Partida Rol por web

Proyecto Mutante X (X-Mutant Project)

#1. Marshall

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09/07/2012, 21:10
Directora

29 de marzo de 2006. New Orleans (Louisiana). Medianoche.

El teléfono sonó en plena noche, despertando a media casa. Tu madre lo atendió, como siempre. Todo el mundo sabe quien lleva los pantalones en casa de los Mandeville, la madre que te parió. Estabas medio soñoliento, mirando confuso a tu padre y a tu madre. No atinaste a oír gran cosa, fue una conversación corta y llena de monosílabos. La cara de tu madre estaba seria, casi pétrea mientras escuchaba. La de tu padre era casi idéntica.

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09/07/2012, 21:12
Mrs Mandeville

-Marshall, vístete. Nos vamos- es lo único que dijo la Sra. Mandeville, antaño conocida como la Comadreja Dorada de New Orleans (antes de que se retirara del negocio claro, ahora prefiere llevarlo todo desde su cómodo sofá en su casa de estilo colonial, admirando la buganvilla del jardín). Tu padre, el Halcón Bermejo, el mayor contrabandista de joyas de diseño que ha habido nunca en toda Louisiana (y que demonios, de toda la costa este americana, desde los Callos de Florida hasta más allá de Georgia!) se quedó mirando a su amada esposa, pero ésta le lanzó una mirada, indicándole que se apartase y se calmase.

-Sólo nosotros dos- le especificó, con frialdad. Siempre había sido una mujer muy calculadora, fría y ambiciosa. Sabía lo que quería, cómo y cuando, era su mayor virtud, aunque también su peor defecto.

-Debe de ser urgente si llaman a estas horas- respondió tu padre, algo molesto por haberse quedado fuera, con lo que él había sido para el Gremio!

-Lo es- sentenció la mujer de mediana edad. Al ver la incomodidad de su marido, le sonrió y se acercó a él, pasándole los brazos por el cuello y besándole con suavidad en los labios, como disculpando la torpeza de los Grandes. No suelen mostrar demasiadas atenciones cariñosas en público, siempre te dicen que eso sólo lleva a la debilidad y al fracaso. Tu no quieres ser débil, no? Así que dedujiste que el asunto era importante. Mucho.

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09/07/2012, 21:14
Directora

A los pocos minutos, ambos estabais cruzando Bourbon Street con el coche de la familia. A través de la ventana del vehiculo veías pasar las luces de neón, los músicos de jazz tocando en la calle, la gente riendo y celebrando a saber qué, pero todos parecían extrañamente felices en su mundo de negrura, luces brillantes y vapores etílicos acompañados de la mejor banda sonora de su vida.

El sonido de un saxo lejano quedó atrás, junto con las calles más transitadas, al girar el coche hacia la derecha y adentrarse en una avenida ancha de grandes mansiones coloniales, con sus sicomoros y buganvillas en flor eterna, entremezclando sus aromas dulzones, dándole un toque bellamente decadente a todo el conjunto. Finalmente cruzasteis la verja de metal y enfilasteis el camino de entrada, las ruedas del coche hicieron ese ruido extraño y agradable al mismo tiempo cuando pisaron los cantos rodados que componían el camino.

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09/07/2012, 21:16
Mrs Mandeville

-Marshall no la cagues, me oyes?- tu madre no te había dicho nada hasta ese momento, consciente de que era tu primera vez en la Mansión LeBeau y no quería que hubiera estropicios por tu parte -Nada de estupideces y no les mires a los ojos directamente, entendido chico?- siempre te llamaba "chico" cuando se ponía extremadamente seria, cuando te entrenaba en los sótanos de vuestra casa, cuando te equivocabas y te golpeaba la mano con una vara para que aprendieras el significado de la palabra dolor y de la palabra fracaso. "Un ladrón atrapado, es un ladrón muerto", esa era su frase favorita.

Esta era la primera vez que te presentaban formalmente al Gremio. Está claro, tenía que ser eso, por qué si no os harían salir de casa a horas intempestivas sin explicación alguna?

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09/07/2012, 21:17
Jean-Luc LeBeau

Jean-Luc LeBeau en persona os recibió en una pequeña sala, exquisitamente decorada con muebles de Luis XVI y carísimas lámparas de cristal de bohemia. El pan de oro brillaba por todas partes, como si nunca se pudiera acabar aquella sala. Las pinturas que adornaban las paredes estabas casi seguro de que eran  las auténticas, que no había ninguna imitación cara, incluidos los Picasso y Gauguins.

-Siento haberos importunado a estas horas, Madame- es lo primero que surgió de sus labios, en un exquisito acento cajun. Te pareció desde luego un hombre imponente. Entrado en sus cuarenta años, era alto, atlético y su pelo castaño, con las sienes plateadas, lo llevaba recogido detrás de su nuca con una cola baja. Trajeado de Armani gris oscuro, os recibió con una sonrisa amable y ladina. No dejaba de ser quien es, el Jefe.

Tu madre inclinó la cabeza y tiró de ti para que hicieras lo mismo, había que demostrar humildad y servilismo ante el Jefe del Gremio de Ladrones.

-No es nada mi Señor, para eso estamos, aunque he de decir que me intriga la urgencia del asunto...- respondió ésta, manteniendo el nivel de sumisión y a la vez frialdad, de no daré fácilmente mi brazo a torcer, a pesar de todo.

-Lo sé, lo sé- terció éste, con un gesto de manos de disculpa -Relajaos Mrs Mandeville, esto será rápido. Ya es hora de que su hijo se dé a conocer formalmente a Nosotros y va a tener la mejor oportunidad que podría tener para probar que es un miembro útil de nuestra gran familia...- sonrió maliciosamente -El Gremio os estará sumamente agradecido por ello. Qué más se puede pedir? 


...

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09/07/2012, 21:27
Directora

[Tres días más tarde]

01 de abril de 2006. Atlanta (Georgia). Mañana.

Tejado de un callejón.

Sí, oportunidad, eso te habían dicho hacía unos días en tu ciudad natal, pero menuda putada. Se suponía que era un trabajo relativamente sencillo, para un novato, alguien que debía probarse por primera vez en un trabajo para el Gremio y estaba resultando un desastre total.

Primero el avión, a qué lumbreras se le ocurrió mandarte en clase turista?! Te tocó al lado de un gordo seboso y un tío enano, con cara de bestiajo, que no paraba de fumar puros apestosos y pedirle cervezas a la asistenta de vuelo. Por Dios! Iba a matar a alguien en cualquier momento, desde luego! Y luego encima va y te pierden las maletas en el aeropuerto y la señora de la ventanilla sólo te dijo que te calmaras y que ya mirarían de localizar tus paquetes y mandarlos a tu hotel. Pues con esa cara de perro pachón y voz de "no tengo sangre en las venas" fijo que lo iban a encontrar!

Tras eso, estaba el hotel, que cojones? Para eso primero debería haber sido un hotel, era una maldita pensión de Holidays Inn!! Qué estamos, en la America Profunda?! Es Georgia, se supone que debería haber cosas mejores que esa mierda de cuchitril con sábanas de dudosa limpieza y chinches en la moqueta de suelo, de la cual dudabas que nadie hubiera limpiado nunca desde que la instalaron a saber cuando.

Y luego el tener que hablar con toda aquella chusma hasta dar con quien tenía el maldito paquete, el que tenías que recuperar. Un paquete pequeño, pero pesado, que parecía que un cliente importante había “perdido” (bonito eufemismo para decir que lo habían interceptado, vamos! Panda de inútiles! No me extraña que necesite al Gremio para recuperar un maldito y estúpido paquete!), en manos de una pandilla de niñatos con navajas y pistolas que se creían los reyes del mundo, como se llamaban a sí mismo? Ah, si, MS-13, unos advenedizos, aprendices de rateros cutres, sin un Gremio que los gobierne y les enseñe el verdadero arte del robo. Nada que ver contigo, desde luego.

Y oj! Ese olor apestoso a humo, coches y suciedad constante, como si nadie en toda la puta enorme ciudad no se duchara nunca. Todo es un enorme insulto a tus sentidos, tan opuesto a la bella y antigua New Orleans.

-Céntrate chico- le dice su guía, un hombre de mediana edad, con una enorme cicatriz que le cruza la cara. Le habían puesto una niñera, porque obviamente había venido solo. Su madre le había mandado sin más y le había repetido 20 veces que no la cagase, que si lo hacía bien y complacía al Jefe, pronto tendrían trabajos mucho mejores y de ahí a la Mona Lisa hay sólo un paso!

Miras hacia abajo, desde el tejado de tejas y Uralita en el que os habéis ubicado, dos calles más abajo, para observar la situación. No era nada buena. Justo cuando llegáis al cuartel de esos criajos os encontrasteis de frente a la policía intentando asaltar el sitio. Lo que se dice un total desastre. Cómo demonios vas a recuperar un paquete de un sitio totalmente sitiado y ocupado por la policía, que además tenía muy mala fama?

Hasta que un ruido llama tu atención, a tus pies, en el callejón sobre el cual os alzáis tú y Slamdog. Algo se mueve entre los contenedores de basura?

Notas de juego

Tirada percepción dificultad verde.

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09/07/2012, 21:51
Marshall Mandeville
- Tiradas (1)
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09/07/2012, 22:58
Marshall Mandeville

Slamdog es un tipo duro; se le nota por la cicatriz. Quizás se la hiciera de la forma más tonta, pero uno se imagina mil formas de haberse rajado la cara antes de pensar que lo atropellaron por accidente, o que al médico se le cayó nada más nacer. Como que lo torturaron en un sótano para derrocar a los LeBeau y no soltó ni una palabra, o que se enfrentó a toda una banda callejera él sólo para defender su territorio. Todo es posible en Georgia. Porque vamos, ¿que unos pandilleros de pacotilla hayan interceptado un mísero paquete del Gremio? ¿De verdad?

Al principio creía que era una broma. Cuando Jean-Luc LeBeau posó su mano sobre mi hombro, estaba seguro de que el gran golpe sería mío. No, el Gran Golpe. Se merece unas mayúsculas. Pero no; querían que me fuera a Georgia con Cara Rajada para salvar un paquete minúsculo de un par de adolescentes que se creen muy guays por llevar un par de tatuajes y tener una navaja en la mano. Dios misericordioso. Yo lo que quiero es entrar en un museo, robarle la gorra a los guardias y, de paso, el Jardín de las Delicias. Algo así. ¡Es el sueño de cualquier adolescente que se precie! No me merezco esto; me tratan como un don nadie. Pues no. Soy el hijo de la Comadreja Dorada y merezco un respeto.

Y entonces las palabras de mi madre aparecen en letras de neón en mi cabeza, parpadeantes y brillantes: no la cagues.

Slamdog me saca de mi ensimismamiento. Que me centre, dice. No me da una colleja; se lo agradezco. Mi madre ya lo habría hecho. ¿Qué has aprendido hoy?, diría mi padre. Pues a librarme de la violencia gratuita de esa pelirroja del infierno, habría contestado. Miro con curiosidad la cicatriz de Slamdog. Yo creo que se enzarzó en una pelea con un loco con un machete que tenía secuestrada a su putita preferida.

- Estoy centrado –replico.

Supongo que contestarle a un tipo duro como Slamdog no es lo más sensato, pero es mi niñera y me la follo cuando quiero. Le contesto como quiero, perdón, y más cuando tengo que lidiar con esos tal MS-13. Por favor; qué nombre más extremadamente estúpido. ¿Se creen un escuadrón de la muerte? Mira que me pongo mi máscara de V de Vendetta y…

Un ruido. Me han enseñado a agudizar el oído y a prestar atención, así que mi vista se desvía hacia abajo. Hay unos cuantos contenedores de basura. Ojalá fuera un zombie. No, un vampiro. Uy, no, que es de día. Seguro que es un gato. Qué asco. Esto es una mierda. ¿Cuándo llegará el momento de entrar en el cuartel y rescatar el paquete? Podría esquivar a los policías si me volviera invisible, aunque eso no es algo seguro.

- ¿Miau? –susurro, esperando que un minino me conteste.

Espero una colleja de Slamdog que no llega.

No la cagues.

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09/07/2012, 23:54
Directora

Aunque al principio te cuesta discernir qué está pasando ahí abajo, en cuanto agudizas un poco tus sentidos te haces una idea muy clara de lo que sucede. De una puerta oculta acaban de salir tres chicos, vestidos como pandilleros: una chica de aspecto latino, a la que le ves algo el canalillo de la camiseta de tirantes desde arriba (es una buena vista, lo has de reconocer, la chica tiene buenas tetas), un chico de cabello castaño claro muy acojonado y un chico afroamericano, que porta una pistola con la que apunta a los otros dos. Oyes con suma claridad, quizás por el eco del propio callejón, como el nègre les ordena que se arrodillen, al estilo ejecución. Está claro que no son amigos, precisamente. La chica parece muy desesperada aunque te da una extraña sensación, como si hubiera perdido solidez? Pero eso es imposible no?

Y entonces lo ves. El Paquete. Pequeño, rectangular, envuelto en papel de periódico y cinta americana gris. Tal como te lo habían descrito. Y lo sostiene la chica latina, la misma que está ahora arrodillada y a punto de morir...

-Ves algo chico?- Slamdog te mira ceñudo, porque te has quedado mirando al callejón. No te dice nada respecto a tu osadía, parece darle igual, al menos por el momento. O quizás es que sabe quien eres. Supones que en algún momento descubrirás el motivo...

Notas de juego

tú decides qué haces, si intervienes o no xD

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10/07/2012, 15:29
Marshall Mandeville

En vez de un gato, lo que sale de entre los contenedores son tres ratas. No entiendo por qué son tan desorganizados y tan caóticos, pero por lo menos una me proporciona una buena visión de sus tetas. Sí, joder. Lo malo es que la van a matar. La verdad es que me da bastante igual; no es cosa mía. Que se cosan a balazos si quieren: mi misión es conseguir el paquete y salir de esta ciudad apestosa.

Y entonces lo veo.

- El paquete.

Se me abren los ojos como platos. Me remuevo. Esa chica tiene el paquete y el negro la va a matar. ¡Deja esa pistola y vete a recoger algodón!, pienso. Porque si la mata seguramente es porque quiere lo que sea que contenga ese dichoso envoltorio (¿papel de periódico? ¿Qué clase de cutrez es esta? Me siento estafado), y si se lo lleva me espera una eternidad en el anonimato ladronil. Mi madre me repudiará y mi padre tendrá que llevarme sándwiches de queso al sótano para que no muera de hambre en mi confinamiento.

Tengo que conseguir ese paquete. Y si eso conlleva salvar a la chica, supongo que su vida también corre a mi cargo.

Miro a Slamdog. No puedo saltar sobre el pistolero callejero porque estamos demasiado elevados, pero quizá pueda llamar su atención para que la chica huya. No, no; eso significaría que tendría que encontrarla a ella después, y… espera, noto algo raro en ella. Parece algo incorpórea, como si su masa corporal fuera más ligera y translúcida que la de los demás. Es etérea.

No, Mars, no te emparanoies. Es imposible. Quiero decir, seguro que es por los nervios. Respiro profundamente y me tranquilizo. Tengo que hacer algo y tengo que hacerlo ya.

- ¡Vamos, tú eres el guía! ¡Ilumíname con tus amplios conocimientos criminales! –insto a Slamdog.

Notas de juego

Cuando hable contigo modifico poniendo la acción, que tengo pensadas varias cosas pero no sé muy bien si son factibles o qué xD

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16/07/2012, 19:15
Directora

Slamdog enarca una ceja, te mira ceñudo ante tu petición extraña y boquea un momento, como si fuera a responder pero se lo piensa mejor y te suelta un pescozón.

-Cállate niño!- y vuelve a su posición meditabunda. Te mira de reojo y tiene la extraña sensación de que no te callarás hasta que le digas algo, así que acaba respondiendo -Lección 1: nunca te metas en peleas ajenas, que se maten entre ellos, es más fácil luego coger lo que es nuestro- lo dice todo en voz baja y grave, aunque su voz es algo carrasposa -Así que mira y observa.

Entonces ambos oís el disparo del chico nègre, directo a la cabeza de la chica latina (que desperdicio con esas tetas!), como un enorme trueno resonando en el callejón. Y los dos esperais algo que no llega: la sangre y el estallido de sesos rosas. No hay sangre, no hay cabeza reventada como una sandia golpeada por un bate de beisbol. Porque no hay sangre?! La pistola humea, la bala ha salido limpia del arma y limpia ha cruzado la cabeza de la chica hasta encastarse en la pared del callejón. Ce que l'enfer!

-Sacré Bleu!- murmura entre dientes Slamdog, que no parece dar crédito a lo que acaba de ver.

Y luego el otro chico, el poca-cosa, es golpeado por el chico nègre y cae al suelo, inconsciente. La chica latina está sola, con tu paquete, y con un negro pandillero armado. Y ninguno de los dos parece lo que se dice normal.

-Bueno, chico, todo tuyo!- te palmea la espalda, enérgicamente y sonríe socarronamente. Casi dirías que intenta empujarte por el borde del tejado para tirarte al callejón, de lo fuerte que te da...

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17/07/2012, 19:46
Marshall Mandeville
- Tiradas (2)
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18/07/2012, 18:47
Blackmistress99

Notas de juego

Lore pon el post y lo de los puntos de karma o no podré responderos ni a tí ni a Aura ^^u

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18/07/2012, 21:43
Marshall Mandeville

Eh, eh, eh, eh. ¿Pero esto qué es? No es posible que esa chica siga viva después de que le hayan disparado en la cabeza. No sólo eso, sino que la bala ha atravesado su cráneo como si, en realidad, ella no fuera totalmente corpórea. La chica del paquete tiene algo especial, por decirlo de alguna manera, y no son precisamente sus pechos. Me quedo pasmado durante un momento, ese que transcurre entre el balazo y el empujón de Slamdog. Me viene de sorpresa; no esperaba que ese armario empotrado me dedicara esos gestos de cariño en un momento como este; un momento que, en teoría, debería ser tan importante para mi carrera (una mierda. Robarle un paquete a unos pandilleros no es un momento importante; es un momento terrible, humillante y horriblemente despectivo hacia mi persona). 

El golpe me echa hacia delante. Intento mantener el equilibrio a base de bracear, pero me es imposible y caigo al vacío. Sin embargo, mi cuerpo reacciona y, en vez de caer sobre alguno de esos sucios incompetentes y ensuciarme la ropa (y, ya de paso, romperme algunos huesos), flexiono las piernas justo en el momento en el que toco el suelo y aterrizo posando las manos sobre el asfalto. Miro hacia el grupo con el ceño fruncido, intentando transmitir seriedad. Puede que ellos sean unos pringados, pero yo soy un tipo profesional. También he visto muchas películas, y mi padre dice que eso le da solemnidad al asunto. 

Me levanto ágilmente, sin desperfectos, y miro al négre. 

- Eh, tú -lo llamo, con voz grave. Sí, vale, todavía me está cambiando, pero tengo que sonar potente; la primera impresión es lo que cuenta-. Deja a la chica. 

El otro me importa bastante poco, la verdad. Que lo mate. Pero la chica, además de tener el paquete, me tiene que explicar ciertas cosas. Como por qué la bala no la ha matado; eso sería una buena historia. Una gran historia. 

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19/07/2012, 17:49
Blackmistress99

Notas de juego

Pasas a responder a la otra escena ^^