EL viaje en el taxi fue muy cómodo, más de lo que pude haber pensado, a pesar del desvió que tuvo que tomar a causa de una manifestación que había mas adelante, no me molesto para nada, aun así recordé que debía ir primero al Eliseo, no entiendo porque razón había dicho otra dirección, eso de seguro pasa cuando uno se está peleando con el asistente que nunca hace nada bien, y se desorienta por completo, en fin al llegar amablemente el señor del taxi decide esperarme y hacer de chofer por el resto de la noche, *Y a decir verdad no esperaba menos de él, jajajaja.*
Al entrar en el gran edificio noto un mostrador con 2 guardias de seguridad, los cuales no llamaron mi atención, sin embargo una pequeña niña se encontraba delante, *Y no es que yo sea una gran modelo, ojo que si lo soy, pero quien rayos pudo vestir a esta niña*, me distraje un rato viendo dicha vestimenta y aunque por dentro me burlaba a carcajadas por fuera mostraba un rostro amable, al tranquilizar algo mis pensamientos me acerco a donde están los guardia, evitando por ahora acercarme a la niña.
—Buenas se encuentra el buen Gustav o Wilhelm Waldburg necesito presentarme ante ellos.
Con una sonrisa espero su respuesta, luego volteo y vuelvo a ver a la pequeña niña causándome cierta duda, *Que haría una niña así aquí, quizás las apariencias me engañen y no sea lo que parece*.
Berlín parece desierto hasta que llegas al centro ves la policía antidisturbios terminando de encerrar en la furgoneta algún manifestante, la guardia regula el tráfico y te dejan pasar sin ningún problema. Cuando estas a punto de llegar allí ves salir a una niña algo furiosa con la que casi atropellas, la oyes decir.
Yo soy actualmente el regente de la capilla de Berlín. Maxwell Ldeson. Fui informado que llegarías esta noche y nosotros los tremere protegemos a nuestras niñas, hay un lugar en la capilla para que descanses de día, MI criado te acompañara a donde tengas que ir yo me quedare en el eliseo tengo asuntos que tratar
Berlín parece desierto hasta que llegas al centro ves la policía antidisturbios terminando de encerrar en la furgoneta algún manifestantes, la guardia regula el tráfico y te dejan pasar sin ningún problema. Cuando estas a punto de llegar allí ves salir del eliseo a una niña algo furiosa con la que casi atropellas, la oyes decir.
El guarda de seguridad te mira y te da un libro de firmas.
Firme el registro por favor. Donde aparezca su nombre, si no aparece su nombre le daré cita para mañana, hoy tienen la noche muy ocupada señorita.
Miras el registro y firmas donde está tu nombre. De repente.
YA ESTOY ARTAAAAAAAA!!!!!!!!!. A ella le hacéis casi y a mí me ignoráis estúpidas bolsas de zumo. Hablare con mi primogénito os vais a enterar.
La niña abandona el eliseo.
Uno de los guardias no puede contenerse más y dice- Por fin creí que no se iría nunca. O lo siento señorita. Coja el ascensor hasta el 3 piso allí hay una sala de espera enseguida la llamaran.
Al entrar en el edificio, te das cuenta que por dentro es todo lo contrario, es un edifico con todos los adelantos tecnológicos y modernistas, en el centro un mostrador con dos guardias de seguridad que te están mirando.
Paro el choce en la cuneta, bajo y le pregunto a la moza y le pregunto, que es eso k no le creen, que me explique lo del dragon.
Una vez que me lo ha contado, despreocupandome totalmente de ella....., me monto en el coche y me dirijo a los eliseo para reunirme con los principes.
Katerinka escucha la pequeña voz y mira hacia abajo, al ver a la niña se sorprende y mas al ver el aspecto de la pequeña, realmente era estravagante, entonces se da cuenta que lleva un muñeco de peluche, agachandose para ponerse a su altura y con voz amable pregunta:
- Hola pequeña, como estas? que haces aqui? y tus padres?
A Katerinka le parecia realmente extraño que una niña estuviera ahi y mas con ese aspecto, sin embargo, no podia evitarlo, tal vez porque llevaba demasiado poco tiempo siendo vampiresa, pero para ella los niños pequeños eran eso, niños peqeños
Me acerco al mostrador.
-Perdonen, acabo de llegar a la ciudad y quiero ver a los principes, ¿donde y cuando puedo verlos?
Si no pongo otra cosa hablo siempre en aleman.
Escucho lo que dijeron los guardias, sonrió y continúo hasta el ascensor, a medida que avanzo varias inquietudes por la triste niña desaliñada me llegan a la cabeza, *¿Qué habrá querido decir esa niña, quien será realmente? ¿Por qué nadie le habrá puesto atención? * Normalmente esas cosas no me llamarían la atención, pero es que tanto mal gusto por la moda y el estilo me causa cierta indignación, lo cual hace que piense en ello, y sienta que dicha presencia es la causa de que los guardias también la ignoraran, además de que quizás no esté en la lista y solo estaba fastidiando. En fin llegando al piso 3, entro en la sala de espera, miro a mí alrededor, y espero a que sea llamada.
William sigue hacia su destino, en la calle parece que ha habido una manifestación o algo por el estilo. Una niña aparece de repente en el camino diciendo cosas muy raras.
La niña te mira de forma extraña penetrante, al poco sonríe, A bueno eres de la estirpe, aunque no te conozco, te recomiendo no entrar en los parques o el dragón ira a por ti. La niña desaparece delante de ti. Te quedas unos segundos perplejo por la reacción de la niña y te das cuenta de que ya estás en tu destino y que el edificio de donde la niña Salió es ahí donde debes entrar. En el interior ves a dos guardas de seguridad en un mostrador y a un tipo rubio delante de ellos.
en el siguente mensaje añade a William que es el rubio que ves.
no tardas nada de echo la niña salio de eliseo, Aparcas el coche y entras, En el interior no hay nada mas que 2 guardias de seguridad en el mostrador, aunque el edificio en su interior es moderno el exterior es de tono clasico. Te acercas a los guardias y antes de poder hablar se oye la puerta entrando un hombre.
añade a satanas en el mensaje de contestación ya que el es el que entra por la puerta.
Subes a la 3 planta y nada mas salir, ves un monton de butacas y libros para leer, en una de las butacas hay una mujer esperando, te sientas en uno ha esperar como te han dicho, escuchas una discursión, proveniente de la sala continua, parece 3 hombres gritando entre si, al poco el ascensor se pierde y en su regreso sale de el un hombre.
El guardia te saca un libro, con nombres, si eres uno de ellos firma sino tendras que esperar hasta mañana los principes hoy estan muy liados y no atienden sin previo aviso.
Miras la lista y firmas sobre tu nombre. El guardia recoje el libro. Suba por el ascensor hasta la 3 planta alli, espere asta que le llamen, los principes estan reunidos en este momento y hay una señorita esperando antes que usted.
Cojes el ascensor hasta la 3 planta.
Niña: Mis padres, supongo que te referirás a mi Sire, hace un siglo que no lo veo. En cuanto a tu otra pregunta estoy enfadada con estas dos bolsitas de zumo que siguen ignorándome, solo soy una niña en aparecía, a y mira te trae el libro para que lo firmes, ya que tienes cita con alguno de los principes o quizá con los dos.
Estais los 3 en la sala de espera, primero en llegar fue Katerinka, seguida de Satine y por ultimo Vassili.
Katerinka sube por el ascensor meintras piensa:
- Asiq ue debe ser una malkavian esa pequeña, pero quien puede ser tan depravado como para convertir en vampiro a una niña pequeña, no se, prefiero no pensarlo la verdad
Al abrirse las peurtas se dirige al lugar dondo aparentemetne tendra que esperar, por lo que no lo duda y se sienta en el primer asiento que ve, al parecer no hay nadie mas, asi que simplemente se sienta a esperar mientras observa la habitacion pero distraidamente sin prestar demasiada atencion a los detalles que en ella hay
Al llegar a la sala de espera me doy cuenta que no esta tan vacía como pensaba, dentro veo a una chica sentada, imagino que al igual que yo está esperando verse con Gustav y Wilhelm así que sonrientemente me le acerco y la saludo.
—Hola, Mucho Gusto, Me llamo Satine, y tú?
Espero a que responda y luego continúo
— ¡Un Placer! ¿Imagino que vienes por lo mismo que yo cierto?
Escucho lo que responde la chica y me siento cerca de ella mirándola y mirando los detalles de la sala, además sonriendo pienso sobre mi actitud, * En realidad solo quiero ser amable, y poner algo de conversación para pasar el rato, sinceramente no me imagino lo aburrida que estaría si tuviera que esperar callada y sola en esta sala, por suerte no estoy sola y tengo como gastar el tiempo, además quien quita y haga nuevos contactos, al parecer en este lugar nadie me reconoce, así que debo ser lo más amable posible mientras me adapto. *
Antes de proseguir comienzo a escuchar unos extraños ruidos, al parecer una discusión o algo así en la sala de alado, pero intento no prestarle mucha atención así que me volteo y continúo.
— ¿Escuchaste también eso? Extraño ¿cierto?, pero bueno y que me Cuentas, ¿desde dónde vienes tu?
Volvía a retomar la conversación placenteramente, de repente veo como entra otra persona en la sala, cuando volteo a ver mejor, no evito sentir la más horrible nausea que podría sentir, * Simplemente no paso a los Nosferatu y por la apariencia de este no me cabe la duda de que es uno, hasta la niña mal vestida que estaba al llegar podría soportar y tolerar en cualquier situación pero no a uno de estos.* Intento sonreír, pero evidentemente mi humor había cambiado, así que solo hago silencio y me vuelvo algo distante dentro de la sala cambiando mi lugar y sentándome lo más lejos posible de eso.
Me dirigo hacia Wilhelm Waldburg, y le comento, principe, soy nuevo en la cuidad, acabo de llegar y deseo perdiros permiso para permancer en berlin.