Partida Rol por web

Polvo de Escorpión

2. Un alto forzoso

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15/03/2018, 11:06
Narrador

El goliath se desplomó en el suelo tras las heridas infligidas por Corianne. Había pagado cara su confianza. En otro de los frentes, el golpe de Daha dejó al orco lo suficientemente aturdido como para poder evitar el ataque de Nekaua. Así que cuando la goalith lo estampó contra el suelo escuchó el ruido de una multitud de huesos rompiéndose. Pero poco importaba ya, estaba muerto. Y no sólo eso, sino que entró en tal frenesí que describiendo un arco con su escudo golpeó al enemigo que tenía sus espaldas. Fue capaz de resistir el golpe, pero lo dejó seriamente herido.

Con la muerte del goliath varón y el orco, las primeras muertes se acababan de cobrar. No parecía que fueran a ser las únicas.

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15/03/2018, 11:23
Trasgo

Los trasgos tiradores volvieron a cambiar de objetivo. Con Iskal alejado y Daha sin entablar en combate, fue contra la semielfa contra la que dirigieron sus flechas. O al menos lo intentaron, puesto que ambos disparos estaban tan desviados que hasta parecía que estaban apuntando a otra persona.

El trasgo miró a Nekaua asustado ante su aparente incremento de tamaño, pero seguramente sintiese un miedo similar a sus compañeros porque una vez más hizo el intento de atacar a la goliath y una vez más fue inútil.

Los trasgos hacen ataques inútiles.

- Tiradas (3)
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15/03/2018, 11:28
Balaka

A Balaka sus heridas parecían importarle poco. Tampoco las vidas de sus compañeros. En esos momentos sólo pensaba en acabar con Kifel como fuera. No se parecía en nada a la cabecilla goliath que Nekaua había conocido. Una vez más la mujer atacó con sus dos armas, pero esta vez el pelirrojo no pudo evitar el golpe de su hacha que acabo tiñendo su armadura de rojo. Mejor suerte tuvo con la daga, la estocada salió desviada y no llego a tocarle.

Balaka hace ataque completo contra Kifel, acierta uno y falla otro. Le inflinge 5 puntos de daño.

- Tiradas (3)
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15/03/2018, 12:03
Kifel Robbarth

Kifel gritó cuando el hacha le golpeó. Pero fue más de sorpresa que de dolor. No había sido nada para lo que podría haber sido. Sin embargo, fue lo suficiente como para desconcentrar al pelirrojo. Cuando le devolvió el ataque con su espada, el tajo no llegó a alcanzar a Balaka.

Kifel ataca a Balaka y falla.

- Tiradas (1)
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15/03/2018, 12:56
Orco

Los orcos dieron unos pasos hacia atrás cuando Nekaua pareció agrandarse. Pero a diferencia de los trasgos, éstos no iban a acobardarse. Uno de ellos continuó atacando a la goliath, mientras que el otro aprovechó como Daha se quedaba sola para encararse con ella.

La semielfa no tuvo problemas en bloquear el ataque, pero no Nekaua, que preocupada por su hermana había bajado la guardia y recibió un feo un corte en la espalda.

El orco verde da un paso de 5' a J8, ataca a Daha y falla.
El orco amarillo ataca a Nekaua, acierta, y le inflige 9 puntos de daño.

Mapa del combate

Iniciativa
Iskal
Daha
Nekaua
Corianne
Petrick
Trasgos
Balaka
Kifel
Orcos

Comentarios: Masca te he cambiado el movimiento porque al dar el paso de cinco pies hacia abajo, eres tú el que acaba en posición ilegal porque ocupas la casilla del orco (que el ya ocupaba la tuya). Te he movido porque entiendo que quieres ir hacia Balaka. Si quieres hacer otro movimiento o quedarte en la posición inicial y forzar a mover al orco sin problemas.

¡Es el turno de todos!

- Tiradas (3)
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15/03/2018, 14:24
Corianne

Corianne esbozó una sonrisa socarrona.

—Bien. Porque...

... Los piratas...

—... yo siempre reclamo mis deudas.

Eso lo hacía más fácil. Le había salvado el pellejo al mago y, en algún momento, le pediría un favor a cambio. Un gran favor. Y no precisamente uno sexual. Eso acallaba su vocecita interna que le decía que era una estupidez cometer heroicidades.

Enarcó una ceja en dirección a Petrick y salió disparada en dirección a la goliath. No a la gigantesca, musculosa y, en opinión de Corianne, absolutamente irresistible. Sino a la otra, a la que estaba siendo reducida a pulpa sanguinolenta por el Panocha. La pirata aún no tenía claro por qué llamaba a Kifel así, o cuando había empezado a hacerlo. 

El caso es que, ayudada por el impulso, fue, vio y le metió la espalda en las tripas a Balaka. Presa de numerosos golpes y contusiones, la goliath también cayó. Corianne lanzó un suspiro de alivio y miró en dirección a los trasgos.

—¡Más vale que huyáis ahora o seréis los siguientes! —tiró su baladronada. 

Cargo contra Balaka hasta la casilla N14. Ataque, golpe, 5 daños. El DM dice que cae inconsciente pero no muere aún. Por si Nekaua quiere hacer una enternecedora reunión familiar con ella después. 

- Tiradas (2)
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15/03/2018, 15:19
Narrador

La caída de Balaka fue el pistoletazo que anunció el final del combate. Con los dos goliaths caídos y también uno de los orcos, los trasgos no tardaron en huir despavoridos. Era hasta cómico ver al trasgo subir desesperado por el terraplen asustado. Los dos orcos restantes, en inferioridad numérica, no dudaron en seguir a sus compañeros de asalto.

Tan pronto como los asaltantes habían aparecido, desaparecieron. El combate había acabado.

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15/03/2018, 15:46
Balaka

Balaka abrió los ojos y comenzó a respirar con fuerza, como si la vida se le estuviera escapando y con cada bocanada quisiera mantenerla dentro de ella. El dolor estaba dibujado en su rostro, pero también la férrea voluntad de no proferir queja alguna. Cuando Nekaua se acercó a ella apretó la mandíbula con fuerza. No podía mostrar su desagrado de otra forma. Finalmente ladeó la cabeza, escupió un poco de sangre y sin mirar a su hermana a la cara también escupió unas palabras en gol-kaa.

Morah-ne tatgalzagch. Boheda-le margrath et kaeh.

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15/03/2018, 16:03
Balaka

Márchate traidora. Déjame morir tranquila.

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16/03/2018, 01:03
Nekaua

No fue fácil contener los deseos de salir corriendo tras los orcos y trasgos. Dos veces les había ofrecido la posibilidad de marchar, y se habían dado media vuelta cuando por fin estaba dispuesta a hacerlos pedazos. Ni siquiera era consciente del recuerdo que uno de los orcos había dibujado en su espalda con su arma.

Dejó que la furia se marchara. Los labios le temblaban, y las manos, como si las sacudieran rachas de viento.

Es mi hermana, dijo, sin mirar a los demás. Había tratado de matarlos, y tenían sus propias heridas que atender. No tenía derecho a pedirles ayuda.

Arrojó el escudo a un lado y se arrodilló junto al cuerpo caído. Se sorprendió al darse cuenta de que era tan alta como su hermana, y más corpulenta. La última vez que la había visto, tres años atrás, Nekaua era prácticamente una niña.

Eso es absurdo, Balaka, replicó en la lengua común. La habían aprendido de sus propios padres, que habían pasado años en las tierras bajas, más allá de las montañas, antes de que cualquiera de las dos naciera. Las tierras bajas eran parte de su legado, como las montañas. Y para Nekaua, se habían convertido en más, aunque no supiera expresarlo con palabras. No pienso dejarte morir.

Descolgó la mochila y sacó de ella una pieza de gasa blanca. Una toalla, bendecida por un sacerdote errante de Beltegueuse que había visitado Doña Clavilda dos veces durante el tiempo que la muchacha goliath había pasado con la madura paladina. Enjugó con ella la sangre de las heridas de su hermana, y dejaron de sangrar. Si no eran letales, sobreviviría. Quisiera o no.

¿Qué has hecho de ti? ¿Por qué has dejado al clan sin tus habilidades para… para este sinsentido? le preguntó. Me llamas traidora… ¿Porque ahora vivo en las tierras bajas, junto a los humanos, como hicieron padre y madre, y casi todos los mayores? ¿Sabes algo de mí que yo no?

Uso una de las vendas benditas (me queda otra) para estabilizar a Balaka.

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16/03/2018, 12:56
Corianne

Corianne se temió lo peor cuando Nekaua reveló que aquella goliath era su hermana y se dirigió derecha hacia ella. Contuvo el aliento un momento, sabedora que no tendría ninguna oportunidad si aquella exquisita masa de músculos que parecían esculpidos en piedra decidía emprenderla a golpes con ella. Retrocedió un paso y abrió la boca para echarle la culpa a Kifel y la cerró justo en el momento en el que se percató de que no caminaba hacia ella. Caminaba, por supuesto, hacia su hermana. 

Dejó escapar un suspiro de alivio y se retiró para dejarlas sitio.

—¡Eh, sacerdotisa! —llamó a Daha—. Petrick está hecho un asco, ¿podrías venir y echarle un vistazo a sus heridas?

Fue a limpiar sus espadas en la hierba y cuando pasó junto al Panocha le dijo:

—Peleas bien. Recuérdame que no te haga trampas en las cartas. 

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16/03/2018, 16:24
Daha Phiatabel

Daha asintió con la cabeza. La sacerdotisa se acercó al mago. Había sido bien vapuleado. No había demostrado ser un gran guerrero, sin embargo si estaba entre ellos era por algo. El Ministro Principal le habría escogido por algo. Al fin y al cabo habían sido sorprendidos en una emboscada. Poco podía hacer un arcano en una situación como aquella. Su fuerte en el combate tenía que estar en una elaborada estrategia.

La semielfa se agachó junto al mago y observó sus heridas. Ciertamente tenían mala pinta, pero nada que no puediera curar con ayuda de Alcor. Situó las manos sobre las heridas de Petrick y cerró los ojos mientras se concentraba y oraba hacia su dios patrón en busca del poder sanador.

Eso sí se le daba bien. La magia divina y en concreto la curativa era algo que dominaba a la perfección y con lo que disfrutaba. Atacar al orco no le había resultado algo agradable, sin embargo había tenido que hacerlo. Sanar a Petrick era sin embargo algo mucho más satisfactorio para ella.

- Creo que enseguida empezarás a sentirte mejor, Petrick. - Dijo la cleriga y entonces se dirigió a Nekaua. - ¿Qué hacemos con tu hermana? - Le preguntó. - ¿Sabes porqué nos ha atacado?

- Tiradas (1)

Notas de juego

Lanzó curar a un nivel superior por dominio y sumo 2 puntos extra por dote.

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16/03/2018, 17:26
Iskal

Iskal iba a preguntar si estaba todo el mundo bien, a él mismo le dolían las dos heridas que había recibido y manchaban su pelaje de rojo pero al menos había tenido la oportunidad de devolverlas de vuelta.

Se sentía mal por Nekaua. No sabía qué sucedía entre las dos hermanas exactamente pero era lo suficientemente listo para sumar dos y dos e intuir que no se trataba de algo bueno. Y cuando los lazos de sangre estaban de pormedio, las complicaciones tendían a multiplicarse como las cabezas de una hidra.

Cuando la goliath se dedicó a curar a Balaka, le dio desde atrás un par de palmadas afectuosas en el hombro con la zarpa; era mejor aquello que cualquier cosa que pudiera decir sin saber.

¿Tienes... —giró la cabeza para pedirle a Daha si podía echarle una mano a él también pero repentinamente recordó algo y miró en ambas direcciones—. ¡Clea! ¿Dónde ha ido el carro?

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17/03/2018, 00:45
Petrick Baldrych

Siento cómo se me parte el corazón cuando Corianne se aleja de mi lado para irse a coquetear con el motivado pelirrojo que viaja con nosotros. Sin embargo, la semielfa no tarda en venir en mi ayuda y tanto su presencia como su contacto me ayudan a superar el dolor de la pérdida.

—Mmmmm, qué manos tienes... —ronroneo a la tímida muchacha cuando ésta me restaura plenamente la salud. Estoy casi seguro de que tenía un nombre, pero lo cierto es que no me he quedado con él—. Gracias por los servicios, apúntalos en la cuenta de Veiner, ¿quieres, querida?

Es entonces cuando oigo al hombre-gato preguntar por la rubia y el carro y reparo en su ausencia.

—Vaya, pues a lo mejor me toca pagar a mí después de todo... —comento para mí mismo, pero mis palabras caen en saco roto dado que la semielfa ya se aleja a toda prisa sin haberse cobrado en salchichón el justo precio por sus servicios.

Lo cierto es que ahora mismo me encuentro en plena forma y, como conocedor de la magia que soy, únicamente puedo atribuirlo a un milagro. Solo hay una cosa que me cause contrariedad en estos momentos y es haber perdido mi montura en la refriega, de modo que hecho un vistazo por los alrededores por si la localizo nuevamente antes de que se desvanezca.

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17/03/2018, 10:43
Daha Phiatabel
- Tiradas (2)

Notas de juego

Cometí un error en la anterior tirada de curar. Ahora he tirado el dado correcto y bueno... El resultado ha sido calamitoso... Sólo 6 pg curados Petrick.
Así que lanzo un segundo conjuro y curo 8 más. 14 en total.
Gasto luz de lumia y soportar elementos.

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20/03/2018, 22:45
Kifel Robbarth

Kifel mantuvo el mandoble en alta cuando escuchó a Nekaua decir cuál era su parentesco con Balaka. No fue hasta que la goliath se encargó de su hermana que el pelirrojo clavó la espada en el suelo y se dejó caer en el suelo llevándose ambas manos a los costados, justo donde había recibido los dos golpes. En su rostro se dibujó una expresión de dolor.

No te preocupes que te lo recordaré—fue lo único que alcanzó a decir.

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20/03/2018, 23:00
Balaka

Balaka torció el gesto cuando su hermana le colocó las vendas. Por un momento incluso pareció que iba a volver a luchar. Pero no fue así, la goliath continuó resignada y esta vez respondió a Nekaua en común.

Ni madre ni padre aprobarían que portaras al Rompedor de Cadenas en tu escudo. Ni que viajases con alcoritas. ¿Qué sois? ¿Un grupo de hermanitas de la caridad?

Pese a su situación de inferioridad Balaka seguía dirigiéndose con desprecio.

El clan ya no existe. Madre fue derrocada y fuimos obligados a integrarnos completamente con el resto de la tribu. Si yo no hubiera estado buscándote...—entonces la goliath agitó los brazos furiosa—¡Y todo para esto! ¡Tantos meses pensando dónde estarías! ¡Tantos meses lamentándome de no haber estado con madre para luchar junto a ella! ¿Para qué? ¿Para encontrarme con esto?

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21/03/2018, 15:02
Daha Phiatabel

Daha escuchó expectante lo que aquella extraña y belicista criatura tenía que decir. Se notaba que escupía odio en sus palabras. Odio hacia su propia hermana. Eso era algo que conocía bien. No odiaba a Docrich, sino todo lo contrario. Pese a su aspecto, su hermano era una persona con un corazón bondadoso. Un firme apoyo desde que se reencontrara con él tantísimos años después.

No obstante Daha si conocía el odio. El odio hacia un familiar próximo. Tan próximo como su propio padre. Laavar era una persona cruel. Una persona que no conocía el amor y que comulgaba con los degenerados valores que los kurnitas promulgaban. Su madre o madrastra no era mucho mejor que su propio padre. No obstante, Mariandra dentro de su innato egoísmo si conocía la piedad y arrepintiéndose podría encontrar el perdón.

¿Qué estaría pasando en esos momentos por la cabeza de Nekaua? Por lo que su hermana acababa de decir, mucho habían cambiado las cosas desde que su compañera dejara las tierras altas. Por lo que tenía entendido de aquella peculiar raza, sus normas y sus leyes eran realmente estrictas y especialmente duras. De todo aquello sólo se podía esperar un final. La propia Nekaua arrebataría la vida de su hermana en castigo por aquel ataque. Aunque podía estar equivocada, no lo creía.

Dudó un instante si repetir la pregunta. De hecho comenzó a articular la frase para detenerse tan solo un momento después. - ¿Qué…? – Daha suspiró vaciando lentamente sus pulmones. Era una situación difícil, pero tenían que tomar una determinación. No debían seguir allí por mucho tiempo, los supervivientes del combate podían pretender reorganizarse y volver a por ellos.

- Alguien debería ir a por Clea. – Dijo en alto y para todos la semielfa. – Debemos ponernos en marcha cuanto antes. No quiero una segunda emboscada. – Afirmó.

Daha se agachó junto a Nekaua y suavemente posó su mano sobre su hombro. Ahora eran compañeras en una importante misión para la República. Tenía que ayudar a la goliath a superar aquel duro trance.

- ¿Qué vas a hacer con ella, Nekaua? – Preguntó de nuevo Daha.

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21/03/2018, 20:29
Corianne

Corianne ignoró la respuesta del Panocha. Había resultado bastante menos divertida de lo que había anticipado. En cambio, la respuesta de Balaka la hizo sonreír.

—¿Hermanitas de la caridad? —repitió en tono divertido—. Sí, se nota que sabes juzgar a la gente. 

Señaló a Iskal el camino por donde había desaparecido Clea con un gesto de la cabeza.

—¿Qué dices, gato? ¿Vamos a buscar a la...

...mamapollas...

—... asistente —dijo con una inflexión en la voz— de Veiner? "Alguien" debería ir a por ella, ya sabes.

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21/03/2018, 20:35
Iskal

«Cerastes... no me fastidies que se va a poner ahora a echarle en cara el rollo de "ser bueno es ser debil y yo soy más guay porque voy partiendo en dos todo lo que me encuentro» masculló Iskal en su fuero interno mientras aplanaba cómicamente las orejas a ambos lados.

Entonces oyó la voz de Corianne y las volvió a erguir.

—Sí, vamos.