Partida Rol por web

Me paro delante del bar al que nos ha traído el señor Graga:

-No estoy seguro, pero me parece que nuestro compañero tiene un gran humor, y si, nos ha traído a los bajos fondos. -Me cruzo de brazos, y les comento- Llegado a este punto, ya no tenemos vuelta atrás, entraremos a tomar algo, y a ver si conseguimos información para llegar a nuestro destino.

Abro la puerta, y les invito a entrar.

Nada más entrar, Mou-R se percató de la clase y distinción que tenía aquel local. Justo el tipo de sitio que parecía hecho a medida para alguien como él, si no fuera porque los precios eran prohibitivos y no estaban a su alcance.

- Miradme. Miradme todos, no os olvidéis de mi cara porque algún día volveré aquí, y entonces me haréis una reverencia en cuanto entre y os pelearéis por ganaros mis favores.

- ¿Seguro que tú has estado aquí antes, Garga? ¿Esto es lo que tú llamas "un garito con muy mala fama"??? -le preguntó, abandonando sus ensoñaciones de tiempos futuros.

La no presencia de CSs de color rojo le hizo temer lo peor. ¿En qué clase de lío se habrían metido ahora?

- Por cierto, ¿quién de vosotros invita a la primera ronda?

Entráis dentro, la gente del local os mira un poco raro durante unos instantes, alguno incluso no tiene pudor en señalaros con el dedo, pero no tardan en volver a lo suyo.

Es el que regenta el local el que os dirige la palabra, un CS Amarillo – Por los circuitos de nuestro querido ordenador, ¿Qué será para tan variopinto grupo?

El hombre está tras la barra, hay taburetes y también mesas, todo distribuido por colores como mandan los cánones.

-A menudoz zitioz me traeiz, comento mientras jadeo de cansancio. No podia eztar ezto maz lejoz.

Para una vez que estaba en un sitio tan pijo y yo con estas pintas, sin arreglar, oliendo mal, sudoroso. Amigo Garga ezto ze aviza antez hombre, yo no puedo venir a eztoz zitioz con eztaz pintaz que tengo una reputasion que conzervar.

No puedo dejar de observar el local, quien sabe cuando volvere a estar en otro igual.

-Bueno.. eran los "Bajos Fondos", ¿no? -digo, avergonzado, comprobando que desde la útima vez que estuve, habían reconvertido el local en algo tan colorido y pijo que mareaba..

-Ya que estamos aquí, como dijo Mou.. ¿os apetece tomar algo? Yo invito, por el paseo que os he hecho dar. ¿Os parece? Así podremos hacer unas averiguaciones disimuladas acerca del paradero de Mac-R-ron..

- Bueno, va, si tú invitas...-recalcó Mou, no fuese a ser que luego hubiesen problemas a la hora de pagar.- ¿Nos sentamos? -preguntó señalando una de las escasas mesas rojas-Así, cuando venga el camarero a ver qué queremos, podremos comenzar nuestro interrogatorio, sibilina y disimuladamente.

- Ya podéis empezar a pensar en una buena manera de hacerlo, sin que se note. -Si hubiese sido otro tipo de local, hubiesen podido pedir un plato de Maca-R-rones pero, en aquel bar de copas, no pegaba mucho.

El empleado de detrás de la barra lo flipó un poco con lo que pasasteis de él, pero se conformó con escuchar las palabras “Yo invito” y ver como os dirigíais a una mesa, tuvisteis la precaución de sentaros un una de color rojo.

El local era pijo a rabiar, todo limpio e iluminado, hasta las meses emitían luz, casi se hacía necesario el uso de gafas de sol.

El camarero se acercó – A ver… dejadme adivinar… ¿tres bebidas rojas y una naranja? – Quedé esperando confirmación y añadió… - ¿Os pongo alguna tapita? Tengo unos chipirones buenos, buenos…

El camarero me dió susto con esa mirada profunda y su gesto tan ameno y divertido.

-Vale con los chipis, y las bebidas supongo que también, ¿no? -dije, mirando a los demás a ver si alguno rehusaba.

Esperando probar por primera vez la refrescante bebida naranja, les digo en voz baja:

-Bueno, Garga es el que conocía este lugar, supongo que sería el mas indicado para preguntar, pero como quiero que seamos un grupo unido y feliz, os doy vía libre para que consigáis la información entre todos mientras yo disfruto de mi bebida.

Viendo que estaba haciendo un gran trabajo, me relajo un poco para ver como evolucionaba el grupo.

Algún día el ordenador estará orgulloso de vosotros.

Vas a ver tú...

- ¡Buf!-resopló como quien no quiere la cosa, pero asegurándose de que el camarero le oyese- Con el calor que hace hoy, no hay quien viva. La república... digo... la re-única forma de aliviarse, va a ser con una bebida roja de ésas. Y unos chipis, claro.

Mientras pronunciaba despacito para colar subliminalmente el santo y seña que les habían dado, bizqueaba y hacía muecas de una forma bastante ostentosa, intentando darle más énfasis al asunto. Ridículo, vamos.

Satisfecho de sí mismo, observó atentamente la expresión del camarero (que parecía tener una mueca perenne en su cara), atento a ver si había alguna reacción.

Había que aprovechar que Garga invitaba y aun que no nos podíamos pegar la juerga padre, teniamos que pasar desapercibido en este local tan lujoso

Amigo, dije al camarero, me guzta ezte local. Me guztaria haserle una propuezta, mire uste' yo en miz ratoz librez zoy dj y me  preguntaba, bueno le pregunto zi habria alguna pocibilida' que pudieze un zervido' , me señalo a mi con las dos manos, pincha' en ezte local

Traiga algo maz de picar que yo tengo que mantener ezte cuerpito que dioz me ha dao...

El camarero toma nota de las bebidas, los chipis y “algo más”, no me inmiscuyó en las palabras de Danit pero si pareció reaccionar a lo que dijo Mou.

- ¿!Cómo… Como dice usted!? Repita, repita – Arranca una hoja de su libretita y la deja delante suyo luego el lápiz que estaba encima de su oreja también, mientras mira hacia todos lados nervioso.

Mientras espera de dirige a Paqui-R - ¿A pinchar? ¿Qué no ha traido dinero o qué? – Hable con mi compañero que esta poniendo la música si a él le parece bien yo no tengo inconveniente

Me quedo anonadado ¿he oído bien lo que ha dicho mi compañero?

Veo que el camarero ha reaccionado ante aquella pequeña y traidora frase, y le digo en voz baja:

-No tendrá Macar-r-rones en el menú de hoy, ¿verdad?

El camarero abrió aún más sus peculiares ojos dándole un aspecto más atractivo a su rara belleza

- ¿Y cuantos quiere? - Giró de forma tan brusca su cuello que parecía que se lo fuera a romper

El futuro de Mou pendía de una nota: o la posible infiltración entre los rebeldes o el pelotón de fusilamiento. Cogió la libreta y escribió, con pulso firme y decidido.

VIVA LA REPÚBLICA

Miró hacia todos los lados, por si alguien les observaba y le entregó la nota al camarero.

- Tome, aquí tiene el pedido. Chipirones incluidos.- le sonrió, mostrándose aparentemente tranquilo.

MIentras Mou le da la nota, le contesto al "bicho":

-Quiero uno, el jefe de todos los de la olla.

Me quedé superagusto después de demostrar mi pericia hablando en clave.

La agudeza con la que le estaban colando la contraseña y la misión parecía dar resultado.. Pero tanto hablar de chipis y macarrones a mí me daba hambre..

Deseé que además de sernos útil nos trajese ya el pedido, pero no me atreví a decir nada para no meter la pata mientras el camarero se decidía a responder a las peticiones de los compañeros.

El camarero en su imperturbable gesto de amor y cariño tomó el papelito y lo leyó.

- Jum… - Danit-N acabó de rematar “el pedido” – JUMMMM Esperábamos a cuatro CS’s de color naranja y no, uno naranja y tres rojos… pero bien, es correcto todo lo demás, vengan, acompáñenme, ese pedido no puede ser entregado aquí, ese “Macarrón” pesa mucho como para traerlo a la mesa.

Seguramente Paqui-R se quedó con las ganas de su comida y bebida, pero al menos no le cobraron a Garga-R, aún.

El camarero camina hasta la zona de atrás la puerta que da al almacén de provisiones, y espera a que lo sigáis.

Bueno, pues parecía que la estrategia desarrollada había dado sus frutos. Satisfecho pero desconfiado de que no se torciesen las cosas, Mou-R se levantó del asiento dispuesto a ir con el camarero. Miró al CS naranja a ver si daba su consentimiento y, si era así, seguiría a su jefe hacia el almacén del garito.

Me levanto del asiento un instante después que Muo, y les digo a todos los cs:

-Señores, sigamos a este tipejo.

En cuanto se da la vuelta para guiarnos, doy un par de golpes a la funda de mi pistolaser, haciendo una señal a los compañeros para que tengan las armas a punto.

Si aquí hay traidores, tendremos que acabar con todos.