Partida Rol por web

Quen non foi de vivo...

La hora bruja.

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18/10/2007, 00:47
Catalina Ríos

Cati observa a su alrededor como intentando descubrir algo que no se ve a simple vista, pero pronto pone cara de decepción. Con una mueca de disgusto, se dirige a sus compañeros:

- José ya nos fue de gran ayuda una vez, y quizás lo pueda ser de nuevo. No sabemos si todavía está... aquí -dice con voz algo temblorosa-, pero si alguien es capaz de llamarlo o contactar con él, no deberíamos perder tiempo, pues es muy importante que nos organicemos cuanto antes para lo que se nos viene encima... -y mientras dice esto no puede disimular un gesto de preocupación-.

Notas de juego

Venga, ánimo, que esto está chupao... ¡glub! :-S

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19/10/2007, 14:02
Director

Al mirar a tu alrededor, no ves a aquella sombra que te resultaba similar a Jose y que horas antes te ayudase. Pero en cambio, sí que empiezas a notar algo... el zumbido. El mismo murmullo que te llegaba en su momento en el cementerio de San Andrés, pero menos lacerante, menos zumbido y más murmullo mezclado de unas pocas voces. Viene del centro del terreno, más allá del círculo de árboles, donde están las ruinas de la casa.

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19/10/2007, 14:03
Blanca

-Quizá deberíamos avanzar hacia el interior, hacia las ruinas. Parece el núcleo de lo que está ocurriendo y es donde habrá más actividad y energía disponible.-

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19/10/2007, 19:54
Miguel Osorio

Si.. pero presiento algo.. digo haciendo el amago de emprender la marcha, pero dudo un momento. Algo que creo que siento cuando hay gente ... ¿muerta? finalmente me quedo quieto. No lo sentí la primera vez que vinimos aquí.

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20/10/2007, 13:24
Neves Lobeiro

-Lo que notas es su actividad. Deben estár haciendo algo. Espero que sea cosa de José, porque no nos convienen más enemigos ahora mismo...- dice Neves, tiritando de frío bajo su abrigo de lana.

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21/10/2007, 14:04
Miguel Osorio

Aunque es obvio que no digo todo lo que pienso, comienzo a caminar. Sólo hay una forma de terminar esto..

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21/10/2007, 18:15
Director

Camináis hacia el centro del terreno, atravesando la última línea de tejos que rodea la explanada donde están las ruinas de la casa. Cerca de allí, la fuente desplazada marca el lugar por el que se accede al agujero donde fallecieron los guardias civiles, Ángela y José.

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21/10/2007, 18:16
Director

Notas cómo la sensación es aquí más fuerte. Las voces, ahora puedes escuharlas mejor, murmuran como si hablasen a través de una pared de hielo. No distingues sus palarbas, pero sí los tonos. Un hombre, una mujer, niños... La voces infantiles parecen provenir de las ruinas, mientras que las adultas parecen venir de los árboles.

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22/10/2007, 17:16
Diana de Arcos

Diana se retrasa un poco, con el arma en ristre, realizando lo mejor que puede su papel de guardaespaldas. Escruta con todos sus sentidos el panorama que se le ofrece alrededor, intentando adivinar dónde puede estar la amenaza que sabe con certeza que les ronda.

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22/10/2007, 20:15
Miguel Osorio

nena, eso no te servirá de momento.. digo a Diana mientras giro en torno a mi, observando con los ojos entrecerrados la casa y el bosque. Esto parece un herbidero de gente.. muerta. Cinco años en la universidad... Parece que algo los ha atraído.estudiando psicología. Creo que hemos llegado en el momento apropiado. para acabar diciendo estas cosas.

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22/10/2007, 21:01
Catalina Ríos

Cati, sensiblemente asustada, se dirige hacia Miguel.

- ¿Quieres decir que hay más... espíritus -esta última palabra la pronuncia lentamente, mientras traga saliva con dificultad- a nuestro alrededor? ¿José está con nosotros?
Si esto fuera una película de miedo, pensaría que la chica estaba loca... y obsesionada con ese tal José.

- Neves, ¿por qué están aquí? ¿Qué buscan? ¿Nos ayudarán, son simples observadores o están contra nosotros?

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23/10/2007, 09:56
Neves Lobeiro

-No podemos saberlo todavía, si no deséan mostrarse a nosotros o al menos a Miguel. Mientras, creo que conviene que empecemos el ritual. Excepto Daniel y Diana, los demás sentáos en círculo alrededor mío. Durante el ritual yo cantaré y hablaré y en algunas ocasiones os pediré que repitáis un cántico varias veces. Os iré dando instrucciones.- diciendo esto, Neves se sienta en el suelo, seguida de Alba y Blanca.

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25/10/2007, 13:57
Catalina Ríos

Cati observa a las tres mujeres sentadas en el suelo, y seguidamente se sienta junto a ellas, esperando a que Miguel haga lo propio y Neves comience a dar las instrucciones pertinentes.

Todo esto parece tan irreal; si no fuera por la presencia de mi padre, pensaría que se trata de una terrible pesadilla.
Aún así, quizás acabe despertándome...

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25/10/2007, 16:47
Daniel Ríos

Daniel se coloca ne el lado opuesto al círculo, fuera de él, de donde se encuentra Diana.
Le agrada la seguridad que el arma parece infundir en la persona de Diana. No le importaría tener otro arma en sus manos, pero lamentablemente solo lograría hacerse daño con ella.

Daniel dirige su mirada hacia su hija, asintiendo y a continuación da la espalda al círculo de personas intentando discernir mas allá de las sombras negruzcas que les rodean.

Jamás anheló tanto un cigarrillo como ahora.

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25/10/2007, 22:59
Director

De repente y antes de que puedas reaccionar, escuchas una de esas voces acercarse, acercársete por detrás y decirte:

-Hemos reconstruido el círculo de tejos. Quizás os sirva.-

Es, inequívocamente, la voz de José.

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26/10/2007, 19:00
Miguel Osorio

Cuando Neves termina sus palabras, y yo me disponía a seguir a la joven Cati, siento un escalofrío y me giro rápidamente. ¿José? y me quedo callado. La mirada perdida en el suelo.

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27/10/2007, 12:29
Diana de Arcos

Sin dejar de vigilar los alrededores, Diana observa al grupo con el arma lista para lo que sea. Tiene la vaga sensación de que sólo una parte de su cerebro funciona, como si la mayor parte de lo que es (o mejor, de lo que era) hubiese corrido aterrorizada a esconderse en lo más profundo de su mente. Prefiere no pensar en ello y se concentra en la tranquilidad que le da sentir el peso del subfusil en sus manos. Respira hondo y vigila.

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27/10/2007, 18:56
Director

Al volverte, vuelves a ver la familiar figura borrosa de Jose, elevándose en el aire y llendo a ocupar una rama de un tejo. Pero ves algo más. Como ya habíais visto anteriormente, la casa estuvo rodeada por tejos, pero el círculo más cercano a ella estaba incompleto. Tres árboles había desaparecido con el tiempo, quemados, talados o muertos por un hongo. Y sin embargo, de alguna manera, allí están. Sabes que no están, pero los ves, relucientes, azulados y contrastados como si fuesen el negativo de lo que fueron en vida. Los fantasmas de los árboles, de nuevo en su sitio.

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28/10/2007, 23:48
Miguel Osorio

Debemos continuar, junto los tejos que están cerca de la casa. Aquel es el mejor sitio, Blanca. digo mientras miro el tejo bajo el que estamos ahora, y sonrrío. Luego comienzo a andar hacia dónde he hablado. Los fantasmas que hay en la casa... no son malvados.

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29/10/2007, 13:10
Daniel Ríos

- Al menos no todos, quieres decir - explica Daniel, dirigiéndose a Miguel - Porque no creo que el hijo pródigo al que queremos... detener, sea un cacho de pan precisamente.

Daniel juguetea nerviosamente con su mechero, encendiéndolo y apagándolo, una y otra vez.