Partida Rol por web

La hiena trata de morder, pero completamente envuelta en arañas, tan solo consigue encabritarse en el mismo lugar en que está, del todo descontrolada.

Baddum por su parte sigue gritando, aturdido, dolorido, picoteado por los cien aguijones : ¡¡ Ayudaaa !!

 Los gritos alarmantes de Baddum llaman la atención de Trash que le lanza una fugaz mirada para ver que le ocurre, manteniendo la guarda en alto ante la hiena.

Entre los gritos de Baddum y la sorpresa que le genera ver al gnoll a su lado, Briskas se olvida de las arañas y se comienza a preocupar por el gnoll que ha trepado en silencio. Descartando, en su mente, la ballesta, que solo considera útil para ataques a mucha distancia decide correr el riesgo de ponerse de pie y usar su propio poder en bruto.

- Así que has venido a visitarme - comenta utilizando el lenguaje del hombre hiena - Eso no fue una buena idea - agrega tras dar un paso atrás y apuntarle con su dedo al pecho de su contrincante.

El rayo de negrura que Briskas hace surgir de su dedo impacta en el medio del pecho del gnoll demostrando la verdad de sus palabras.

¡BRISKAS! ¡TENEMOS A LAS ARAÑAS ENCIMA!

Tras advertir al de los bichos, Matriorca intenta que la punta de su lanza pase junto a la hoja de la puerta entreabierta para hundirse en las carnes de la hiena.

¡BRISKAS! ¡HAZ DESAPARECER LAS ARAÑAS!

Poco después, el enjambre de arañas se disuelve, dejando tras de sí el recuerdo de un millar de pequeños mordiscos en Baddum.

Cuando Briskas se levanta su cabeza vuelve rápida a morder el techo de la choza al recibir un contundente golpe del escudo del gnoll, que aulla risueño ante el éxito de su golpe, toda la visión de Briskas se ve teñida de rojo y retrocediendo unos pasos estira su dedo tratando de vislumbrar la figura perruna duplicada que se agita ante su vista, finalmente y a los pocos segundos logra enfocar a su enemigo y dispara su mortífero proyectil. El gnoll frente a Briskas queda totalmente frito por el rayo que atraviesa de lado a lado su cuerpo y con cara de pasmado cae de espaldas dejandose escuchar el horrible golpe de su cuerpo contra el suelo.

El último de los gnolls vivo, aulla a la hiena ya tan malherida infundiéndole el valor necesario para continuar luchando y mientras trata de alcanzar a Trash en un golpe que ni la sombra le logra alcanzar, en esta noche en el que la luna puede verse de un tono rosado y las estrellas hacen que debais bajar la vista ante su luz celestial, aulla

Greejal vendrá, estais muertoos, la Tribu de la Sangre os despedazará a todos, ESTAIS MUERTOS ORCOS IAAAAJAJAJAJA

 Trash se ríe en la cara del insensato y bravucón chucho que tiene delante.

 - Si tu tribu soys como vosotros, me daís lástima.- Escupe el orco.

 Desués lanza un pesado hachaco para teminar con el gnoll, pero es demasiado el ímpetu pueste en el ataque que falla estrepitosamente, lavando el hacha profúndamente en el suelo, toda la cabeza de la arma enterrada.

Aguantando el dolor que significa haber recibido un hachazo no esperado, el brujo contesta con su habitual tono sardónico - Pues... allí tienes a tu amiguito para que te haga compañía - mientras ve caer al gnoll que ha sido tan torpe como para herirlo.

- Y es una pena que ninguno de uds viva como para ver como eliminamos, también, al Greejal ese - añade tratando de olvidarse del dolor que siente en el cuerpo tras el golpe recibido

Hechando a un lado el arco, saco la espada y ataco al Gnoll, aprovechando que esta en un lugar tan pequeño, es imposible fallar.

-Grrrr!!! -

Lo miro a los ojos intentando intimidarlo, esas bestias se estan multiplicando por todo el paramo como termintas, y esta claro que nos enfrentaremos mas de una vez contra ellas, si acabamos con unas pocas ahora, menos quedaran para luego.

En medio de la refriega medio de soslayo-

-Cargemos hacia afuera, ese es el espiritu orco y matemosles en la oscuridad con el miedo en sus ojos - digo mientras se muestra una sonrisa en mi colmilluda boca.

La hiena trata de alcanzar a Trash y esta vez sus dientes están muy cerca de alcanzar su carne quedandose clavados en la muñequera que el gigante viste para ser apartada hacia atrás de un empujón ante el gruñido del gigante

Jajajajajajaja - La hiena ríe, un animal ajeno a la clara derrota de los gnolls, que no parece comprender que la batalla ha terminado, que no parece comprender que aquí solo le espera la muerte, que apremiada por los aullidos de su amo continúa el ataque de manera incansable y con el mismo ímpetu con el que cargara al principio contra los refugiados orcos

La noche será corta, y la luz de la lámpara tintinea a vuestras espaldas en lo que parece una despedida a vuestros visitantes.

Vamos a ver. ¿Entonces te envía Greejal?

La anciana desplaza su lanza con intención de volver a herir a la hiena.

¿O has acabado aquí por casualidad?

Aun herido, el brujo se aproxima al borde de la terraza para ver contra quienes siguen combatiendo su enemigos. Al verlos les apunta con su dedo para dejar salir un nuevo rayo de negrura

- Y a quien le importa quien lo envió... si ya está muerto - acota a las preguntas de la anciana mientras el rayo de oscuridad acierta a su objetivo

La lanza de Matriorca parece haber impactado, y al ojear la punta no encuentra sino un jirón de ropa de Trash, pero este no parece haberse dado cuenta, la lluvia de golpes que por su cuerpo han resbalado sin hacerle ni un rasguño le han dejado la vestimenta hecha harapos, la hiena ríe al tratar de morder la lanza cuando esta pasa por su lado y es imposible para ella esquivar el rayo del SpiderBrujo, quien recolgado por la pared, estira un brazo con tal de lanzar su ataque fulminante, tendiendo a la hiena en el suelo.

El último de los gnolls gruñe con fuerza, aunque sus golpes resultan torpes e infructuosos, llenos de rabia, furia y sedientos de venganza, habeis matado a sus compañeros, y habeis matado a sus hienas, y ahora no queda otra sino luchar, ahora mismo, en medio de la batalla, no parece dispuesto a charlar y responder vuestras preguntas, las palabras de Trash impactan en su cara convertidas en gargajos provocadores, y tan solo puede aullar al pronunciar el nombre de Greejal y repetir.

¡¡ Greejal os encontrará, estais muertos orcos !! ¡¡Vuestra raza ya no existe en Bejayla!!

 JAJAJAJA Se ríe a carcajadas el coloso verde.

 - Pues suerte que no existimos, imagina si existieramos ya no quedaría ninguno de vosotros, chuchos estúpidos!

 Sin dar tiempo a contestar lanza un pesado golpe contra su cuerpo, superando sus defensas y entrando profundamente en su cuerpo.

Baddum, viendo que el combate ha terminado y inspirado por los salvajes gritos de Trash, abre por completo la puerta y trata de asestar una puñalada al gnoll que justo alza el escudo para desviar su brazo. El humanoide con cuerpo de hiena vomita una enorme cantidad de sangre cuando Trash retira su hacha dejándolo muy herido. Ahora, el gnoll, alza la cabeza mostrando sus dientes aún desafiante al líder orco en una risa ante sus palabras, como si de algún modo, hubiera ganado, de algun modo.

Con un desesperado ataque, intento acabar el trabajo. Despues de una pequeña cabriola parece que esto va ha seguir durando, pero la gloria de luchar con la tribu, no hay quien me la quite de la cabeza, se contaran las gestas mucho despues de que muramos, aunque tengamos que arrasar a todos los pueblos de aqui a nuestra vista.

De reojo a Trash y a Baddum:

-Vamos ORCOS!!-

La sangre por todos lados, hace que nuestro instinto primigenio, se desboque como nunca y eso es bueno, es natural.

Sólo quedaba ante ellos un mísero gnoll. Matriorca despliega su lanza y escucha un ruido metálico. La punta de su arma ha chocado con la armadura de hierro del enemigo.

¿Se habrá quedado en eso? ¿O la lanza ha ido más allá hasta alcanza su corazón. La vieja asoma por el costado de Trash para ver la cara de perro de su contrincante.

 Otra vez los orcos habían tenido que luchar para vivir... otra vez sus enemigos regaban con su sangre la tierra del valle y ellos continuaban vivos. Triumfantes.
 Pero lejos de esas reflexiones Trash mira al malherido brujo.

 - Entra y descansa, o es que quieres ir a reunirte con Ruzgal.- Se gira mirando a la anciana.- Buen trabajo Matriorca.

 Sin mirar a nadie en concreto sinó la oscuridad del exterior dice:

 - Esperad aquí, voy a dar un vistazo por los alrededores por si avisto alguno de esos chuchos, no vaya a ser que regresen en unas horas con otra manada, pensando que pueden hacernos nada. Snikrot acompáñame.

 Sin esperar respuesta el guerrero sale a dar un vistazo.

Mirando a Trash:

-Claro Trash, señor de la llanura- con un ligero asentimiento de cabeza guardo mi espada, y recojo el arco, le quito el polvo con cariño y me dirijo a la salida para ayudar al magnifico jefe en lo que precise, es un buen momento para asegurar la zona.

Quizas encontremos a los lejos mas grupos, o alguien que se hacerque en silencio, quizas humanos perdidos, mi boca se hace agua, humanos tiernitos, estan mejor que la dura carne de hiena, pero ahora me concentrare en la caminata.