Partida Rol por web

La biblioteca es un lugar vetusto pero algo más agradble que el resto de salas de la casa. Al menos hay sillones y un par de mesas, aunque todo lleno de una capa de polvo que ríete tú de los suelos de la Rue del Percebe 13. Los libros se amontonan por todas partes, aunque, para vuestro disgustos ¡son casi todos de decoración, huecos por dentro!

Es una biblioteca...piensa sin darle importancia.
Yo me esperaba más un cuarto con un gran tocador para retocarme el maquillaje, pega más con mi cuerpo explendoroso.

La Chica Increible se pasea por la biblioteca, mira algunos libros y encuentra algunos interesantes. Puede que sean pistas...

Cuando entra en la biblioteca encuentra a la Chica increible con un libro en la mano mientras se pasea como si de un pavo real se tratase.... A mal tiempo...

- !AAHHH! Una cinta de cassette... Ni mas ni menos Durcalia Jurados !BUAG!. El asesino debe ser muy malicioso... no se me ocurre objeto que pueda provocar una tortura mas dolorosa que este...

Se acerca a la chica para ver los libros que ha cogido.

- ¿Cual es la temática del marsupilami?... ¿Novela negra o policiaca?

Filemón ojea las estanterías con una mano en la barbilla, como meditando. En realidad no tiene ni idea de literatura y le interesan bien poco los libros, pero siempre hay que aparentar que se es un investigador leído.

- ¡Anda! ¡Un bastón!- dice cogiendo el bastón y dándole unas vueltas - Esto me recuerda a mis tiempos como luchador de Jiu-Jitsu que nos entrenaban para ser mortíferos con el bastón...

Hace un par de movimientos de karate y el bastón sale disparado rompiendo un par de bombillas de la lámpara del techo. Algo abochornado lo recoge del suelo y sale silbando por la puerta de vuelta al comedor...

[viene del Comedor].. sin embargo, López nunca llega a entrar en la Biblioteca. Después de que abandonase el Comedor, no se le vuelve a ver.

Carpanta entra en la habitación persiguiendo a López que... ¡misteriosamente desaparece! Desconcertado, observa a los demás ocupantes de la biblioteca.

-¡Diablos! ¿Dónde se ha metido mi pollo asado?

Mira alrededor y empieza a comprobar que su desayuno no está escondido detrás de algún estante, tirando montones de libros al suelo en el proceso.

-¿No se lo habrá comido alguno de ustedes, verdad?

-¿Que se ha encontrado por aquí?- pregunta Anacleto mientras se acerca a Spirou para observar la cinta.

Por fin la cucaracha enorme y negra sde habóia detenido, pero debía ser alguna clase de mutación ya que  juraria que la había oido hablar. Ni corto ni perezoso cogió la silla apunto a la cucaracha y se prera para asestar el golpe

Anacleto observa a tiempo a Rompetechos, y se esconde detrás de Spirou para evitar ser golpeado por la silla.

Spirou esquiva como puede el golpe, que debido a la altura del agresor iba directo a zona frágil.

- !Tengo suficiente con estar envenenado! Agradecería que ningun marsupilami me dejara fuera de combate... No sobran cerebros pensantes en esta casa.

Algo enojado se dirije hacia el comedor, en busca de una mano experta que le ayude a hilar el misterio...

SuperLopez entra en la habitacion.

Aqui no habra.... una puerta oculta verdad?. Lo digo, porque no encuentro un baño.

Un sonido muy molesto sale de su estomago.

Visto lo visto volvere a buscar.

Se queda un momento mirando los libros y parece estar pensando en algo con un ojo medio cerrado. O quizas sea otra cosa.

Anacleto, viendo que no hay nada mas de interes por lo cual quedarse en ese lugar, sale de la biblioteca y se dirige al comedor, donde espera encontrarse con mas gente para discutir sobre las pistas.

Nuevas pistas en esta sala:

- Una carta del banco Santafé Circular Hidrogenado señalando que el propietario de la cuenta, un tal Ataulfo Sanchidrián González, con residencia en esta casa, está en 200.000 cucas de números rojos.
- Una botella cerrada, llena de un licor verdoso. Aparentemente es de alcohol, pero no tiene etiqueta alguna.

Haddock se acerca a la botella con los ojos como platos, y la coge, sin encoomendarse a nadie...

COPÓN CONSAGRAO.

Ejta deuda ej mu grande. Seguro que jijnifica algo impottante.

Cojo la carta del banco.

Spirou entra en la biblioteca y encuentra al capitán junto a Arensivia.

-¿Habeis encontrado algo más? No puede ser que hayan abierto el marsupilami para nada.

Arensivia reacio a mostrarlo sujeta un papel.

- AHH¿Que tienes ahí?

Observo cómo un mozalbete de uniforme, pero sin ningún signo de graduación superior a la mía, se dirige de manera impropia a un superior, cómo yo lo soy.

FIMMMMMMMMMMMMMM... MÉ...

VAMOH A VÉ CHI NOH SENTRAMOH, Y LE DEHAMO DE PELDÉ E REPPETO A LÓ CHUPERIORE...

EIN...

SHAVÁ...

POQQUE TE VA A CAÉ UN PURO ENSIMA QUE TE CAGAH...

A vé, ¿a qué Unidá pettenese uhté? Poqque tié narise e unifomme dojo...

¿no cherá uhté homochechuá?

O lo que é peó, ¿no petteneserá a la Unidá Militá de Emegensia?, que no son ni soldaó, ni bomberoh, ni na de ná.

Y ya no me rematé, ¿no cherá uhté homochechuá y peteneserá a la Unidá Militá de Emegensia?

¿y pa qué quié chabé que é lo que he cogío?

Chi na má que é una catta del banco.

COÑIO, YA.

Tintín entra a la habitación luego de haberse quedado clavado mirando algo, que posiblemente ha considerado una pista sobre el paradero de Milú. Ha permanecido agachado observando a un punto invisible en el marco de aquella puerta, moviendo los dedos por la madera, y tanteando en la unión del zócalo. Así, hubo reacción de su parte cuando se precipitaron al cuarto los que ahora, en este mismo momento, están en su centro.

- ¿Han encontrado algo? - pregunta, abriendo los ojos lo más que puede; es ahí cuando ve al Capitán y a la botella - ¡Por todos los...! ¡Capitán, por favor no piense en beberse eso! ¡Imagine que resulta ser que la causa de la muerte fue veneno, y se encontraba en la otra botella que encontramos vacía! - hace una pausa, y mueve la cabeza - Y no diga que ya estamos envenenados, no sabemos si es el mismo veneno.

Sin quitar los ojos del Capitán, por si se le ocurre hacer algún movimiento con la botella, Tintín mira a Arensivia.

- Señor, ¿una carta del banco? ¿Habla de algún crédito o alguna deuda, tiene algún nombre?

-Mi querido Tintín, ¡¡YA estamos envenenados!! Responde haciendo caso absolutamente omiso de la puntualización de su compañero. El capitán abraza la botella con su férreo y musculoso brazo, yergue el mentón, altivo, y sacude la cabeza, asintiendo.

-¡¡Rayos y Centellas!! ¿Es que tengo que andar preocupándome por algo que YA ha ocurrido? Además... esto es una pista... no es una prueba. Mmmmm... ni siquiera sé si esta especie de alpargata en forma de botella contiene alcohol ninguno. ¡¡RECAÑONES!!

Y sale de le Biblioteca hacia el comedor de nuevo, con aire ofendido.