Partida Rol por web

La piloto, todo lo tensa que estaba, empezó a menear la cabeza, al son de los trombones y demás instrumentos que sonaban. Era una marcha en toda regla, y no solo le sacó una sonrisa, sino que además, le entró una emoción especial por lo que estaban a puntito de acometer. 

Estaba totalmente motivada.

No lo podían ver, pero Adriana le había guiñado un ojo al marine.

- Gracias chaval.

Lorna no llevaba puesto el traje de vacío. Le agobiaba y le hacía sentir torpe pero, sobre todo, daba impresión de que temía que el ataque fuera a salir mal. Un capitán pirata no podía permitirse parecer timorato frente a su tripulación.

Asintió ante el hilo musical. 

-No me suena, ¿es música drinaxiana?-sus conocimientos musicales eran mínimos, todo lo más, lo que escuchaba en la radio del patrullero en Asim-Pero me gusta. Es... apropiado. 

- No lo sé, capitana. Al cabrón de mi segundo sargento le gustaba y la ponía siempre antes de cada ataque. La verdad es que parece apropiada para estas operaciones. – afirmó Mark tranquilamente.  

Desde mi puesto en el cañón por si acaso nos lanzaban algún misil, movía la cabeza al ritmo de la música, cabeceando como cuando tenía pelo, como echo de menos tener pelo... Una batería con un doble bombo le vendría bien a esto... con estos extraños pensamientos miraba fijamente el visor del puesto de artillería deseando no ver esos maldito puntitos aparecer mientras notaba como la nave desaceleraba gradualmente.

Sentada en su espacio dentro de la cabina, trataba de ir preparando todo lo posible las medidas necesarias para interceptar las comunicaciones de la presa de la Blackmore. No querían arriesgarse a que se comunicasen y se viesen en apuros por lo que iban a hacer.

-Aún estamos algo lejos para poder bloquear o corromper sus protocolos de comunicación, pero estoy lista para ello cuando sea el momento.

Al contrario que los demás, Cassana no llevaba armadura. Se consideraba a sí misma una noble (incluso aunque siempre había tenido un punto rebelde para una), y el miedo a la muerte siempre era inferior al de la deshonra. Puede que para los demás pareciese una estupidez, pero era algo importante para ella. Por ello, al ver cómo Lorna se mantenía igualmente sin proteger su cuerpo, hizo que ganara puntos a sus ojos.

22:30 - 108-1097

Había sucedido algo muy curioso: la Exploradora Troyana no mostraba ningún signo de estar detectando en modo absoluto a la Blackmore. No estaba modificando su rumbo, no emitía señales de radio pidiendo socorro. Era como la nave de los corsarios fuera por completo invisible.

Estaban a 47.000 kilómetros de su presa, y aún mantenían un silencio completo de radio. Solo estaban usando los sensores pasivos para no delatar su posición y se estaban guiando exclusivamente por la señal del transpondedor de la Exploradora Troyana, que estaba funcionando como un faro para sus avanzados sensores. En esos momentos, habían comenzando a decelerar para igualar la velocidad de su presa e igualar sus velocidades. En caso contrario, a estas alturas viajarían casi al doble de velocidad que la nave de los nobles y solo tendrían la posibilidad de realizar un disparo antes que tener que dar la vuelta.

En este momento ya podían disparar con el cañón de partículas. Pero quizá podrían aprovechar para intentar aproximarse más.

No nos han visto. O son arrogantes como nobles.

Conecto con la torreta:

-"Doble", ¿puedes hacer algo a esta distancia o necesitas que nos acerquemos mas?

Se volvio hacia la consola de comunicaciones:

-Veillon, espere a que abramos fuego antes de intentar nada.

Contacto con el otro puesto de artilleria:

-Valdes, permanezca alerta. No creo que nos reciban con misiles pero tampoco quiero ser muy lista diez segundos demasiado tarde.

Copy. Dejo de cabecear, respiro hondo y aferro los mandos. Va a ser una media hora larga...

23:00 - 108-1097

La capitana no podía creer lo que estaba sucediendo. Estaban a menos de 19.000 kilómetros de la nave de los nobles y no les habían detectado aún. No había otra explicación posible (a no ser que en verdad fueran los nobles con más sangre fría de la galaxia): la nave que les había dado el Rey Oleb era un fantasma, invisible a los sensores de su presa.

Estaban a punto de alcanzar a la Exploradora Troyana. En 18 minutos, hasta podrían acoplarse con ella y abordarla. Increíble.

-Veillon, bloquéelos.

Levantó la mano con un gesto teatral.

-¡Fuego!

Cassana comenzó a poner en marcha los programas con las rutinas de interceptación que había preparado. Esperaba que fuese suficiente como para anular las comunicaciones del blanco y que éstos no notasen absolutamente nada hasta el último momento, cuando no hubiese marcha atrás.

-Estoy en ello. -fue toda la contestación que dio, centrada como estaba en repasar los paquetes de datos que emitían y recibían sus sensores.

- Capitana, puedo hacer algo a esta distancia, pero considero más seguro dejarles menos margen antes de prepararnos para el abordaje. – contestó Doble con aplomo militar.

Se alegró cuando Lorna siguió su recomendación.

En cuanto Lorna gritó la orden, Doble aseguró la mirilla del cañón y aún tuvo los cojones de cambiar la lista de reproducción para poner la música adecuada para el momento.

- ¡Comenzamos el espectáculo! – bum, bum, buuuuummmm, bum, bum. Podía imaginarse el chorro de partículas fluyendo

-¡Impacto!-exclamó Lorna levantándose de un salto y perdiendo los papeles ligeramente-¡Bien hecho, "Doble"!

Ahora no había marcha atrás. Si alguno de sus "piratas" pensaba que todo aquello no iba en serio sus dudas se habían despejado.

Señaló la pantalla donde su objetivo acaba de encajar el cañonazo.

-Artillería, alto el fuego por ahora pero permanezcan alerta. Scharhorst, acérquenos a esa nave. Hombres y mujeres de la Blackmore, ¡a por ellos!

- Sí, capitana. – confirmó Mark que se dispuso a prepararse con el traje de vacío y el rifle de energía, además de sus armas ya preparadas, y activó el HUD.

- Veillon, ¿puede conseguirnos alguna lectura de la estructura interna de la nave? – pregunto por el comunicador.