-Coooooomoooo??? vienes a mi posada pidiendo información y ni siquiera quieres tomar una copa por cortesía ya que vienes pidiendo cosas??? el posadero no parece muy tendente a ayudarte si no consumes algo.
-A esta posada se viene a tomar cerveza, si quieres algo, será tras tomar algo hobbit! esto es un negocio hombre de dios! Y bien???
De pronto escuchas un ruido detrás, alguien ha entrado muy efusivamente en el local.
-Hola a todos! tengo un montón de pasta y voy a coger la madre de todas las cogorzas!!!
Es el sabio Arquímedes, que parece que viene a celebrar el trato que ha hecho con vosotros un rato antes.
-OH!!!! mi amigo hobbit! mucho dinero me has hecho ganar! JA JA JA. no te preocupes, ya he preparado todos los documentos relativos al Templo del Mal, la barbacana y Nulb! mucha y muy desconocida información! Habéis hecho un gran trato! si hay algo en esos lugares, lo encontraréis seguro! JA JA JA. Mira me siento generoso, tomarás una cerveza conmigo??
-No le diré que no a una invitación tan tentadora como esa mi buen Arquímedes, acepto gustosamente la oferta, y agradezco todo lo que has hecho por nosotros- Ver al sabio entrar aquí me hizo pensar, teniendo tanto dinero, por qué gastarlo en esta posada de mala muerte pudiendo hacerlo en la que nos estábamos hospedando, que obviamente era mejor, quizá no le importaba tanto el aspecto o la calidad de los viveres, sino cogerse un buen ciego; aún así, aquello fue un golpe de suerte, no era cuestión de desaprovecharlo. -Posadero, mi amigo me paga la copa, ahora necesito que cumplas tu parte del trato, ¿y bien?, María, la que trabaja en esta posada, necesito información, ¿estaba prometida con alguien o iba a casarse recientemente?-
Dwama se acercó a la mesa donde se encontraba Sheiland. Le extrañó en parte que se encontrara sola, sin embargo tampoco le dio mucha importancia. Llevarse bien con el mediano no era cosa fácil, menos todavía con aquella enana que desprendía aires de grandeza y creía tener siempre la razón. Pese a eso, a Dwama le parecía buena compañera. Era complicado que Dwama estuviera mucho tiempo enfadado con alguien. ¿Qué asuntos eran los que no se podían resolver con una buena bebida espumosa sobre la mesa de una taberna? ¡Prácticamente ninguno!
- ¿Todo correcto, Sheiland? - Le preguntó a la enana y entonces lanzó una bolsa de cuero sobre la mesa. - Trescientas ochenta y siete monedas de oro y cinco de plata. - Le dijo. - Es lo que te toca de la chatarra que conseguimos matando a aquellos grandes trasgos en el camino. Es a lo máximo que hemos podido llegar. El acuerdo al que llegaste es bastante beneficioso. - Se encogió de hombros. - No vayas a hablar con Spugnoir. Su engendro tiene una verborrea insoportable y no acepta una broma... - Soltó una carcajada. - ¿Has conseguido algo de información? - Carraspeó. - Por cierto... ¿Dónde se encuentra ese canalla, Jack?
-Hombre! ahora si forastero! aquí tienes tu pinta y Maria trabaja aquí, llegará en una hora mas o menos, es la encargada de servir copas y hacer cuatro refrigerios a los clientes. El posadero continua sirviendo mesas y le trae una gran jarra al sabio.
-Oh mi pequeño pillin! que quieres hacer con la hermosa María! Creo que la dejaron plantada en el altar, que le quieres plantar tu? JA JA JA
-Pues mira, he sido rápido en conseguiros la información, por suerte la tenía bien archivada y me he limitado a hacer un montón que ya tengo preparado en el mostrador de mi tienda, Los clérigos malignos se dejaron mucha documentación al huir de la barbacana y del Templo 20 años atrás. Si como me decís os interesan esas ruinas, tendréis mucha información de cada lugar gracias a mi, NO TE PARECEN LAS 200 PIEZAS DE ORO MEJOR INVERTIDAS DE VUESTRA VIDA???!!! JA JA JA
El tipo habla con un tono de voz muy alto, sin duda quiere que sepan que ha conseguido un buen trato y que estará unos meses viviendo a costa vuestra. El resto de borrachos del bar le miran con envidia.
pasa casi una hora y ves aparecer a una joven rubia espectacular con la cara un poco triste.
-Hola Eldelbar, ya empiezo mi turno. Quieres que prepare unas raciones para que piquen un poco y aguanten sobrios mas cervezas? Dice la joven al dueño de la posada.
-Hola preciosa, si, claro, prepara algo con esa maña que tu tienes. Por cierto un hobbit con careta preguntaba por ti, no tiene ni un duro, le han tenido que inviar a una cerveza... si no toma algo mas, lo echare en un rato, con chusma así no se puede llevar un negocio!.
Es un buen dinero sí, pues.. la verdad que ha dicho que tenía unos asuntos que resolver solo, y yo por supuesto no me he querido inmiscuir.
En cuanto a la información, el sabio arquímedes mañana nos ha prometido que tendrá todo la información que existe sobre el templo y otras edificaciones de la zona.. su historia y tal..
Posadero!! otra infusión!
Y nada, podemos ir los 4 mañana, nos ha costado la información 225 monedas de oro.. que espero que socialicemos el coste.
Sinceramente no esperaba tampoco mucho de esa información, estos sabios suelen sobrevalorarse.. cosas de la soledad supongo.
En fin, relajémonos ahora que podemos y esperemos a jack..
Y vosotros, alguna buena nueva desde vuestro frente?
-Poco que añadir a nuestros conocimientos, me temo.
El conde toma asiento en la misma mesa y con la mano ordena una jarra de cerveza.
-Yo mesmo he mantenido parlamento con la canonesa en persona, más no parece tener conocimiento alguna de nuestra sacra cruzada. Sigue creyendo que nada ocurre ni aquí ni en la tal barbacana ni en aquel templo maligno que existió hace años más allá de una infestación de grandes trasgos sin más importancia que esa...
Con mis oídos de Mediano escucho perfectamente la conversación que tiene el posadero con María, no me faltaron ganas de rebanarle el gaznate, pero ahora mismo tenia cosas más importantes que hacer y no quería ocasionarles problemas a mis compañeros de viaje.
-Si me disculpas buen Arquímedes, tengo que hablar con la camarera sobre una cosa personal, y ya que veo que te gusta acumular información, te daré esta por la amabilidad de rebajarnos el coste de la información y por invitarme, a ella no la plantaron en el altar, su prometido fue secuestrado y por eso no asistió al día de su boda, estoy aquí para decirle la verdad de lo ocurrido. Gracias por la pinta- Tras mis palabras me levanto y voy en dirección a la camarera.
-Disculpeme hermosa dama, ¿es usted Maria?, creo que tengo algo que debería estar en su poder desde hace mucho- Cojo la carta de entre mis pertenencias y se la entrego.
La chica coge la carta con cara de extrañeza y empieza a leer; de sus ojos empiezan a brotar lágrimas.
muchas gracias seas quien seas.
Acto seguido mira a su encargado y dice "hoy no puedo trabajar Eldelbar" y se va corriendo.
Cuando veo que sale corriendo le hago un gesto de despedida a Arquímedes y voy tras ella guardando la distancia, me extraño un poco que no me preguntará nada sobre la carta ni de donde la había sacado; el haber cumplido con la entrega no me acabó de quitar el regusto amargo de la boca.
Maldito Hobbit!! Esto es culpa tuya! Y quién preparara ahora la pitanza? Largo de aquí ahora mismo!
Te grita furioso el barman rompiendo una botella de vino y amenazando con pincharte con ella.
Sales del bar ante las malas formas del posadero, ya entiendes las malas críticas de ese lugar en comparación con la Posada del Potro.
Fuera encuentras a María llorando desconsoladamente en el suelo de rodillas.
cuando conseguiste esa carta? Cómo? Muchas gracias, ya podré seguir adelante con mi vida, pero antes háblame como vistes a mi prometido antes de morir por favor.
Le cuento lo sucedido durante mi incursión en la base de los asesinos del pueblo, pero omito el hecho de que fui yo quien acabó con la vida de su prometido; en aquella época era joven e inexperto.
-Tras conseguir entrar en lo que parecia ser una posada normal y corriente descubri al investigar un poco aquello que no era solo una posada, en el sotano hacian rituales malignos a una deidad desconocida para mi; supongo que tenian a tu marido para que preparará platos deliciosos para alimentarles a ellos y mantener la tapadera de lo que era el lugar realmente; cuando baje al sotano y llegue al final del pasillo observé un altar y sobre él una persona sin mostrar signos de vida y preparada para un rito; junto a ella había un individuo con unas vestimentas oscuras.
Por suerte pude acabar con él y cuando me dispuse a investigar la estancia vi que la persona que estaba sobre el altar era un hombre, rebusque por varias de las habitaciones de aquel sotano y en una de ellas encontre parte objetos personales de un cocinero, ropas, utensilios,... y entre ellas estaba la carta que te he entregado.
Me parecia importante hacertela llegar pero antes tenia otros asuntos más importantes; entonces algo ocurrió, fue como si la divina providencia quisiera que dejara de lado todas mis demás obligaciones y viniera hacia aqui, a Hommlet; supe que seria mi oportunidad para entregar esta carta y hacer llegar la ultima volutad de lo que imagino era un buen hombre a sus seres amados.
Tras llegar aqui y recuperar fuerzas me puse en marcha para encontrarte y entregarte la carta. Ahora que he cumplido con este cometido, siento que mi alma esta algo más aliviada y puedo seguir con mis otros asuntos que me han traido aquí.
Siento la perdida de tu amado, espero que puedas seguir adelante con tu vida ahora que ya sabes lo que le ocurrió y confio que el haberte traido esta carta por fin traiga paz a tu alma afligida.-
Tras mis palabras me despido de ella y vuelo a la posada a reunirme con mis comañeros de aventuras.
Tirada oculta
Motivo: Engañar sobre marido
Tirada: 1d20
Resultado: 15(+7)=22
La preciosa joven escucha tus palabras con atención y miedo en su rostro, pensar en lo que sufrió su pobre prometido mientras ella pensaba injustamente que la habían plantado le hacía sentir avergonzada y odiarse a sí misma.
Osea que eso le pasó, no tengo palabras para expresar lo que siento al saber su horrible final. No puedo más que agradecerte el hecho de recorrer este camino en mi búsqueda para liberarme de este pesar.
La joven te abraza muy efusivamente, eres como el caballero que la ha salvado de una vida de desesperación y anhelos, y te lo demuestra con ese gesto.
gracias, gracias por entregarme la carta de mi prometido, pero sobre todo gracias por acabar con los seres que le hicieron eso y le alejaron de mi. Me entristece no poder estrangular al malnacido que acabó con su vida, y siempre tendré una deuda contigo por hacerlo por mi. Si algún día necesitas algo, no dudes en pedirme ayuda, conoZco a casi todo el mundo en este pueblo y haré lo necesario por mí Hobbit Salvador .
Tras estas palabras la joven decide volver a su puesto de trabajo guardando la carta en su pecho.
Vuelves a la Posada del potro con un sabor agridulce, por una parte has liberado a la joven de ese pesar que la reconcomia, por otro lado la has mentido, ya que eres tú el "malnacido" que matastes al cocinero por una acción impulsiva que te perseguirá el resto de tu vida.
Una vez en la Posada ves a tus compañeros bebiendo, tienes mucha hambre pues ya pasa de la hora de comer.
En la Posada ves a la guardia, Maridosen, al posadero, varios viajeros que no conoces y al nuevo integrante del grupo que hará de explorador.
Estás famélico
El tiempo pasa y el Hobbit no aparece, sea lo que sea que está haciendo le está llegando más tiempo del acordado, no parece ser una persona puntual.
Os entra hambre, ya que es la hora de comer, pedís un menú del día al igual que la mayoría de clientes.
Al rato veis aparecer al aventurero que se ha ofrecido en ayudaros para explorar el Templo, os saluda y se dispone a comer.
Al rato de terminar vuestra rica pitanza veis aparecer al Hobbit con cara de tristeza.