Partida Rol por web

Los ojos de Takezo brillaban, no solo por la increible historia del combate contra Thanatos, esperaba con ansias a que Ban terminara de relatar su destino a Sonia, para que le hablara del suyo.

¡Sería entrenado por Nobou de Capricornio! El muchacho no tenía idea, pero si Ban decía que era el tutor ideal para el, estaba seguro de que lo sería.

—¿Es japones tambien? ¡Me esforzaré y aprenderé todo lo que enseñe! —el chico hizo una pequeña reverencia. Todavia tenia su papel con su destino en el bolsillo y lo sacó para llevarselo al pecho —Nobou de Capricornio —repitió.

—Te reuniré con tu hermano cuando sea un santo de Atenea, Sonia ¡Usaré mi universo interno para encontrarlo! —no comprendía muy bien a que se refería el adulto con el universo interno, pero en su mente se formó la idea de un poder sobrenatural que lo podía todo. Incluyendo encontrar personas.

Cuando la puerta sonó y entró Samath a Takezo lo atacaron punzadas de culpabilidad ¿Intentarian huir de un destino tan fabuloso? ¿Quien defendería a las personas entonces? Los atraparían tarde o temprano, pero ahora quería viajar más temprano que tarde.

—Debo ir a hablar con los otros... Para empacar las cosas — se despidió  salió rumbo a la habitación común.

- Yo... bueno... 

Asentiría a Sadalbari, no podría irse con ellos sin embargo si podría hacerles algo de tiempo a los que querían escapar. Athenea le a dado todo, una nueva vida, amigo... un propósito por el cual vivir. Sería imposible para el ir en contra del propósito de ella pero sabe muy bien que tal vez ninguno piense igual, algunos tienen sus propias intenciones, otros no quieren hacerlo y otros...no se deciden a que grupo pertenecer.

De camino a la oficina de Ban diría en voz baja - Yo le pertenezco a Athenea... Estaba muy claro de lo que quería hacer y al llegar a la oficina de Ban y cuando este me resibe veo a a Takezo ya a Sonia en la oficina. - (Veo que vinieron a lo mismo) La verdad no creía que fueran a despedirse ya que seguro Ban va a venir a vernos por la mañana... - (Esto significa que ellos no van a escapar eh...) No se si sentir alivio o qué por esto ya que la verdad no sabe si es lo mejor que se puede esperar n este viaje y prefiere ver a sus amigos vivos y sin armadura a muertos y lejos de aquí... aunque esto no lo aplica para el en realidad.

Según lo que le dice y pregunta Ban el hace una reverencia y responde respetuosamente.

- No señor Ban, el anciano Tatsumi no me asustó... solo quería saber dónde y con quien será mi entrenamiento, y si es posible... la historia de quienes la han portado... No solo quería saber en dónde y el con quién sino también el quienes. Si seré el caballero del lobo debo ser el más grande que ha existido para que Athena no pierda el valor de haberme cuidado.

No es que no tenga familiaridad con el señor Ban, le aprecio mucho y es totalmente seguro que sin el este lugar sería un infierno con el viejo desgraciado... sin embargo Ban es una autoridad y hay que tratarla como tal.

Takezo entró en la habitación despues de una carrera por los pasillos, convencido de que su deber era quedarse y convencer a sus compañeros de hacer lo mismo, pero su determinación se apagó cuando vió las caras de los demás.

¿Cómo iba a pedirles el que hagan algo que no querían hacer algunos?

—Deberian despedirse del señor Ban. El es tan bueno con nosotros... —comentó reuniendo las pocas posesiones que tenia, y envolviendo su boken en una sabana.

-Bien veamos... Dijo mirando el papel en donde estaba anotado el destino del chico y comparándolo con la otra hoja que contenía información de lugares y nombres. -Irás a las colinas Bomi en Liberia, allí serás entrenado por Lumen, santo de Géminis.- Al decir eso bajo los papeles y miro a Samath a los ojos.
 -El anterior portador de tu armadura fue mi gran amigo Nachi. El hoy se encuentra a cargo de otra de las mansiones de la familia Kido reclutando jóvenes prometedores como ustedes así que al igual que en mi caso También renuncian a entrenar a su sucesor. Sobre él cómo guerrero de Atenea te puedo contar que formo también parte de la protección de la diosa cuando fue atacada en las 12 casas así como también fue uno de los que soporto los embates del dios de la muerte y logro sobrevivir que no es poco. Además fue una de las pocas personas que logro reponerse al puño demoniaco de Fénix en el incidente del coliseo hace ya muchos años. Como verán mi generación posee gran resistencia y espero que la suya no solo se quede en eso.- Dijo poniendose de pié -Todos trabajamos mucho para que esta generación sea mucho más fuerte y organizada que la nuestra. Queremos que ustedes sean las leyendas que se contaran en el futuro y juro que trabajaremos arduamente para que asi sea. No teman el futuro que les depara en sus lugares de entrenamiento, confíen en sus maestros y en Atenea. Verán que cuando se den cuenta serán grandes y honorables guerreros.

Para cuando Takezo llego la mayoría de los niños ya tenía una gran parte de sus cosas empacadas, algunos se habían tomado un descanso de tanto embalaje y se encontraban haciendo alguna otra actividad para pasar el tiempo. Obviamente en esa calma que producía la concentración el comentario de Takezo no paso desapercibido para nadie.

Sadalbari fue la primera que reacciono. -No sé si sería conveniente, esto que vamos a hacer también le traería problemas a el así que no quiero verlo antes de la fuga.- Dijo e hizo un pausa.
-Se que tal vez el no nos está contando todo pero fue el que mejor nos trato aquí adentro... Nadie debería ir a hablar con él. De ese modo será más difícil animarse a hacerlo.- Sentencio mientras miraba al resto de los niños cuyo miedo parecía vencer sobre su convicción de escapar. -Ya están los ánimos muy por el suelo Takezo, ir a ver a Ban terminará de rompernos y finalmente aceptaremos un destino peor que el de la fuga.

Takezo miró al suelo y no guardó el boken en la mochila. Se sentía culpable, y no sabía que debía hacer. No podía dejar que todos los chicos se fueran solos, y tampoco podía faltar a su deber como aspirante a santo.

Después de que estuvieran en un lugar seguro regresaría. Si no los atrapaban antes.

—¿A qué lugar tienes en mente ir?

          - ¡Muchas gracias Takezo!    Creo saber donde se encuentra, solo que su madre, mi madrastra no querrá que vaya a visitarlos sin una buena razón, fue ella la que me mando aquí después de la muerte de mi padre! ....  -    Responde Sonia indecisa de continuar diciendo algo más que tiene en la mente y le acecha. una culpa que le atormenta un poco, justo cuando ingresa Samath en el lugar, pero antes de que parta de alli el pequeño oriental le dice:

          - Si me das un momento más te alcanzo para platicar con los otros chicos, te parece bien Takezo? -    Dice Sonia antes de escuchar las valientes palabras de Samath, a quien le sonríe tan solo por un momento antes de imaginarse a los tres chicos mas grandes con armadura

Asentiria con la cabeza y una pequeña sonrisa a Sonia cuando me sonríe por igual.

No es tonto, al escuchar las palabras del señor Ban solo podría tragar saliva... resistir a un dios, resistir a un fénix, proteger directamente a nuestra mismísima diosa Athena si estos son méritos de un caballero ďe bronce no quiero comenzar a pensar cuales serán los de un caballero de plata o un santo de oro...

- (Me falta... demasiado por recorrer...) Apretaría los puños y respiraria profundo aprendiendo las azañas del anterior portador y jurandome que seré más fuerte, algún día... pero lo seré. 

- Señor Ban, yo seré el lobo de Athena sin lugar a dudas y superaré al señor Nachi su amigo o mi entrenamiento habrá sido sido vano.

Cuando el le menciona que será entrenado por un santo aunque no era su intención en lo profundo de el se encendería una llama... y esta le diría que debe esforzarse aún más que antes.

- ¿Quién es Lumen, de Géminis? ¿Le llegó a conocer señor Ban?

-Afuera debe de haber varios lugares en los que podamos escondernos un tiempo. Una vez que salgamos de la mansión tendremos tiempo para decidir dónde ir y que hacer.- Contesto Sadalbari luego de tomarse unos minutos para deliberar. -Incluso puede que haya algún otro hogar que no nos obligue a ir a una zona remota a que nos golpeen para ganar una armadura.- ¿Por qué? ¿Tienes en mente algún lugar?

 -No te preocupes por eso Sonia, seguramente podremos abrir una línea de dialogo con tu hermano. La fundación posee recursos como para negociar cualquier término.- Dijo con seguridad a la niña pues sabia el alcance de las influencias y el poder económico de la fundación Kido.

 -Me alegra que pienses de esa forma Samath. Estoy muy seguro de que lograras ser un excelente Santo de Lobo.- Alentó el hombre al muchacho justo antes de responder su pregunta.
-Conozco a casi todos los santos actuales pero solo de vista o nominalmente, es parte de la mi trabajo administrativo.- Aclaro Ban. -No puedo decirte mucho ya que no he tenido muchas oportunidades de hablar con él pero sé que tiene una hermana gemela, casi podría decirse que ese es un requisito excluyente para ser usuario del Cloth de Geminis, pero que la chica está alejada del santuario.- Informó.

—No —negó con la cabeza y miró a Sonia entrar por la puerta.

—Solo los acompañaré hasta donde vayan. Luego regresaré. Diré que me quedé atras y me dejaron —dijo en voz baja. Sadalbari tenia razón y la moral de los demás estaba muy baja y no quería bajarles el animo.

Asentiría decidido y agradecido por el apoyo moral de Ban,  la verdad aunque no lo pida le hace sentir muy bien que esté de su lado ya que... no sabe que pensarán los chicos. En verdad se preocupa mucho por el futuro de estos, si no logran escapar espera que el señor Ban se entere a tiempo para ayudarles y si lo logran le preocupa el destino que pueda aguardarles en las peligrosas y frías calles. Aunque seamos fuertes juntos... se que hay mucha maldad en el mundo.

- Casi un excluyente?... Eso hace parecer que el destino juega un papel importante en esto... Samath ciertamente no cree en el destino absoluto, cree en que el destino es un enorme árbol de posibilidades donde los más excelentes frutos se encuentran mucho más altos que el resto y aquellos que vivimos somos quienes debemos alcanzarlos pues no caerán en nuestras manos y si caen y alguien que ha llegado más alto no lo a atrapado... puede llegar a ser este fruto tan pesado que nos haría caer del árbol hacia la profunda oscuridad de las raíces que envuelven y retienen a aquellos que se confían, "La muerte".

- En ese caso debe ser muy difícil el ser un Santo de Géminis... Lo piensa (Dos hermanos que escalan hasta lo más alto... Tendré yo un hermano o hermana gemela para reclamar ese des... no, mis padres nunca mencionaron algo así de igual modo) Ahora que el señor Ban había despertado una duda más de las que tenía quiere aprovecha y preguntar.

- A qué se refiere conque está alejada del templo la hermana del caballero Lumen señor Ban? Ciertamente no entendió a que se refiere.

-No puedo obligarte a quedarte con nosotros si no quieres.- Sentencio la niña. -Ya estamos cortos de tiempo así que prepara tus cosas. Aun tenemos que ver que harán Samath y Sonia, pero no nos podemos demorar mucho en eso. Si no están listos para la hora en que apagan las luces entonces tendremos que dejarlos atras.-

Justo en ese momento notó que Sonia ingresaba a la habitación. -Hablábamos de ti Sonia. ¿Qué vas a hacer al final?

-Eso ya es información de la que no dispongo Samath. Sabemos que ya no forma parte de las líneas de defensa de Atenea pero el cómo y el por qué no se nos fue dicho aún. Supongo que son temas personales de Lumen y que exceden lo administrativo, así que no se nos compartió esa información.- Dijo Ban e hizo una pequeña pausa.
-Sin embargo Lumen esta mas que capacitado para formar caballeros, Atenea confía bastante en su capacidad para enseñar y por eso tienes que quedarte tranquilo.-

Takezo asintió y palmeó la mochila de la que sobresalia un palo largo envuelto en una sábana blanca. —Ya estoy listo.

Se apartó de las niñas para ir a ver como iban los demás. En especial quería ver como iba su amigo Kotaro.

Asentiría confiando en las palabras de Ban y luego se despediría de el, no lo hace de Sonia o Takezo ya que les verá más adelante y solo se despide de ellos con un gesto con la cabeza para volver a la habitación y sentarse en su cama para acostarse y ver el colchón de la cama de arriba.

- Espero que todo salga bien... para todos Susurraría y cerraría los ojos para que el tiempo pase.

Kotaro aún estaba algo mal por lo que Tatsumi le había dicho, mientras empacaba a veces sus ojos se llenaban de lagrimas y en otras ocasiones se ponía pálido como una hoja de papel. Le pidió a Takezo que lo ayudara con algunas cosas para doblar y no dio mucho espacio para la conversación. Empacar fue una actividad que les costó casi todo el día. Para cuando la mayoría termino fueron llamados a Comer. Tras terminar la cena, los niños se dirigieron a las habitaciones a terminar de empacar y también algunos pudieron recorrer la mansión por última vez. Alnair se quedo a ayudar en la cocina, donde la despidieron con un postre solo para ella como comento mas tarde. Darío tuvo que reempacar varias cosas porque la maleta no le cerraba ya que había hecho una bola con todas su ropa y la había tirado dentro, Sadalbari ayudó a Darío con sus cosas ya que quería que todo esté listo para cuando salieran. Kotaro estuvo deambulando solo por la mansión pero llego poco antes de que se apagaran las luces cuando todo estuvo listo para ejecutar el plan de escape.