Partida Rol por web

Asintió a Sand, y esbozó una sonrisa al oír como decía que las mujeres habían ganado y a los dos segundos estaba rectificando por Richie. Ann se encaminó hacia el mercado con el resto, observando los alrededores. Entrecerró los ojos extrañada porque no parecía haber mucha gente. Era demasiado raro teniendo en cuenta que era la capital. La twi'lek verde parpadeo un par de veces al oí a Zak que les dejaba a las chicas el preguntar.

- Ya claro... yo creo que a los hombres os pasa algo con lo de preguntar. - sonrió chistosa.

Ann se acercó a uno de los puestos, y no pudo evitar abrir la boca al ver los precios. Se recompuso un poco y miró al dueño de la tienda.

- Buenos días, acabamos de llegar al planeta y nos ha llamado la atención que hay poca gente en el mercado y el palacio está desierto, ¿ha ocurrido algo? - preguntó mientras sus ojos iban de los productos al dueño.

Daesha hacía amago de sonreír por los comentarios que oía, y normalmente les habría respondido con algún comentario algo pintoresco... común de la twilek azul que a veces tenía fama de poseer una lengua que pinchaba pero en esa ocasión estaba preocupada. cuando llegaron al distrito comercial no estaba como debería estar, abarrotado. No se separó demasiado del grupo, pudo oir como Ann preguntaba a uno de los mercaderes mientras ella se acercaba a un puesto de telas, le recordaba cuando tenía que escoger cuando Richie le hacía los vestidos en la Mesopotamia, ya hacía de eso tanto...

Sus ojos se abrieron sorprendidos por los precio, volviendo el rostro hacia el resto de sus compañeros con los que regresó.

- Los precios están disparados... ha habido algún cambio de gobierno y no nos hemos enterado. - comentó con el ceño fruncido dejando que fuese Ann quien preguntase. Aunque Daesha tuviese una cara y un tipo bonito como había dicho Zak, a lo mejor los mercaderes no pensaban lo mismo de su forma de preguntar las cosas, no es que fuese tosca... sino algo directa.

La mujer dueña del pequeño puesto suspiró

- ¿No sois de por aquí, verdad? - comentó bastante acertada

- Desde que el Imperio fue derrocado comenzó una fuerte crisis en nuestro planeta, las importaciones y las exportaciones han bajado y los impuestos que nos exigen ahora son altísimos, antes estábamos bajo su supervisión y ahora el gobierno liberal nos está destrozando... la única manera que tenemos para seguir adelante es adaptarnos a la situación, ¿no queréis ninguno de mis productos? tengo esposo e hijos y si no saco adelante mi negocio vamos a tener que abandonar nuestra casa... - su rostro se mostraba afligido

Me acerque al puesto mirando todos los objetos que tenia a la vente y casi entrando en shock por esos precios.

-Y no sabe donde podemos encontrar a los nuevos mandatarios ya que tenemos una cita con ellos-

Los precios eran tan caros que mis creditos no llegaban para ninguna cosa y se que como comprara algo a ese precio Hino me echaria la bronca del siglo estando enojada bastantes dia conmigo.

Me acerque a Sand y apoye la mano en su hombro.-Que narices a pasado en este planeta la gente se ve que esta echa polvo....-

Ann mostró un leve atisbo de pena ante la declaración de la mujer. Se llevó una mano a la cabeza incómoda por no poder ayudarla.

- Ojalá pudiera comprarle algo pero me temo que no llevo tanto encima. - le dijo con tono algo culpable. - Gracias por la información de todas formas. -

Miró a sus compañeros, por si ellos tenían alguna pregunta más y se sorprendió un poco por el hecho de que aquellas gentes estuvieran antes mejor con el Imperio.

Daesha no dudó en retirarse del puesto al ver esos precios y no decidió preguntar nada, la única pregunta que hubiera formulado fue la que Zak había hecho. Era a lo que habían venido allí, a averiguar que había pasado y donde estaban aquellos con los que se habían citado.

No abrió la boca, desvió la mirada hacia el resto de comerciantes observando que también habían subido los precios de aquella manera.

La mujer con una gran educación resolvió la pregunta de Zak al instante

- Si tenéis una cita lo mejor será que vayáis al palacio, ahí es donde se llevan a cabo todas las reuniones, y no os preocupéis  por no comprar nada, soy consciente de que los precios son elevados para las personas que vienen de otros sistemas, ojalá podáis volver cuando esté todo otra vez en condiciones - mostró una sonrisa algo apenada.

Sand se sintió contagiado por la mirada de tristeza y dio un leve suspiro, después os miró como esperando algún tipo de movimiento por vuestra parte.

Al ver que la mujer nos ayudaba y lo triste que estaba por la falta de creditos me volvi a acercar a su mostrador.
-Acerqueme un papel y algo para escribir, ya que comprar no puedo pero le puedo poner en contacto con mi mujer que la podria aprobisionara de suministros y si le dice que va de mi parte le hara una rebaja-

Despues de escribirselo se lo pase.-Digale que va de parte de Zak- Me volvi hacia mis compañeros frotandome las manos.-Bueno bueno bueno que giros da la vida al final el tanque del grupo tenia razon y debiamos haber inspeccionado el castillo por dentro...-Miro a Daesha con una sonrisa de satisfaccion por llevar razon ya que eso ocurria una vez de cada diez mil.

Miró a Sand suspirando y después sus ojos se posaron en Zak que le dio a la mujer la manera de contactar con Hino para conseguir algunos suministros más baratos.

- Al menos tendrá algo de ayuda. - se rascó la mejilla pensando.

Empezó a reírse al oír a Zak con expresión de victoria de que debían volver al palacio.

- Que no se te suba a la cabeza. - bromeó y comenzó a moverse un poco esperando que sus compañeros empezaran también a tomar de nuevo el rumbo al palacio.

Cuando nos fuimos alejando de la zona comercial para ir hacia el palacio nuevamente Daesha volcó los ojos por unos instantes antes las palabras chulescas de Zak.

- Si... desde luego Zak, aunque te ha faltado sensibilidad y algo de razonamiento con la comerciante, ofrecerle negocio a la pobre mujer. Apuesto que apenas vende como para que pueda comprar algo de fuera, sea mas barato o no. - Dijo encogiéndose de hombros.

La mujer cogió el papel que le entregó Zak e hizo una leve reverencia. Agradeció el gesto de preocuparse por ella y comentó que en cuanto pudiera aprovecharía la oportunidad.

Después de aquello os pusisteis de nuevo en marcha al palacio, Sand se quedó de nuevo escoltado por vuestra presencia hasta el momento en el que llegasteis otra vez a las escaleras que daban a la puerta del edificio, las cuales estaban abiertas por completo. Todo seguía como antes, sucio, descuidado y lo más importante, sin ningún tipo de medida de seguridad.

La verdad no hice mucho caso al comentario de Daecha ya que yo al menos habia pensado algo para intentar ayudarla, aun que segun ella fuera poco sensible.

Me puse en la cabeza del grupo de vuelta al castillo al que llegamos despues de un buen rato, donde todo seguia tal y como lo dejamos.-Ire a echar un ojo dentro para ver si veo algo-

Entre al castillo sin desenfundar el arma pero con la mano bien cerca por si necesitaba desenfundar rapido por un ataque, mientras buscaba a alguien dentro del castillo o una zona cuidada.

Mientras volvían al palacio, Ann no paraba de darle vueltas a lo que estaban pasando aquellos ciudadanos por el mero hecho de haber sido salvados del Imperio. Era de locos. Miró a la puerta abierta del palacio y vio a Zak entrar el primero preparado para desenfundar si hacía falta. Sus ojos fueron de Sand hacia la entrada y ella sí que sacó su blaster incómoda por el silencio.

- Veamos que tienen que decirnos de su falta de cortesía... - murmuró en voz baja mientras seguía a su compañero y miraba los alrededores.

Daesha permanecía al lado de Sand al igual que Ann dejando que Zak fuera en cabeza. La twilek no esperaba que hubiera ningún tipo de ataque, la comerciante había dejado claro que aquí estaban los responsables de haberlos dejado tirados cuando llegaron al planeta sin ningún tipo de recibimiento así que confiaba en ello aunque no pasaba nada el tener un poco de cuidado y ser precavido. 

- Solo espero que no es excusen malamente... porque me van a oír. - respondió al comentario de Ann. Aunque en realidad el que debía hablar era Sand, pero Daesha no soportaba perder el tiempo de esa manera.

A los pocos minutos de adentraros en el palacio y observar los alrededores, visteis que el desorden y la suciedad era más profunda a cuantos más pasos dabais. Las plantas estaban si cuidar, el suelo no brillaba como podría haber hecho antaño y el mobiliario, roto en su mayoría, parecía sacado de unos suburbios en vez de una corte real.

Fue entonces, mientras caminabais, cuando apareció alguien a recibiros, salio de una de las salas del fondo al alertarse por vuestra presencia, su aspecto parecía de todo menos el de un noble, se trataba de un Nikto vestido como si fuera un contrabandista, armado con una pistola blaster en su cinturón y una mirada algo pícara.

- Vaya, pero si tengo invitados - dijo mientras colocaba sus brazos en jarra y os miraba a todos detenidamente.

- ¿Podéis hacer el favor de dejar vuestras armas en el suelo? no me gusta tener huéspedes armados, da mala impresión -

Sand os miró y después fijó su mirada en el Nikto

- Buenos días caballero, lamento si nuestra... visita le sugiere desconfianza, pero he venido aquí con el interés de dialogar con usted pacifi... - sus palabras fueron interrumpidas rápidamente.

- Las armas al suelo, lo primero es lo primero - comentó algo más serio.

Mis dedos se acercaron mas aun al rifle con la aparicion del nikto y sus peticiones en un tono poco amigable y su reiteracion aun Sand hablandole cortesmente, asi que yo mire a Sand pero estando atento a las acciones del nikto.-Bueno señor que hacemos, seguimos sus peticiones?- Quedando despues en silencio para acercarme a Sand por si acaso pasaba algo mas.

El Nikto frunció el ceño

- No des un paso pelo blanco, un movimiento más y desearéis no conocer como es nuestra hospitalidad -