Partida Rol por web

Aquel dúo volvió desde mitad del bosque y se movieron al "Sendero Sandía" que nacía del Camino Carambola, también llamado "Camino Estrella" por su popularidad entre los viajeros que se movía del norte al sur siguiendo la costa y que también daba a la "Ciudad Calabaza", aunque en sentido contrario, pues se encontraba en el interior, al otro lado cruzando al Pueblo Papaya.

Aquel dúo siguió corriendo por el bosque hasta llegar al Sendero Sandía, ya casi era medio día por lo que el sol empezaba a picar en la piel por su soberanía sobre el cielo diurno. Realmente aún tardaríais algunas horas más en llegar hasta el Pueblo Papaya, probablemente a la hora de comer si se daban prisa y no había ningún tipo de inconveniente...

...cosa que, por desgracia había. 

Tras los árboles en una curva, en el suelo a unos 15 metros de distancia enfrente de aquel grupo, bloqueando el paso, se encuentra un Tauros tendido en el suelo, muerto que tiraba de una carreta que no dejaba el paso por el Sendero Sandía. Este noble Pokemon tiene marcas de que ha sido atacado a distancia y sucumbió a sus heridas.

En este lugar los bosques se cierran en torno a la senda, con un empinado terraplén y densos matorrales a cada lado.

En aquella zona seguían estando aquellos tres compañeros de Guild de antes, eran aquellos dos que venían de un pueblo y por tanto, lo que decían apenas se entendía una mierda, y absolutamente nada si hablaban con cierta rapidez en lo que fuera que sea ese idioma extraño que ambos tenían... la chica a la que le había echado un ojo y... sorprendentemente la otra chica que estaba en la base... Además de eso también había un Ponyta tirando de un carruaje, probablemente traído por Levan Audex y acompañando a este miembro de la Guild se encontraba una muchacha de cabellos azulados tratando a los Pokemon heridos.

Y así fue como aquel dúo de domadores Pokemon conformados por Airi Wada y Touma Makoto, así como el Pokemon de este último, el Houndour llamado Sekitan, llegaron por puro azar y fortuna justamente a la zona donde aquellos compañeros y desconocida se encontraban luego de vagar por el bosque.

Y así fue como aquel dúo de domadores Pokemon conformados por Airi Wada y Touma Makoto, así como el Pokemon de este último, el Houndour llamado Sekitan aparecieron de la nada atravesando la espesura del bosque. Airi Wada tenía una gran laceración en la espalda y estaba siendo cargado por Touma Makoto a caballito.

Ignoraba por completo las discusiones médicas que tuvieran por un lado Yuri y Yumei, ahora mismo lo único en lo que pensaba era en la pequeña que se había escapado sola, tras escuchar las palabras de Ketten me puse a caminar de un lado a otro claramente nervioso, preocupado y muy alterado tratando de pensar en algo sin llegar a ninguna idea rápida tan solo en ese bucle de pensamiento.

Hasta que un ruido entre la vegetación me hizo detenerme por completo para mirar en esa dirección, no tardo en aparecer la figura de Touma cargando con la niña que estaba bastante herida, de inmediato corrí hacía ambos casi obligando a que el chico dejara a Airi en mis brazos para cargar yo con ella- Cariño ¿qué te ha pasado? Nos has preocupado un montón a todos ¿te duele mucho? ¿Y donde esta Kana? -la batería de preguntas cayo sobre la pobre niña- Touma si no fuera porque eres un hombre te daba un beso ahora mismo que te sacaba el alma -agradecí al chico mientras acariciaba el pelo a Airi

Me acerque un poco timidamente a ayudar con el Tauros para ayudar a Levan, aun estaba algo cortada por la situación-

Si, se... se fue y no pude seguirla... Deberíamos... ¡OH DIOS MIO!

Antes de seguir hablando vi como llegaban con la niña llena de sangre, corrí hacia ellos junto a Levan.

¿Qué ha pasado? Gracias a Arceus que la encontraste Touma, pero ¿Cómo habeis acabado asi? Yumei, Yuri necesitamos ayuda por aquí por favor.

Finalmente, llegamos a donde los demás. Agotada, me había quedado medio dormida en la espalda de Touma y al sentir que me movían los abrí para encontrarme con los rostros de Levan y Eula. Ambos me estaban haciendo preguntas preocupados.

- Yo... yo... quería conseguir bayas para todos, pero los perdí - dije comenzando a llorar frustrada.

Me encontré en el bosque con Touma y me ayudó a buscar las bayas, pero apareció un pokemon muy fuerte y nos atacó... y se me cayeron las bayas... por suerte, Sekitan consiguió recuperar uno - dije sacando la única baya que tenía - Touma me trajo todo el camino. Gracias, Touma - dije sonriéndole.

También conseguimos agua de manantial - entonces, me di cuenta de una pregunta de Levan - ¿Kana? No estaba conmigo, ¿ha desaparecido? - mis ojos se abrieron con expresión asustada.

Te dije que no te alejaras... Airi, escucha respira, Kanna esta aquí con nosotros no te preocupes está bien. 

Le di un pequeño abrazo tratando de no herirla mas. Ahora descansa y deja que ella te curen ¿Vale? 

Me levante, recogí a Kana y se la di a Airi para que se calmara al ver a su amiga.

La pila de Pokemon inconscientes seguía ahí, y sí, en efecto se encontraba Kana sana y salva, sin contar el hecho de que no estaba sana por todas las heridas que había sufrido y estaba inconsciente... y salva tampoco, porque como no la trataran esta podía terminar por morir.

Cuando Yumei Nozomi escuchó la palabra "Agua de Manantial" esta saltó corriendo a donde Airi Wada se encontraba, y rebuscó en sus pertenencias hasta conseguir aquella cantimplora de agua de manantial, sus ojos brillaban de pasión cuando finalmente se hizo con ella.

-¡Justo lo que necesitaba!. -Exclamó alzando la cantiplora y sacando pequeñas pipetas en donde fue llenándolas de agua- ¡Muchas gracias!. ¡Ahora demostraré a esa "Renegada Chamana" qué es la ciencia de verdad!.

Al parecer aquel comentario que en un primer lugar pareciera ser inocuo -como el agua que portaba- parecía haber sido mucho más ácido de lo que esta hubiera imaginado que sería, pues llegó a quemar a alguien. -¿A quien llamas "Renegada Chamana"?, "Charlatana Ciencicera". -Dijo con un gesto serio en su rostro-  ¡Te demostraré cómo curamos aquí a la gente usando los métodos tradicionales del Santuario de la Suerte!. -Señalando a Yumei Nozomi esta continuó- ¡Te reto a que no eres capaz de curar a estos Pokemon mejor que yo!. ¡Escoge a 2 y a una de las heridas!.

El reto evidentemente fue aceptado, por parte de Yumei Nozomi, y esta creyéndose capaz de curar a alguien recientemente envenenado escogió como primera paciente a no otra que a Gorda, mientras que la segunda en curar sería a Kana, así como a su dueña. -¡Yo curaré a estos y tu te encargas de los otros!. -Exclamó mientras sacaba un matraz con una pequeña piedrita en su interior- ¡Airi, ven aquí con Gorda y Kana!.

El reto había sido aceptado, por lo que ahora a Yuri Takamiya esta iba a ser la encargada de curar a Lumine, a Cu y a su dueña Tuathanach Glasraich. No eran los Pokemon más pesados, pero sus heridas parecían ser serias.

-¡Chica herida!. ¡Cruza las manos así y ponte a rezar por una pronta recuperación!. ¡Rápido!. ¡No tenemos tiempo que perder!. -Dijo mientras seguía masticando algas y escupiendo en las heridas.

     Me alegre al ver que la chica "pelo fuego" había vuelto junto a nosotros e incluso con la llegada del compañero "ropajes negro" ayudaba a estarnos preocupando por un solo asunto al mismo tiempo ... eso si, falta el rescatar a la pequeña Vulpix de la jefa.., tal que me acerque a "al muchacho a cargo" mientras apuntaba al toro.

    Oe, ¿ no quelias me'el los les'o del Taulos en el carruaje ? - para empezar a caminar hasta una de las patas del cadáver esperando que los que estuvieran sanos se fueran uniendo, eso si... sobre la disputa de las curanderas, era obvia a quien le iba a apoyar.

    ¡¡ Animo Nozomi la sabia !!

Tuatha miró a Yuri algo confusa.

-Eeerrr bie, aunquie preferiria un chupito de argo... seguro que me ayudaria musho a resha a arceu con am fuersha.

Dijo juntando las manos e intentando recordar las oraciones que su padre le intento enseñar desde pequeña.

-O arseu nuetro que ta en lo shielo santificao sea tu nombre, venga a nosotro tu reino, _{aunque no en forma de sentauro porfabo,}hagase tu volunta_{, meno tranforma a la gente en caballo,}asi en la tierra como en er shielo. Dano er pan nuetro,_{y la casalla,}de cada dia, y perdona nuetra ofensha, asi como nosotro perdonamo a los que no ofende, _{meno a la mujer de lo melone,}No no deje cae en la tentasio y librano de Girantina...

Una ves reunidos con el resto, aunque estaba agotado no espere que nadie mas quisiera cargar con la chica ya que se encontraban agotados por lo que podía ver a simple vista pero el agradecimiento del sujeto que me había quitado a la chica era de lo mas peculiar, después de pensármelo un poco lo mire un tanto incomodo pero más que nada asustado soltando una incógnita -¿Puedes sacar el alma de las personas con los besos?- Al ver que la pequeña reaccionaba con lagrimas puse mi mano en su cabeza con un gesto amable -Te esforzaste mucho felicidades.

La conversación fue interrumpida por aquellas dos mujeres de "Ciencia" discutían me limite a levantar mi postura caminando nuevamente hacia el Tauros para examinar su estado, no era un experto o un hombre de ciencia pero al menos sabia que un Pokémon seguiría vivo mientras este produjera calor y respirara por lo que me acerque para poner mi oreja lo mas cercano a este y ver que descubría.

El Taurus muerto se encontraba curiosamente en un estado carente de vida. A su vez no emitía calor alguno, aunque de vez en cuando expulsaba gases pútridos por uno de los dos orificios de la comida, en concreto el que se usa habitualmente de salida. De hecho las marcas de haber recibido ataques de ponzoña que se habían extendido por el torrente sanguíneo del animal eran bastante claras, lo que le provocó una muerte agónica.