Partida Rol por web

Misteriosamente, Diana renuncia al tema del DVD, entregándomelo de nuevo. Eso me provoca un gran alivio, porque el contenido inicial es realmente vergonzoso. Y casi todo el mundo por aquí lo conoce, aunque hace ya un tiempo y ya se les habrá olvidado. Y Diana no lo ha visto nunca, por suerte.

Mejor, sí... -Digo cogiendo el DVD- Nadie quiere verme bailando delante de un estadio lleno de público... -Digo sonriendo, entre aliviado y divertido- ¿Un juego? ¿En qué tipo de juego estás pensando?

¿Qué? ¿Cómo?

Bailando. Con las animadoras. Ahora todo tenía más sentido. De ahí lo del chantaje, claro. Un extraño sentimiento me había invadido antes, un tonto miedo a ver qué era lo que hacía con alguna animadora. Pero no tenía por qué, ¿No?

-¿Juego? ¡Olvida el juego! - volví a quitarle el DVD y me acerqué al reproductor. – Sólo será un momento, así que podemos verlo mientras pensamos a qué jugar… ¿No? - dije sin esperar respuesta y metí el disco, para después darle al play. - ¿Qué tal verdad o atrevimiento? Tampoco conozco muchos juegos... - comenté mientras se iniciaba el video.

No suelo ir a fiestas o tener reuniones de amigos.

- Aunque después de esto creo que Jayden jugaría con ventaja... - reí al empezar a ver el contenido.

¡Eh!

¿Pero qué...?

El DVD vuela de mis manos, por segunda vez. Veo a Diana correr con él en las manos, camino del mueble donde está el televisor y el reproductor. Mi primer instinto es salir tras ella, con toda la intención de quitárselo otra vez, pero cuando la alcanzo ya ha sacado el disco y lo está metiendo en el reproductor. Desisto de la idea, levantando las manos y el rostro hacia el techo, con los ojos casi en blanco. Me dejo caer hacia atrás en el sofá y cojo un cojín para taparle el rostro, mientras oigo el himno del instituto y Diana propone un juego.

Después de esto yo ya no me opongo a nada, pero Remy, me las vas a pagar. Te dije que quería hacer desaparecer todas las copias...

Cuando finaliza el himno, se qué es exactamente lo primero que va a verse en la reproducción, así que no pienso quitarme este cojín de la cara. Me hundo en el sofá y espero a que termine.

Después de eso, el árbitro da inicio al partido y ya me da igual. Retiro el cojín poco a poco, preparado para taparme de nuevo si Diana se está partiendo de risa.

Después de los comentarios de Jayden sobre el vídeo me esperaba cualquier cosa, así que me senté en el borde del sofá dispuesta a reíme un rato. Noté como este se tapó con el cojín, y eso ya me sacó una sonrisa. Sin embargo, al comenzar su intervención en el baile me quedé alucinada, y me arrimé aún más al borde del asiento para verlo mejor. No comenté nada durante el baile, simplemente veía el video con la boca abierta.

Al terminar miré a Jayden, que empezaba a salir de detrás del cojín.

-Pero… ¿Estás loco? – dije pegándole con otro de los cojines. - ¿Cómo vas a hacer desaparecer todas las copias? Es… ¡Es genial! ¿Dónde has aprendido a bailar así? – pregunté asombrada.

Remy abrió los ojos como platos cuando miro esa parte del video – Por el amor de satán, no me acordaba de esta parte – reía por lo bajo, tomando y destapando dos cervezas.

-Hombre eso fue magia, después de ese ejercicio tendrás que rehidratarte – Le paso una de las botellas – Anda bebe un trago y ríete de ti mismo –

Tomo el cel y mando un whatsapp

Ya había dejado todo en el horno asi que faltaban unos cuarenta minutos para que estuviera la comida – Dime que tienes más de esos movimientos, espera!- miro a Jayden mientras le señalaba con la mano que sostenía la botellita de cerveza – Porque no demuestras uno de tus bailes…. Te reto - miro a Diana - Ahi tienes tu juego. verdad o reto - La mirada de Remy cambio a una picara y malvada en cierto modo.

Cuando asomo la cabeza apartando ligeramente el cojín de mi cara, de improviso veo a Diana demasiado tarde, golpeándome con otro cojín del sofá. No me da tiempo a esquívarlo, tan solo a amortiguarlos a medias con el que tenía.

¿Q-qué? -Pregunto sorprendido. Lejos de reírse de mí, cree que ese bochornoso espectáculo estuvo genial. Me quedo mirándola, con una sonrisa avergonzada, sin saber qué decir. Es algo que no me esperaba, aunque me encanta la cara que pone al decirlo. Remy me ofrece una cerveza, afirmando no recordar esa parte, cosa que no me termino de creer. ¿Como puede olvidarse de esto? Pero, aunque no he terminado mi refresco, la acepto. Me apetece más, ahora mismo- Bueno, mi madre insistió en meterme a clases de baile de pequeño, y aún me acuerdo de algo. Pero ese bailecito fue más merito de las animadoras. Era la época en que Samantha se fastidió la rodilla, ¿te acuerdas, Remy? Y hablé con las demás sobre la apuesta y les hizo gracia, así que estuve ensayando con ellas, jajaja.

Doy un trago a la cerveza, y Remy no tiene otra ocurrencia que retarme a bailar aquí y ahora. Casi escupo la cerveza por la nariz de la impresión. ¿Ponerme a bailar aquí, ahora, delante de ellos? ¿Delante de Diana, ahora mismo, en la situación tan rara e incomoda en que estamos?

Si acepto el reto, más vale que vayáis a por todas cuando yo os rete a vosotros...

Espero una respuesta sincera...

- Que si lo recuerdo, pero eso de la rodilla fue un misterio – se rasco la nariz un par de veces con el dorso de la mano, cuando iba a tomar un trago miro a Diana – Tomas?- pregunto – tengo esta cerveza, si la quieres, o puedo buscar otra del refri –

Luego escucho a jayden sus últimas palabras, el rosto de Remy cambio – sabes que no me voy a tirar atrás, dispara con lo mejor que tengas - sonrio con malicia ahora si - Cuando me toque nuevamente ya veras lo que tengo en mente -

Remy retó a Jayden a deleitarnos con otro de sus bailes, parecía haber encontrado un juego que le gustaba. Este contó que había tomado clases de pequeño, aunque las animadoras le habían ayudado mucho.

-Ahora no hay animadoras que te ayuden… - reí. – Bueno, venga, acepto. – accedí, al parecer ambos conformes con ese tema de los retos.

Remy me ofreció una cerveza, y aunque no solía beber normalmente la acepté.

-Esta está bien, gracias. – dije tomando la que tenía en la mano. – Creo que la voy a necesitar… Pero no para atreverme con mi reto... Sino para no recordar mañana el baile de Jayden. – volví a reír.

Maldición, pensé que se echarían atrás...

Está bien... -Digo con resignación, poniéndome en pie con la vista en el techo. ¿Cómo lo he hecho para que la noche se tuerza tanto?- ¿Me sostienes la cerveza? -Le pido a Diana mientras me dirijo al reproductor y lo apago, encendiendo el equipo de sonido y seleccionando música de baile. Veamos como salgo de esto... El tema empieza a sonar, suave y tranquilo al principio, y voy adaptándome al ritmo dando pequeños oaais y moviendo los brazos...

...Cuando la cosa empieza a animarse, hago un paso que me gustaba mucho antes, a lo Michael Jackson, deslizando los pies en círculos...

...Para seguidamente dar unos pasos con cruce de piernas...

...Un poco de movimiento de caderas con apertura y curré de piernas...

...Y cuando la canción está lista para la traza final, un gesto dramático abriendo las piernas y bajando al suelo con la mano para terminar.

Entonces la canción termina, se hace el silencio, y me siento totalmente estúpido y ridículo, doy una vuelta sobre mi mismo y sonrío avergonzado.

Venga, ya podéis reír a gusto... -Digo extendiendo la mano para que Diana me devuelva la cerveza- Me toca, ¿no? Diana, ¿verdad o reto?

Le sostuve a Jayden la cerveza mientras hacía su prueba, que resultó en un baile un tanto peculiar.

-Bueno, no ha estado del todo mal. – reí, aunque sin desternillarme. – Lo mejor ha sido ese gesto del final… ¿Cómo ha sido? – dije, intentando imitarlo. – Tengo que pensar cómo usar este potencial en el club de teatro. – volví a reír y le devolví la cerveza a Jayden.

Eché otro trago a mi cerveza, cuando casi me atraganto al escuchar que la próxima era yo.

-Eh… Pues… - Estoy bastante acostumbrada a que me ridiculicen así que… - ¿Reto? Venga, reto. - dije sin estar del todo segura.

Cojo la cerveza, riendo avergonzado mientras Diana no desaprovecha la ocasión de hacérmelo pasar peor. Sin embargo, cuando me siento de nuevo en el sofá, a su lado, elige la opción del reto.

¿Estás segura? -Pregunto provocativamente, antes de inclinarme hacia delante y tomar el mando del equipo, pulsando el botón del play, dejar el mando sobre el sofá y coger la botella de Diana de su mano.

Muy bien, señorita... Deleitemos...

La música empieza a sonar, y yo me cruzo de piernas esperando a que me enseñe cómo se mueve.

-AJAJAJAJAJA BRAVO!- la carcajada de Remy se escuchó bastante fuerte, Jayden termino el baile y siguieron los aplausos.  – Eres lo más Tío, debes enseñarme alguno de esos pasos –

Luego llegaba ese momento que estaba esperando – Bien, a ver que te traes entre manos…. Cuenta cual será el reto Jay, no te lo guardes -

Al escuchar aquel “¿Estás segura?”, me temí lo peor, eso significaba que aquella cabeza ya había maquinado algo. Aun así asentí, pensando que nada podía ser tan horrible, pero cuando cogió el mando del equipo y me quitó la cerveza no me lo podía creer. Remy estaba entusiasmado esperando el reto de Jayden, y este con un “Deleitenos”, justo antes de que empezara la música, confirmó que lo que me pedía era que bailara.

-Pero… ¡Acabas de bailar! ¿Vale repetir prueba? – miré a Remy, pero me temía que ninguna excusa me iba a servir. – Está bien, hmmm… - cogí la cerveza de las manos de Jayden y le eché un buen trago, antes de devolvérsela. – Pero que esto no salga de aquí. – les advertí, apuntándoles con el dedo índice.

Conozco esta canción…

Me había subido a un escenario varias veces en convenciones, karaokes, y karaokes de convenciones, pero este ambiente… Era muy distinto. Me mentalicé en algunos segundos, mientras me quitaba las gafas y las dejaba sobre la mesa, sólo tenía que interpretar.

Cogí mi chaqueta vaquera y me la puse, antes de alborotarme un poco el pelo y ponerme frente a ellos de espaldas.

-Ponmela desde el principio, por favor. – pedí a Jayden, antes de volver a mirar hacia el televisor.

Este puso la canción, y cuando la melodía empezó a sonar comencé a moverme lentamente al ritmo de la música, hasta que empezó a escucharse la voz de la cantante, a un ritmo mucho más movido, y me dí la vuelta, abriendo mi chaqueta de repente y comenzando a bailar.

Lancé la chaqueta a los chicos tras unos segundos, alzando mi brazo en uno de los puntos álgidos de la canción, sin dejar de moverme al ritmo de la música.

Continué bailando, cambiando de pasos y de ritmo según lo pedía la música, con movimientos exagerados como había hecho desde el principio, tal y como esa cantante acostumbraba.

Al finalizar les hice una reverencia, como la que los actores hacen en el teatro, y me dejé caer en el sofá entre los dos, exhausta.

-¿Contentos? – reí y cogí la cerveza de manos de Jayden - Repito, esto queda entre nosotros. - miré a ambos y les sonreí, antes de darle un trago al botellín.

Miré después a Remy, pensando en qué podría preguntarle o mandarle como reto, ya que era el único que quedaba; pero al no conocerle mucho tampoco tenía muy claro con qué podría pincharle.

- Mmmm, estoy generosa, voy a darte opciones. - intervine finalmente, mirando a Remy. - Si coges verdad, tienes que decirnos que chica o chico del instituto te gusta más y menos, y por qué. - se me ocurrió aquella tontería, pensando en la dichosa web del instituto, y es que no quería pasarme. - Y como reto... Tendremos que intercambiarnos la ropa. Vestirte de mujer, vaya. - reí, convencida de que no escogería esa opción.

Asiento con la cabeza, con los ojos cerrados y una sonrisa satisfecha. Cuando pregunta si vale repetir prueba. Si yo pringo, pringamos todos.

Además, estoy deseando verla bailar.

Se pone la chaqueta y me pide que ponga la canción desde el principio, cosa que hago viendo cómo le da un buen trago a su cerveza.

El espectáculo me deja embelesado. Comienza a moverse poco a poco, para darse de repente la vuelta y quitarse la chaqueta apasionadamente, arrojándola. La cojo al vuelo, sorprendido por el gesto, y lanzo un grito de ánimo como los de los conciertos, comenzando a dar palmas al ritmo que se mueve. Mis ojos se iluminan viéndola bailar, hasta que hace una reverencia y se deja caer junto a mí. Le tiendo su botellín y, cuando lo coge, Aplaudo suavemente.

Te lo has ganado, sin duda. Voy a tener que pedirte un baile un día de estos... -Digo sonriente, antes de darme cuenta de lo que estoy proponiendo y apartar la mirada, algo turbado al recordar de nuevo la situación en que nos encontramos Diana y yo.

Sin embargo, vuelvo a sonreír cuando Diana ofrece opciones a Remy. De hecho, las opciones son ambas muy divertidas.

¿Chica o chico? Uuuuu... A ver si voy a descubrir algo nuevo esta noche sobre ti, Remy, jaja. Tranquilo, ya sabes que yo no juzgo esas cosas... -Río burlándome de mi colega, convencido de saber positivamente que no va a sorprenderme como han hecho "otras"- Por favor, escoge la opción dos, tío, tienes que estar monísimo de tía...

Arqueo una ceja con el reto de Diana, no era que le molestara si no algo le llamo la atención * Tendremos que intercambiarnos la ropa. Vestirte de mujer*; lo medito dos segundos o quizás menos – Bien adelante, ya que tendremos que intercambiar la ropa, ve poniéndote cómoda– Dijo Remy quitándose la camiseta y siguiendo por los pantalones.

-Eso sí, no me pendre la tanga que lleves puesta- sonrió ante su comentario, Tatch no tenia pudor alguno o quizas tenia seguridad ante toda accion que realizara.

Remy me dejó sin habla cuando escogió la segunda opción, y no precisamente por animarme a ponerme cómoda, ya que para entonces ya me había quedado claro que no tenía demasiados pelos en la lengua, sino porque me había dado la impresión de ser del tipo de chicos al que no le haría mucha gracia vestirse de mujer.

Desde el principio le había visto tan masculino, con aquel aura de chico duro, que llegué a pensar que podría ser de aquellos tíos a los que les molesta que se juegue con esto. Pero no, estaba equivocada, y me alegraba de ello. Remy se mostraba seguro y tenía cierto aspecto de chico malo, lo que le hacía atractivo a pesar de no tener un cuerpo especialmente llamativo, pero además estaba demostrando ser cercano y divertido.

Hice toda esta reflexión mientras veía cómo se quitaba la ropa allí mismo, hasta que su comentario sobre mi ropa interior me hizo reaccionar. Inmediatamente eché la mano hacia mi trasero, tratando de comprobar si mi ropa interior asomaba de alguna manera.

-No llevo tanga, ¡Listo! – grité enfurruñada, por haberme tratado de engañar, tras comprobar que mi ropa interior seguía en su sitio. – Quiero decir, que… - comencé avergonzada, al darme cuenta que había hablado de más. – Es igual. – dije pasando la mano por mi nuca, y cogí la ropa de Remy. – Ahora vuelvo. – saqué la lengua a ambos y me metí en un baño.

Me quité la camiseta negra, bastante ancha, la minifalda vaquera y los leggins y me puse los vaqueros de Remy, que no me quedaban mal, y su camiseta, que me quedaba bastante ajustada en la zona del pecho pero que igualmente me entró.

-Aquí tienes. – dije a Remy con una sonrisa, dándole mi ropa, y me puse las gafas. – Vístase y elija víctima. – añadí, volviendo a sentarme en el sofá.

Tomo la ropa apenas Diana salió del baño – Je, pensé que tenías más agallas – La miro mientras se colocó la camiseta negra y luego la falda. Se detuvo un instante para mirarse en el reflejo de la televisión.

-Mierda que me veo sexy hasta con falda, luego dime donde la compraste – Estallo en carcajada – Deberías probar esto Jay, se siente un frescor importante – luego se dejó caer en el sofá – Bien ahora me toca a mi verdad?- Pregunto de forma enigmática por así decirlo.

- Bien esta es para los dos juntos… verdad o reto -

-No soy ningún pez. – respondí sonriendo a Remy ante su comentario de las agallas, echándome a reír cuando se vistió y comenzó a comentar la jugada. – Sí, diría que te queda mejor que a mí.

Continué riendo, deteniéndome al escuchar que esta vez el reto era para los dos.

-Definitivamente teníamos que haber fijado las reglas antes de empezar a jugar, entre repetir pruebas y retos conjuntos… Vaya morro tenéis. – reí y eché otro trago a la cerveza, que casi había acabado ya. – Venga, va, pero nada de volver a bailar, ¿Vale? – guiñé un ojo a Remy, que se encontraba a uno de mis lados, y me acerqué un momento a Jayden, que se encontraba al otro. – No te ofendas, hemos quedado en que me lo pedirías… - le susurré, dado el comentario que había echo tras mi baile.

Apuré lo que quedaba en el botellín y lo posé en la mesa, poniéndome en pie y poniendo mis brazos en jarra y las piernas un poco abiertas, imitando la clásica pose de Superman.

-Y bien, ¿Qué tenemos que hacer? ¿No nos das opciones? – pregunté a Remy, antes de mirar a Jayden – Te dejo escoger, verdad o reto.

La prueba termina siendo de lo más divertida. Remy es y ha sudo siempre un tío sin vergüenza alguna, de modo que ponerle un reto de este tipo esta destinado a volverse contra uno. Aún así, no me corto en reírme de él cuando aparece con la ropa de Diana.

Te queda realmente bien, Remy, creo que al fin has encontrado tu estilo, jaja.

Diana, en cambio, no deja de sorprenderme. No se corta un pelo en irse al baño y cambiarse también, poniéndose la ropa de mi amigo. Tiene un desparpajo que...

De repente, Remy salta con poner una prueba para los dos a la vez. Mi gesto se vuelve serio, de repente. ¿En que diablos está pensando? Ya la he cagado una vez, esta noche. Dos ya sería demasiado... Sin embargo, Diana me susurra acerca de bailar, recordándome que había quedado en pedírselo. Eso me devuelve la sonrisa. No sólo no le incomodó el comentario sino que ha tomado nota de él.

¿Qué te parece ambas? -Replico a Diana con una sonrisa divertida. Está claro que ha conseguido volver a levantarme el ánimo con tan sólo unas pocas palabras- Verdad Y reto...

Lo estaba pasando realmente bien con los chicos. Había pasado de sentirme fuera de lugar a sentirme realmente agusto. Por lo general tendía a ser bastante cauta con la gente que no conocía, si bien podía desmelenarme con facilidad en “mi ambiente”, pero la confianza que me dio Jayden desde el principio y que Remy fuera un buen amigo suyo, acabaron haciéndome sentir muy cómoda; incluso tras lo sucedido en mi casa con Jayden. Quizás la cerveza y lo poco que había comido también tuviera algo que ver.

-¿Las dos? – pregunté, deshaciéndome de mi pose superheroica y señalando a Remy. – Esto traerá graves consecuencias para ti. – dije en una fingida amenaza y reí. – Vale, las dos, de perdidos al río. – respondí a Jayden.

Puede ser divertido.

Había enviado un par de mensajes con anterioridad, así que volví a mirar el teléfono para ver si había recibido respuesta, pero nada.

¿No querrá hablar conmigo? Igual no debí decir nada por mensaje...