Partida Rol por web

Sabíais que la cosa pintaba mal muy mal. Vuestra Señora os había enviado a una misión importantísima y habíais regresado sin cumplirla lo que sin ninguna duda haría correr la sangre ( en el mejor de los casos ) y sería la vuestra.

La misón tampoco parecía tan difícil así a simple vista. Se trataba de conseguir un libro llamado " Levanta Muertos " y por si con el nombre no os quedaba demasiado claro, cosa que a vuestra ama no le extrañaría os explicó que era precisamente para hacer que los muertos se levantaran en la noche de Halloween y así hacer cundir el pánico y " joder " la fiesta, ya que como ella siempre decía, no le gustaba que algo que debía de dar miedo se convirtiera en una fiesta en la que los mortales de divirtieran y rieran sin parar.

Poco después de vuestra llegada a la catacumba que os servía de cuartel general os hizo llamar y al hacerlo, retumbaron hasta las paredes, cosa que dejaba claro su mal humor. Eso no era bueno, no, nada bueno.

Las puertas de la sala del trono de vuestra amadísima señora se abrieron y ella, estaba sentada en su trono, con la vista clavada en todos vosotros hasta que os arrodillasteis frente a ella, momento en el que las puertas se cerraron solas de golpe a vuestras espaldas. La cosa se ponía " chunga "..

- No sé dónde tengo que buscar personal competente, pero desde luego que con vosotros tengo el infierno ganado. Sois una panda de inútiles descerebrados que no valeis para absolutamente nada y ahora, antes de que me dé por arrancaros la piel a tiras a todos y os clave en tronco para dejar que os sequeis al sol, quiero que me expliqueis por qué narices venís sin lo que os he pedido..

Parecía dispuesta al menos a escuchar algunas de vuestras palabras antes de comenzar a cumplir sus amenazas.

Su vista se paseó de uno a otro unos instantes y tras estar realmente segura de que cada uno le daba más asco que el anterior, señaló esa cosa pequeña y fea que no tenía claro aún como denominar.

- Tú, Tirramisú.. Empieza desde el principio, quiero saber qué fue lo primero que hicisteis en cuanto salisteis de aquí.

Cita:

Mi excelentísima Señora! Exclama el kobold arqueándose en un rápido y respetuoso saludo, pero quedando bien erguido a continuacion...con la frente bien alta...es decir, a sesenta centímetros del suelo.

Justamente mi poderosísima ama y señora! El problema fue salir de aquí!
Sabíamos que debíamos apresurarnos, y obtener el libro...cof cof…perdón, "EL LIBRO", a tiempo, antes de la noche del horror....
Pero los problemas surgieron tan solo al comenzar nuestra gesta!
Esa...esa "cosa" ese guardián espantoso que vigila la entrada y salida de nuestras catacumbas, no nos dejaba salir!

Todos conocían muy bien al espantoso "Ser" que habitaba y custodiaba la Fosa-Pantano.
Normalmente servía para evitar que intrusos indeseados osaran acercarse al cuartel, aunque cada esbirro, cada esclavo, y cada sirviente de la Señora Oscura, recordaba muy bien las dos ocasiones en que la Ama utilizara al espantoso y feo monstruo verde para ejecutar a aquellos esbirros que le habían fallado.

Tiramisú, miró a su ama con inocencia...al menos con toda la inocencia de la que era capaz un diminuto humanoide con sangre de dragón en las venas...

Se dice Tiramisú...no Tirrrramisú! Pensó en reclamarle, pero se mordió la lengua. Ya habría tiempo de descargar su ira con alguno de sus compañeros.

Mi adorada Señora Oscura. Comenzó nuevamente....
Creo que alguno de nosotros sabía como salir de las catacumbas, (me refiero a quien alimenta a esa Cosa Verde y Fea....)...seguramente el encargado de alimentar al guardián de la entrada pueda explicaros mejor porque nos demoramos en comenzar la misión....

Hummm, Luego, todo se fue al traste por culpa de tener que hacerlo todo a las apuradas, maldito monstruo asqueroso...Hubiera sido mejor salir a hurtadillas como siempre hago, pero entonces tendría que haber hecho la misión yo solo...Pfffs, seguro que todo habría salido mejor así.

Tiramisú se queda pensativo, a la espera (o con la esperanza....), de que su ama busque respuesta en otra parte.

La mujer no se podía creer que aquel estúpido bicho que sólo tenía que encargarse de atemorizar a los indeseados no hubiera dejado salir a sus esbirros para llevar a cabo su meléfico plan, pero entonces se le pasó por la cabeza que si asustaba a todos los indeseables sin hacer distinción...

- Supongo que al final buscasteis la manera de salir ¿ no? Porque no quieras saber lo que te puede pasar si me dices que os habéis pasado todo el tiempo que debíais estar buscando mi libro escondidos en el pasillo más oscuro y alejado de mis dominios..

Su voz aún sonaba tranquila, todo lo tranquila que podía sonar con el tremendo cabreo que tenía encima y se quiso mostrar un poco paciente, esperando que Tirramisú continuara su relato.

Sii! Si mi fabufantastica magnificencia!
Logramos engañar a esa fiera criatura...le arrojamos la bolsa de galletas que Triki planeaba llevar a nuestra gesta, y logramos escabullirnos.
El problema fue que esto nos demoro un poco en la salida, y debíamos llegar a tiempo! Antes de la noche de Halloween!
Todo hubiera salido bien, de todas formas, pero claro..Triki estaba hambriento,...esteee...todos lo estábamos en realidad, y habíamos perdido una parte de nuestras viandas para el viaje!

Así que una vez afuera, nos pusimos a discutir! Estuvimos una hora, y por poco no nos matamos entre nosotros, su grandeza.
Yo era de la opinión de que debíamos recuperar el tiempo perdido, e ir rápidamente al este, hacia el lago de Cristal Zaroski, atravesarlo rápidamente como nos había indicado, y dirigirnos sin perder un segundo a buscar el libro...perdón, EL LIBRO, al Cementerio de Cristal.

Claro que....el kobold hace una pausa, y mira a Triki, a Mosquito...y por ultimo al espantoso Pingüino pedofílico.
Sin embargo, no hace acusaciones y continúa...
Claro que...algunos de nosotros no tenían la misma opinión. Algunos....querían ir primero DOS DIAS HACIA EL SUR! DOS DIAS! Para reequiparnos en el Pueblo Maldito. Grita algo mozqueado, con voz grabe y gutural....y fingida, el pequeño kobold.
Otros opinaban que debiamos ir directo a por el libro. Al final, eran tres contra dos. Terminamos yendo al sur, a buscar más viandas para el viaje a ése maldito pueblucho.

El plan era comprar merca robada a la cofradía más famosa del lugar. Una organización sindical, dedicada al robo de todo tipo de golosinas y venta a bajos precios...Si, ha adivinado, mi toda poderosa Señora...!
El plan fue comprar mercadería a bajos precios, en la cofradía del Club de las Ladronas de Caramelos!

Le mira con un poco de cara de odio cuando cuenta lo de las galletas (¡¡¡GALLETAAAAS!!!). Aún así era su compañero... y había que ayudarle.

- Sí, sí... pero no te olvides de lo que pasó luego... después de comprar las chuches y las galletas, GALLETAAAS. - se vuelve un momento como loco levantando los brazos y moviendo la cabeza, recordando lo ricas que estuvieron esas galletas. - Sí sí, lo del edificio con esa inscripción tan rara...

Ay...Triki, Triki! Te expicamos ya veinte veces eso! Dice Tiramisú negando con la cabeza...
Mi grandisima señora!...esas palabras extrañas, o al menos extrañas para Triki, era un código que se encontraba labrado en las puertas del Club de las Ladronas.
Dicha cofradía nos permitía entrar a comprar sus oscuras mercaderías robadas, pero solo si conocíamos la respuesta a ese acertijo...

Tras meditarlo un buen rato, descubrimos la respuesta. Renela. Es decir, el nombre de la Maestra Cófrade del club de ladronas de caramelos. Renela.

El kobold escribe las palabras con un poco de sangre que unta en su dedo, dibujando las letras sobre el potro de tortura de su ama, y explica.
Como bien puedes ver, o magnifica y poderosa ama del terror, simplemente había que tomar la primer letra de Resucitaremos, luego la ultima letra de aunquE, luego la primera de Nos...y así, ...la ultima de cuestE, y la primera de La....y por ultimo, la ultima letra de vidA.
Renela!

Cuando les dijimos la contraseña, a través de una pequeña mirilla en la puerta, nos dejaron pasar a comprar vituallas para la odisea.

Renela, es como todos supimos más tarde, no solo la Maestra Cofrade de la organizacion, sino tambien la portadora de la Mítica Bufanda Celeste de Entioquia!...

La Señora Oscura se quedó observando a Triki, quien había comentado algo acerca de alguna cosa que se le había olvidado mencionar a Tirramisú, y antes de que incluso su ama pudiera decir nada, incluso pensar en si volver a preguntar o comenzar a torturarlo por omitir detalles, quizás importantes, quizás tonterías, su esbirro comenzó a hablar, sin que ella le hubiera pedido que lo hiciera lo que sin duda la enfureció y entonces fue cuando ocurrió lo que tarde o temprano tendría que ocurrir.

La mujer giró la cabeza, y sus ojos lanzaron una mirada que hizo que Tirramisú se retorciera del dolor, cayendo al suelo mientras su cuerpo se convulsionaba como si le estuviera dando un ataque epiléptico. Para cuando se pudo volver a levantar, se le veía bastante más demacrado que como había llegado.

Tras aquel momento doloroso para vuestro compañero y en el que visteis que eso mismo os podría pasar a vosotros, la vista de su señora, ahora mucho más relajada debido a haber podido descargar algo de mal humor contra uno de vosotros de posó en el " pajarito " del látigo.

- Sigue antes de que a todos os haga lo mismo que a él..

Con su mano señaló al pobre Tirramisú.

Sí Señora oscura

Pingu se queda mirando un momento a Tirramisu y le invade una sensación de frío cuando ve que este se revuelca por el suelo.

Y acto seguido mirando a Triki cuando dice lo de las chuches viniendole a la cabeza unas piruletas fantasmales, - No os olvidais de algo - poniendose la alita en el pico como si recordara algo - Sí aquellas piruletas con cabezas de fantasma, me quede perplejo cuando las de la cofradia me dijeron que servian  para un "ritual Fantasmal", que hacía abrir una puerta de otra dimensión y de allí comenzaban a entrar entes fantasmales para asustar a las personas. - Pingu ladea la cabeza y encuentra los ojos de la Señora oscura mirandole fijamente, él poniendose rojo de vergüenza y tragando saliva continua relatando los hechos - A mí  me parecía que me tomaban el pelo, pero me engatusaron cuatro piruletas - Pingu avanza un paso hacía la Señora oscura y se saca de la manga las Piruletas y se las da. Ladea otra vez la cabeza y mira a Tirramisu, Triki, Pitufina y Mosquito - ¿que os parece si hacemos la prueba?

Excelentisima Señora!! Pido perdón. - Dice pingu mientras arquea el cuerpo hacia el suelo en señal de respeto, y de mientras mirando a Tirámisu como se revuelve de dolor, pensando en que no le pase lo mismo a él.

Volviendo a mirar a la Ama con un tinte rojo en sus mejillas, tragando saliva comienza a explicar lo que paso - En las catacumbas encontramos unas espantosas Batpinzas que las dominaba el tipo feo verde ese, las Batpinzas nos atacarón con desmesura, eran más agresivas de lo que aparentavan en principio -  comenzo a temblar cuando volvio a pensar con las batpinzas, pero cuando volvio a mirar a la señora oscura sus temblores cesaron de golpe, sabia que la ama seria más sadica que las propias batpinzas.

Mirando alrededor tragando saliva atenazado por los recuerdos de las batpinzas y viendo como tirámisu se levantaba  del suelo con la cara desencajada, comenzo a tragar mas saliva, pero tenia la garganta seca y había un nudo en su garganta y con un suave carraspeo de garganta continuo su argumentación con una voz más ronca que anteriormente.

Aparte que aparecian por todas partes, matabas una y te aparecian quatro de golpe y con más mala leche que las anteriores, fué una tortura salir de las catacumbas, pero al fin con demasiado retraso pudimos salir de ellas, no sin antes dedicarle unas palabras a su familia a ese tipo feo y verde con sus malditas Batpinzas. El muy bastardo nos siguio hasta mucho despues de salir de las catacumbas.

Terminada la explicación hizo otra reverencia hacia la señora oscura y espero en su sitio sin mostrar ningun tipo de impaciencia ni nada que se le asemejara, solo aparto la mirada un momento, para volver otra vez a mirar a la Señora oscura de nuevo esperando su respuesta.

Que suerte que no le he dicho lo del latigazo al hombre feo de verde, y que le salto el ojo izquierdo de la cara, mirando un poco aliviado como si se le hubieran quitado el peso del mundo encima. Ahora solo faltaba esperar a la opinión de la señora oscura.

Mmm... Jo... ¡Qué frío es este sitio!, no lo recordaba así. Y... ¿Frío? ¡Pero si los muertos no sienten frío!. Por eso le gusta a nuestra Sra. para que sus muertos se queden con la piel intacta durante muchos años. Jo, espero no ser nunca uno de esos.. ¡a la mierda con esos pensamientos!

Mosquito abre los ojos, despacio. La luz del lugar se clava en su cerebro, pero no tarda en acostumbrarse a la penumbra de la habitación. Lentamente se incorpora después de haberse arrodillado y analiza la estancia. El dolor del viaje aún recorre su cuerpo, lo que lleva a la ardilla a mirarse, buscando las supuestas causas de su resaca; una petaca (vacia) enganchada en su cinto tiene la culpa.

- ¡Será...! -se le escapa al ver la reacción contra Tirramisú, pero su instinto de supervivencia se dispara y continúa maldiciendo en pensamientos para que su Sra. no le hicera lo mismo a él.

"¡Será hijo de goblin! ¡Comecucarachas! ¡Cerebro de culo de rana! Demasiado inútil, demasiado inútil... Ñañaña..."

Mosquito continúa una retahíla de insultos y ocurrencias varias propias de los de su especie. Una ráfaga que dejaría pasmado hasta al más rufián de las tabernas portuarias.

-¡Pingu!. Señala a modo de advertencia. ¡¡Si no quieres que nos pase lo mismo tienes que contarle como fué el camino de huída mientras esas batpinzas no dejaban de picotearme el trasero!!. Zi zi, justo en el momento en el que te desahogabas con ese moco verde. Le dijiste hijo de puta-rana o algo así y ezo hizo que se cabreara.. Yo sólo recuerdo que el camino daba mucho miedituu..-