Partida Rol por web

Seltyel avanza esquivando como puede todo el material del granero y se posiciona junto al muro mientras desenvaina su espada.

Aquello era una sucia emboscada orquestada por muertos vivientes, si bien al tratarse muertos vivientes taldanos sus ataques resultaban bastante patéticos. Condenado esquivó los golpes con facilidad y se colocó en una situación no tan comprometida, con adversarios rodeándole por todas partes. Todos sus esfuerzos se centraron en esa tarea, motivo por el cual sus golpes no fueron todo lo certeros que hubiera deseado.

La espesa niebla cubre vuestra vision y volveis a escuchar el engranaje de la maquinaria trasportando barriles de grano por encima de vuestras cabezas.

Ahora ya sabeis que aspecto tienen vuestros enemigos, un aspecto terrorifico. Las garras y las guadañas , junto con su etereo aspecto hacen que se os erizen los pelos de vuestros brazos. Hasta ahora nadie se ha llevado el honor de derramar la primera sangre, si es que estos seres tenian sangre...

Son varias figuras silenciosas, encapuchadas y cubiertas por la niebla aparecen ante vosotros sin que su cuerpo parezca tener una forma física, como si se solidificaran a partir de la misma niebla que cubre el granero,  ese mismo vapor es el que parece animar sus capas y sus armas. Sin embargo, debajo de cada capucha, un cráneo humano flota,  con las orbitas vacías y teñido de un blanco puro, casi resplandeciente.

Observando como los virotes de la ballesta rebotaba, sin hacer daño alguno a la criatura, lanzo la ballesta al suelo y invoco mi linaje dracónico para convertir mis manos en garras y haciendo un ligero movimiento para situarme espalda contra espalda con condenado le araño el torso al único undead que tengo a rango...

Evan suelta su ballesta al tiempo que sus manos se transforman en dos enormes garras con las que ataca al Black Echelon mas cercano. Parece que las garras del hechicero consiguen dañar a la aparicion, que aulla furiosa...

Recuerdas haber oido algo sobre este tipo de apariciones, pero no consigues recordar nada mas aparte de que se les considera no muertos (undead).

Larissa atisba entre las montañas de grano las horribles criaturas contra las que se están enfrentando.

Y se pone frenética:

-¡Malditos monstruos venidos del más allá! ¡Volved al polvo de donde partísteis! ¡Este es el lugar de la carne y la sangre, no del polvo y los huesos! ¡Por la vida que recorre mis venas y las de mis compañeros y por nuestra voluntad de vivir y gozar yo os envío de vuelta al polvo de donde nunca tuvísteis que salir!- Mientras estas palabras atropelladas salen de la hermosa boca de la clériga esta presenta hacia adelante el símbolo sagrado de su deidad y una emanación de energía positiva y vida sale de ella, dañando a todos los muertos vivientes que profanan con su presencia el mundo de los vivos.

Tras las palabras de Larissa una onda de energía cubre casi toda la niebla, afectando a los espectros, como si les golpeasen haciendo que sus huesos retumbaran, soltando polvo y suciedad. El que estaba luchando con Evan pegado a la pared no resiste las heridas que Larissa le produce con su canalización y se desmorona. Un poco mas adelante, justo al lado de condenado, otro Black Echelon que permanecía oculto esperando para atacar al monje también se ve afectado por la energía de la clériga y pierde su oportunidad de atacar a Condenado por sorpresa.

Lamentablemente el ataque de Larissa parece insuflar de nuevas fuerzas a los espectros, que se mueven por el granero y arremeten contra vosotros. Larissa es capaz de esquivar un ataque por parte de un espectro que aguardaba detrás de la pared, pero Condenado no puede evitar las dos garras del que acaba de aparecer a su lado, y Evan, aunque es capaz de esquivar una garra, sufre un violento tajo en el pecho, producido por la guadaña de otro espectro, que le hace tambalear, y casi perder la consciencia.

Encima vuestra los barriles de grano empiezan a correr de un lado para otro, en breves segundos se pondrán a descargar su mercancía por el granero....

Seltyel no tiene mucha fortuna atacando al ser que tiene enfrente.

Reconfortado al tener las espaldas cubiertas por otro siervo de la Majestrix, Condenado recuperó la compostura y se abalanzó sobre aquellas aberraciones. Lanzó la frente hacia el espectro que tenía frente a él, golpeándole el tabique nasal con tanta fuerza que el cráneo salió despedido aterrizando en el grano varios metros más lejos. Acto seguido se giró rápidamente para clavar la rodilla en el espinazo de otro, escuchándose un crujido que le produjo una profunda satisfacción, sobre todo cuando aquella cosa se derrumbó en un montón de harapos y una guadaña.

Ashdareb y su Eidolon se cruzan a la entrada con Mirella, que sale corriendo en direccion contraria.

Llegan hasta la parte baja del granero. El edificio se compone de cuatro salas.  En un primer vistazo, hasta donde vuestra vista permite vislumbrar (que con esta niebla no es mucho)  veis que todo el suelo de las salas está cubierto de grano hasta cerca de vuestras rodillas. Se os hace difícil andar por entre los silos.