Partida Rol por web

Janyce no dejó pasar que vosotros estabais allí, hizo un gesto que jamás esperabais que saliera de una persona con ese tipo de carácter pero en cuestión de segundos aquella mujer estaba arrodillada en el suelo suplicando vuestra ayuda.

Entre sollozos comenzó a daros algo más de información ya que aquella situación era bastante desconcertante

- Los muchachos... entraron... entraron en territorio prohibido... no sé porqué lo han hecho... ellos son mineros... es la forma que tenemos de subsistir pero hay sectores en este planeta que evitamos pisar porque nos dieron mala impresión desde el primer momento... no sé porqué maldita sea - dio un golpe en el suelo - no sé porqué han decidido adentrarse... deberían haber ido al sector que les correspondía y han desobedecido y no hay rastro de ellos... por favor... sé que os dije que no necesitaba vuestra ayuda... pero quiero que encontréis a nuestros hermanos... los que habitamos en esta colonia somos una gran familia... sé que esto para vosotros será un juego de niños... por favor tened piedad... - Aquellas palabras levantaron una gran expectación entre los colonos, los semblantes de pánico eran evidentes en todos los presentes.

Alassia reaccionó a las súplicas como solo un jedi haría y se ofreció a ayudar.

-Por supuesto que os ayudaremos, Janyce. Es la deber de un jedi ayudar a aquel que lo necesite. Dino hacia donde debemos dirigirnos y qué debemos saber para ir preparados. ¿Qué fue lo que sentisteis en aquel lugar, exactamente? ¿Por que le teneis tanto miedo?

-Necesitamos a tu mejor explorador o guerrero que conozca la zona lo mejor posible y que nos sirva de guia. Aunque nosotros podamos ser fuertes, sin el conocimiento adecuado de la zona podriamos sucumbir con gran facilidad.

Aunque la situacion fuera terrible para el pueblo, debiamos mantener la calma. De esta forma habria una mayor probabilidad de exito en esta proxima mision.

Ban miró a Janyce y a sus compañeros. La nativa estaba realmente alterada, y no era fingido. Ese sitio en el que el grupo de muchachos se había adentrado no tenía buena pinta.

-De acuerdo, paso a paso. Janyce, claro que os ayudaremos, pero como han dicho mis compañeros necesitamos conocer todo lo posible de a donde han ido y qué peligro, o peligros, son los que hay en esa zona. ¿Podemos sentarnos y nos explicas con tranquilidad? Así iremos sobre seguro.

Ban la miró, asintiéndole y animándola a tranquilizarse y a contarles todo lo que sabían.

La mujer se levantó

- Gracias... por un momento pensé que ibais a rechazar mi petición... siento si me mostré reacia a necesitar vuestra ayuda pero... la República no hizo nunca nada por nosotros y tenemos nuestro orgullo... pero ésto... ésto no me lo esperaba... - se llevó las manos a la cara

- Entre esas personas está mi marido... por favor... haced todo lo posible para rescatarlos, él es el único motivo en mi vida por el cual me tragaría mi dignidad para hacer que se salvase... - se acercó más a vosotros y os comenzó a explicar

- Mirad... en ... en ese sector que está al norte, allí hay un valle con varios accesos subterráneos donde el mineral está impoluto, pero hace 5 años todo se vino abajo y perdimos a muchos de los nuestros, se... se catalogó como una zona prohibida porque - se secó las lágrimas - porque aquellos que se marcharon y sobrevivieron nunca... volvieron a ser los mismos... - cogió aire - por favor, partid hacia allá, rescatar a los míos y nuestra colonia estará en deuda con vosotros de por vida -

Uno de los hombres que estaban por allí al escuchar todo lo que ocurría no dudó en hacer acto de presencia.

- Yo les guiaré si es necesario, conozco la zona perfectamente, aunque no es fácil acceder si no tienes algo de soltura con las piernas, no sé quienes vendréis pero debemos darnos prisa, no queda cerca - hizo un gesto a Janyce de asentimiento, era su manera de transmitirle confianza.

- Más vale que no seáis un estorbo, si mis hermanos están en peligro hay que actuar rápido, ¡vamos! - tras decir aquello el hombre comenzó a andar rápido rumbo a las cadenas montañosas donde supuestamente habían desaparecido sus compañeros. Janyce aún estaba en estado de shock por la noticia, se despidió con un gesto torpe de la mano

-¿Rechazar tu petición?-le preguntó a Janyce-Hemos venido a ofrecerte nuestra ayuda, para lo que necesitaseis. Me hubiera gustado que fuera en otras circunstancias, sin estar en peligro la vida de nadie inicialmente, pero así es la vida. Así que puedes contar con nosotros, no te preocupes.

Se volvió hacia aquel hombre que se había adelantado ofreciéndose de guia-No, no seremos un estorbo, pero antes de nada, tenemos una nave a escasa distancia de aqui. ¿Podríamos ir con ella y llegar allí en menos tiempo que andando? ¿Hay algún lugar donde poder aterrizar sin problema? Janyce ha dicho que era un valle. Si casualmente hay heridos entre los vuestros cuando lleguemos, será más fácil evacuarlos con la nave que andando-miró al hombre, a la expectativa. Por sus cálculos, en un valle habría sitio donde aterrizar la nave, pero el comentario de Janyce sobre los desprendimientos de los túneles le hacia dudar sobre si el terreno sería o no adecuado para soportar el peso de la nave. Eso solamente los nativos podrían asegurarselo.

Ban tenia una perspicacia envidiable, en seguida recordo nuestra nave para movernos con mayor soltura. -Si no hubiera una zona de aterrizaje, bien podriamos dividirnos en 2 equipos, unos que entren por tierra y otros que sigan en la nave para cualquier rescate de emergencia. Que les parece?

El hombre no tardó en haceros ver la realidad mientras avanzaba a un ritmo trepidante.

- El terreno no está a nuestro favor, no tardaréis en comprobarlo. Una nave no va a conseguir nada, tan solo se puede acceder a pie siempre y cuando se tenga la fortaleza física necesaria... como es mi caso - afirmó sin pelos en la lengua. Aquel hombre parecía muy seguro de si mismo -

Alassia no tardó en responder.

- Id vosotros con él, yo me encargaré de volver a la nave y estar en contacto con el Consejo por si nos dan alguna indicación - no tardó en girarse.

- Que la fuerza os acompañe - hizo un esbozo de sonrisa mientras no tardó en avanzar tan rápido como pudo hasta la nave.

Retomasteis el rumbo a la supuesta zona prohibida, el colono estaba serio, centrado en su tarea de guiaros, estaba en tensión y era algo que podíais apreciar solamente observando sus puños cerrados con fuerza. Mientras ascendíais lentamente por los escarpados montes intentó daros conversación y responder cualquier duda.

- ¿Y vosotros qué sois exactamente? nunca me he topado con un caballero Jedi, no sé qué sabéis hacer o hasta que punto sois necesarios para la galaxia, aquí la gente es normal, se gana la vida con su sudor y su esfuerzo y velamos el uno por el otro como si fuéramos de la misma sangre - explicó

Ban miró al colono y, obviando su tono provocativo o arrogante, según se mirara, le contestó-Adelante pues, cada segundo cuenta-pero se sorprendió al escuchar a Alassia. Estuvo tentada de tratar de convencerla para que les acompañara, pero conocía muy bien a su compañera y si quería quedarse en la nave, era una buena opción y seguro que tendría una buena razón para hacerlo. Asintió a Alassia- Que la fuerza te acompañe. Nos vemos en breve. Si te necesitamos allí, te llamaremos.

Se despidió de Janyce con un leve gesto de su cabeza y sin pensarlo más comenzó a andar tras el colono que se perdía ya casi de vista entre las casas. Lo alcanzó rápidamente, seguido de Truk.

-¿Qué somos? Yo, exactamente, una miraluka-dijo sin contestarle a la pregunta de forma evidente-Soy humana, como tu, salvo que no tengo ojos. No veo como tu, sino que tengo otro sistema. Podemos decir que es algo así como un rádar...

Aunque el colono andaba rápido, Ban le mantenía el ritmo.

-Pero creo que preguntas por qué es un jedi. Somos como vosotros, no hay tantas diferencias, solo que cuidamos de todos. Explicarte de lo que somos capaces de hacer, es complicado con palabras. Trabajemos juntos para traer a tus compañeros, cuando volvamos al poblado hablaremos tranquilamente de todas las dudas que aun tengas sobre nosotros.

-Exacto Ban. En estos momentos debemos estar concentrados en el rescate, tras el exito podremos conversar acerca de las trivialidades de la vida! diria corriendo tras el pequeno grupo por el monte.

-Sin embargo, algo de lo que si podrias platcarnos es acerca de lo que nos podriamos encontrar en estos terrenos y como confrontarlos! Diria dirigiendome a Colono, el cual corria como juan en su casa.

- Pues espero de corazón que sea cierto todo lo que decís y podamos superar esto, pensé jamás que volveríamos a vivir esta pesadilla - continuó el camino tras responder a Banth'aa

El colono se quedó unos instantes en silencio, pero no tardó en hablar mientras seguía guiando el camino.

- La primera vez que llegamos... hace ya bastantes años... nuestros padres decidieron cartografiar el sector para así poder sacarle el máximo beneficio a nuestras cualidades... sin embargo sufrieron lo mismo que está ocurriendo ahora, se adentraron en aquella zona montañosa y un derrumbe provocó que tan solo una persona sobreviviera, él nos relató como todo se vino abajo sin haber indicios de movimientos sísmicos, algo antinatural... lo cual ha justificado que para nosotros ese lugar esté maldito... siempre se ha intentado no hablar de este tema en la colonia pero creo que es correcto que sepáis que no vamos a un lugar seguro precisamente, independientemente de que creáis o no en las maldiciones -

De repente el hombre se detuvo, observó que algo había pasado en la tierra ¿quizás un derrumbamiento? la cuestión era que ahora se había formado un obstáculo bastante perjudicial para vuestra expedición.

- Maldita sea, éste es el camino más corto - señaló a un terreno repleto de zonas escarpadas y con pequeños precipicios originados de manera natural por pequeños derrumbamientos de las rocas.

- Joder, era lo que nos faltaba - se cruzó de brazos y os miró.

- Hay dos opciones, o arriesgarnos y saltar por esta zona o dar un rodeo, pero esa opción nos llevará mucho tiempo... lo peor es que yo no sé si podré pasar, pero lo intentaré si creéis que es lo mejor, vosotros sois los "guardianes" ¿no era así? -

Ban escuchaba atentamente al colono y un par de ideas se iban formando en su mente.

-Los desprendimientos por causas naturales, pueden darse. La tierra y las rocas hay veces que estan situadas de forma precaria, pero mientras que nada ni nada las mueva, asi se quedan. Hay veces que es la propia erosión del terreno lo que va debilitando la escasa sujección que puede tener una de ellas y, cuando esta falla, todas se vienen abajo en cascada. No es necesaria una maldición, solo el paso del tiempo y un cúmulo de circunstancias que generan la desgracia-le contestó. Esa era su primera idea. Estaban hablando solamente de una zona de terreno inestable, en el que habían tenido la desgracia de adentrarse en el pasado y, sin querer, romper el pequeño equilibrio de la zona, ocasionando un derrumbe.

Pero ahora allí, delante de un 'casual' desprendimiento en el camino, la segunda opción tomaba más forma.

-Después puede haber otra opción. La hemos visto en más de un planeta joven, recien descubierto-comentó mientras evaluaba si seguir por aquel camino o tomar el más largo y seguro-Se trata de una raza autóctona del planeta, desconocida para los recién llegados, que quieren proteger su vida y su cultura a toda costa, disfrazando sus defensas como accidentes naturales. Todo lo nuevo es peligroso, y causa miedo. ¿Habéis detectado algún indicio de otra cultura o raza en el planeta desde vuetra llegada? -miró el desprendimiento y asintió en silencio para si misma-Tanto si ponemos como premisa que el terreno es inestable como que puede haber 'algo' ocasionando esos desprendimientos, creo que la mejor opción es pisar sobre seguro. Jugaremos con ventaja así, nos aseguramos el llegar a la zona en la que dices que están tus amigos. Iremos corriendo, reduciremos el tiempo, si te ves con capacidad para ello-le terminó diciendo al colono que ahora ponía en duda poder seguir por la parte peligrosa del camino.

Miró a Truk-¿Qué opinas? Quizás has visto algo que a mi se me ha pasado por alto.

El colono reflexionó.

- Demos el rodeo entonces, tu compañero no parece tenerlo claro pero tú sí - emprendió la marcha.

- Yo desde luego a nivel personal solo conozco a los colonos y a las especies que nosotros mismos hemos traído para fomentar la ganadería - notabais que su ritmo era cada vez más rápido.

Sabíais que ibais a tardar más, pero no quedaban más opciones.

- Seguidme, rápido, nos llevará  bastante más tiempo alcanzar el sector al rodear la montaña pero no podemos perder la esperanza - comentó mientras avanzaba tan rápido como le permitían sus piernas. Llevasteis cruzando aquel terreno casi una hora y aún no habíais llegado, sin lugar a dudas el obstáculo que os habíais encontrado os estaba entorpeciendo más de lo deseable. Durante el trayecto el colono no tardó en dar de nuevo conversación.

- ¿Cómo es realmente la vida de ser un Jedi? - en un principio no miró a nadie en especial

Finalmente avanzamos por el camino largo. Era una dura y peligrosa travesia pero debiamos llevarla a cabo lo antes posible. Lllevaba escuchando discreto la platica entre Ban y el guia que al parecer, tras su actitud dura y arrogante resulto un individuo muy curioso.

-Siento la ausencia Ban! diria un poco consternado por no haber contestado ni participado en la decision que se habia tomado en cuanto al camino que seguiriamos. -Me encontraba fuera de mi por un momento, pero ya estoy aqui! diria tras una sonrisa y un gesto de conviccion.

Seguisteis avanzando por el camino, dejando que las palabras casi quedasen en segundo plano.

- Ya veo que no estáis muy habladores, no sé si en general sois todos así - el guía llegó a creer que haceros tanta preguntas estaba ralentizando el camino.

- Si en cambio a ustedes os interes saber más de nosotros, os diré que me llamo Rodhin, y mi vida es la colonia, todo lo que hago es por y para su futuro, trabajo y me divierto como una persona normal, pero eso también implica sufrir como cuando ocurren estas cosas - finalmente tras subir unas cuantos picos y dejando un gran esfuerzo en ello, llegasteis hasta un punto elevado donde el colono tomó la iniciativa

- Venid, asomaos, ya hemos llegado, este valle sin vida es el sector prohibido, tan solo de verlo hace que me hierva la sangre - dijo mientras apretaba los puños. Si os ponéis a la altura del colono tendréis una vista completa del lugar, tiene una extensión de aproximadamente un kilómetro, kilómetro y medio, está formado por zonas rocosas y áridas que han generado muchas pequeñas cuevas naturales, sin embargo las rocas allí presentes tienen un gran estado de erosión y sequedad a diferencia del resto de territorio explorado.