Partida Rol por web

La sección de Emil fue la primera en ponerse en firmes frente al General. El resto de guardias iban llegando de todas partes, y aunque se notaba que la compañía había sufrido bajas en todas las unidades, el estado de ánimo de los nativos de Krieg era firme, como se esperaba de ellos. Hombres aguerridos que no temían a la muerte ni a los enemigos del Imperio, hombres valientes que solo deseaban poder servir a su amado Dios Emperador y llenar de cadáveres enemigos su camino.

El general estaba quieto, charlaba discretamente con un coronel mientras esperaba, paciente, a que toda su compañía se reuniera. 

Hago un rápido vistazo a la sección antes de cuadrarnos delante del general, los miro con orgullo, son mis hombres, mis compañeros de lucha. Hemos sangrado en el campo de batalla, eso nos hace hermanos de sangre. Los he visto reír, disfrutar de las horas previas de la lucha siempre en silencio, distante porque tristemente como oficial que era, tendría que sacrificarles por el emperador llegado el momento. Y con el nuevo ascenso aún se hace más difícil, si eso es posible, mucho más difícil…

- “Dragones de arena” – grito y la respuesta es el sonido de las botas al golpearse en la posición de firmes.

- General, la sección esta preparada para recibir sus órdenes – digo a mi superior cuadrándome ante él.

Orgullo y honor.

El ogrete se intentó poner recto como un palo, pero no le salía...su espalda estaría encorvada hacia adelante siempre, con esa "chepa" característica.....sin embargo, su mirada se dirigió hacia arriba, conforme le habían enseñado, la barbilla apuntando hacia arriba....mirando al cielo.....

Durante unos instantes permaneció así, hasta que, aburrido, bajó la mirada y observó a su alrededor....quería comer y beber, o quería matar a los enemigos del emperador, pero ahí lo tenían....

De todas formas, no dijo nada...sabía que Emil se enfadaría, así que esperó. 

Cuadré los pies, tan fuerte como mi memoria me decía que era correcto, junto a mi, un unisono de botas golpeandose retumbó. ¿Genial otra misión encadenada?...¿está gente no sabe lo que es la extenuación?...¿o simplemente no les importamos?

Y vaya si nos pusimos firmes, si hubiera caido una bomba alli en medio ahora mismo poco nos hubiera importado hubieramos muerto muchos sin dar un paso atras, era lo que se nos pedia, daba igual se no teniamos la mejor punteria, si no corriamos todo lo que se nos exigia, si no comiamos, si pasabamos penurias tipica de la instruccion y de la guerra. Eso si, sabiamos morir como ninguno, dando y recibiendo guerra, como un cuerpo con muchos individuos y en el centro de todos estaba yo, calentito y protegido, conocedor de que mi futuro iria mas haya que lo de estos soldados, conocedor de que yo tenia una deuda con el en terra y no pensaba fracasar.

Conforme pasaba el tiempo iban llegando más guardias imperiales, ya no solo de Krieg, sino de los propios Imperator Custodes, ese ejercito que había destinado un total de cuatro compañías para aquella campaña. Con el mismo semblante se iban colocando donde sus oficiales más directos les indicaban mientras que las planas mayores se reunían con vuestro propio general.

La conversación entre los diferentes oficiales de alta graduación se veía algo animada, a pesar de las perdidas dentro de un margen aceptable estaban con buen animo y predisposición al combate. Emil y sus hombres, que eran los que estaban más cerca de aquel elenco de oficiales pudieron escuchar algunas palabras sueltas tales como...

 - Debemos organizar una defensa... - 
 - Si esos marines dejaran de discutir esto iría más rápido -
 - ya dije que se debió desplegar a los catachanes... ahora estaremos sin refuerzos -

Observo por el rabillo del ojo a mis hombres, mientras escucho a medias la conversación entre los diferentes oficiales de alta graduación. Nos tocara volver a combatir en breve, por lo que parece. Bueno ya descansaremos cuando estemos muertos - pienso y justo veo a Tronchahuesos intentar aguantar en posición de firme sin mucho éxito. Es un ogrete, no le puedo pedir más, pero tengo claro que no me gustaría estar en el pellejo de mis enemigos teniéndolo delante.

- Señor - comienzo a decir - permiso para que mis hombres pasen a posición de descanso en espera de recibir las ordenes de acción.

El general ignoró o sencillamente no escuchó a Emil, pero si fue el caso del sargento mayor de la compañía el cual se encaró con Emil - Relajaos soldados, pero nada de risas ni juegos tontos ¿De acuerdo? - su voz dura como el acero, su actitud belicosa en cada gesto lo hacía un hombre temido por muchos, más si cabe por algunos comisarios - estamos de mierda hasta el cuello eh - le dijo a Emil dándole un leve golpe en el hombro - justo al estilo de Krieg... por cierto, buen trabajo con tu sección, os habéis organizado bien - lo felicitó de manera extraoficial 

- No más que otras veces Sargento mayor - asiento levemente con la cabeza -  Todo el mérito es de mis hombres, cuando tuvieron que dar un paso adelante y echarle un par lo hicieron sin dudar un ápice, al estilo de Krieg - respondo a Albert echando una mirada orgullosa a los hombres que conformaban la sección - Pero esto solo ha sido el comienzo, esperemos que sigan demostrándolo según pasen los días - añado para que las felicitaciones no se les suban a la cabeza, un soldado demasiado crecido,  la mayoría de las veces es un soldado muerto.

- ¿Sabes a donde nos van a destinar o seguimos esperando a que los marines decidan que parte del pastel nos dejan a la guardia imperial? - pregunto. 
 

Norragh miró hacia Emil en cuanto nombró la palabra "pastel", como si fuera un perrito hambriento y con ojos de felicidad.........

Solo falta que saquen unas banderas, y traigan unas sillas. Hay una maldita guerra y cada segundo cuenta a que demonios estaban esperando...

Mi impaciencia la calle con rezos, y asi me quede en un estado de trance mientras repetia algunas letanias mil veces dichas.
 

Una sonora carcajada salió de su cubierta boca por la mascara de gas. Negó con la cabeza repetidas veces y palmeó el hombro de Emil con cierta camarederia. Nunca se mostraba así con otros soldados, solo con los miembros de la compañía que se habían ganado su respeto... y Emil, lo logró.

No... que los Marines, divinos todos ellos, hagan lo que les salga del bolter - comentó con voz algo airada - la guardia imperial hará lo que mejor sabe hacer, defender con su vida el Imperio del hombre mientras ellos se llevan la gloria... organizaremos la defensa me temo

Mientras hablabais, dejaron de llegar los otros guardias imperiales. Había varios cientos allí reunidos, sin duda les habían zumbado bien, pero para sorpresa de muchos, la moral estaba realmente alta a pesar de la ultima batalla y de las perdidas.

Los soldados de la Imperator Custodes se iban saludando con alegría entre ellos, las dos primeras compañías sin su Mariscal habían sido rescatadas por sus hermanos... pero quedaba demasiada guerra por librar; al menos, parecía que empezaba a organizarse mejor el asunto.

Los oficiales seguían hablando a buen ritmo, los asistentes portaban placas de datos con mapas que iban mostrando y estos, con gestos y asentimientos iban siguiendo las sugerencias de otros generales o sencillamente rebatiendo las de otros... no eran como los marines, había una colaboración clara, se dejaban las enesmitades de lado por el bien común... así es como se debía actuar.

- Al menos aún somos un buen numero de unidades, loado sea el emperador. Pues nada a esperar entonces a que lleguen el resto y a preparar las defensas, a ver si nos dan un leve respiro para poder revisar los equipos con algo de tranquilidad - respondo al sargento mayor.

Señor - el operador de radio se acercó a Emil dedicándole una larga mirada - ¿qué cree que va a pasar? - aprovechó que el Sargento Mayor se había retirado con su general. Carraspeó - esta situación esta lejos de ser controlada por nadie... no es que me de miedo - se puso recto ante la idea de que hubiera pesado que era un cobarde - pero esto me da mala espina 

Miro a mi operador de radio, se nota que esta nervioso pero bueno es algo normal, las cosas están empezando a desmadrarse - Descansaremos, nos reorganizaremos por secciones dándonos nuevos objetivos y acabaremos con los enemigos del emperador. Haremos lo que mejor sabemos hacer, Wolfgang. No te preocupes, de peores situaciones hemos salido - contesto apoyando mi mano en su hombro - Que los hombres revisen el equipo y sus armas. Y todo aquel que sea herido reciba atención medica inmediata. Y lo quiero para ayer.

Norragh estaba cansado de no hacer nada, de mirar hacia arriba o hacia abajo.....seguí teniendo hambre y empezaba a entrarle sueño, debido a la inoperatividad. 

Emil y el operador de radio comenzaron a hablar muy cerca suyo, a Norragh le costaba seguir la conversación, pero sí que entendió algo....y recuperó el habla....normalmente no hablaba con los jefazos...pero se aburría y ahí cada uno parecía estar haciendo lo que quería* "Si jefe......Tronchahuesos machacar enemigos...pequeño-tú ayudar.....¿verdad Max?" dijo con su voz mezcla de voz aflautada y profunda....su inseparable compañero, rubio, alto y grande, más grande que un humano alto y fuerte, sólo dijo un lacónico "Sí" con una voz extremadamente profunda.....

 "Nosotros ser grandes guerreros, ¡grandes! Nosotros matar muchos enemigos. ¡Muchos!" siguió Norragh mirando a su alrededor, dándose un par de golpes en el pecho y mostrando su envergadura....que ciertamente era impresionante...era como una isla-fortaleza en medio de un mar de uniformes...destacaba. 

Luego se acercó a Emil y le dijo en voz más baja..."Yo herido.....¿yo curar? Mi gustar Doc." con una sonrisa algo bobalicona....mientras le enseñaba varias heridas sufridas en el anterior combate.

Recibiendo las ordenes y ejecutandolas de inmediato me entretuve con mi inseparable companero a buscar un rincon para tirar una manta y organizar todas las cosas que teniamos, lo haciamos meticulosamente, mirando cada una de ellas, su estado y autonomia, para luego colocarla en un sitio en concreto de tal manera que en la mas absoluta de las oscuridades podriamos encontrar medianamente lo que buscabamos. Nos pasamos un buen rato, incluso limpiamos las botas y los cinturones, aunque deslucia un poco con el resto del traje lleno de polvo era mejor que nada y asi manteniamos el tiempo ocupados.