Partida Rol por web

Imposible esquivar eso...sin embargo no parece que vaya a hacerme daño directamente.

Probablemente cualquier otro estaría asfixiado de calor...en cierta manera somo el peor rival posible para el otro. La mayoría de tecnicas no haran demasiado efectos. O al menos sería así si no hubiese esa diferencia de poder tan abismal.

Me tomo un momento para valorar la situación y llego a la conclusión de que tengo dos posibilidades. Poco probables ambas pero...no tengo otros caminos.

Bueno, menos pensar.

Me lanzo contra el muro de fuego, que hace esfuerzo por retenerme, aunque consigo atravesarlo con solo unas leves quemaduras.

Y comienzo a moverme muy rápida. Mucho. Es el hanshafu...o parecido. Es mi versión, el espejismo* y vuelvo a atacarle con todo El otro camino es tan improbable como este.

Le notas molesto. Le has pillado desprevenido y vuelves a hacerle un pequeño rasguño. Nada importante, pero al menos vuelves a tocarle.

Solo una vez, por supuesto. Las demás, de nuevo es como si no se moviese pero tampoco le das.

¡Y cuidado! ¡Dos nuevos cortes!

¡Y van con mucha fuerza!

- ¿Seguirás con el Tozansho?

-No sé si eso aguantaría dos golpes como esos, sotaicho.

Me concentro y estiro mi mano ante él de pronto, usando el shunko para detenerlo. Su reiatsu es tremendo...no lo podré parar más que un instante. Pero lo suficiente para alejarme y esquivar sus golpes.

Busco su mirada. Es hora de usar el otro camino. Sumirlo en el terror de mi pesadilla eterna. ¿Soportará ver su cuerpo quemarse y sentir dolor por ello? ¿Cuántos años hará que no siente eso?

Relamente tampoco tengo grandes esperanzas en ello.

Frunce aún más el ceño. Siente que su cuerpo comienza a arder y algunas llamas llegan hasta sus ojos, pero ni se mira.

Ahora tú ves que de pronto se enciende cuan antorcha. Arde. Él siente que se entremezclan ambas llamas y tu ves que las suyas cada vez son más fuertes. ¿Se está curando?

Sí, en efecto. Así que le da igual sentir dolor. Las llamas de su zampakûto le calman y encima no le afectan.

Camina hacia ti, lentamente.

Es realmente acojonante. ¡No hay manera de dañarle!

- ¿Quieres seguir intentándolo?

Su zampakûto brila de forma incandescente.

Y ahí viene. Mueve la zampakûto de arriba a abajo, frente a su cara y parece como si el fuego saliese de su boca. Una gran bola de fuego inmensa que se dirigie con rapidez hacia ti.

Es hábil. No cabe ninguna duda. Pero le queda mucho por mejorar.

Un nuevo tozansho mientras salto hacia atrás, para bloquear esa bola de fuego. Y se acabó el juego.

-Aún podría haberle tocado otra vez, creo. Pero ahora que ha liberado su shikai...sin poder liberar mi bankai aún...hasta aquí llego. Gracias por el entrenamiento señor.

Le hago una leve reverencia, sellando mi shikai.

-Hacía mucho que no me quemaba ¿Me entrenaría más a menudo? Sería la mejor forma de mejorar.

Hemos perdido, Kàryu. Aunque no ha estado mal ¿No?

- De vez en cuando no viene mal un combate entretenido. Pero espero que la próxima vez me des más quebraderos de cabeza.

Se coloca bien el haorí y vuelve el bastón en el que se apoya.

- Ten un buen día, Shihöin.

Y sin más se marcha. Tiene varias cosas que atender.

-Como si pudiera...- murmuro cuando se va.

Suspiro y emprendo el regreso al Seireitei.

Te cruzas con Hitsugaya, que corre hacia la zona donde habéis peleado para apagar el fuego antes de que una pequeña chispa vuelva a propagar el fuego.

- Te dije que entrenaras, no que incendiaras todo.

¿Bromea? ¿Lo dice en serio? Bueno, ya se ha ido así que....

Karyu te habla:

Ha sido impresionante. Esto nos demuestra todo lo que tenemos que aprender, Reena.

Sí. Aunque no es por darnos de guays pero...parecía sorprendido las veces que le hemos tocado. Creo que no se esperaba que alguien con casi mil años menos que él pudiera. Aunque nos habría destrozado si hubiese querido...nos queda mucho.

Sigo a Hitsugaya.

-Yo no he incendiado nada. Ha sido el sotaicho. Pero no puedo hacer gran cosa contra él sin mi bankai...apenas le he tocado un par de veces...hasta que liberó su shikai....y se acabó lo que se daba. Estoy harta de no tener poder...

Sonríe un poco.

- Siempre te vas a lo difícil, Reena. ¡Como si pudieses con el sotaicho! Ni con un brazo menos. Así que así te preparas para el torneo, ¿no? Pues que sepas que ya sé los participantes y no te resultará sencillo. ¿Quieres los pesos que usabas antes? Kuchiki taicho te los ha traído hace un rato.

Llegais a la zona e Hitsugaya saca a Hyorinmaru. Empieza a apagar los focos incendiados.

-¿Byakuya ha traido mis pesos? Vaya, no me esperaba eso. Sí, los usaré. Y sobre ir a lo dificil...no pensaba ganarle. Sabía que no podía. Pero nunca le había visto combatir...y aunque sé que no me ha dado con todo, ni de lejos, ya me hago una idea. Más o menos. La cosa es que con lo fácil no se mejora...o se mejora menos. Cuando esté a tope le retaré de nuevo, tal vez pueda hacerle algo más.

Cuando termine regreso con él para que me de los pesos.

-¿Quienes participan?

Te da la bolsa de tela con los pesos dentro y luego recorre la distancia hacia su mesa donde recoge un papel y te lo trae.

- Míralo tu misma. Aún no están todos. Pero sí los que te interesan.

Mizu Tanaka

Abarai Renji

Kenin Moguruma

Lisa Yadomaru

Rukia Kuchiki

Kizuku Konse

Rikichi

Hanataro

Isane

Nemu

Reena Ichimaru

Reena Shihöin

-Creí que Madarame se apuntaría. Curioso. Aún así hay dos con bankai, que yo sepa...puede ser duro.

-Gracias taicho.- le devuelvo la lista.

Tras ponerme los pesos, vuelvo a correr como hace ya tanto...alrrededor de la zona de la división. Todo lo rápido que puedo. Tengo que ser más rápida. Más fuerte. Más poderosa. Mejor en todo...si quiero poner en apuros al sotaicho alguna vez.

Mizu aparece cuando llevas la mitad de las vueltas y te sigue sin ninguna dificultad.

- ¡Hola tai-Reena-sama! ¡Ya no vienes a vernos! He ido a ver a Soyu. Me ha contado lo del monstruo aquel. Pero está tranquila, eso es bueno. ¿Qué haces? ¿Entrenas? ¿Quieres una carrera?

Va corriendo hacia atrás. Tan tranquila.

Te fijas en que Mizu capta muchas miradas del resto de tu división. Pero ella parece ignorarlas.

-De acuerdo, corramos si quieres.- sonrío. -¿Pero por qué te miran tanto?

Me freno para descansar un poco.

-¿Es por la competición? ¿O es que eres la nueva sex simbol?

- Será porque llevo ganando el torneo los últimos 20 años.

Se encoge de hombros como si no le diese importancia aunque en su interior se siente muy orgullosa de sí misma.

- Supongo que se preguntarán si este año será igual habiendo entrado tú en el torneo.

Se coloca a tu lado.

- ¿Preparada?

-Preparada. Listos...¡Ya!

Empiezo a correr.

Quizá debí quitarme los pesos...

-Igual se preguntan eso, sí. ¿Y tú, te lo preguntas?

Sonríe. Ha estado entrenando todo el día y ahora se nota bastante cansada.

- Bueno, más interesante será desde luego. Veo que vas recuperando forma. Eso me gusta. Aunque me ganarás ahora solo porque llevo todo el día entrenando, que lo sepas. ¡Te lo pienso poner dificil!

-Bueno...¿Has visto el incendio de antes? Era yo peleando contra el sotaicho. Y llevo un buen rato corriendo...no es que esté "fresca como una rosa" precisamente. Creeme que Yama-jii pega duro de verdad...y suerte que el fuego no es lo mejor para atacarme a mi....

Hasta ahora he dado vueltas corriendo. Ahora las doy a base de shumpo. A sprints. Es otro tipo de entrenamiento.

Para cuando llego a la meta, aún le queda mucho a Mizu.

-Je...gané. Tendrás suerte en el torneo, no estaré al 100%.

Le revuelvo el pelo.

Intenta recuperar el aliento.

La gente está hablando por los alrededores. Parece que te dan por ganadora y están más que encantados de que pertenezcas a la décima.

- Bueno. Si pierdo no me importará.- te mira y aunque un poco ruborizada, no te aparta la mirada y sonríe.- Siempre he admirado a Reena-sama ^^.