Partida Rol por web

Con la decisión tomada, el grupo avanza por la interestatal 5 hacia Tacoma. Hay muy poco tráfico a estas horas de la noche, pero los runners hacen un esfuerzo por mantener su velocidad dentro de lo razonable (después de todo, una patrulla de Caballeros Errantes dándote el alto cuando llevas encima un arsenal suficiente para hacer caer un pequeño país africano puede arruinarle la noche a cualquiera). Siguiendo las indicaciones de GPS del datachip de Silver y con el reconocimiento previo de Ryuka en forma astral, es sencillo localizar la zona exacta donde se ubica la central geotérmica abandonada.

Al llegar al ramal de la Estatal 167 que lleva a Puyallup, queda bastante claro que el mantenimiento de dicha carretera no está en la lista de prioridades del excelso Ayuntamiento de Seattle. Hay abundantes baches y socavones dispersos por todo el firme, muchas de las farolas no funcionan y la mediana hace una década que no se limpia de vegetación... 

En la distancia, el actualmente extinto volcán del Monte Rainier se yergue desafiante en el cielo, resaltando entre un verdadero desierto de dunas formadas por ceniza volcánica. El Flujo de Lava Mowich, los restos solificados del magma expulsado por el volcán durante la Danza del Gran Fantasma han ocupado y rectificado el curso del río Puyallup, creando un lago de cieno gris tóxico estancado. Los edificios del distrito original han quedado reducidos a meros esqueletos ruinosos de cristal, acero y cemento.

Toda la zona se ve iluminada de cuando en cuando por súbitas e impredecibles explosiones de lava de pequeños acúmulos de magma subterráneo que rompen la superficie de lava solidificada, lo que concede más mérito a los contrabandistas que según se rumorea atraviesan la zona desde o hacia el recientemente establecido reino élfico de Tir Tairngire.

Bienvenidos a la Cocina del Infierno, chummers...

Termino de arreglar mi cyberdeck en el viaje y lo inserto nuevamente en mi brazo cibernético antes de llegar a nuestro destino. - Sabéis que esto es una mala idea, ¿verdad? - Le pregunto a mis compañeros.

Aun desde el vehículo, echo un vistazo por la ventanilla de la furgoneta de Alex. Tengo la sensación de que nos estamos metiendo en la puta boca del lobo para nada, pero bueno. Una vez terminada la inspección visual, me conecto a la red y echo un vistazo alrededor en el mundo digital. Para mí sigue siendo mucho más cómodo detectar cualquier objeto con conexión a la matriz y hoy en día hasta los hechiceros llevan un commlink encima.

Ryuka iba más bien silenciosa mientras veía a través de la ventana del coche cómo el gris de la ciudad se convertía en los tonos ocres de la naturaleza muerta que pintaban las tierras baldías. Era obvio que ver así aquél terreno le provocaba alguna especie de bajón, que aliviaba parcialmente acariciando a su gato.

Por aquí. Señaló, corroborando las indicaciones que tenían, y sin prisa revisó de nuevo su automática low-cost.

Cuando llegaron al lugar, escuchó a la hacker, a quien sonrió, mostrando los colmillos del lado derecho.

¿Desde cuando son divertidas las ideas prudentes? Miró a su gato y le acarició haciéndole sentarse en el coche. No te muevas de aquí.

Aunque el animal tampoco tenía demasiadas ganas de salir a aquél lugar que aún olía poderosamente a químicos. Cuando puso los pies en aquella tierra muerta, sin embargo, la sonrisa volvió a borrarse mientras miraba alrededor.

Algo no me da buena espina aquí... Murmuró para sí misma.

Mientras estuvimos por la Interestatal 5 hacia Tacoma, no pude evitar murmurar y maldecir por lo bajo, pues al fin y al cabo, estar en una carretera así y no pisarle a fondo para exprimir toda la potencia de Bull era un desperdicio… claro que por otra parte, también era consciente de que no era buena idea hacerlo y arriesgarnos a que nos parase una patrulla.

O a que lo intenten- añadí para mis adentros sin poder evitarlo, a pesar de lo cual, mantuve una velocidad razonable, al menos hasta que llegamos a la Estatal 167, donde estaba claro que las tareas de mantenimiento hacía un tiempo que no se llevaban, pero para mí, eso solo hacía la conducción más entretenida -Además, dudo que aquí haya patrullas*- me dije mientras empezaba a esquivar baches, socavones y obstáculos varios sin, para desgracia de los que fuesen detrás, plantearme siquiera disminuir la velocidad.

¿Mala idea?-  dijo al escuchar a Byte detrás suya -¿Cómo va a ser mala idea agenciarnos un Rover como ese?- le pregunté.

Dox,  seguía sin estar del todo conforme con la conveniencia de emprender esa loca misión con 0% de expectativas de poder sacar algún provecho.

Pero habían varias de sus compañeras estaban empecinadas en llevarla a cabo, y fuera una buena o mala idea, él jamás dejaba en la estacada a los suyos.

Era por eso que estaba con cara de circunstancias y apretujado en el asiento trasero de esa caja de zapatos que Alex llamaba coche.

   - No se por que crees que vamos a poder quedarnos con ese Rover. - Intervino con un gruñido divertido.- En cuanto se mueva y apunte con esos cañones suyos, pienso convertirlo en un montón de chatarra.-

Antes había dejado su Ares Predator V con Lanzagranadas en el coche, por que no había esperado que les asaltaran otros runners, pero ahora iban directos a una confrontación anunciada. No había motivos para no sacar la artillería pesada...

Pues entonces, tenemos que hacernos con él antes que puedan moverse- le respondió a Dox girando la cabeza para mirarle a él en lugar de a la carretera, con un tono que dejaba claro que eso era algo totalmente evidente -Llegamos, pillamos el coche y nos largamos- le dijo, como si aquello fuese lo más sencillo del mundo de hacer -Pan comido- añadió al tiempo que hacía un giro brusco para evitar un nuevo socavón sin siquiera molestarse en mirar la carretera.

Pan comido.

Las palabras de Alex aún resuenan en los oídos del grupo cuando un poderoso rugido se deja oír por la desierta autopista. La mayor parte de los runners se vuelven o examinan los sensores de sus vehículos para comprobar que media docena de pandilleros a los mandos de motocicletas profundamente customizadas se incorporan desde un punto ciego en una entrada lateral de la autopista. La mitad conducen mientras los otros echan mano de fusiles de asalto AK-97 que blanden de manera amenazadora mientras se acercan a toda velocidad.

-¡¡Me pido la furgoneta hortera!! grita uno de ellos con la mandíbula desencajada.

El repentino rugido de varios motores casi se entrelazó con las últimas palabras de Alex, que veía en su mente como en los sensores de Bull aparecían varias motocicletas, modificadas de arriba abajo a juzgar por como sonaban sus motores, las cuales empezaron a perseguirles.

Agarraos a algo- dijo al tiempo que ponía una de las canciones de su lista de reproducción para persecuciones, todas ellas canciones antiguas y no muy comunes -Parece que tendremos diversión en el camino- añadió sonriendo, pues al fin y al cabo, en su opinión, no había nada como una buena persecución… aunque el que había dicho que Bull era hortera no iba a encontrar nada divertido lo que le esperaba.

Niños preparaos, es hora de jugar- murmuró mientras ne sumergía en Bull, dirigiendose tanto para su drones como para el probio Bull.

En el espacio de la Matriz cercana a la posición de Byte, esta ve que en las cercanías (100 metros) hay dos docenas de commlinks (del tipo más básico: MetaLink o modelos similares) y casi 10 vehículos. Ninguno de ellos está en modo silencioso. Tres de los vehículos se encuentran ligeramente detrás de su posición (en movimiento hacia la furgoneta) y varios dispersos por el trayecto de la autopista, a lo largo de los 10 kms que faltan para llegar al objetivo (la planta geotérmica abandonada).

Las cosas parecen complicarse desde la matriz. Tres vehículos se acercan a toda velocidad hacia la furgoneta y tanto ellos como los commlinks de sus ocupantes no parecen tener la precaución de intentar hacerlo sigilosamente. Sumergida en la realidad virtual no puedo avisar a mis compañeros, así que me centro en las posibles amenazas y marco los dos vehículos más alejados al nuestro. Si realmente intentan hacer algo, es probable que el resto se ocupe del más próximo en los primeros segundos.

Rae se encontraba cabilando sobre los problemas de su familia perruna y embotada por los fuertes olores químicos dde la zona. Esto evitó que percibiera con rapidez a los moteros, que detectó cuando ya se encontraban encima de ellos.

Sacando fuerzas de flaqueza y apretando los dientes, sus ojos brillanron brevemente mientras el poder de su totem la hacía gruñir i ganar reacción. Lanzó su moto a un lado y luego al otro para evitar ser acertada por la cacofonia de balazos de los moteros. Era el momento de usar el colt APDS, pero primero debia evitar que convirtieran a su Mirage en un colador. 

Ryuka estaba absorta mirando el horror de paisaje que se extendia ante ellas cuando los moteros les salieron de alguna parte y empezaron a perseguirles, gritarlrs y dispararles. La elfa ya estaba de bastante mala hostia por volver a cruzar por aquellos horribles parajes, y ahora encima a todo color y con todos los sentidos, como para que encima vinieran a tocarle las narices.

Echó la cabeza hacia atrás contra el reposacabezas. 

Aaaaaghhh! Qué asco de día, en serio!! Bajó la ventanilla y se arremangó las mangas, señalando el asiento a su gato. Tú ahí quieto.

De nuevo concentró sus energías en las manos, pasando el poder a una sola de ellas mientras lo seguía canalizando, y asomaba por la ventanilla, rastas al viento.

Eh, capullos!! Cuando levantó el dedo haciendo una peineta, el orbe salió disparado contra la moto más cercana. Tu jeta sí que es hortera!!

Rae sonrió canínamente. Iba a intentar hacer algo digno de Gato: disparar por debajo del sobaco mientras su moto se balanceaba peligrosamente. Ironías de la vida. Al menos este acto no le provocaba urticaria en las fosas nasales. 

permitiendo que su Mirage bandeara peligrosamente, dio un golpe seco con el brazo y su Colt America apareció en su mano desde su funda de brazo. Permitiendo el giro de la moto, apuntó durante una fraccion de segundo y le soltó un balazo al primer perseguidor. 

Sin mirar si había impactado,  intentó reorientar la moto para evitar salirse de la carretera. 

Byte ataca a dos de las motos desde el ciberespacio, dejando dos marcas en cada una de ellas.

Gunslinger mantiene el control de su moto con cierta dificultad y desenfundado una de sus SuperWarhawks dispara contra el conductor de una de las motos. Sin embargo el disparo carece de precisión y el motero se echa a un lado en el último momento, con lo que la bala sale rebotada de uno de los laterales de la moto. Mientras Watchmaker se sumerge en la matriz para conseguir un mejor control de su furgoneta.

Los pandilleros disparan frenéticamente sus AKs, intentando alcanzar la parte trasera del Bulldog y a Gunslinger.

Entonces llega la respuesta desde el interior: Ryuka agita las moléculas de una de las motos que las persigue, consiguiendo que comiencen a saltar ciertas chispas de los laterales. Y Rae, con un disparo en posición acrobática, consigue impactar en el hombro de uno de los conductores, que no parece especialmente preocupado por la abundante pérdida de sangre.

-¡¡¡Fraaaaakkk, eso ha dolido!!! aulla...

Dox estaba tan encajonado en la parte de atrás del pequeño vehículo de Alex, que el ataque de los motoristas lo pilla totalmente desprevenido.

   - Los domingueros que faltaban...- Gruñó mientras sus compañeras iniciaban un cruento contraataque.

Desde luego estaba claro que la noche iba a ser larga. Con un suspiro despreocupado, aferró su querida "Vera" un rifle Ares Alpha con lanzagranadas incluido y abriendo el techo del vehículo se irguió volviéndose hacia los atacantes.

Apuntando hacia el motorista mas cercano disparó una ráfaga completa contra aquel desgraciado. No era cuestión de ir de ahorrativo...