Partida Rol por web

Kael observó el humeante cuerpo de la rata womp. Esa alimaña casi le pilla un dedo con un mordisco porque creyó que se trataba de un adorable gatito de Lothal.

Yo habría jurado que se parecía a “Michifú”, mi antiguo cachorrito. Supongo que lo que me pasa es que lo echo de menos.

Enfundó la pequeña pistola con otro de sus molinetes, muy satisfecho por su puntería. Miro en torno y vio como todos los componentes de la pandilla se había desecho del ataque de aquellas bestezuelas, con mayor o menor fortuna, pero sin mayores incidentes. Se rio con las exclamaciones de Len.

—¡Sí! ¡Somos los mejores! —y se unió a los gritos de júbilo por la “victoria”, muy contento —¡Yuju! ¡Los mejores!

Una vez en marcha de nuevo, el ascenso se volvió complicado. No veían un lugar fácil para escalar y había que encontrar uno. Len se puso a buscar la mejor ruta posible y Kael decidió hacer lo mismo. Hasta Deto aconsejó ir con cuidado.

—Ya va, ya va, droide-niñera. Te haremos caso. Busquemos un lugar más fácil para trepar. — dijo Kael con impaciencia. El niño tenía ganas de subir y no le apetecía pensar en riesgos, pero el pequeño droide llevaba razón. Observó por los alrededores pero ningún lugar le parecía que ofreciera una escalada sencilla.

Assid bufó asqueada por aquellas ratas mientras se limpiaba el puño de su brazo cibernético de lommite, Kael lo celebraba y Len también pero ella era más práctica y generalmente más seria, no se relajaría hasta alcanzar su objetivo, así que observó aquella pendiente y al escuchar a Kael lo de "droide niñera" puso los brazos en jarras, acababa de disculparse con Deto y ahora Kael volvía a las andadas, pero cuando vio que solo era una broma y Kael tenía precaución no dijo nada.

Ella había vivido en las calles y sabia bien como sobrevivir, mientras los demás rastreaban la pendiente ella optó por saber el camino más accesible para escalar debido a su supervivencia.

Es verdad que en plena montaña no era lo mismo, pero tanto en ciudad como en montaña había sus caminos más accesibles que otros, solo había que verlos.
Es verdad que estaba cansada pero era orgullosa y eso podía arreglarse pronto, así que ahora debía observar y fijarse para con su habilidad de supervivencia, saber donde escalar más fácilmente y encontrar la ruta mas accesible para trepar y no tener más sorpresas desagradables.

         - Tal vez tengas razón Len, pero si hubieras estado mas adelante te pudiern haber emboscado esas ratas a ti solo y derrotarte antes de que nos dieramos cuenta para ayudarte ... Como sea concuerdo en que los hemos derrrotado juntos!   Ahora juntos debemos buscar el mejor camino y ayudarnos para llegar a la nave -     Le responde  Zeva sin intención de extender demasiado la discusión para concentrarse en la pendiente para alcanzar la nave, para lo que camina unos pasos laterales para tener varios angulos en su búsqueda, mientras que se acerca un poco hacia la pareja de Assid y Kael antes de preguntarles a los presentes:

          - ¿Todos estan bien? ... ¡Porque me parece que las mordidas de esas ratas podrian ser peligrosas!    ¿Alguien más tiene una guerda con gancho para escalar este pequeño ascenso hacia la nave? -     Durante las preguntas anteriores Zeva a sacado de su mochila una cuerda que remata en un tipo de gancho y con un juego de correas que puede ajustar a su cinturón antes de comenzar a tomar vuelo para lanzar la cuerda al conjunto de rocas a los que vió como o¡bjetivo para tender la cuerda para poder escalar de camino a la nave    

El grupo se detuvo al pie de la montaña, observando la imponente pendiente rocosa que se alzaba ante ellos. Desde arriba, la columna de humo negro seguía elevándose en el cielo, marcando el lugar del impacto de la nave. Pero había un problema evidente: no había un camino claro para subir.

Len, el más acostumbrado a explorar, frunció el ceño mientras inspeccionaba la ladera. Se movió a los lados, examinando posibles puntos de apoyo, pero por primera vez no estaba completamente seguro de qué ruta tomar.

—Mmm… esto es más complicado de lo que pensaba —admitió, guardando su brújula analógica tras verificar que no había calor residual en la zona. Miró a los demás con cierta incertidumbre—. Podría intentarlo, pero no veo un camino realmente claro.

Kael, que había estado más concentrado en celebrar su victoria contra las ratas que en analizar el ascenso, chasqueó la lengua y cruzó los brazos.

—Bueno… tampoco parece taaaan difícil, ¿no? Solo hay que… ya sabéis, trepar —dijo, aunque al ver de cerca las rocas irregulares y las zonas empinadas, su confianza inicial empezó a flaquear—. Vale, quizá haya que pensar un poco más en esto.

Assid, en cambio, tenía una mente más práctica. Mientras los demás dudaban, ella observó la vegetación alrededor. Era lista. Sabía que en una ciudad siempre había rutas más fáciles para moverse… y en la montaña, la lógica era la misma.

—No tenemos que hacerlo tan complicado —dijo de pronto. Se acercó a un árbol cercano y, con un rápido movimiento, quebró un par de ramas gruesas. Probó su resistencia y, satisfecha, improvisó dos bastones de apoyo—. Con esto podré repartir mejor el peso y hacer que la subida sea más estable.

Pero justo cuando los demás seguían sin encontrar una solución clara, Zeva sorprendió a todos.

—Bueno… si no encontramos un camino fácil, lo creamos —anunció con una sonrisa confiada mientras sacaba una cuerda con gancho de su mochila y la aseguraba a su cinturón.

Los demás la miraron con sorpresa.

—¡¿Desde cuándo llevas eso ahí?! —preguntó Kael, incrédulo. (el DJ también se ha sorprendido XD)

Si se lograse atar bien la cuerda por alguien que escalase primero, se podría usar como apoyo para el resto.

El grupo tenía ahora una opción clara: si alguien con habilidades de escalada subía primero, podrían fijar la cuerda y facilitar el ascenso para los demás.

Kael miró la pendiente y luego a los demás.

Len, Assid y Zeva intercambiaron miradas. ¿Quién asumiría el desafío?

Rik resopló aliviado cuando las ratas huyeron en desbandada, alzando el puño sin mucho entusiasmo. Le sabía mal haber tenido que atacar así a la rata, aunque tenía claro que su golpe había sido en defensa propia para que no se los comieran, pero no podía evitar sentirse un poco culpable, pues al fin y al cabo, él odiaba la violencia.

Sonrió con los comentarios de sus amigos y asintió a Len cuando este lo animó por el tema del botín, en estos casos en los que se hablaba de posibles beneficios, Rik siempre se ponía de buen humor. El olor a rata quemada, por el blaster de Kael, le hizo arrugar el morro. Momentos después, seguían su camino, y las cosas parecían mejorar. 

Pero no todo iba a ser tan fácil, pues la pared escarpada que tenían delante, tras acercarse más a la columna de humo, les invitaba a dar media vuelta y volver a casa. Rik, cansado y no muy atlético, empezó a desmoralizarse, pensando en que más valía abandonar a tiempo y buscar otra oportunidad, que arriesgarse a romperse la crisma, cuando entre Assid y Zeva lo sorprendieron. Tras ponderar unos instantes, intentó imitar a Assid, pues él no era nada hábil con la escalada y cualquier ayuda sería bienvenida. - Disssculpa por copiarme tu idea, Assssid, pero essss una muy buena idea. - 

Rompió otras dos ramas, tras revisar varios árboles para encontrar las que se ajustaran a su tamaño, y sonrió triunfante. - Mira Assssid, parecemosss pájarosss zancudosss...ahahahah...- la risa de Rik era asmática, como aspirar para dentro, y resultaba muy curiosa y graciosa. Luego miró a Len, primero con un ojo, luego con el otro*, y señaló hacia arriba con uno de los palos. - ¿Qué esssperasss..que nosss sssalga barba o que Kael ssse tire un pedo de Bantha y ssssuba de un ssssalto? - dijo, riéndose un poco de nuevo por su ocurrencia, metiéndose con el ricachón del grupo. 

Bien, pues Rik también tendría una ayuda con la que poder escalar más fácilmente. Zeva tiene 4D+1 en escalar... yo ahí lo dejo y quien quiera que lo recoja. XD El segundo es Kael con 3D+1... que se ensucie un poco...

Assid resopló viendo que nadie se movía-bueno Rik solo soy práctica pero gracias creo que es una idea sensata-dijo con una sonrisa al alienígena reptiliano al ver que éste agradecía su idea y la imitaba, aunque tampoco subió.
-¡En fin yo misma lo haré!¡iré primera!-manifestó mientras escalaba con aquellos bastones.

Aunque estaba cansada subió tranquila por los resquicios entre las rocas con aquella seguridad que la caracterizaba y luego se asomó para ver a los demás abajo-no parece difícil incluso Kael lo haría-dijo Assid bromeando al chico noble-Deto analiza desde aquí lo que puedas detectar-dijo después Assid a su pequeño compañero droide -y los demás será mejor que subáis de una vez u os perderéis las maravillas que podamos encontrar aquí arriba.

Luego observé que era lo que había allí y si nos quedaba mucha distancia que recorrer tras el impacto de la nave.

Sí mi querida Assid me presta los suyos, subiré en primer lugar. No hay miedo, este chico es muy lanzado... Decir esto cuando uno se puede despeñar es tentar a la suerte, ¿no?

Con una determinación inquebrantable, Assid tomó la delantera. Se ajustó los improvisados bastones de apoyo y, con un resoplido, comenzó a trepar por la ladera. Su avance era constante y calculado, utilizando las grietas en las rocas para asegurarse un buen punto de apoyo. Cada paso era firme, cada movimiento preciso.

—¡En fin, yo misma lo haré! ¡Iré primera! —exclamó, sin esperar más.

A mitad de la subida, aseguró la cuerda de Zeva en un saliente rocoso y tiró suavemente de ella para probar su resistencia.

—¡La cuerda está firme! ¡Vamos, ya podéis empezar a subir!

Uno por uno, los demás fueron ascendiendo, usando la cuerda como apoyo. Kael, aunque inicialmente había bromeado, no dudó en agarrarse con fuerza y trepar con cautela. Len, con su instinto de explorador, mantuvo el ritmo con confianza, mientras Zeva avanzaba asegurando a los demás con mirada atenta.

Rik, sin embargo, tuvo un momento crítico. En un descuido, una roca bajo su pie se soltó, haciéndolo resbalar y perder el equilibrio.

Pero en el último instante, el alienígena reaccionó con reflejos felinos, estirando un brazo y aferrándose a la cuerda con fuerza. Su agarre se tensó, su cuerpo quedó suspendido por un segundo eterno, pero logró impulsarse de nuevo hacia la pared de roca.

—¡Eso estuvo cerca! —exhaló Kael, todavía con el corazón acelerado.

—Sssssí… pero nada que no pueda manejar —respondió Rik con una sonrisa nerviosa antes de continuar el ascenso.

Finalmente, tras varios minutos de esfuerzo, uno a uno fueron alcanzando la cima. Assid, ya arriba, los observaba con una sonrisa de triunfo.

—No ha sido tan difícil. Incluso Kael lo ha logrado —bromeó, dándole un leve empujón amistoso al chico noble cuando llegó jadeando.

El grupo se giró hacia el horizonte. Desde la cima, la vista era impresionante. A lo lejos, en una pequeña meseta oculta entre las montañas, la nave caída esperaba. El humo aún se elevaba en el cielo, pero ahora podían ver más detalles del impacto.

Deto se acercó rodando, con su sensor óptico titilando mientras analizaba el entorno.

—Procesando datos... No detecto señales de movimiento inmediato, pero la nave sigue emitiendo calor residual. Sugiero proceder con cautela.

El destino estaba claro. Ahora solo quedaba decidir cómo abordar la nave sin saber qué podrían encontrar en su interior.

Y como con esto doy por acabada la escena inicial, cerraré esta escena y abriré una nueva con todos los niños ya en la cima listos para ver qué es esa nave.