Partida Rol por web

Eres llevada hasta la mitad de una ciudad futurista con rascacielos enormes. Su aspecto es bastante similar a lo que seria un estilo cyberpunk: oscura, llena de neones por todas partes y vehiculos que sobrevuelan las alturas. Echando un vistazo alrededor puedes ver que por la calle deambulan robots similares a los centinelas que ya conoces en versiones mas avanzadas. Por el cielo sobrevuelan otras versiones de mayor tamaño, cerca de los 4-5m. La gente que anda por la calle va con ropa roida, puedes verles implantes ciberneticos, incluso robots tambien.

La calle está llena de baretos, carteles con pintadas que dicen fuera IMAXTX donde se ve el simbolo de la empresa y un refrán que dice: tu puedes ser mejor. Acepta la tecnología y no la biología. El aspecto es de una calle que parece pertenecer a un bajo fondo de la ciudad.

Parece que sin demasiado tiempo a reaccionar, aparezco en aquel planeta.

"¿Dónde estoy?" Es el primer pensamiento que cruza mi mente al llegar allí. 

Desde luego me imaginaba que nos llevarían a un planeta desértico, sin muchos más habitantes y poca tecnología. Un lugar donde nos pudiéramos "pegar" a gusto sin causar daño a nadie. Pero eso... Esto es otra cosa... Hay mucha gente, muchos edificios y muchas variables. ¿Por qué mandarnos aquí?

Por ahora intento no llamar la atención y mirar a mi alrededor. Buscando algún rastro de poderes mutantes... Super poderes... O algo así... No sé si en este planeta existen los mutantes o algo así. 

"No quiero usar mis poderes hasta saber si pueden tener alguna forma de detectarlos". Esos robots se parecen demasiado a un centinela... No me gusta... 

Comienzas a andar por la calle tratando de no llamar la atención, aunque es más fácil pensarlo que hacerlo, pues todo el mundo se gira al verte y te miran extrañados. No obstante, unas mallas ajustadas y coloridas no es lo quedarían llamar moda los habitantes futuristas de la urbe.

Tras unos metros, llegas a un callejón estrecho que bien podría servirte de escondido un rato. Al momento, el sonido de cristales rotos te hace girar la vista hacia el otro lado de la calle. Un enmascarado ha cruzado, literalmente, el escaparate de una especie de bar y trata de levantarse del suelo.

- Mutante localizado - Oyes decir a uno de esos ciborg a con aspecto de centinelas, despejando tus dudas sobre su parecido con los que ya conoces.

"Estupendo"

De todo un planeta, he tenido que caer en la zona donde los mutantes son cazados... Una gran idea... Por ahora parece que no me han detectado. Tal vez solo activen sus sensores si usamos nuestros poderes...

Por ahora prefiero esperar y recabar más información a la antigua usanza, cosa que no es mi fuerte. Llevo demasiados años acostumbrada a leer la mente cuando quiero conseguir algo... Y ahora... Esto se está cobrando su precio. Además, sin la fuerza fénix, no confío demasiado en que mis poderes me puedan sacar de esta.

De manera que seguiré observando... Quiero ver cómo responden aquellos robots a la amenaza, si son muy diestro, poco y sobre todo ver qué hace aquel mutante. 

Ante tus ojos ves como el centinela apresa con sus brazos al encapuchado. En ese momento, el supuesto mutante levanta la cabeza hacía el enemigo y una explosión cegadora lo inunda todo y debes retirar la vista por completo. Cuando vuelves a mirar allí, el centinela yace en el suelo medio quemado y chisporroteando sus circuitos por todos lados. El hombre, en pie, ya no lleva encima la capucha ni la gabardina y aparece con un extraño traje. Convoca una especie de rayo con sus manos y se monta en el mismo para salir de allí, siguiendo unos callejones cerca de tu posición. Parece débil pues la velocidad no está con el en este momento.

Capacidad de entrar en fase... Tal vez piroquinesis o alguna capacidad para proyectar hondas de calor... Y luego esos rayos... ¿Se ha subido a ellos? 

Interesante.

Aprovechando que se mueve no tan rápido como esperaba, intento seguirle.

Tal vez me pueda llevar a más mutantes o, simplemente, a conseguir ciertas respuestas sobre este lugar. 

El extraño mutante sigue alejándose del lugar y pasando por varios callejones. Tu, a duras penas, logras seguir su estela, aunque a pie, por el suelo. Tras varios minutos, notas que ya no hay presencia de esa especie de centinelas en miniatura que veías por las calles. Llegas a una verja que separa la calle de lo que queda de un rió que cruzaba la ciudad, ya urbanizado. El mutante cruza por encima de la verja y llega a una especie de alcantarilla enorme. Da unos golpes que resuenan por el lugar con los nudillos de la mano. Después, se abre la tapa metálica y accede a su interior.

Desde tu posición, has podido ver toda la acción sin ser vista por el extraño mutante.

Creo que nunca antes había corrido como ahora... Correr... Es casi como ir gateando cuando tienes la posibilidad de volar. Aunque parece que esto merece la pena.

Desde luego si es una ciudad con centinelas, tenía que haber algún tipo de resistencia.

"Y creo que los he encontrado."

No había más centinelas cerca, de manera que los detectores tienen que estar en ellos, no generalizados por la ciudad. Eso es bueno. Si a lo largo del camino no han saltado más alarmas o han aparecido más, es de suponer que sus detectores tienen cierta área de acción limitada...

Veo a aquel mutante cruzar el río y entrar por una alcantarilla. ¿Por qué no pueden escoger mansiones u hoteles de cinco estrellas? Siempre alcantarillas... De manera que busco algún puente o zona para poder cruzar el río. 

Si no encuentro ninguno, miro a mi alrededor para asegurarme que no hay centinelas cerca. Si no veo ninguno, me concentro para elevarme y así poder pasar por encima del río, intentando pasar desapercibida... Hasta que llego a aquella boca de alcantarilla. 

Gracias a tus habilidades y poderes mutante, pasas sin problema y te aproximas a la compuerta de alcantarilla. No detectas a nada ni nadie pues parece ser un sitio bastante apartado de la concentración humana.

Parece que cruzar el río no ha supuesto un problema. Veamos si todo sigue así de aquí en adelante... 

No me hacía ninguna gracia meterme bajo tierra, y menos en las alcantarillas, pero por ahora me parecía la opción que aquel planeta me había puesto en primera página. Además allí, alejado de todo, podría usar mis poderes con más tranquilidad.

De manera que miro la boca de alcantarilla y, con un simple gesto de mis dedos, esta se eleva. 

Una vez el camino está despejado, echo un vistazo al interior del conducto, esperando ver alguna luz abajo o algo... Tras esto palpo mi uniforme.

"No sé si con el teletransporte sigo teniendo el móvil o algo que me sirva de linterna"

Hechas mano a tus bolsillos para darte cuenta que nada llevas en ellos. O nunca llevaste una linterna y móvil encima o en el tele transporte os privaron de cualquier objeto de más en vuestro inventario personal.

Sin más dilación y a duras penas, logras mover la enorme y pesada tapa de alcantarilla. Te gachas para acceder a su interior y vuelves a deslizar la tapa a su sitio. Te encuentras en una cámara oscura y maloliente. Hay mucha humedad y goteo incesante de gotas al tratarse de algún tipo de esclusa. Al fondo, ves el reflejo de algún tipo de luz. En el suelo, pisadas en la misma dirección.

Sin linterna, sin móvil y sin nada. Y si ya de por sí lamento no poseer la fuerza fénix, cuando veo la oscuridad de aquel túnel lo lamento mucho más. 

"Toda una mutante de nivel omega y, aún así, echando de menos un mechero para alumbrar el camino."

Por suerte, en la distancia, puede ver una pequeña luz que se aleja de mí.

"Debe ser aquel mutante que ando siguiendo" O al menos eso creo.

Me mantengo levitando en todo momento, ya que no quiero que mis pisadas hagan ruido contra el suelo húmedo de la alcantarilla. Mientras que, de forma instintiva, levanto un escudo a mi alrededor, ya que es mejor prevenir que curar. Así que, una vez tengo las defensas listas y evitar el ruido al levitar por el suelo, empieza a acercarme a aquella luz.

En todo momento intentando guardar las distancias pero tampoco demasiada, no me gustaría quedarme a oscuras en aquel lugar...

Continúas por el fondo de aquel lúgubre pasillo, medio a oscuras, mientras te mantienes levitando gracias a tus poderes mutantes. Comienzas a oir leves voces y palabras de algún tipo de conversación. Llegas a una puerta estanca con un ojo de buey. Tras ella, parece ser que hay gente, pues distingues al menos cuatro o cinco voces diferentes.

Parecía que había llegado a algún sitio... Una puerta... Reforzada con un ojo por el que poder mirar.

"Parece que hemos llegado a algo."

Intento observar la puerta con calma, ya que es bastante posible que no pueda hacer nada contra ella. No se busca una guarida secreta en las alcantarillas para que, al final, poner una puerta normal y corriente.

Lo que me pregunto es, entonces, si mis poderes mentales podrían atravesar dicha puerta y leer la mente de alguno de los que están al otro lado. Sobre todo, por un lado, para obtener más información, mientras que por otro, para saber la contraseña. O quiero pensar eso, que me la van a pedir de alguna forma.

- ¿Qué crees que estás haciendo? - Esa voz resuena en tu cabeza. Parece que alguien con poderes telepáticos está dentro de la sala y ha detectado tu presencia, al intentar acceder a su mente de igual forma.

- ¡Gente! ¡Tenemos un intruso y parece un mutante! - Oyes ese grito tras la puerta. Parece que te han descubierto.

Sea como sea, tus poderes no están a su mejor nivel o el otro telépata ha conseguido neutralizarlos haciendo acopio de sus propios poderes mentales.

"Mierda"

Desde luego no estaba en mi mejor momento, y el echo de estar en un mundo y una ciudad completamente desconocidos no me estaban ayudando.

Esperando que el otro telépata no sea más fuerte que yo (y que no pueda así leerme la mente), desactivo tanto el escudo como la levitación. Por el momento esperemos que solo crean que soy telépata. 

De manera que ya que me habían descubierto, decido intentar adelantarme y llamar al gran portón. 

Al llamar al portón, todo cae en calma durante unos segundos que parecen eternos. Oyes unos leves susurros tras la puerta, como si decidieran que hacer con "el intruso, que eres tu misma.

De pronto, oyes unos pasos que se acercan a la puerta, esta se abre y aparece un hombre vistiendo una túnica con capucha. No puedes verle la cara y la falta de luminosidad del lugar no ayuda a ver poco más.

- ¿Quién eres y a qué has venido, mutante? - Te dice en un tono serio y mustio.

Una vez toco la puerta, pasan varios segundos de silencio hasta que alguien contesta al otro lado.

- Me llamo Jean y he llegado aquí siguiendo a otro mutante. Supongo que he encontrado la resistencia.

Espero a su respuesta o su reacción alerta. He supuesto que sería bienvenida al ser mutante, aunque también entiendo que me quieran hacer ciertas preguntas... 

Desde detrás del encapuchado surge otra figura y al acercarse logras reconocerlo como el mutante al que seguiste hasta este extraño lugar.

- ¿Esta Fräulein me ha seguido hasta aquí? Además, tiene poderes telepáticos. No hay duda de que es una mutante, como nosotros... - Comenta el mutante que tienes delante con un marcado acento bávaro.

En ese momento, el enmascarado descubre su capucha para dejarte ver su cara y quedas pasmada al ver que no era un hombre sino una mujer la que estaba debajo. Se despoja de toda la túnica para que puedas verla y te sonríe abiertamente.

- Bienvenida, pelirroja. Siento decirlo, pero esto, más que una resistencia, son los refugiados de esas máquinas de ahí afuera que nos quieren dar caza. - Te comenta.