Partida Rol por web

Recibo el abrazo de Jayden y sonrió cuando dice que no me conoce tanto como pensaba.

-Por eso yo soy la periodista.

Escucho lo que dice. De el ultimo año la Universidad y la libertad que ella promete.

-Gracias Jayden. Siento si no te lo he contado antes. Es que es...difícil. Mi hermana piensa que lo hago por ser la rebelde de la familia. Negué con la cabeza.

Y Jay vuelve a abrazarme lo cual sinceramente agradezco mucho. Por que un buen abrazo era lo que necesitaba ahora mismo.

Cuando dice lo de las posibilidades comienzo a reír.

-jajajajaja. Que bobo. Ademas según parece , no soy tu tipo...bien parece que te gustan mejor...dotadas. Comento con una sonrisa refiriéndome claramente a Diana.

La verdad es que me había quitado un peso de encima al hablarlo con Jayden. No era que necesitara contarlo a los cuatro vientos o hacer una fiesta de ello era simplemente la libertad de poder expresar lo que era delante de una persona que no me juzgara. Eso en este instituto o en cualquiera era casi una utopia.

Si, bueno... -digo, soltándola, ahora que parece que se encuentra algo mejor y trata de cambiar de tema aprovechando mi broma- Parece que todos tenéis muy claro lo que siento, y tal. Ojalá lo tuviera yo tan claro...

Lanzo un cansado suspiro. El tema de Diana me trae bastantes quebraderos de cabeza, y ni siquiera se por qué estoy luchando exactamente. Y lo peor es que esto parece que no ha hecho más que empezar. Sin embargo, todo el mundo habla de ello como si estuviera más claro que el agua.

No lo se, es decir, me cae genial, de verdad que sí... -Comienzo a explicarle a mi amiga, probablemente porque necesito hablar con alguien yo también. En el fondo, me gustaría haber podido hablar con ella anoche, aunque eso supusiera habernos quedado despiertos hasta las tantas charlando. Pero al volver estaban también los otros, y se me quitaron las ganas- Pero también somos muy diferentes. Sí, tenéis razón, es rara, es distinta. Y eso, en lugar de hacer que quiera alejarme, hace que quiera conocerla mejor. No se, es raro, nunca me había sentido así. -Miro alrededor, haciendo un barrido por toda la explanada de entrada al instituto, que tantas veces he recorrido- Y todos sabemos cómo son las cosas por aquí, ¿verdad? Pasar tiempo con ella va a suponer un montón de problemas...

Parece que esté tratando de buscar excusas para echarme atrás, pero todas se me vienen abajo casi al momento. Porque para todas ellas encuentro una respuesta casi al momento, de forma que me importan una mierda. Sólo hay un único problema, y es no tener claro lo que siento.

¿Sabes? Para ti el fin del instituto va a ser todo un principio. Yo, en cambio, lo veo como un final. No se lo que quiero hacer cuando termine, en que universidad intentar entrar, qué carrera quiero hacer. Mis notas tampoco son para echar cohetes. Las asignaturas optativas de este año las he elegido al tun tun, en función de si me motivaban más o menos, sin pensar en que me sirvieran para hacer una cosa u otra. -Meto mis manos en los bolsillos del pantalón, hundiendo la cabeza entre los hombros mirando alrededor, algo avergonzado- Así que me espera un año sin aspiraciones, en el que ni siquiera se si lograré estar en el equipo de baloncesto, y con la cabeza echa un lío.

Veo una lata vacía cerca de donde estamos, y le doy una patada, haciendo que se pierda bajo uno de los coches que están aparcados cerca.

Bah, no me hagas caso, ya se me pasará esta paranoia organizando la fiesta del sábado -Sonrío, quitándole importancia al tema. Bastantes problemas tiene Robin ya como para liarla con los míos...

 Escucho a Jayden.

-Los polos opuestos se atraen. Eso es un hecho comprobado. Sonreí. Supongo que es muy distinta a la lista de admiradoras que sueles tener y eso es lo que te gusta. A pesar de que es un poco rara parece bastante inteligente y eso si es una novedad a lista de chicas con las que has estado jajajaja. Le doy un golpecito en el brazo a modo de broma. Supongo que para ser el ultimo curso sera el mas largo. Le miro con una sonrisa. No soy las indicada para decir esto. Pero haz lo que quieras sin pensar en lo que piensen los demás. Que quieres estar con Diana. Hazlo. Eres Jayden Garlan. El que no te admira en secreto te tiene envidia. Pues aprovéchate de ello.

Entonces escucho lo del fin del Instituto y tengo la sensación de que esta bastante perdido. Esta es la prueba de que no es bueno tener unos padres tan pesados como los míos ni tan despegados como los suyos.

-¿ no se si sabrás que estudiare periodismo? Dije burlona. Te apuntas a mi misma Universidad y estudias Marketing y dirección de empresa. Dirás que coñazo Robin. Y yo te dire pues no. Por que la materia la conoces mejor que nadie. Cuando termines la carrera podrás montar tu propia empresa organizadora de eventos. Le mire encogiéndome de hombros. Se te da de miedo. Y creo que seria un trabajo que gustaría.

-Espero no haberme venido arriba. Pero es que creo que se daría bien.

Me pongo colorado como un tomate, con una sonrisa nerviosa y estúpida. Lista de admiradoras, tíos que me admiran o envidian... No se, nunca me he visto así. Es cierto que estoy bien visto, por las fiestas y por estar en el equipo de basket, que me llevo bien con la gente y eso. Pero tampoco me veo como alguien tan especial. Y tampoco es que tenga un éxito abrumador con las tías. O sea, sí que he salido con algunas, pero no más de lo normal.. ¿no?

Aunque sí que es cierto que todas eran muy diferentes a Diana. Física y... sí, intelectualmente. Y en personalidad las gana a todas ellas de calle, eso es seguro.

Eres la más indicada para decirme lo que sea, Robin -Le digo, aún avergonzado- Si alguien lo es, eres tú.

Eres mi mejor amiga. Tu opinión vale más que la de todo el puto instituto junto.

¿Marketing y dirección de empresa? -Digo arrugando el morro y mirando hacia el cielo- ¡Dios, suena a coñazo total, Robin! Jajaja. Pero eso de organización de eventos... ¿Tú crees? -Me quedo pensativo un instante, imaginándolo. Conferencias, exposiciones, reuniones de empresa, bodas... No suena mal del todo...- Vale, hagamos un trato -Digo haciéndome el interesante- Yo estoy dispuesto a ir a tu misma universidad, con gran esfuerzo por mi parte, y hacer que tu estancia allí sea maravillosa, pero a cambio tú harás dos cosas por mí: una... -Levanto el índice delante de su cara- ...me ayudarás con los estudios, listilla -Le saco la lengua, guiñándole el ojo- Y dos -Levanto también el corazón, mostrando los dos a la vez, antes de acercarme para susurrarle más de cerca- Cuando monte esa empresa, me dejarás organizarte tu boda de ensueño con la chica que te merezca. Y la despedida de soltera, ya que estamos.

¿Qué me dices? Responde rápido que tenemos que ir a clase...

Le da la ultima calada a la chustilla que tiene por cigarro y lo tira al suelo, pisandolo, para entrar al instituto.

La primera mierda del mes.

Sonrio cuando veo a Jayden rojo como un tomate.

- ¿ es que no se da cuenta?

- gracias Jayden eso significa mucho. Pero luego no te arrepientas .comento con una sonrisa.

Asiento cuando dice que con dos condiciones. Sería genial ir la misma universidad. Cuando dice la primera condición sonrio.

- vale. Ni que no te ayudara ya.

per cuando dice la segunda me pongo roja como un tomate. ¿Boda? ¿Organizar un boda? Si ni he salido del armario. Y ya me quiere organizar una boda.

- si si acepto. Venga vamos que no llegamos. Comento nerviosa mientras me levanto y tiro de el.

A eso me refiero, que necesitaré que sigas ayudándome. -Digo mientras parpadeo incesantemente, con una sonrisa de niño bueno- Y arrepentirme no es una opción, prometido.

Hago un aspa con la mano sobre mi pecho, tan sólo un instante antes de que me agarre del brazo y tire de mí hacia la entrada del instituto, con repentinas prisas.

Vaaale, vaaaale... No lleguemos tarde, jajaja.

Ambos nos dirigimos a grandes zancadas hacia la puerta del edificio principal. Creo recordar que nos toca clase de Economía. Coñazo total, pero lo voy a necesitar para esos nuevos planes con Robin.

Salgo a la entrada con Diana, poniéndome las gafas de sol al cruzar la puerta. Sin embargo, todo mi buen humor se desvanece al ver mi coche. Sigue donde lo dejé aparcado, pero las dos ruedas que alcanzo a ver están desinfladas, evidentemente pinchadas. Me quito las gafas, observando el coche con gesto inexpresivo. He visto estas cosas desde siempre, pero nunca me lo habían hecho a mí. Rodeo el coche y compruebo que, en efecto, son las cuatro ruedas las pinchadas.

Vaya por dios... Qué cosas pasan... -Le digo a Diana, antes de sacar el móvil- Perdona un momento, tengo que hacer un par de llamadas...

La primera a mi seguro, para que me manden una grúa y me cambien las ruedas. No habrá problema en que me lleven después el coche a casa, supongo.

La segunda llamada, a Remy. Quería hablar, y esta es una buena oportunidad. También yo quiero hablar con él. Además, necesito transporte, ya de paso.

Remy salió del instituto a la entrada donde se encontraría con Jaydem, bebió dos sorbos de café y le busco por la mirada hasta encontrarle – Hey… - Observo que estaba acompañado, una mueca rara apareció en su cara pero se acercó hasta él.

- por fin te tengo a tiro, que tienes entre manos – pregunto

Qué pasa, tío -Le digo levantando la mano para chocársela. Estoy junto a Diana, ambos al lado de mi coche, cuyas ruedas están todas pinchadas- Creo que no os conocéis, ¿no? Remy, esta es mi amiga Diana. Diana, mi colega Remy.

Terminadas las presentaciones, hago un gesto con cara de circunstancias señalando al coche como si tal cosa.

¿Cómo lo ves? Parece que he provocado alguna pataleta hoy, jeje. Tenía que acercar a Diana a su casa y pasar por la mía a por la ropa de deporte para las pruebas del equipo de basket. ¿Te vendría muy mal hacerme de chófer un rato, y mientras hablamos de la fiesta de este finde y de alguna cosa más que tengo en mente?

Remy salió del instituto a la entrada donde se encontraría con Jaydem, bebió dos sorbos de café y le busco por la mirada hasta encontrarle – Hey… - Observo que estaba acompañado, una mueca rara apareció en su cara pero se acercó hasta él.

- por fin te tengo a tiro, que tienes entre manos – pregunto

-.-.-.

Miro a Diana y se acercó tomándola por el hombro con una mano y dándole un beso en la mejilla – Mucho gusto de conocerte – Luego observo lo que Jayden le mostraba, no pudo evitar sonreír disimulando poco con un trago de café. Luego vino la parte de ser chofer – sabes que te costara, no? – Busco las llaves en el bolsillo – Andando –

Tras esto les guio hasta el auto – sabes puedo conseguirte ruedas nuevas, va si es que quieres mover tu auto del estacionamiento – Abrió el Impala invitando a subir a sus acompañantes.

-No sabía que estabas saliendo con alguien – Miro a Diana – hace cuanto están juntos? -

Ya he llamado a la grúa para que se lo lleven, me lo llevarán esta tarde o mañana a casa. -Digo abriendo la puerta trasera a Diana para que entre, rodeando el coche luego para sentarme junto a Remy delante- Pero me harán falta algunas de repuesto, supongo, así que si quieres ir moviendo el tema... -Concluyo con resignación.

No lo estamos, jeje. -Respondo a su pregunta con humor, lanzándole una mirada a Diana en el asiento trasero- Pero tranquilo, últimamente nos lo dicen mucho... -Le guiño un ojo a Diana antes de volver a mirar hacia delante.

¿Y a ti que tal te ha tratado el verano? ¿Has... conocido a alguien? ¿Y como es que tu hermana se ha venido a estudiar aquí, no estaba en un internado o algo así?

-El verano me ha tratado más que bien, estuve en Londres con mis padres y luego tras convencer a Talia que hiciera el papeleo para venir *América* viajamos juntos a Buenos Aires… allí sí que se montan fiestas de las buenas – Sonrió y miro por el retrovisor a Diana – Y no, no conocí a nadie, pero si no estás con Diana… - Volvió a mirar por el retrovisor y se giró para mirarla antes de arrancar el auto – Seria irrespetuoso si te quisiera invitar a tomar algo a la salida de clases? – el auto comenzó a moverse y la vista fue a dar a Jayden y luego a la calle.