Partida Rol por web

Y como hago para haga lo que le yo le diga Maedros?

Pregunto en un susurro antes de reirme ligeramente

Siempre sois tan impaciente? pregunto con un ligero tono provocativo

Me temo que las ordenes de la Paracondesa eran claras, cuando sepamos lo que quiere la sociedad, me temo que tendremos que volver a reunirnos en privado dentro de poco tiempo

Maedros ríe con ganas y niega con la cabeza. Luego, al detenerse el carruaje, se baja del carruaje, y le toma la mano con delicadeza

- Querida, en absoluto, en ocasiones soy extraordinariamente paciente. Aunque por supuesto, depende del motivo por el que uno deba esperar. En todo caso... no es un temor volver a estar a solas contigo, mi dama Mirella

Hothar, Klatet, Hendrick y William: Por la ventana, sin que ellos os vean, contempláis como salen del carruaje lo que no pueden ser sino dos chelaxianos perfectamente vestidos y arreglados. Dedicándose galanteos y palabras amables. Algunos reconocéis de pasadas expediciones y aventuras a vuestro compañero Pathfinder Maedros, que ayuda a bajar a la hermosa Mirella, clériga de Asmodeus que ayudó a Hothar a combatir la plaga del Valle de la Luna Oscura.

Plaga que se repitió al año siguiente y fue otra vez erradicada por el paladín Nazredin y el oráculo Klatet, entre otros.

Al cabo de unos instantes, entran en el edificio y son guiados hasta vuestra habitación. La decorada antesala del despacho de Hestia Themis, la capitana de ésta Logia. 

Maedros y Mirella: El edificio no es muy llamativo, pero sois admitidos sin ningún problema tras sus puertas y conducidos a una sala donde se encuentran ya preparados otros cuatro Pathfinders. Ambos reconocen a Hothar de haber compartido misiones junto a él. Asimismo contemplan a un ballestero acorazado con el cual Maedros trabó discusión filosófica unas semanas atrás, un tipo rubio con un arco muy grande y... ¡un semielfo ciego! O eso parece por sus ojos lechosos...

Vuestros compañeros os distraen de observar la curiosa decoración del lugar, y además alguien se está moviendo al otro lado de la puerta...

- Saludos, Hothar. Me alegra contar con vuestra destreza en las armas para esta nueva misión - dice Maedros acercándose al susodicho y agarrándole el hombro- Les dimos una buena paliza la última vez. - tras estas palabras mira a Hendrick y le sonríe- ¿No te parece Hendrick? Me alegra tenerte otra vez con nosotros - dicho esto mira a los dos pathfinders restantes y una gran sonrisa aparece en sus labios al reconocer a William Grend- Que me aspen si no es William Grend. Han pasado ya algunos meses desde nuestras... aventuras. Me alegra mucho vuestra presencia. Teneis que ponerme al día. - por último se acerca al elfo aparentemente ciego- Mi nombre es Maedros Tolre, camarada pathfinder, hechicero de Cheliax. Creo que salvo que mi memoria me engañe, no habíamos coincidido hasta ahora. - tras estas palabras hace un gesto, presentando a todos a la dama Mirella- No se si conoceis a mi bella amiga, la dama Mirella Andergen, clériga. Creo que somos un gran grupo esta vez. Veremos para lo que se nos requiere

William enarcó una ceja cuando vio entrar a Maedros. La verdad es que el agradaba encontrar una cara conocida, y sabía por experiencia que el hechicero era habil y util. La misión, fuera la que fuera, tenía posibilidades estando ellos dos.
Además parecia conocer a casi todos los demás.

Bienhallado Maedros. Es bueno verte, me alegra ver que todavía estas entero aunque no me tengas para cubrirte las espaldas.

¡Por la terca cocorota de Torag! ¡Por el culo pétreo de los Cinco Reyes! Si es Maedros el Quebrantacorazones. Y mi dulce dama Mirella... - me acerco y le cojo la mano, besándosela con delicadeza. - Ahora sí que podemos montar una buena fiesta, con cerveza, comida y bailes... ¡Un fiestón! Lo pasaremos de miedo, creedme, que yo sé de estas cosas.

Con una sonrisa acepto la mano de Maedros al bajar del carruaje, revisando por un momento con el rabillo del ojo que el cochero ya se esta ocupando de que entre mi equipaje y continuo hacia la casa sin prisa charlando animadamente con Maedros

Despues dejo que el haga las presenaciones, deleitando a los presentes con una sonrisa, mirandolos con curiosidad, solo me saca de la espera el galante saludo del enano

Hothar, cuanto tiempo, se te ve igual de fuerte que la ultima vez, me alegra que estes con nosotros, me sentire mas segura con tu arma cerca

Klatet escucha atentamente a los recién llegados y los saluda cortésmente mientras pondera las repercusiones de esta inesperada reunión...

Al escuchar el nombre del artefacto, Klatet se tensa y sus ojos blanquecinos se vuelven de un blanco más puro, más intenso. Si hubiera manera de saber hacia donde está mirando diríais que mira hacia arriba...

HIJO MÍO

PREGUNTAS POR UNA DE LAS RELIQUIAS MÁS MALDITAS DE TODA LA JAULA

CREADO CUANDO EL MUNDO ERA JOVEN POR INCONSCIENTES HOMBRES RATA DEL CONTINENTE EN EL EXTREMO OPUESTO DEL MUNDO,TERMINÓ SUS PASOS EN LA TIERRA DE LOS RÍOS Y LAS ARENAS CUANDO ELLOS LO ENVIARON LEJOS.

EL FARAÓN HIRKOSHEK II, EN SU SABIDURÍA LO OCULTÓ EN SU PIRÁMIDE AL MORIR PARA QUE NO LLEVARA LA RUINA A TODO EL MAR DE LA PIEDRA ESTELAR CAÍDA.

MIL AÑOS ATRÁS LOS DERRO PERTURBARON EL DESCANSO DEL FARAÓN Y SE LLEVARON SUS RELIQUIAS. PERO EN SU BENDITA LOCURA, TAMBIÉN TOMARON EL ARTEFACTO. AHORA LO HAN ENVIADO LEJOS DE SU CIUDAD. MÁS QUE PARA AYUDAR A SUS CONGÉNERES, PORQUE LO TEMEN. TEMEN SU INFLUENCIA. PREFIEREN QUE DAÑE AL MUNDO EXTERIOR.

SU PODER ES GRANDE, CUALQUIER RATA EXPUESTA A SU MALIGNA INFLUENCIA CRECERÁ Y SE TRANSFORMARÁ EN ALGO MÁS PELIGROSO DE LO QUE VOSOTROS LLAMÁIS UNA RATA TERRIBLE. HORDAS DE ÉSTOS MONSTRUOS OS ESPERANÁN SI NO OS DAIS PRISA.

Hestia no está para numeritos o ataques.

-Klatet. Por las barbas del Senado... ¿Te pasa algo? ¿Llamó a un sanador?.

Al cabo de unos segundos Klatet se relaja y sus ojos vuelven al tono lechoso habitual.

El artefacto... Conozco su origen... Fue creado por hombres rata, en otro continente... Acabó en poder de Osirion y el Faraón Hirkoshek II lo enterró con él en su pirámide para que su maldición no asolara el continente.

Los derro lo robaron de allí, pero descubrieron que su poder era grande y lo alejaron de su ciudad para que su influencia nefasta se viera empleada contra nosotros, los habitantes de la superficie.

Si no nos damos prisa, un ejército de ratas gigantes, más peligrosas que las ratas terribles, nos estarán esperando, pues tal es su poder y su influencia...

- Quien sabe, tiene medio camino hecho - piensa en voz alta Maedros que luego mira a Hestia con una mezcla de pesar y simpatía- Lamento tu pérdida, Hestia. Ya sólo por ella te ayudaría. Por supuesto puedes contar conmigo. En todo caso... sí hay algo que me gustaría preguntar. ¿Pudo tu amiga decir el número y tipo de adversarios que encontró?

Frunzo el ceño, haciendo que casi se junten las pobladas cejas, y junto los labios haciendo que la barba tape por completo mi gesto. La furia me embarga sin poder evitar sentir la pérdida de la capitana. Muchas veces ocurren estas cosas, a mi ya un par de veces. Y no gusta. No señor...

Abro y cierro los puños varias veces para intentar que circule la sangre y ver si así me relajo. No funciona. Doy varios pasos de un lado al otro, intentando quemar energias. Me paro, miro a Hestia, y renuevo mi andar. Tras unos pasos más, me dtengo en un giro, mirándola a ella y a todos los presentes.

Disculpadme mi señora, pero recuperar el artefacto no será la única misión. ¡Baaah! ¡Que mi culo se pele y las orejas se me vuelvan picudas ahora mismo si no vengo a la condesa! Y libraremos a la ciudad de esas inmundas ratas. ¡Oh si!

El tema de las ratas no le hacia gracia a William, y lo del artefacto magico poderoso y maldito menos todavía. No le importaba enfrentarse a un grupo de hombres, soldados, bandidos, lo que sea. Pero que son más faciles de matar. En fin, la vida no es facil.

Vale, vale. Por mi está bien. Claro que iré. No estoy en la sociedad para mariconadas, las misiones faciles que se las queden otros.
Si lo que dice el amigo Klatet es cierto más nos vale salir cuanto antes.

Hestia no pone en duda las palabras de Klatet, si alguien es llamado Oráculo del Conocimiento será por algo, y se vuelve hacia el resto.

-A tus preguntas, Maedros, diré que Arieta pudo ver a varios Derros, pero nunca más de uno o dos a la vez. Sus sirvientes humanos y otras criaturas esclavas hacían todo el trabajo.

Alentada por las palabras de Hothar y William asiente y prosigue. -Tomad este mapa de la ciudad. Aquí está marcada la alcantarilla por la que escapó Arieta. En su delirio no recordaba el camino más allá de ella. Preparaos bien para vuestra misión teniendo en cuenta que será subterranea y que encontraréis lo más seguro Derros en ella.

William recoge su mochila, se la ajusta a la espalda y revisa su arco mientras contesta a la capitana.

Naci preparado.
¿Alguién tiene más preguntas o nos podemos ir? Hay derros a los que matar, y un artefacto del mal que recuperar.

Se acerca a Hestia y le pide el mapa.

¡Vamos allá! ¡Mi urgrosh rebosa alegría! ¡Démosles lo que se merecen!

muahahahahahaha