Partida Rol por web

 Miré a mis compañeros mientras nos disponíamos a salir del sitio, con cara inexpresiva:

 - Disculpadme, tengo que ir un momento al servicio, nos vemos fuera...

 A continuación fui directo al baño, sin prisa pero sin pausa...

Vas al baño totalmente cachondo. Estás puesto, más vale acabar con esto cuanto antes. Solo tienes en tu mente una imagen que se te ha quedado grabada y te perturba

La imaginación deforma los pequeños pechos de la joven y los convierte en dos verdaderos mastondotes.

 Me encierro en una de las cabinas del baño, asegurándome que hecho el pestillo, cojo algo de papel higiénico, me bajo los pantalones, y a aliviarse toca...

Sales totalmente desfogado, ¡qué alivio!

Esperáis fuera mientras Gabriel va al... ¿Baño? ha tardado más de lo que esperábais

Finalmente aparece y os reunís los tres. No hay ni rastro del negro. Ha oscurecido ya y hace algo de frío. Os tapáis para no resfriaros... ¿Por dónde empezar?

Delante vuestra hay una gran avenida en la que la circulación de coches es casi permanente, es una locura. Pero esto es LA. El tiempo apremia.

Elsa se cerró el abrigo y cruzó los brazos esperando así obtener algo de calor. Esperó pacientemente a que sus nuevos compañeros saliesen del restaurante.

Unos antes que otros... Hombres... pensó Elsa.

Cuando el último de ellos salió casi ni se digno a mirarle.

¿Qué había cola en el baño?

Después comenzó a caminar, casi sin prestarles atención.

Vamos chicos, no tenemos todo el día... Busquemos una cafetería para ver que información tenemos y joder si alguien tiene el teléfono del principito negro que le llame... Al menos si hay que acabar con él, que no sea en su barrio...

Harvey caminó tras la mujer. Parecía decidida a acabar con el encargo cuanto antes, aunque no supo discernir si por quitarse el marrón de encima o si en realidad pretendía impresionar al jefazo. Que más daba. Él no pensaba correr.

- Puedo hacer un par de llamadas. Con suerte alguno de mis colegas esta por la zona y se acerca a darle nuestro mensaje.

Sacó el móvil, accedió a la agenda y fue pasando nombres, intentando adivinar quién de ellos podía encontrarse más cerca a aquellas horas. ¿A quién se le habría acabado la mierda y necesitaba ir a por más? Quizás podía hasta pillarle un poco a él, ahora tenía 50 de los grandes.

Una vez decidió quien recibiría la llamada, pulsó y se quedó algo rezagado del grupo.

-Ahora os alcanzo. - 

Lamas a tu amigo Jhonny, un consumidor empedernido.- ¿Sí?.- Escuchas cómo se mete una raya. 

- ¡Hey! ¡Ese Jhonny! ¿cómo te va? Oye, no andarás cerca de... *

- ¿Por esa zona? ¡Tú estás loco! ¡Es una zona de negratas! yo soy blanco tío, me agujerearían nada más entrar. Ten cuidado si vas por ahí...- Acto seguido tose.

-¿Ir yo? Qué pereza...- 

- Están perdiendo mucha clientela, eso no es sano para el negocio. - rió. - ¿Entonces no conoces a nadie de la zona a quien pueda llamar? Necesito contactar con un tío... - Entonces cayó en la cuenta de que ni siquiera conocía su nombre. ¿Cómo cojones iba a preguntar por él? - Menudo imbécil... aun tendremos que ir a buscarle... - Negó con la cabeza, con cierta resignación. Pues tampoco podían pasar de su culo... 

- Bueno sí, conozco a un negro que vive por aquellos lares... pero... no me atrevo a llamarlo... es... bueno, vamos a ver, lo hago por tí, porque me caes bien. Espera, que lo llamo y te digo.- Acto seguido cuelga el teléfono.

 Miré a Elsa con una expresión carente de emoción, aunque manteniendo una actitud cortés, ya que no me interesaba crear mala sangre entre mis compañeros y yo:

 - Pues la verdad es que si... Lamento haberos hecho esperar...

 También era mala suerte, debía de haber algo malo en la comida... Para que te fíes de los restaurantes pijos. No me sorprendería que sanidad se pasase por aquí para ver porque los clientes visitan tanto el servicio.

Joder... lo lamenta... y los demás aquí, pasando frío como gilipollas... En fin, pongámonos en marcha y tomemos algo caliente joder, se me están quedando las manos heladas.

Elsa cruzó la calle casi sin preocuparse de que sus compañeros fuesen detrás de ella... Cualquier transeúnte despistado casi podría llegar a pensar que Elsa estaba hablando sola pero joder.. esto era LA, ¿no? La gente hablaba sola constantemente.

En fin... creo recordar que girando por esta calle había un sitio medio decente...

Entráis en un bar americano conducidos por Elsa. El lugar está lleno de gente, es normal, es la hora de la cena. 

Ahora hay un gran bullicio que está cenando, por lo que cuesta entenderos cuando habláis entre vosotros. Os sentáis en una mesa y os atiende una camarera.- ¿Qué desean tomar?.- dice mientras retira los desperdicios de los anteriores clientes.

Para mí agua con gas, por favor...

Elso ojeó a la camarera, de forma discreta... Quizá en otro momento... ahora tengo cosas que hacer... pensó Elsa mientras sacaba de su bolsillo la documentación que les habían dado pero, sin dejarla a la vista de ojos indiscretos. Sólo cuando la camarera se hubiese ido pondría toda la información encima de la mesa para trazar un plan.