Partida Rol por web

Al parecer las primeras criaturas era diferentes de las otras que les siguieron, los Jedi, aun juntos y con sus poderes, no podìan contra ellos.

En ese segundo, vio que Roogbor iba solo al frente, en un frenesí de sangre, como pocas veces lo había visto.

La decisión cayó como ella lógicamente: Roogbor estaba bien solo en esta oportunidad.

Cambiò rápidamente el modo del arma a un solo individuo (no area) y disparo contra uno de los bichos que asediaba a Cobaine.

El misil falló y fué a estrellarse lejos.

Descargó su ira contra el jedi miedoso..

"Vamos Gaheris! tu puedes hacerlo mas rápido que eso!!"

Después de unos segundos, el Padawan recarga el lanzamisiles hasta dejarlo listo para un nuevo disparo. Luego de eso se lo pasa a Balael en sus manos.

Chidoo imita a Sake y cambia el modo de su rifle para poder disparar con fuego automático para lanzar una ráfaga contra los enemigos que atacan a D'Angbar. Dispara todo lo que tiene contra ellos, dándole tantos tiros que acaban moliendo a los objetivos, dejándolos inertes y humeantes.

El Maestro Vayami se concentra un pequeño momento y lanza dos golpes en rápida sucesión que cercenan a la bestia a la mitad, dando por finalizado el combate.

Al ver que ya no hay enemigos descanso unos segundos para tomar aliento -Eran duros comento a mis compañeros -¿estais todos bien?

Sake intenta calmarse para poder recuperarse pero siente como el veneno está en su sistema y sigue causando daño. Le parece que aún no ha terminado y la ponzoñosa sustancia puede matarle si no es tratada.

El sable de luz pone punto y final a la contienda, todas las bestias yacen inertes en el suelo incluyendo los escupidores que la furia de Roogbor se lleva por delante. Todos permanecemos en pie pero la herida de Sake aunque no demasiado profunda se torna en un color grisáceo por la presencia del veneno

Dejame ver esa herida, hay que eliminar la toxina antes de que ataque algún organo

Abro el kit médico y mientras limpio la herida aplicó un retardante para que las defensas del propio Sake sean capaces de neutralizar el veneno invasor.

Tras unos instantes en los que Sake nota un quemazón en la herida comienza a encontrarse mejor a medida que el eescáner indica que baja el nivel de toxina.

Eso es, esta remitiendo en seguida estarás bien. Comprobar si hay alguna otra salida

Mantengo un grado de vigilancia extrema mientras el noble Bel-Iblis cura el envenenamiento del combatiente Sake.

Sin embargo, he apagado el Sable de Luz, aunque mantengo la empuñadura en la mano derecha.

Me centro en la Fuerza para percibir cualquier amenaza que pudiera estar aproximándose a este lugar.

El tratamiento médico sobre Sake es capaz de neutralizar el poderoso veneno que le tenía el peligro. Chidoo parece tiritar de un escalofrío a pesar de ser un tipo sumamente rudo. Musita a todos con una voz calmada a propósito:

 - "Meedo no entunino. Misini nu wanta no pentena soke no no noka ta ana tururu a atawa na ina seupu no na etene mutuwa... o tini no wa."

En sus ojos de rodiano se puede ver que las imágenes del primer ataque es algo que nadie podría olvidar y, aunque él sobrevivió a esa noche, una parte de él no lo hizo. Cambia el modo de su rifle a fuego semiautomático para cambiar sus pensamientos. Luego de eso avanza con cautela.

Vayami también apaga su sable de luz y lo mantiene en la mano a medida que avanza y comenta:

 - "Hay unas variedades que son fáciles de eliminar aunque muy letales al momento de atacar. Las otras se notan que eran grandes oponentes. Supongo que las de tamaños mayores que ustedes describieron debían ser atrocidades para gente poco entrenada como ustedes."

Su tono es arrogante, característico de él, pero se nota que respeta el peligro de la situación al haberlo constatado en carne propia.

No te preocupes, estoy seguro que el sith será un oponente digno a tu categoría replico al maestro no sin cierta ironia...

Tenemos que ponernos en marcha, vayamos a revisar la salida pero tener cuidado esta claro que que este nido puede estar lleno de sorpresas. Abrir bien los ojos

Me sitúo a la izquierda del noble Bel-Iblis, listo para protegerle a la primera señal de peligro.

-Gracias Haka le digo al noble aliviado a pesar del quemazon de curarme el veneno que corria por mis venas, y avanzo a su costado a un par de pasos de distancia y con el rifle preparado para el ataque de cualquier enemigo.

- "Imagino que esas bestias no han sido más que el aperitivo. No he detectado a más que un usuario de la Fuerza, pero no descartaría que dentro hayan droides, trampas o incluso más soldados Sith.

Gaheris, hermano. Ven al frente del grupo a mi lado. Nosotros dos debemos encabezar juntos la marcha mientras el resto del grupo nos cubre con sus armas a distancia." -

Mientras avanzamos por la estancia en formación y a cierta distancia entre nosotros, uso el escáner al acercarnos a la puerta a fin de identificar lo que nos espera tras ella.

Extiendo mi percepción de los alrededores a través del uso de la Fuerza para percibir lo que acecha más allá de la puerta cerrada.

Sientes que al otro lado de la puerta hay una habitación pequeña con otra puerta. Dentro de la habitación hay un hombre en un ordenador y otras pocas cosas que no logras distinguir, como máquinas.

Le susurro a Haka antes de seguir -se que es un rasguño, pero quizas puedas echarle un vistazo a esta herida no vaya a empeorar, no sabemos a que nos podemos enfrentar y mejor si estoy en optimas condiciones.

La exploradora mira cada uno de los posibles peligros con creciente curiosidad.

Toma la posición que Haka sugiere y apresta un lanzador de misiles dejandolo en modo "Area" y otro en modo normal.

"Este maldito SITH pagará por esto, lo prometo!"

"Ey Roogbor, estas bien, te lastimaron?" - le pregunta a su amigo.

Susurro para mis compañeros:

- "Al otro lado de esa puerta hay otra habitación pequeña con otra puerta a su vez. En la habitación hay un hombre con un ordenador que controla a una serie de máquinas que no he logrado identificar. Tal vez droides de combate o trampas." -