en un claro desafio.

- ¡El mal será castigado!

 La espada de Ethelnir baja con una velocidad imparable hacia su oponente...

Ethelnir, casi sin resuello retrocede un par de pasos, casi exhausto por el esfuerzo ...

El tremendo golpe de Ethelnir hiere de gravedad a su contrincante pero no parece tener el efecto esperado. Se conoce que las almas de estos mercenarios no son tan negras como el paladín esperaba, no obstante, el hombre está a duras penas de pie... Mientras tanto Grachius resiste asestando un golpe con su espadón que prueba la sangre a lo cual el guerrero se permite una sonrisa.

Los tres mercenarios atacan con sus armas pero Durnak, Lorik y Grachius evitan sin problemas sus golpes.

Neblin siguió con sus arremetidas con su pequeño estoque. Normalmente intentaba desentenderse de los combates y si se veía metido en uno, intentaba atacar por la espalda a los desprevenidos, pero esas ruinas no le daban mucho margen de maniobra para rodear a aquellos tipos enormes.

El escudo del ulfen se interpone entre el humano y la pequeña daga del mediano.

Durnak asesta el que espera sea el hachazo definitivo a su contrincante.

- ¡Habrase visto! ¡Que desfachatez pensar que vais a acabar con nosotros! ¡Ni en sueños! - murmura furioso.

Y tal vez por perder la fuerza por la boca, no puede dar toda la que querría al hachazo.

El herido líder de estos hombres retrocede, saca una poción y se la bebe mientras que Clarissa repite su acción anterior. Lorik, Grachius y Ethelnir notan como parte de sus fuerzas son recuperadas, aunque el alivio sigue siendo poca cosa.

Sin embargo, parece que es todo lo que necesitaba Grachius pues asesta un espadazo a su oponente que abre una profunda herida y mancha el suelo nevado de sangre mientras cae...

 El elfo retrocede mientras saca el arco.

Con un movimiento fluido apunta hacia el lider de los ulfen.

La espada y el escudo quedan en el suelo, mientras el paladin se centra en su objetivo ... sin embargo el cansancio y el dolor hacen que falle el tiro.

Cansado de tantos movimientos de escape, Lorik dió un paso hacia adelante para con el impulso atestar un golpe poderoso sobre uno de sus contrincantes.

El guerrero detiene in extremis el golpe de Lorik, pero el impacto es lo suficientemente fuerte como para que le desestabilice y no consiga impactar a su contrincante. Por su parte, el que está contra Durnak logra impactar un potente hachazo en el costado del enano...

Neblin se retiró momentáneamente del combate con una idea en la mente. Empezó a correr hacia uno de los costados con la idea de rodear aquella pared derruida.

Durnak se mueve para ponerse justo delante de su oponente, esperando así que su ataque sea más efectivo.

El guerrero detiene a duras penas el hachazo de Durnak. Tarde o temprano el enano impactaría y él sería hombre muerto...

El líder sigue a cubierto y saca una nueva poción y se la bebe.