Partida Rol por web

Salió extrañada de la tienda al escuchar como alguien llamaba. Se quedó sorprendida, al encontrarse con Scout y después de sus palabras, no pudo más que sonreír. Ahora ya sabía más de lo que debía y esperaba que lo aprovechara en su beneficio.

Me quedé mirando como Pete cojeaba mientras se acercaba a nosotros, con un chasquido el brazo de Coach volvió a su sitio y se volvió a marchar. Supongo que así, paga su deuda. Pero de alguna forma me seguía sintiendo intranquila, pues aunque no había sellado el trato, estrechando la mano de El Productor, sabía que este último no se iba a quedar ahí.

Vi como Violet se marcha detrás de su hermano y como volvía desmoronada. Recogí la lona del gamo que Coach no había traído y para agradecérselo, lo besé en la mejilla. Pero antes de acercarme a mi compañera, me acerqué a Militar y lo tomé de la mano.

-Estaba preocupada por ti.-Musité.-Todavía no olvidé mi primera noche en este lugar, algunos considerarían que podríamos que podríamos casarnos en ese momento. Ja, ja, ja.-Reí divertida y una punzada en los pulmones, me devolvió a la realidad.

Me acerqué a Violet, y nos envolví con la lona para que aislar nuestro calor corporal.

El scout respondió con una cabezada y sonriendo al cumplido del militar

"Ni te imaginas la cantidad de cosas que pasan en las acampadas de los scouts.... no es el primer hombro que coloco."

Luego miró al coach y puso cara de preocupación

"Haz caso de lo que te dice el Doctor Judas...intenta descansar el brazo y no darle mucho trabajo en un par de días. Si vuelves a necesitar ayuda basta con que silbes Rongar..."

DÍA 4. HORA 10.
CONFESIONARIO DE SECRETOS
 

Janet silbó metiendo las puntas de su pulgar y corazón entre los labios.

-¡Y AHORA LOS PREMIOS! -Exclamó llamándolos mientras se encontraba frente a una hoguera bastante grande y ella, sentada en una silla, alrededor de esta, se encontraban otras seis silla más rodeándola.-Para Scout y Doc.-Señaló dos silla que tenían un abrigo hasta los tobillos de plumas de oca, unas botas forradas de lana y un gorro junto una bufanda y guantes, cada uno de su color. -Para Empresaria y Zoo.-Señaló otras dos silla. Estas sólo tenían las botas y el abrigo.- Y para Militar y Coach.-Señaló dos sillas que tenían un abrigo, del color de cada uno.-¡VAMOS! ¡ACERCAROS! ¡Es hora de las confesiones!

Esperó a que los concursantes se encontrasen con ella, se pusieron la ropa y después se sentaron junto a ella. A su izquierda Scout, seguido de Doc, después Empresaria, junto a ella Zoo, a su lado Militar y junto él Coach, que estaba a la derecha de Janet.

-Bien cada uno de vosotros tiene un secreto de uno de los otros cinco que se os fue entregado esta mañana en un sobre.-Tomó aire.-Sólo uno es mentira.-Sonrió malévola.- Ahora, tenéis que hacer una sóla pregunta a la persona que tenéis su secreto, pero la pregunta no puede ser preguntar la verificación o no del secreto. Tenéis que hacer una pregunta de ese secreto. -Se echó hacia delante y sintió el calor del fuego.- Por ejemplo, yo podría preguntar a Zoo... ¿por qué abandonaste a tu familia siendo tan joven? O a Militar ¿cómo se llamaba la niña que mataste en un última misión? O preguntarle a Scout ¿cuán benevolente es tu reverendísimo padre en casa? O.... a Empresaria ¿te gusta dormir tres veces a la semana en un hotel barato? O a Doc ¿cómo te gustan los hombres? O... a Coach ¿cómo piensas rescatarla?-Se reclinó en su silla.-¡Qué empiece el confesionario de los secretos!

-Por supuesto, habrá premios y castigos para quien no quiera responder o mienta.

El scout clavó la mirada en el suelo....la pregunta que siempre había querido hacer y nunca se había atrevido, la pregunta que explicaría el porqué de muchos de los problemas de su infancia, la pregunta que le carcomía el alma...

"Yo tenía una tarjeta sobre mi hermana.... mi pregunta es........ Que hice mal para que me odiaras así?"

No podía levantar los ojos del suelo... entrecruzó los dedos apretando tanto que los nudillos se pusieron blancos, preparado para encajar el golpe, uno de esos golpes que duelen en el alma.

Me acerqué hasta donde Janet se encontraba. Agradecí con un mero pensamiento el premio. Dejé a un lado la lona, para envolver en el cálido y mullido abrigo. Me saqué mis botas y me puse aquella tan blandas y calentitas. A mis botas les hice un nudo con los cordones y las até a la asa derecha de mi mochila. Coloqué la mochila a mis pies y me quedé esperando a que Janet hablase.
....
Oí como Peter formulaba su pregunta a Violet mientras tanto me dedicaba a sacar la hoja de periódico de la mochila que había encontrado en el sobre con mi nombre. Y pasando por encima de Doc la hoja de periódico, se la entregué a Scout.
-¿Por qué te sigues culpando de un accidente? -Le pregunté enseñándole la hoja de periódico donde venía un Scout llorando desconsoladamente delante de una tienda de campaña calcinada. Y con el titular: "Un chico fallecido mientras dormía".

Maldita sea, esa es la única pregunta que no quería que me hiciesen, pensaba decírselo en privado y no allí, ¿pero qué podía decir? Bueno, podría intentar contestar con evasivas, no decir toda la verdad, para luego en privado, contarle todo, no había otra, él se lo había buscado.

- He sido así, porque desde que tú naciste toda la atención de nuestros padres te la llevaste tú, yo quedé relegada a segundo plano y no podía permitir eso, por ello intenté llamar su atención tratándote mal, pero se vé que no lo hice bien, pues solo conseguí alejarles a ellos y a ti de mi vida.

Lo digo mirando al suelo, llevo años arrepintiéndome de mi comportamiento. Y ahora tenía que hacer la pregunta para Coach, aunque estaba segura de que mi prueba era la falsa.

- Coach, ¿quién te espera en casa? Quiero decir, ¿qué hay de tu mujer?

Tras esto me fijo en mi hermano, quiero ver su reacción.

Scout recibió la confesión de su hermana inmóvil, con la cabeza gacha y los ojos cerrados... igual que un cachorro al que su dueña amenaza con pegar con un periódico después de una travesura. En cuanto hubo terminado cabeceo asintiendo, muy despacio. La tensión en sus mandíbulas era evidente, como si apretando los dientes fuera a ser capaz de digerir un trago amargo con más facilidad.

Todo ha sido por celos? Pero..... pero..... si siempre fue la favorita. Le pagaron el reformatorio, le pagaron la universidad... y la enviaron lejos cuando las cosas se torcieron en casa para protegerla... y aun así..... 

No sabía si reír o llorar, si levantar y abrazar a su hermana o encajarle un puñetazo en la boca... Su única reacción fue abrazarse las rodillas y hundir la cara en ellas, por si alguna lágrima traicionera se empeñaba en eludir su control.

Estaba hundido en sus pensamientos cuando Lina le pregunto la pregunta que no deseaba escuchar, la pregunta que lo atormentaba casi todas las noches, por que se culpaba? hubiera podido hacer más? no llevaba en su joven cuerpo una secuela imborrable de lo que había tenido que pagar?. El muchacho miró a Lina con una tristeza infinita y tras un par de intentos donde se le quebró la voz consiguió contestar.

"No lo entiendes.... nadie lo entiende. Tenía 17 años y era mi primera vez como ayudante de tropa, a esa edad es bastante difícil llegar a ese rango... para simplificar diríamos que era el segundo de abordo. Era una preciosa noche de otoño y todos habíamos cantado en la hoguera y contado historias de terror" Al joven se le escapó una sonrisa burlesca "No, no cantamos el kumbaya, cantamos cosas con y para los chicos, michael jackson, algo de country.... aquella noche recuerdo que uno de los chicos me pidió que cantara algo de Beyonce...." Peter rió brevemente antes de continuar "bueno...me estoy desviando. Los chavales se fueron a la tiendas a dormir y yo inspeccione el campamento... Todo estaba en orden. Una hora después me despertó un olor a quemado pero no fui capaz de encontrar las llamas. El jefe de tropa también se despertó y gritó aterrorizado apuntando en dirección a la tienda...."

Al scout se le quebró la voz y ya no pudo contener las lágrimas...

"Yo salí a la carrera...entré en una tienda en llamas y conseguí sacar a 3 niños..... pero no al último... La tienda se derrumbó antes de que pudiera volver a entrar...."

"No vi las llamas....la tienda era marrón.... y.... mis ojos.... si hubiera tenido unos ojos normales hubiera visto el fuego...pero....confundo el rojo, el verde y el marrón..... si hubiera reaccionado 10 segundos antes lo hubiera salvado...."

Tras una pausa que se hizo eterna solo pudo terminar diciendo...

"Fue culpa mía. Él debería estar con su familia....y yo muerto..."

Fruncí el ceño molesta.
-¡Tú no tienes la culpa de ser daltónico!-Le dije más rabiosa de lo necesario.-Es como si yo me culpase por ser hija de mi padre, o Doc por tener pene y no vagina, o Militar tener la piel blanca y no negra,o... ¡YO QUE SÉ!-Hice un aspaviento desesperada por no salirme las palabras mientras me ponía en pie. En dos pasos me puse frente a Scout, pasando por delante del Doc y notando a mis espaldas el calor de la hoguera.
Mi cuerpo reaccionó antes que yo me pudiera dar cuenta, cuando lo vi llorar de aquella manera lastimera. Porque primero lo abofeteé con demasiadas ganas y después me eché sobre él para rodearlo con mis brazos por el cuello, estrechándome contra él. Lo apreté contra mi pecho turgente, con mi cabello acariciando su cara.

El scout la apartó con suavidad y se acarició la mejilla en el punto que le habían golpeado, después muy quedamente respondió

"Era mi responsabilidad...debí haber sido más rápido, debí haber sido mejor..... para mi ellos son como mis hijos, como mis hermanos pequeños.... como te sentirías tu si tuvieras un hijo o una hija y no hubieras podido hacer lo suficiente para salvarlos?"

No quería revelar secretos que no eran suyos.... y básicamente los 2 o 3 psicólogos que había visitado tras el incendio coincidían con ella, golpes aparte, pero ellos no lo entendían... no entendían ese vacío en el corazón cuando un niño pequeño, un hermanito pequeño muere sin que puedas evitarlo....

Un dolor punzante se clavó en mi pecho como si alguien me clavase una saeta. Me quedé blanca y por un momento no supe como reaccionar. Siemplemente volví a mi sitio, rozando con mis piernas las rodillas de Doc y me senté.

Vi la cara de sufrimiento de mi hermano al contestarme, parecía que no sabía muy bien como reaccionar pero al final no hizo nada. Lo peor fue la siguiente pregunta, sabía que para él, volver a contar toda su dura experiencia era horrible, lo veía en sus ojos, siempre se había culpabilizado sin sentido por ello.

- Hiciste bastante, allí había más responsables y fuiste el único que hizo algo, deberías sentirte orgulloso de haber salvado a los que pudiste, déjate de martirizarte, tienes que superarlo si no nunca podrás avanzar en la vida.

No se que me ha llevado a decirle eso, quizás un impulso de actuar como una verdadera hermana mayor.
 

El chico no contestó a las palabras de su hermana. Su cabeza estaba muy muy lejos, reviviendo aquel día una y otra vez y preguntándose que hubiera podido cambiar para salvar al cuarto niño..

Hiciste lo que pudiste Scout, no te culpes.

Las preguntas estaban empezando a hacerse asi como las  correspondientes respuestas. Yo pensaba que el secreto que no era cierto era el que me habian dado a mi la verdad, pero visto que casi todas las cosas eran increibles ya qui dentro cualquier cosa podria pasar. Esto como llevaba tiempo pensando se hacia cada mas efecto social que de supervivencia, pero aun así yo queria ganar, asi que habia que seguir adelante.

-Bueno Lina, creo que a mi me toca preguntarte a ti, y ya que estamos en el concurso te preguntare por él. ¿Cuales han sido tus tres mejores momentos aquí dentro?, prefiero saber los buenos que no los malos.

La miro a los ojos esperando una respuesta lo más sincera posible.

Miré a Zoo algo confundido quizás. 

-No me espera nadie en mi casa, ni tengo mujer zoo. Creo que debes tener la tarjeta de la mentira quizás, yo no puedo mentir por las reglas creo no?  así que si he dicho algo que no es cierto deberían aclararlo aquí- dije a la Zoo con mi mejor sonrisa de gilipollas, quizás había tenido algo de suerte aquí. Miré a mi lado a Janet como esperando que ella me resuelva la duda que tenía. 

Escuchó a los dos hombres. Y se quedó mirando a Coach. Sin duda, había respondido a una pregunta referente a su secreto, de la forma más correcta y verífica.

Pero... Sonrió malévola y sacó una bocina y apuntó hacia Militar.

-UUUUUUUUUUUUUUUUUUU -Sonó gotural y estridente, dejando momentáneamente a los presentes ensordecidos pero sobre todo a su destinatario.

Negó con el dedo índice hacía Militar.
-¿Qué clase de pregunta esa esa? ¡Sólo faltaría que le preguntaras si cuece o enriquece! -Se quejó la presentadora con segundas.- Tienes castigo, querido. Y sí, -sonrió ampliamente- tú sobre es el único falso si alguien se preguntaba que era el que tenía en las manos.-Miró a los presentes.- El castigo, vendrá después. Ahora toca que Doc y Coach hagan sus preguntas.

Fruncí el ceño, ante la pregunta de Militar. Esa pregunta no revela ningún secreto. Entonces vi como Janet nos apuntaba con algo. Esperaba una bomba de humo o algo así pero acabé gritando de dolor mientra me tapaba las orejas.

-¡¡¡¡PPPPPAAAAARRRRRRAAAAAAAAAA !!!! -Gritaba pero era inútil, hasta que no se vio saciada no paró de tocar las narices... la moral... el cerebro.

Cuando acabó, comenzó a mover los labios mientras hablaba pero no podía oír nada. Jadeaba, con los ojos desorbitados del susto. Crispada, entendí que en ese preciso momento mis sentimientos hacia Alucard habían cambiado radicalmente, al odio.

Me alegré al confirmar que mis sospechas eran correctas sabía que mi sobre tenía que ser el falso, ella no podía haber hecho una cosa asi. Lo malo que para Lina pareció que la pregunta no le gusto, lo cual me entristeció,así que tendría que hablar con ella.
Aceptaré el castigo sin problema, y que me alegra el confirmar mis sospechas e que mi sobre era el falso. Era imposible que fuese cierto. Lina me gustaría explicarte a solas el porque de la pregunta, ya que tus ojos demuestran que no te gusto mucho la pregunta, por eso me gustaría explicarme La digo con cara de pedirla que me entienda.

Miré a Janet, si, era muy atractiva y sabía coordinar todo pero por otro lado me parecería de lo peor que haya revelado que mi secreto no era falso, había hecho bien en intentar disimularlo y me arruinó la estrategia. Mala suerte. De todas formas había salido bastante bien parado, o al menos eso creía. 

-Mi pregunta es para...- dije haciendo algo de suspenso- el doctor. Doc ¿si los familiares de un paciente se equivocan a su criterio en su decisión, usted haría lo que le dicen aunque crea que están totalmente errados?- preguntó intentando resaltar aquello.