- Habría que hacerlo por partes. - le comento.
- Lo primero sería recabar toda la información que haya sobre el Hutt. - añado. Por cierto, ¿quién es el Hutt responsable de eso?
Daesha pertenecía en silencio pero no le gustaba eso, ellos eran solo padawans y no lograrían salvarla. El dejar el Templo significaría que acabaran expulsados.
- Te creí mas cuerdo Koro... Ibamos hablar con Siria para ayudarle a que esas emociones mermen, no avivarlas. - dijo enfadada y cruzandose de brazos.
- ¿Vas a rescatar a su madre?, ¿Vas a rescatar a mis padres?, Preguntemos al resto de nuestros compañeros que tienen padres a manos de esclavistas si también quieren... Siria no es especial, lo somos todos... No vamos a rescatar a nadie.
Daesha se levantó e iba de un lado para otro.
Miré a uno y después a otro, estaban compinchados desde el principio, eso si que no me lo esperaba y menos de Daesha, me negué a responder, porque si lo hacía, sabía que no me iban a volver a hablar en mi vida, aunque no sabía si lo prefería.
- Daesha, a veces hablar de las cosas consigue aliviar la tensión. - respondo.
- De momento recopilaremos toda la información posible. Luego ya veremos el rumbo de acción.
-Ni necesito, ni queiro vuestra ayuda. Habéis tramado algo a mis espaldas, asi que ya no confío en vosotros. No os váis a inmiscuir mas en mi vida-Contesto.
- ¿como te atreves a decir eso Siria?, si fueste tú el que me comenzó a hablar de ello. - Dijo mirandolo sorprendida. - Esto lo estamos haciendo para ayudarte, pero claro, es mas sencillo verlo como un acto de desconfianza o amenaza para escudarte en ello y dirigirte hacia el camino mas fácil y cobarde - Daesha no se estaba sintiendo nada bien, notaba un nudo en el estomago, un enfado que la hacía elevar la voz.
-En ningún momento pedí que hablarais a mis espaldas. En ningún momento dije que quisiera poneros en peligro.-Estaba astiado de la desconfianza que mostraban hacia mí, daba igual lo que dijeran. Era desconfianza.
- Eres un desagradecido Siria, golpeas la mano que se te tiende. No me esperaba esto de tí, y creeme cuando te digo que tu madre no se sentirá orgullosa de tí cuando te conviertas en uno de esos sith. Tal vez los Maestros tengan razón y eres tú el que nos puedes poner en peligro al resto. - Daesha sentía un torbellino en su interior, no era miedo, ni era realmente enfado, era dolor.
- Koro, para mi es suficiente, voy a marcharme.- Dijo dirigiendose hacia la puerta esperando si él se quedaba o seguía con el desviado. Todas sus esperanzas se habían roto en un abrir y cerrar de ojos.
Me se de alguien que se va a llevar un bono por buena interpretación ;-)
-No-Susurro, era un susurro que daba mas escalofrío que un grito, lleno de odio y rabia -El que se va soy yo, tranquila, no me verás convertido en un Sith, ni en un Jedi-Digo saliendo por la puerta de mi habitación.
Me alejo del templo para ir con mi madre mientras pienso, en que, no debería haber confiado en nadie.
Yo la dejaria para ver que hace Koro
Bueno, se hace lo que se puede xD
Sí, por mi bién, no creo que intenten detener a Siria, al menos no Daesha xD
Luego posteo. Cuando pueda hacerlo con el ordenador. Desde el móvil es un coñazo. ;)
- ¡Siria! - le digo levantando la voz. No puedes rechazar toda la ayuda que se te brinda.
- Si te vas cometerás un grave error. No podrás ayudar a tu madre a salir del jugo del Hutt. - añado señalandolo con el dedo índice.
Tengo un buen trancazo. Voy a ver que puedo hacer con el móvil. ;)
-¿Y acaso vosotros tenéis un plan genial para liberarla?-Digo irónico, miré a Daesha un momento y volví a mirar a Koro -Recuerda las palabras de la que yo creía mi mejor amiga, soy el que os pone en peligro. Aunque es eso precisamente lo que quiero evitar. Vosotros no habéis estado en ese lugar-