Partida Rol por web

Después de dar más vueltas que una peonza por un campamento que desconozco y en parte me asusta, decido preguntar a los que me intimidan menos, lo cuál no es fácil...
La mitad no saben dónde encontrarla y al final acaban por señalarme el lugar del que he venido así que empiezo a murmurar palabrotas malsonantes por lo bajo mientras chuto alguna que otra piedra por el camino sin demasiada fuerza que digamos.
Lo único positivo es que mi cuerpo parece haberse aclimatado mejor en éste tiempo y ya no me cuesta tanto respirar con normalidad.

Finalmente vuelvo a llegar hasta mis compañeros de desventuras, me cruzo de brazos algo enfurruñada.
-No la encuentro- me limito a decir mientras observo cómo volvemos a estar rodeados de desconocidos. Demasiada gente en poco tiempo, no recuerdo casi ningún nombre...

Pobre Ruby, la mando a dar vueltas por el campamento en busca de la tal Erika, y cuando regresa resulta que está con nosotros. Espero que no sea un pesagio de como van a salir las cosas cuando trate deorganizar la expedición, que no sean los hados tratando de advertirme de mi falta de capacidad par el liderazgo. No, se trata de una casualidad, o incluso del deseo de Gaia de mantenernos unidos.

Miro directamente a Ruby, en silencio, y en cuanto me devuelve la mirada le guiño un ojo señalando a la mujer oriental. Ya la has encontrado.

observo a los demas sin pronunciar palabra tratando de aprender lomaximo posible hasta que me pueda vorver a mi casa donde todo es normal , pero la presencia y palabras de O'really me escaman y me descentran.

Veo como Ruby vuelve de su paseo sin encontrar lo que andaba buscando. Está claro que la organización no es el fuerte de esta gente. Hasta los lobos de verdad tienen más sentido de manada y de táctica que estos mediolobos. De los hombres lo entiendo, entre la testosterona y los instintos lobunos no pueden dar cabeza con bola, pero de las mujeres esperaba algo más de coherencia.

Aunque parece que finalmente si que vamos a alguna parte y no vamos solos. Será mejor seguirla antes de que cambien de opinión otra vez. -Al fin nos ponemos en marcha-digo mientras sigo a la chica cuyo nombre ya no recuerdo, porque no se si es una u otra. Parece que entre la nación de hombres lobo todos son chinos. Será cuestión de conocer la historia, pero empiezo a sospechar de que provienen de asia.

-¡Ah...!- exclamo de forma algo ahogada tras el guiño de Ed, carraspeando y apartando algunos mechones de mi pelo mientras me acerco a la oriental que empieza a andar al cabo de poco, aunque resulta un poco confuso descubrir que parece estar "duplicada".
-Buenos días, soy Melinda, me dijeron que debía hablar con usted...- me pongo a su altura y le hablo todo lo educadamente que los nervios me permiten.
-Al parecer debería enseñarme unos...rituales para...¿'teurje'...?- digo lo último dubitativa, los nombres "técnicos" son tan raros que me cuesta memorizarlos.

Detras de Erika aparece, a un ritmo mas despacio, Shiro reuniendose con los que parece los que van a realizar el ritual a los nuevos cachorros. Su semblante es algo mas serio de lo que ha veis visto en las ultimas pocas horas que llevais junto. Su ojos blancos, inespresivos hasta el momento, parece atisvar ilusion, esperanza y alegria.

me despierto de mi pequeño shock por el viaje maldita sea esto es nuevo para mi, ¿donde estamos? miro que mis hermanos estan al lado mio y veo como hay varias personas al rededor

Por lo que parece creo que el lugar no es Nueva York, demasiados arboles, puede que mas al norte, pero por el calor, no se... Solo que las nenitas de la zona estan muy, muy potables

Encantada Melinda, algo he oido. Tu eres Theurge, es muy interesante te enseñare en cuanto prepare todo para ver lo que es cada uno de vuestros compañeros. Si me acompañais lo haremos en una tienda. Golgo nos la prestara la propia asi tendremos algo de intimidad sonrio mientras camino a una que hay en un lateral. Pasad de uno en uno y espero que los de mayor rango en la manada esten presentes durante todo el ritual

Entro en la tienda y espero mientras comienza a sonar una musica

me fijo en lo que dice mi hermano... mmm potables muy potables y ademas muy apeteciblesle dijo mientras esbozo una sonrisa

Asiento a las palabras de Erika y la sigo mientras compruebo de reojo que mis compañeros nos sigan antes de volver a centrarme en ella.
-Observaré los preparativos, si no te molesta...- digo sintiéndome algo obligada a ello, pero no de forma impuesta si no simplemente siento que debo hacerlo. Es bastante extraño y difícil de describir...

Entramos en la tienda, la cuál miro con ligera curiosidad antes de volver junto a mi supuesta "maestra" observando con atención lo que hace pero dejándole espacio para seguir con ello sin importunarla con preguntas impertinentes que me gustaría realizar.

Es una tienda sobria, de un soldado, con calma Erika ha quitado un cajon para que no la estorbe y se ha sentado en el mientras toca y te indica que te sientes en el suelo sin parar. Notas un frio en los huesos y a algo o alguien a tu alrededor. Tras un rato sonrie dejando el Ertu a un lado y levantandose poniendo una mano sobre tu frente

Entro en la tienda lenta y reverencialmente, sabedor de que a lo que voy a asistir es un sagrado ritual de vital importancia. Es la visión de Gaia y Selene, el discernimiento de las intenciones de aquellos que están sobre nosotros, de futuro y el pasado.

Tomo asiento en silencio, observándolo todo, con los ojos intermitentes entre la ritualista y el objetivo del rito, como testigo mudo de un momento relevante. Aprendiendo, escuchando, respetando.

Levanto el rostro hacia el techo mientras de mi garganta sale una voz en Gauro que habla por mi, aunque es melodiosa tambien

Morador del cristal, seguidor de la cucaracha Theurge. Tienes dudas pero te seran disipadas joven Melinda, todos las tenemos pero al final desaparecen reforzadas por la voluntad de la manada

Una de las asiáticas nos dice que entremos de uno en uno.-Normal, la puerta no da para más, ¿qué esperas?, que nos demos tortas por entrar? estás loca tía, si crees que vamos a salir corriendo a mogollón para meternos en la tienda. Si ahí no corre ni el aire. ¿No se te ocurrirá encender velitas ni chorradas de esas? como haya una varita de incienso nos matas a todos por sobredosis. Nah, fijo que las pone, no saben hacer nada sin engalanarlo todo de florecitas, velitas o cositas que desprendan olor al quemarlas. Habrá que entrar, porque como me quede fuera me voy a liar a hostias con los dos gilipollas estos y no merece la pena. Vamos para dentro.

Miro a los hermanos gemelos y sin importarme quien es quien, ya que no parece que alguno de los dos tenga más educación que el otro, me dirijo a la tienda tras Ruby. No vayamos a obstruir la puerta si pasamos muy seguidos presa de la emoción. Cuando entro me echo a un lado para dejar que entre alguien, pero para quedarme cerca de la puerta por si necesito aire fresco.

La muchacha parece entrar en una especie de trance extraño y me pregunto si supuestamente yo acabaré haciendo ése tipo de cosas. Es un poco escalofriante... Sólo me alivia el hecho de que no parece haber necesitado consumir substancias alucinógenas ni cosas por el estilo, además parece serena y tranquila a pesar de ello así que me limito a asentir dubitativa sin saber muy bien qué hacer a continuación, lo que me lleva a mirar de reojo a Eddie antes de levantarme y apartarme del lado de Erika para dejar sitio al siguiente.

La verdad es que no me ha dicho anda que no supiera... Por el momento.
Excepto lo de la cucaracha... ¿acaso no hay más animales en el mundo?

TE miro y te hago una señal para que te acerques y te sientes en el suelo. Cierro los ojos de nuevo un segundo mientra notas como el aire se vuelve mas frio, como si te llegara al alma, que te helara los huesos. MI voz vuelve a ser la misma que con Melinda, gutural la de un lobo en garganta humana.

La rata es tu totem, Roehuesos, callejero y sarnoso. El embaucador, Ragabash, el que danza en las sombras

-Rata callejera, roehuesos, sarnoso, embaucador. ¿A que te meto? ¿Será estúpida la tía lo que me ha dicho?-Me levanto del sitio no vaya a ser que me siga insultando.-Esta te la guardo-Miro a mis dos acompañantes sin entender muy bien para qué mierda era esto, más que para ponerme de vuelta y media.

Miro la puerta y decido salir, aquí hace mucho frío y me están doliendo hasta las articulaciones. Vamos antes de que se me congele el culo.-Maldita chiflada poseída...