Partida Rol por web

Francisco Jordan nace en NY 17 de Octubre de 1977. Hijo de padres emigrantes españoles, su vida no puede denominarse como "normal". Para empezar, la vida ya le asestó un duro golpe nada más ver la luz del infecto planeta que le esperaba con los brazos abiertos dispuesto a devorarlo: en el parto muere su madre, por lo que crece sin saber lo que es tener una madre. Su padre, aunque nunca lo dijo abiertamente, echaba la culpa de la muerte de su mujer a Francisco. Es por eso que la relación con su padre era mala, aunque nunca desatendió la educación de su hijo durante sus primeros años. A pesar de ser hijo único, nunca tuvo la sensación de ser un niño mimado, todo lo contrario, tuvo que esforzarse el doble para tener contento a su padre, que continuamente le menospreciaba. Cuando contaba con 17 años, empezó a notar como su padre, que nunca superó la muerte de su madre, cambiaba. Al principio no sabia a que se debía ese cambio, pero cada vez le trataba peor, hasta que un dia lo descubrió: su padre se había vuelto alcohólico. Con el paso de los meses, todo iba cada vez a peor. No le pegaba, pero si era muy violento cuando se quedaba sin bebida en casa, o cuando llegaba borracho a casa del trabajo, después de pasar por el bar. Y ocurrió lo que tenia que ocurrir, su padre fue despedido. Tras unos meses de insoportable convivencia, Fran decide marcharse de casa. Empieza a trabajar en multitud de trabajos basura mientras estudia para mecánico. Vive solo, en un diminuto estudio desgarbado. En poco tiempo madura lo mismo qeu otras personas en años. Casi diriamos que se avejenta.
Unos meses después de irse de casa, decide ir a ver a su padre. Lo que se encuentra le horroriza. Ese ser apenas tiene nada que ver con su padre. Sucio, maloliente, con la casa echa un desastre...apenas sobrevive con una mierda de sueldo que se saca cogiendo chatarra.
Ambos tienen una conversación que cambia algo dentro de Francisco...
Unos meses después, tras dejar sus estudios y su trabajo, y con 22 años, se alista en los marines. Necesita un mejor sueldo y un buen seguro médico. Su padre le necesita, y Fran responde.

Aloha, soy Acedor1566... Si yo no se para que me engaño, si siempre me presento a tus partidas... En fin, aquí me tienes, pidiendo plaza una vez más...

Mi propuesta de PJ: 

Pvt. Jonathan Kendrik

"Yo duermo siempre con dos libros debajo de mi almohada. El código de honor de los marines y la santa biblia."

Físicamente, Kendrik es un hombre apuesto, musculoso, con una pasión casi enfermiza por su aspecto físico. Como mínimo, dedica cinco horas al día a entrenarse, aunque hay veces que ha dedicado el día entero, parando solo para comer. Ojos marrones, pelo rubio cortado a cepillo. 

En lo tocante a la psicología, Jonathan Kendrik es un sureño fanático, convencido de que los estados unidos es, son siempre han sido y siempre serán los amos del mundo. La guerra civil fue una de las grandes tragedias de la historia, cuando los negros dejaron de ser esclavos. Molesto por tener que reconocer la legalidad de los claramente inferiores negros, amén de cualquiera no-blanco, y de hecho, de cualquier no-americano. Católico convencido y de devoción fanática. Es un hombre inestable, que por lo general recurre a la violencia como respuesta a prácticamente todo. No obstante, ha aprendido a contener sus "ideales" sobre los de diferente color, lo suficiente como para poderse presentar en los marines, y como para no lo echen. Le jode, pero lo hace. Eso si, es abstemio, y no fuma. 

"Yo solo reconozco a dos autoridades. Mi oficial en jefe y Dios nuestro señor."

Nació en el condado de Etowah, en Alabama, vivió su infancia en la granja familiar de los Kendrik. Fue a la escuela, y al instituto hasta cumplir edad suficiente como para poder ayudar en la granja junto a su padre. Realmente, lo crió su padre, Francis Kendrik, un veterano de Vietnam, con la medalla al valor del congreso. Para el joven Jonathan, su padre era algo a lo que aspirar, su héroe, su ejemplo. Aunque tenía una hermana, ella era un elemento secundario en la vida de Francis, y por ende, de Jonathan. La mujeres debían cuidar de la casa, y tener contentos a sus maridos.  

Por su padre, él es lo que es, y se siente orgulloso de ello. Le enseñó como debía tratar a los negros. Su abuelo había sido integrante del KKK, y su descendencia debía continuar con esa tarea, aunque ya no pudiera hacerlo legalmente. Por supuesto, se sacó la licencia de armas en cuanto tuvo edad suficiente. Cada domingo iban a la iglesia, en la cercana Rainbow city. Allí en padre Simmons cuidaba siempre de su rebaño, y tuvo bien en ayudar a educar al joven Jonathan, pues solía visitar a la familia Kendrik de vez en cuando, una familia modélica como pocas y de gran devoción al señor.

Jonathan solía entrenarse en sus ratos libres, siempre pensando en aquellas historias que le contaba su padre, en lo que podía ver por la tele. Defender la patria, luchar por ella... El joven soñaba con ir allí. Pero su padre, que si había conocido la guerra de primera mano, no estaba de acuerdo. Ese tema había generado más de una riña en casa, y más de una pelea con su padre, que lo quería con él, en la granja. Francis esperaba poder convencerlo para que se quedara en Alabama, pero no había manera. Jonathan no quería escuchar. 

Su padre murió, el mismo día que cumplía 23 años. Fue un golpe duro, quería a su padre, por encima de todas las cosas. No obstante, ya nadie podía impedirle el alistarse. Su madre, su hermana, amigos de la familia y el padre Simmons trataron de impedírselo, pero nadie pudo evitarlo ya.

Maggie Fitzgerald es una luchadora.

Nacida en un villorrio de Missouri, al pie de las montañas Ozark, la aspiración de Maggie siempre fue ser boxeadora profesional. Tras años de entrenamiento (e incomprensión) en su pueblo natal, decidió emigrar a Los Angeles, donde encontró a un entrenador de capa caída, llamado Frankie Dunn, que se avino reticentemente a entrenarla.

Con la ayuda de Frankie, Maggie progresó en el boxeo hasta llegar a disputar el campeonato del mundo de los pesos welter, pero un golpe ilegal de su contrincante la envió, no contra la lona sino contra un poste del ring, dejándola paralizada de cuello para abajo.

Un año después, e infinitas sesiones de rehabilitación más tarde, Maggie ha vuelto a la normalidad pero la Comisión de boxeo le niega la licencia por miedo a que un mal golpe acabe con ella y ello les de mala prensa. Privada de su medio de vida, el ejército profesional no parece una mala salida, y el reclutador no ha puesto pegas a su historial médico.

Por otra parte, 8 años de servicio y el GI Bill le puede proporcionar estudios gratis, para seguir la carrera de Medicina.

Maggie resubida a un server estable (buen cocepto):

http://s4.subirimagenes.com/otros/thump_3237076act...

Maggie resubida a un server estable (buen cocepto):

http://s4.subirimagenes.com/otros/thump_3237076act...

 Servicios médicos de la Marina

Ficha de aspirante:

Nombre: Teodoro McKenzie ("Ted")

Fecha Nacimiento: 4-4-1989

Edad: 20 años

Altura: 1,75m

Peso: 85Kg

Examen Físico:

Dentro de los varemos peso-altura, musculatura desarrollada a un 70%, puede mejorar ostensiblemente con entrenemamiento. Tren inferior y superior normales.

Ninguna enfermedad reseñable.

Cicatriz en la parte inferior derecha del abdomen, según expediente medico, apendicitis.

Examen Psicológico:

Persona tímida pero amistosa, parece fácil moldearle un carácter dado su grado de influenciabilidad positiva. Extrovertido.

Historia:

Nacido en Santpoint, Idaho. Situada cerca de Canada, Santpoint es según los relatos del recluta un pueblo tranquilo y apacible. Rodeado por naturaleza salvaje, por un lado el gran lago de Pend Oreille, y por el otro bosque salvaje.

 De padre Americano y Madre Canadiense. Con 1 hermano y una hermana mas pequeños que el. El padre se dedica a la industria maderera, es talador. La Madre regenta una pequeña tienda de muebles en el pueblo.

 Dice que aprendió a cazar junto a su abuelo y su padre en los bosques cercanos, por lo que tiene experiencia en el uso de rifles de precisión y escopetas.

 Ha pertenecido a un club infantil de acampada y supervivencia, a una asociación regional de lectura. Actualmente es socio de la ANR (asociación nacional del Rifle).

 Tiene aprobados las enseñanzas obligatorias infantiles y secundarias, además posee el certificado de haber cursado enseñanzas secundarias no obligatorias (Batxiller) y haberlas superado.

 Ha trabajado en pequeños comercios de la zona como ayudante o dependiente. También ha trabajado en la empresa del padre como talador.

Motivos para alistarse:

- Servir a su país

- La Marina representa una gran posibilidad de obtener un buen empleo remunerado donde además obtienes enseñanzas para la vida civil posterior.

Que pena que este ocupado y no puedo apuntarme.

Pero ya he pedido el pase Vip.

Yo me pondre a hacer la historia en breves qué ahora mismo ando liadilo

Me gustaria apuntarme a la partida he jugado bastantes partidas a Comandos de Guerra aunque ahora lo tngo un poco oxidadillo pero me refrescare la memoria pues tengo el reglamento. Tambien he sido director de una partida de este reglamento. Creo que podre mantener el nivel de participacion que se requiere y me interesa y conozco bastante bien armas, materiales y misones de las fuerzas americanas en Afganistan e Irak. ¿Que se requiere para entrar a jugar?

Muchas gracias y saludos

Aquí tienes las bases para participar. 

¿Y eso de "Maggie resubida a un server estable (buen cocepto):"?

Nombre: Shad Veyron

Edad: 23

Aspecto fisico: Afroamericano de 1,87 de altura ojos color maron claro y tez muy oscura cuerpo musculoso y trabajado,complexión fuerte presenta una cicatriz en el mentón de un navajazo y tiene varios tatuajes repartidos por sus dos brazos 2 cicatrices de bala en hombro y vientre(De este salio vivo de milagro) durante un tiroteo de bandas,le gusta llevar camisetas ceñidas sin mangas o de tirantes,para mostrar siempre sus tatuajes,pantalones anchos y medio caidos sujetados por un cinturon y suele llevar las zapatillas deportivas,tipicas de jugador de basket y un par de cadenas de buen grosor en su pantalon colgando y un medallón con cadena gorda al cuello qué le llega hasta la mitad del pecho,mirada  seria profunda y penetrante,labios carnosos(Eso fuera de los marines)

Aspecto psicologíco:Es un tio serio, con mucha sangre fria no tiene escrupulo alguno a la hora de matar, de hecho se cargo a su padre y a su tio a quemaropa sin pestañear,tendencias violentas dado qué sufre un trastorno debido a su dura vida de niño,el cual le ha hecho visitar varias veces las celdas de las comisarias,de hecho disfruta viendo a los demás sufrir, es caracteristico en el muchacho soltar carcajadas cuando los demás le suplican.

HISTORIA;

Nacido en Compton el peor barrio marginal de L.A(Los Angeles) dominados por dos grandes bandas los Bloodz y los Cripz,su padre era un pandillero de los Bloodz él cual se dedicaba a vender crack para sacar a la familia,o eso decía el muy hijo de puta, cuando llegaba a casa borracho y hasta las cejas de mierda solo sabía golpear a su madre,la cual gracias a este cabrón estaba enganchada al crack y no duro demasiado cuando Shad tenía 4 años ésta murio de sobredosis,conocío desde su más tierna infancia el significado de la palabra "Supervivencia",pasando hambre como el qué más pués su padre le hacía más bien poco caso, y le pegaba a menudo cuando   volvía ebrio a casa ,podía verse al pequeño Shad con 7 años sus primeros actos delictivos robando para poder comer,no destacaba para nada en los estudios más bien los dejaba de lado era más importante buscarse el pan de cada día en las calles de Compton, fue recogido por su tio pués su padre decidio deshacerse de él así por las buenas y dedicarse de pleno a su negocio,esté le enseño a disparar, empuñó su primer pistola a los 9 años y  un subfusil a los 12, e ingreso en la banda de los bloodz donde comenzo a descubrir qué matar le encantaba y si hacíaa sufrir a los demás mucho mejor, tanta violencia y sufrimiento comenzo a aflorar en el muchacho en forma de violencia no era raro el día qué aparecia en las celdas de comisaria por pequeños atracos,por vandalismo,falta de respeto a la autoridad y un largo etc,además de su larga carrera en los Bloodz a los 15 años ya era muy respetado entre los suyos y sus enemigos los Cripz con varias muertes a su eslpada a los 16 abandonó el instituto, razón por la qué tuvo una fuerte discusión con su tio al cual lo frio a tiros y lo dejo como un colador y después pateo su cuerpo inherte en el suelo, es el día de hoy qué sigue sin sentir remordimiento alguno por lo qué hizo, a los 17 durante uno de los asaltos le toco en el grupo con su padre, aquella era la suya,aquél hijo de puta iva a pagar todo lo qué había sufrido de niño,le partio la espalda con un bate de besibol y cuando este estaba inmovil y paralitico en el suelo descargo un cargador entero de  su pistola en el pecho de su padre y después oculto el cuerpo en un contenedor, al igual qué su tio la policia encontró los cuerpos al ser traficantes de crack supusierón qué era un ajuste de cuentas y pasó del asunto,ahora  solo y sin familia a la qué acudir salvo los Bloodz o eso creía el,si tenía mñás familia no lo sabía,continuo con su guerra contra los Cripz hasta qué un dia,el hamre y la falta de dinero le impulso a coger un par de compañeros de la pandilla y decidio atracar un banco a punta de pistola,la jugada le salío mal y la policía le trinco,4 largos años tras las rejas tonificando su cuerpo y haciendose un renombre entre los presos a los 4 años llego una orden del juez en la cual rezaba qué su condena sería atenuada si aceptaba alistarse en los marines,este acepto y tras pasar el examén medico y el psicologico(De milagro) ingreso en los marines, aquello era un nuevo copmienzo en su vida, un chico pandillero y muy problematico juraba "servir y proteger la libertad" o eso decía la verdad quñé al se la pelaba,había conseguido salir de aquella carcel infecta y putrefacta.

Me llamo Jonas Fendrew, tengo 23 años y soy de origen Irlandés, desde que mi familia llegó a los Estados Unidos, siempre alguno de sus miembros ha servido en las Fuerzas Armadas, el padre de mi tatarabuelo, nada más bajar del barco que le trajo desde Irlanda, se subió a otro para luchar en nombre del Norte.

Mi padre es dueño de una zapateria en la calle Market de San Francisco – mi ciudad natal.

Mi madre es enfermera en el San Francisco General Hospital. Como es de esperar, con los ingresos de ambos aun están pagando su casa. Así que nunca tuve una infancia holgada además, soy el hijo menor, heredé la ropa de mi hermano, los juguetes de mi hermano e incluso los libros de texto de mi hermano...

En el instituto, no conseguí salir con Lucy Evans – la Reina del Baile. Tuve que conformarme con su mayor rival, Torri Johansson; no es que estuviese mal la chica. Estaba buena, pero yo quería a la jodida reina. Siempre anduve a la sombra de Peter Sparks, un puto mariconazo tan snob que en vez de jugar a football, jugaba a basket... Pero el hijo de perra era bueno y era el capitán del equipo. Además de un puto cerebrito... Ése cabronazo si que consiguió una beca deportiva para la universidad... Yo no.

Con mi expediente academico, era de esperar que no lograse llegar a la universidad, mis notas eran justas, mi labor en el campo de football no sobresalía – ojala hubiese logrado ser quatterback – y mis frecuentes partes de agresión en los que me veía involucrado contra los jugadores de basket – putos pijos.

Así que me alisté, el reclutador me dijo que estaría cinco años en el ejercito, que ser un Marine me haría un hombre, me enseñaría a controlar mi agresividad, mi ira y, acallaría esa sensación que acarreo desde niño de ser un segundon; "En los Marines no hay primeros, ni segundos... Solo hay Marines."

Lo siento primera vez que me pasa aqui tienes a tu Magie en subir imagenes:

http://s4.subirimagenes.com/otros/previo/thump_323...

Solamente un idiota se alistaría voluntariamente al ejército. Yo, simplemente no tenía adónde ir, y entre acabar acribillado en un callejón y alistarme en el Cuerpo de Marines, opté por lo segundo y parecer un idiota.

Me llamo Tyrone Jackson, tengo 23 años y crecí en Nueva York.  No me refiero a la Gran Manzana de las postales, ni al Wall Street con sus yuppies encorbatados, ni siquiera hablo del Broadway de los musicales de éxito. Yo crecí en la Cocina del Infierno, entre las calles 34 y 59, en un Manhattan que no sale en las revistas ni en el que los aspirantes a la Casa Blanca se detienen a recaudar votos. Crecí como crecen otros como yo. Negros, hispanos, hindúes y asiáticos desperdician sus vidas en esas calles, olvidados por el resto del mundo, malviviendo en un ambiente sórdido y aguardando a que sus funestos destinos les lleven a la tumba con rapidez .

Mi padre se largó cuando yo tenía dos años, o por lo menos eso es lo que me contó mi madre. Pero mi madre no era una persona demasiado lúcida ni en la que se pudiera confiar; estaba más preocupada por conseguir su dosis de heroína y una botella de matarratas que por educar a un niño. Así que mis primeros años transcurrieron entre las calles y los centros de acogida a los que los Servicios Sociales me mandaban cuando me metía en líos. Y me metí en líos en muchas ocasiones. La Cocina del Infierno jamás te olvida, y las bandas tampoco. Con 12 años recibí mi paliza, empuñé un Colt Python .357 con el que le pegué un tiro a un maldito miembro de los Crips y me gané los colores; y con ello el respeto de la que se convertiría en mi nueva familia: los Bloods.

Mi adolescencia, igual que la de otros negros de calse social baja, transcurrió entre la violencia, los hermanos de sangre, los tatuajes, el crack y estancias más o menos prolongadas en reformatorios. Gracias a esos periodos aprendí a leer y a escribir. Los números siempre se me atragantaron bastante, aunque conseguí superar la enseñanza básica; pero siempre regresaba a las calles con los míos.

A los 16 años mi madre falleció. Dijeron que fue a causa de cirrosis por todos los años nadando en alcohol y metiéndose mierda en las venas. Cuando eso ocurrió, ella era una desconocida para mi. Yo ya tenía mi propia familia en las calles y me estaba tejiendo un futuro tan nefasto como el de todos los hermanos que han terminado en una acera sobre un charco de sangre. ¿Por qué yo tenía que ser distinto? No lo iba a ser.

No tenía ni 19 años cuando fui herido por primera vez. Una puñalada en el bazo, otra en el pulmón y una tercera en el antebrazo. Mis primeros galones marcados a sangre y lágrimas en mi cuerpo. Luego llegaron más robos de coches, más tráfico de armas y de dorgas y finalmente, cuando empezaba a conseguir respeto y renombre, me sacaron de circulación. Pasé casi un año entre hospitales y rehabilitación tras ser alcanzado por cinco balas de 9 mm que un maldito hijo de perra me disparó a bocajarro una noche de invierno.

Todo ese tiempo aprendiendo a andar y cerrando cicatrices me ofreció lo que los borrachos denominan un momento de lucidez. ¿Qué diablos estaba haciendo con mi vida? ¿Hasta cuándo seguiría vivo en las calles? ¿Hasta cuándo conseguiría no acabar entre rejas como otros hermanos?

Me llamo Tyrone Jackson, tengo 23 años y crecí en Nueva York. Y Nueva York casi acaba conmigo. Soy un Marine. Me alisté porque necesitaba huir de mi propia vida. Me alisté porque no haberlo hecho sí que hubiese sido una maldita idiotez. Quizá muera en combate, pero por lo menos eso tendrá un sentido. Morir en las calles de la Cocina del Infierno es el destino de los perdedores. Y eso carece de sentido alguno.

1,82 de estatura.
87 kg de peso complexion media/fuerte.
ojos verdes, pelo negro, piel aceituna.

Que pasa güey?? Quieres historias??
Anda manito, que te voy a contar...
Soy de New York, del barrio hellkitchen
y lo que yo haya visto, tu güey ni te lo imaginas.... Desde lo del 11 S....
Mi family es de Nuevo Mexico, asi que no piense que soy un espalda mojada, vale güey?
Estudié en una escuela publica y cuando me gradué, me hice pandillero. Una mala apuesta pendejo.
Queee??
La concha de tu madre¡¡
La vida de pandillero es muy dura, siempre mirando por detras del hombro por si te dan el boleto.
El caso es que me trincaron y pasé un año en chirona. Joder güey¡¡ se dice el tiempo no el delito.No te lo enseñó tu mama....
Bueno, por donde iba? A ya....Que me dieron a elegir, mas chirona o un tutor...
El caso es que mi tio, que fué del Recond en vietnam, me adopto como tutor. Asi acabe en NY.
Andele, vaya suerte la mia, me hizo la vida imposible el primer año, no tuve tiempo ni de echar de menos a mi mama.
Me dio una leccion de humildad y trabajo duro... Ademas me enseño a ser un marine. Y lo mas importante, cagon, disciplina.
Termine la escuela obligatoria y aprobe con nota, me despegue de las bandas... Aunque no ellas de mi...
Yo que se güey, el caso es que como hables mal de mi tio, te arrepentiras....
Cuando cumplí los 21, mi tio me dijo que no le quedaba mucho de vida, y si volvia al barrio, ya sabia lo que pasaria.
Me dijo que si no encontraba mi sitio, cuando el ya no estuviera, que me pensara lo del ejercito.
Y eso es gúey, aqui estoy, haciendo un rinconcito donde quedarme.
Si pendejo¡¡ Aqui!! Ayudando a unos desgraciados y de paso chingando a todo huevon hijoputa que me dispara.
Ahora tengo 25 y que? Crees que soy muy nena?? Te crees que soy un "Fucking no good"?
Llevo 2 años de instruccion con los marines y con los RECONDOS, 2 años en esta mierda y muchos compadres muertos, pero creo que yo valgo mas que para estar ganduleando en la base. Por eso firme mi vuelta...
Pues claro manito, por eso estoy aqui, pendejo, seguro que no tendre tiempo ni de pensar, si esta minga es mia, jajajajajaja
Ademas, es mas facil ascender si has estado en combate... Asi que... Adoro esta mierda!! JAJAJAJAJA....
Venga pendejo, coge el orinal y dale "huevos" al asunto, que estoy deseando matar flacuchos...

"Hay que hacer, al hacer hacerse y no ser más que lo que se ha hecho”

Sí, eso lo recuerdo, esa imagen existe… ¿Esa niña que está leyendo seré yo? ¿Alguna vez fui una niña? No, no es posible, los niños tienen padres y yo no recuerdo haberlos tenido, yo soy lo que he hecho de mí, soy por lo que he luchado.

No puedo decir que fui feliz, tampoco que no lo fui. Estaba satisfecha, cada día superaba mis expectativas, me gustaba aprender y aún me gusta.

En los horarios que nos imponían en el orfanato y posteriormente en la escuela paramilitar compartía con los demás que, como yo, no tenían padres ni hogar. Algunos eran simpáticos, otros no tanto. Los encargados de nuestro cuidado insistían en que debíamos desarrollar habilidades sociales e incitaban el trato con los compañeros; no importaba si ese trato era en forma de riñas o no.

Nunca me gustaron los juegos, sociabilizar no era para mí. Tampoco me presenté nunca como una líder carismática, lo que no evitaba que me escogieran para participar en sus “concursos”. No quedaba mal, está en mi manera de ser, si las cosas han de hacerse han de hacerse bien. Evité verme incluída exclusivamente en algún grupo, preferí participar un poco de todos simplemente cuando veía necesaria mi presencia y a pesar de ésto no puedo negar que no evitaba que alguno menos fuerte fuera golpeado por los otros. Esto lo haría más fuerte o lo sacaría de nuestro camino. Si los instructores no intervenían yo tampoco lo haría.

Nunca he sido particularmente agresiva, ni aún en mis años de entrenamiento. Participé en cada grupo al que fui asignada con eficiencia. No se necesitan demasiadas emociones para hacer bien las cosas, la ira suele estropear la visión completa de los hechos. Desde pequeña aprendí que pasar desapercibida puede ser beneficioso en todos los aspectos y hubo muchos que cayeron en el error de creer que mi intento era causado por la estupidez. Ellos aprendieron rápidamente lo equivocados que estaban porque no todo es necesariamente como se ve... mis puños se encargaron de enseñarles la lección.

Muchas veces me he visto envuelta en riñas, pese a que las evito, pero no se, tal parece que soy un imán para ellas o es que se creen que por ser mujer no les daré pelea. Idiotas. En el orfanato organizábamos peleas, y ni qué decir en la paramilitar, peleas patrocinadas por nuestros cuidadores y posteriormente instructores, porque ellos apostaban, se divertían a costillas nuestras, pero aquello me sirvió. Sí, me sirvió, porque eso me hizo ágil y diestra. Posiblemente no soy tan fuerte como otros, aún cuando mi físico pueda inducir a lo contrario, pero eso no es lo importante, termino lo que comienzo y lo que no tengo en fuerza lo tengo en destreza y velocidad.

Estando en la escuela, e incluso antes, en el orfanato, decidí lo que quería ser en el futuro y, a mi modo, me consagré a ello. Ya en la paramilitar me esforcé por estar entre las mejores porque sabía que aquello me abriría las puertas necesarias. De mi adiestramiento no puedo decir que tan duro fue porque no tengo otra cosa con que compararlo, sólo se que me exigía de acuerdo a lo que se exige a un Marine: no ceder, no rendirse, ser el grupo elite es el objetivo. Porque si me conformaba con menos estaba perdida y en los marines no hay espacio para los mediocres.

Uno de los instructores de la paramilitar, no se cómo, se enteró de mis aspiraciones y creyendo que así mermaría mi deseo, comenzó a darme un "entrenamiento especial", pero yo no era la única y, sin darnos cuenta, pronto estuvimos todos, interesados y no, inmersos en el mismo plan de entrenamiento. Al comienzo gritos para levantarnos en la mañana y comenzar con la rutina, comida especial, ejercicio, golpes, peleas entre los más agresivos, clases. Nunca quise perder mi tiempo con pequeñas peleas, mi momento llegaría, y, además ¿Para qué golpear a un compañero cuando lo que realmente quieres es hacer que tu instructor desaparezca? Pero en ocasiones aquello fue inevitable y me ví obligada a pelear.

Los instructores se recreaban en nuestras peleas, se diría que las arengaban en silencio sin saber que en cualquier momento habrían podido ser ellos. Si ahora tuviera que sostener una pelea escogería a alguno de ellos aunque realmente dudo mucho que el combate durara lo suficiente para ser digno de mención. Recuerdo mucho que en estas peleas no siempre ganaba el más fuerte, una lengua bien afilada saca a cualquiera de sus casillas y el que pierde el control pierde la pelea.

Después ya no tenían que despertarnos, programamos tan bien nuestro organismo que nos despertábamos al tiempo y estábamos listos a la hora indicada, gran frustración para algunos instructores, no más gritos, ni castigos… por lo menos no por ese motivo.  Ahora sólo tenían que disfrutar la competencia que se iba haciendo evidente entre nosotros, no recuerdo que hubiera distinciones entre hombres y mujeres. Todos teníamos el mismo objetivo, bueno, casi todos, porque el mío era ser Marine y lo conseguí, hoy, con 24 años, lo conseguí.

Espero que nos os importe que os siga dando la tabarra.
Estoy actualizando, y corrigiendo, [El Armero] en la nueva Web:
[url=][El Armero] Armas Cortas[/url]
[El Armero] Subfusiles

Y en la vieja teneis Irak Real Weapons os recuerdo que se preparo para el 2007. Y que esta sin corregir, con lo cual hay algunos errores.

Lastima que tengas el Humbee petado...