Partida Rol por web

SOMBRAS DE LA ÚLTIMA GUERRA 2.0

SEGUNDA PARTE: DARGUUN

Cargando editor
03/01/2017, 12:17
Adia Ringëril

Sacó la hoja del cuerpo del enano y envainó la espada con un solo movimiento fluido. Antes de que el zombie cayera al suelo, ya se había apartado un paso y estaba, de nuevo, sin armas en las manos y con una sonrisa en el rostro, mientras asentía complacida ante el trabajo hecho.

- Bien... - Iba a felicitar a los demás, pero Daisy la interrumpió y se calló, dejando que hablara la semiorca para después encogerse de hombros. - Es un buen plan, vamos. - Terminó diciendo finalmente, desviando su atención a su alrededor. El ruido que habían hecho era suficiente para que alguien con un fino oído les hubiera escuchado. Si así era, y enviaban refuerzos, prefería ser ella quien se percatara primero de su presencia, y no al revés.

Sin embargo era aquél ruido, proveniente del oeste, el que seguía acaparando todos sus sentidos. Buscasen lo que buscasen allí, estaba segura de que lo encontrarían en la fuente de aquél sonido. Así que no perdió tiempo, y en cuanto la cazarrecompensas dejó al muerto apoyado contra la pared, se adelantó por la parte norte del edificio avanzando mientras observaba el suelo en busca de algún posible rastro y pendiente de cualquier cosa que llamara su atención.

 

- Tiradas (3)
Cargando editor
04/01/2017, 03:02
Director

Tras unos segundos en los que recuperáis el aliento reanudáis vuestra marcha. Finalmente os decantáis por rodear el edificio por su parte norte alejándoos de las luces del campamento que visteis hacia el sur. De nuevo Adia y Daisy encabezan el movimiento. Por un callejón rodeáis el edificio. El  irregular suelo de cristal os hacer ser prudentes para evitar caer. Tal y como os dijo la semiorca este edificio es uno de los que se encuentra en mejor estado de toda la villa de Cantera Carmesí.

Al llegar a la esquina observáis...

Frente al edificio que habéis rodeado hay otro más pequeño. Este parece tener su interior a oscuras...pero no tenéis claro de donde procede el ruido que habéis estado escuchando y que recordaba a como si picasen  hielo. Powaqqatsi os dice estar convencido que procede del edificio más pequeño.

 El edificio que habéis rodeado tiene el umbral de su puerta ténuemente por una luz que procede del interior. Aquí todos podéis oír el chirriante ruido de vidrio contra vidrio. Una vez más el druida os advierte de que bajo ese molesto y siniestro ruido también cree oír algún tipo de conversación. Lamentablemente, por más que lo intenta, no consigue extraer ninguna información adicional.

 

- Tiradas (3)

Notas de juego

Me equivoqué en una cosa. Ibais hacia el este y no hacia el oeste como comenté.

Decisión. ¿Dónde y cómo vais?

Cargando editor
04/01/2017, 13:56
Powaqqatsi

 

Podemos ir directo hacia el ruido del edificio pequeño, si están sacando más zombies sería bueno detenerlos mejor antes que después.  Por otra parte, si están cavando un túnel para entrar a los laboratorios subterráneos, pues ya nos habrán hecho parte del trabajo, trabajo difícil por lo que se deja ver del grosor del vidrio.  Creo que ir primero hacia el chico sería lo mejor, por ambas razones. 

Claro, si vamos por el edificio grande quizá encontráramos otra ruta que ellos no y les tendríamos ventaja, pero esto es sólo una posibilidad. 

Yo por ambas rutas iría, sin problema, pero prefiero la primera.  

Mientras se ponían de acuerdo, el druida tomó un par de buenasbayas y se las dió a Ch'om para curarle la herida del golpe por su caída en el vidrio.  Daisy, Finn, Alfrik, ¿tienen pociones, o les curo con un pergamino? 

Caminó en medio del grupo, con el buitre perchado y calladito en su hombro.

 

Cargando editor
05/01/2017, 07:35
Daisy Sue Demonfly

Baja la voz, caradelata. Si tú puedes escuchar una conversación de dentro, los de dentro pueden escuchar una conversación de fuera.

Como si importara después de la pelea de antes. Seguramente sobre eso estaban discutiendo en el interior del edificio. Daisy Sue sacó de la mochila una poción. La miró con ternura, como un gato que cuida más su séptima vida.

La última... aunque en la mochila que nos dió la patrona-señaló a Adia, quien era la que la llevaba-había más. A vuestra salú. Glup... glup, glup... glup... Aaaah. De un trago. Como una machota.

Se quedó con el vial, que normalmente tiraría, y raspó una muestra de la escarcha que recubría los cadáveres de los zombis por si vivían lo suficiente como para preguntarle a alguien listo qué era. Demonfly agitó el frasco, mirándolo a contraluz, como si eso le fuese a ayudar en algo o le hiciese parecer más intelectual. También recogió la cuerda con garfio y la guardó como con la muestra de hielo vidrioso.

Vamos al edificio pequeño, pero cuidao... La puerta del edificio grande está antes. Si pasamos por delante nos podrían ver. Cruzamos la calle principal y rodeamos el edificio pequeño por el este... por el sur... por el oeste... y luego hasta la puerta. De momento cruzar la calle. De dos en dos. Primero las damas... Tú no, novata-dijo a Adia, deteniéndola con la señal de la palma de su mano.

Las señoritas McBones y Demonfly abandonaron la seguridad de la ocultación para llegar a la cara norte del edificio pequeño. Desde su esquina más occidental, asomaron sus cabezas para escudriñar a través del umbral de la puerta del edificio grande, aunque por ángulo no podían ver el tercio norte del interior. Skully McBones no es una de esas calaveras de pitonisa para ver más allá, esas que en vez de hueso son de cristal. Aprovechando que estaban en mejor posición, Daisy Sue también escuchó con atención... No era trabajo para Skully, porque Skully no tenía orejas. Obvio.

- Tiradas (5)
Cargando editor
05/01/2017, 10:56
Adia Ringëril

Suspiró. Cada vez que la cazarrecompensas parecía dar a entender que tenía algo agradable para el mundo, o un poco de sentido común al menos, segundos después lo tirara todo a la basura con algún comentario hiriente o peor, con alguna muestra más de que su enorme cabeza debía estar más ocupada por hueso que por cerebro. Era una contradicción andante, pero al menos era una armada con una maza de hueso que sabía como usar y sentidos desarrollados, así que si quería ir la primera, no iba a ser ella quien dijera nada.

Así que tras la discusión sobre por donde ir -en la que al menos la semiorca bajó la voz y calló al druida-, sobre cuyo resultado no tenía nada en contra que decir, asintió y sacó su arco, tensándolo mientras preparaba una flecha y apuntaba hacia el umbral del edificio grande, atenta por si salía algún enemigo.

Sería la última en pasar, y cubriría al resto mientras cambiaban de posición. Luego, la última, pasaría ella misma. Al fin y al cabo eso haría feliz a Daisy, y por no aguantarla también a ella.

- Pasad, venga. - Ordenó en voz baja, sin perder ojo de la puerta tenuemente iluminada.

Notas de juego

Mientras los otros pasan, yo preparo acción y disparo a lo que salga. Luego ya paso la última.

Cargando editor
06/01/2017, 00:29
Director

Daisy se mueve tan sigilosamente que por un momento dudáis de que sus pies lleguen a tocar el suelo. Incluso Adia, enojada por que la semiorca la haya llamado "novata", tiene dificultades para escuchar sus pasos. No obstante se queda vigilando la esquina con su arco preparado para disparar.

Una vez al otro lado Daisy aprovecha el ángulo para escudriñar el interior del edificio más grande. Ve otro de esos enanos no-muertos arrastrando los pies hacia la entrada. Viene del interior y lleva un capazo lleno de fragmentos de vidrio en los brazos. Cuando llega al umbral de la puerta de entrada vuelca el contenido a un lado y vuelve a entrar en el interior. Las voces que mantenían una conversación siguen escuchándose aunque sigue sin ser posible discernir su contenido.

Cuando es seguro hacerlo Ch'om y Powaqqatsi cruzan el camino siguiendo los pasos de la semiorca. Esta continua rodeando el edificio. Esta estructura parece ser una iglesia. Podéis ver en ella símbolos de la hueste soberana tallados en sus muros de piedra. El tejado parece desmoronado, pero los muros son sólidos y estables. Cuando Daisy llega hasta la siguiente esquina descubre que la parte trasera del edificio está ocupada por un cementerio. Tras las lápidas ve más movimiento. Concretamente se trata de otra pareja de zombies que trabajan incansablemente escarbando las tumbas con sus propias manos.

Miran a la semiorca...

Y continúan con su tarea.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Podéis seguir pasando al otro lado. Daisy , ¿ sigues con tu plan de rodear la iglesia por el este y el sur?

Cargando editor
06/01/2017, 16:02
Daisy Sue Demonfly

¡SSSSH! ¡Sssssh-sssh!-hizo aspavientos con los brazos para que Ch'om y Powaqqatsi no siguiesen, y ordenó silencio de nuevo-¡Ssssssh! ¡SSSSH!

Los zombis del cementerio deben de ser amigos de Skully, porque no hicieron ademán de atacarles. Eso, o que algún sacerdote malvado les ordenó que cavasen pasase lo que pasase, pero seguramente era por lo de Skully. Este nuevo hallazgo cambiaba tanto las cosas, que en lugar de rodear la iglesia, tendrían que rodear también el cementerio, porque daba muy mal yuyu pasar entre los dos zombis.

Uf, ese es un rodeo de tres pares de cojones de ettin...

Quedar expuestos en una zona despejada como la que había tras el cementerio no era lo que Demonfly entendía como subterfugio. De hecho, no había nada en este mundo que Demonfly entendiese por subterfugio, ya que era una palabra que no usaba nunca.

En su cinto, la cara huesuda de McBones estaba orientada hacia arriba. Daisy Sue levantó el mentón para tratar de ver lo mismo que lo de su compañera. Su sonrisa se torció: ambas estaban pensando en lo mismo. La cazarrecompensas sacó su cuerda con gancho y empezó a darle vueltas para que ganase fuerza centrífuga.

Estaba todo planeado: la semiorca treparía al tejado de la iglesia, anclaría el aparejo portátil y bajaría el gancho para subir al druida también al techo. Sería su base de operaciones. El nidito de amor de ambos, de Powaqqatsi y su feo pajarraco. Luego podrían hacer cualquier cosa: espiar por una claraboya el interior de la iglesia, descolgarse por el lado sur para dar el rodeo por arriba en vez de por el este, colarse por una ventana si es que ese era uno de esos templos con dos plantas y palco...

El druida aún estaba a tiempo de hacer cambiar de idea a Daisy Sue si se le ocurría algo mejor...

Notas de juego

¿En el cementerio también hay hielo-vidrio de resbalar o los zombis están escavando en tierra?

¿Hay agujeros en el cementerio, como si ya hubiesen sacado más zombis? ¿O se limitan a cavar en dos tumbas, como si acabasen de empezar o tratasen de exhumar unos cadáveres concretos?

Cargando editor
06/01/2017, 16:55
Powaqqatsi

 

Si, esos dos parecen tener órdenes de cavar y no atacar a nadie.  -le dijo en voz muy baja y muy metálica.  Ch'om se limitó a limpiarse el pico sobre una protuberancia de su hombro, quitándose un poco de la grasita de enano zombi que se le había quedado pegada.  Seguía viendo a Skully con aire de antojo. Quieto, Ch'om. 

Creo que entonces podríamos jalarlos con tu gancho y acallarlos aquí para que no nos sean problema más adelante.  Si no ofrecen resistencia hasta podríamos usarlos de cobertura -agachados un poco solo- para entrar al edificio grande sin que nos vean y ahí echarnos a los dos necrománticos que andan cuchicheando quiensabe que cosas.    ¿Finn tendrá algún hechizo de oír a distancia

Aunque también se me ocurre que mientras uds se ocultan a los lados de la puerta del edificio grande, Ariete y yo podemos plantarnos enfrente y decir algo así como: "¡El Señor de los Filos reclama este lugar como suyo!"  Esperar a que salgan a atacarnos y ustedes los agarran por sorpresa, ya sea de los lados o desde arriba.   ¿Cómo ves? 

De paso, el druida buscó algo en esa pared que pudiera indicar una puerta secreta o algo similar, para entrar a la iglesia primero, pero no por la puerta principal.  

 

- Tiradas (1)
Cargando editor
07/01/2017, 00:40
Director

Desde la esquina echas otro vistazo a los dos zombies y al cementerio. El suelo del cementerio está, como el resto de la villa, también cubierto de vidrio. Los dos enanos no-muertos escarban y quiebran el hielo con sus propias manos sin importarles que sus dedos hayan quedado completamente descarnados debido al duro e inhumano trabajo. 

Ves como, sin mucha delicadeza intentan extraer los cuerpos que hay enterrados en el cementerio. A uno de los lados de un hueco el el vidrio ves un montón de tierra y unos cuantos cuerpos amontonados. Pero no tendrías ni idea de decir cuántos hay debido al estado lamentable en el que se encuentran,la oscuridad y la mezcla de troncos, cabezas, extremidades y cuerpos completos que parecen componer la pila.  Uno de los zombies, como si quisiera confirmar tus sospechas, tira con fuerza de un pie que sobresale de un agujero en la tierra. Al estar la mayor parte del cuerpo enterrado el pie se arranca con un crujido de huesos y piel seca. El zombie, sorprendido, mira el pie con una profunda mirada de incomprensión.

Cargando editor
07/01/2017, 12:03
Daisy Sue Demonfly

Qué feo está prejuzgar a la gente, Powaqqatsi-dijo en un susurro-. Solo por ir por ahí, con un séquito de muertos vivientes, recuperando cadáveres de los cementerios, ya los llamas necrománticos. Pero que feo...

Demonfly miró a los zombis sintiendo lástima de su estupidez y negó con la cabeza con resignación. En su cinto, McBones se agitaba como diciendo que no a Ch'om, que ni lo pensara, que ella ya había notado que el muy pájaro se la estaba comiendo con los ojos, pero que ella era una chica muy tradicional y que antes de dar ningún paso quería un anillo de compromiso en su dedo, ese que quedó en alta mar cuando pelearon en el Exhaustless.

No quiero otra ruidosa pelea sobre hielo-vidrio resbaladizo, y menos tan cerca del edificio grande, así que los zombitontos se quedan a lo suyo, en el cementerio. Tampoco quiero a dos de nuestros mejores luchadores de espaldas a lo que pueda salir del edificio pequeño, y llamando la atención de un ejírcito de muertos vivientes cuando no sabemos cuántos son.

Ugggh... No llegamos a ningún lado discutiendo. ¡Ya sé, que decida el nano! Es paladín, ¿no? Se le supone preparao pa manejar estas situaciones.

Daisy Sue señaló a Alfrik y se le quedó mirando, pero el enano no hizo nada más que encogerse de hombros. Después de todo, los paladines de la llama plateada se especializaban en licántropos, no en zombis.

De acuerdo, tú ganas, abraza-árboles. Haremos lo de entrar en el edificio grande con dos zombitontos por delante tapándonos. Toma-la semiorca hizo entrega de unos pitones que había comprado en Sharn-. Os volvéis a la cara norte del edificio grande, y empitonáis a los dos zombitontos que ya matamos por los omóplatos, pa que queden como asas con los que sujetarlos por detrás. Yo mientras voy a echar un vistazo a ver qué mierdas hay en el edificio pequeño. Suerte.

Y como un fantasma, un fantasma ruidoso, Daisy Sue fue a la calle principal, pasó por delante de las puertas de los dos edificios y pegó su espalda a la pared. Esperó unos segundos, por si alguien montaba escándalo tras verla. Un silencio tácito significaba que todo iba bien, y que podía asomar la cabeza por la puerta de la iglesia y ver si allí había algo de lo que preocuparse.

- Tiradas (4)
Cargando editor
07/01/2017, 14:34
Powaqqatsi

 

Pero, pero... no quería parecer prejuicioso frente a la semiorca, pero si que creía que podrían ser necrománticos, la verdad. Se hubiera sonrojado por su falta de tacto pero el metal de sus cachetes no le dió para ello.  Apenado por malpensado sólo alcanzó a responderle:  Bien, si, mejor ellos.  

Pero entonces a Powaqqatsi se le ocurrió otra idea. ¿Por qué usar un enano zombi si contaban ya con un enano de verdad?  Con un poco de habilidad de disfraz podría parecerse a un zombi local.   Les pidió entonces a Alfrik y a Finn, experto en disfraces (lo había visto probarse en el barco un disfraz de mujer, seguramente con el propósito de practicar todos los días) que decorasen al primero con las entrañas y ropas cubiertas por vidrio de los primeros zombis que derrotaron.  Así, y llevando un cargamento de vidrio a tirar, podría interceptar al zombi que salía del edificio grande.  Lo sustituiría, espiaría dentro y regresaía a contarles en su 2ndo cargamento de vidrio a que se enfrentaban.

En eso reparó en Daisy y Skully, quienes se movían "sigilosamente" a espiar en la iglesia.  Decidió ayudarlas imitando el ruido que hacían los zombis al moverse por el vidrio.  Quizá eso les daría un poco más de ventaja en no ser oídas por los románticos o necrománticos de allá adentro del edificio grande, los cuales seguro estarían muy distraídos con sus propios cuchicheados como para notar mucho.  Jrrk, jrrk, hizo sonar raspando vidrio contra vidrio. 

 

- Tiradas (1)

Notas de juego

* Tiro de bluff para darle un +2 a Daisy en su mover sigiloso.

Cargando editor
07/01/2017, 19:14
Director

Powaqqatsi se acerca a unas ruinas cercanas donde se han reunido Finn, Alfrik y Ariete. Cuando le cuenta a Alfrik su intención de disfrazarle de enano no muerto el enano refunfuña sonoramente. No parece estar dispuesto a cometer tal acto más propio de vulgares asesinos que, según sus palabras, actúan con artimañas. Debe ser Finn quien interceda en favor de Powaqqatsi para intentar convencerle. Finalmente, tras mucha labia del semielfo, Alfrik accede a dejarse "disfrazar" por Finn. Pero no quiere ni oír nada de echarle vísceras por encima.

Mientras tanto Daisy se asoma a la calle y, tras unos golpes que diríais que son sus pies chocando contra algo, desaparece de vuestra vista...

 

- Tiradas (2)
Cargando editor
07/01/2017, 19:42
Director
Sólo para el director
- Tiradas (2)
Cargando editor
07/01/2017, 19:45
Director

Te adentras en el interior de la iglesia recorriendo con prisa los meros en los que los umbrales de ambas puertas coinciden. Esperas que no te hayan descubierto.

El interior de la iglesia te revela más símbolos y ornamentación típica de la Hueste Soberana. El techo está derrumbado y los cascotes llenan el interior de la iglesia. El altar y partes del suelo están recubiertos del mismo vidrio rojizo que cubre toda la villa. Miras a izquierda y a derecha y no ves a nadie. Te adentras unos metros esquivando cascotes y con la maza, Scully Mcbones, preparada, y no descubres a nadie. Y aún así tienes la sensación, por intuición de semiorca o por cualquier otra razón, de sentirte observada por alguien...  

Notas de juego

Tira Buscar y Avistar.

Cargando editor
07/01/2017, 20:59
Adia Ringëril

Y desde su posición lo observaba todo cada vez más confusa sobre cuál sería el porvenir de aquél grupo y, por supuesto de ella misma. Por un lado empezaba a arrepentirse de haberse dejado engatusar por el dinero fácil, pues estaba claro que había gato encerrado en todo aquello, para ser exactos aquella variopinta alianza de gente salida de algún manicomio -o con problemas de fabricación si tenían en cuenta a los forjados- que no tenía muy claro como habían logrado sobrevivir hasta llegar allí. Por otro lado, bueno, por otro lado seguía arrepintiéndose, daba igual porque, ya que no había posible escapatoria de allí, excepto seguir el juego a aquellos locos y esperar que sus planes funcionaran; al fin y al cabo, eran tan ridículos que quien fuera que esperara dentro del edificio se lo tendría que tomar a broma, y cuando se diera cuenta de que no lo era ya sería demasiado tarde. Era una pequeña esperanza, la única que la hizo quedarse y no andar hacia las sombras de las que había salido en busca de su guía para regresar a un bosque o alguna montaña lejana, dónde estaría rodeada de seres con un mínimo de sentido común como osgos, trasgos, orcos y otros humanoides salvajes pero que al menos sabían cuando no suicidarse. 

En eso estaba pensando, perdida en sus propias reflexiones, cuando volvió a mirar hacia sus compañeros y vio que la cazarrecompensas había desaparecido. 

"Maldita sea, y ahora qué...", se dijo para sí misma, en un tono de sufrimiento que no auguraba nada bueno.

Cargando editor
08/01/2017, 00:36
Daisy Sue Demonfly

Demonfly se santiguó ante sus dioses, y se apartó del centro de la sala hasta quedar con la espalda pegada al muro de la pared norte. Eso debería ser suficiente para que no la viesen por el umbral de la entrada desde la calle. Pero había más. Siempre hay más. Lo notaba en la piel... McBones también lo habría notado si tuviese piel. Era como un mal presentimiento.

Nah. No había nada. Mirase para donde mirase, todo parecía tranquilo.

- Tiradas (2)
Cargando editor
08/01/2017, 22:59
Director

 Durante unos segundos has tenido la extraña sensación...la extraña sensación de que alguien estaba observándote desde muy cerca. Pero de repente te has vuelto a encontrar sola en aquella iglesia. Miras a tu alrededor en busca de algo que pueda ser de utilidad para vuestros propósitos. Pero no encuentras nada, tan sólo cascotes y relieves dedicados a la Hueste Soberana.

Cargando editor
09/01/2017, 12:09
Daisy Sue Demonfly

Todo en orden, ahora a machacar craneos de Karnath...-susurró a Skully McBones.

Demonfly volvió a la entrada del templo, en una esquina de la sala, y escudriñó lo que ocurría en el edificio de enfrente asomando de vez en cuando la cabeza por el umbral. Esperaría a que sus compañeros llegasen con los zombis preparados como acordaron antes de salir de su escondrijo. Después de todo, la sensación de que alguien la vigilaba pudo ser fruto de su propia e imaginativa cautela paranoica.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Me quedo en la iglesia, vigilando el edificio de enfrente.

Cargando editor
10/01/2017, 12:57
Director

Tras varios minutos de espera veis que Daisy no regresa de la Iglesia. Desde el umbral de la puerta la veis haceros señales para que os acerquéis hasta su posición Eso implica pasar por delante de la puerta del otro edificio. Sabéis que en su interior debe haber alguien ya que, algunos de vosotros, habéis escuchado sus voces. La ténue luz que sale del interior es otra pita que os indica esa más que probable presencia. Finn ya está terminando de caracterizar a Alfrik como un zombie enano.

Por otra parte teméis que permanecer demasiado rato ahí fuera termine revelando vuestra posición a aquellos que puedan estar dentro del edificio.

Notas de juego

Aquel que quiera pasar a la iglesia que haga una tirada de Movimiento Sigilosamente.

Finn, tira disfrazarse con un -2 ( por no hacerlo sobre ti mismo sino sobre otro). El que quiera puede ayudarle.

Cargando editor
10/01/2017, 14:58
Powaqqatsi

 

Powaqqatsi terminaba de ayudar a Alfrik a disfrazarse de zombi y mientras pensaba en cómo pasar hacia a la iglesia sin que los notaran.

Mm, si no hay nadie en la Iglesia es porque a lo mejor los zombies no pueden entrar en un lugar bendito.  

Estaba tan distraído que todo lo que le ponía al enano encima se le caía.  Como si su armadura estuviera hecha de manteca

Pero en eso se le ocurrió.  Sacó un pergamino de "sonido fantasmal".  Lo activaría al pasar todos, para cualquier ruido que hicieran pareciera que fuera que se acababa de caer de la pila el vidrio que acabara de sacar a  tirar el enano zombie.   Enmascarar el sonido es luego mejor que pretender que no hay.  -explicó. 

Se esperó a que el zombi saca-basura justo diera la espalda para volver a entrar, y que Alfrik disfrazado entrara como a sacar basura también, para leer el pergamino y cruzar, lo más sigiloso que podía un forjado de su tamaño, que no era mucho. 

 

- Tiradas (2)