Partida Rol por web

¿Quieres esperar a ir al lago...? le pregunta ella, mirándolo a los ojos, y echando una mirada fugaz a los baños que tienen a su lado.

Luego se aparta de él y se encoge de hombros. Cómo quieras... Y bueno, ¿no me llevas a dar una vuelta sobre de tu moto? ¿Guapo? y acto seguido le guiña un ojo con una sonrisa de oreja a oreja.

Saco las llaves de mi bolsillo. Pongo cara pensativa, a la vez que hago girar las llaves en mi mano. Tras lo que parecen tres segundos interminables.
Abrazo a Kat de la cintura, le sonrio y le acerco a la puerta del baño. Mientras juego con mi lengua en su boca.
Tras de mi cierro la puerta del baño y guardo las llaves. Todo esto sin parar de acariciarla y besarla.

Sonríe por sus adentros por la decisión de Nathan, lo abraza y lo sigue besando, mientras se encarga de asegurarse dejar el pestillo puesto y mirar de reojo que no haya nadie a dentro.

Una vez segura se apoya a la pica, llevando a Nathan hacia sí, cogiéndolo del cuello de la camiseta, excitándose con cada roce de sus lenguas.

Sin parar de jugar con la lengua. Empiezo a desnudar a Kat.
-.Espera.-Digo al separar nuestros labios.
Saco mi cartera del bolsillo y empiezo a buscar.
Tras dos interminables segundo saco un condon.
-.Menos mal.-Suspiro
Y vuelvo a besarla.

Kat le corresponde los besos y se deja desnudar, cuando Nathan le dice que espere ella se queda mirándolo, y al sacar un condón, ella suelta un par de carcajadas, cogiéndolo y lanzándolo al suelo.

¿Para qué crees que sirve la píldora...?, le pregunta, lamiéndose el labio superior y luego mordiéndose el inferior, Anda... Ven aquí... de un tirón por el cinturón de los pantalones, vuelve a besarlo, mientras sus manos empiezan a desabrocharlo.

Mi cara de sorpresa se convierte rapidamente en una sonrisa.
Mis labios siguen disfrutando de sus besos. Aunque tirado en el suelo. Suelto el condon y la cartera. Empiezo a desabrochar el sujetador. Mis manos van mas rapidas que mis pensamientos.
Ahora es todo instinto.

Sigue besando a Nathan, su lengua continúa buscando la suya, mientras sus manos, que ya han desabrochado el cinturón y los botones del pantalón, empiezan a quitarle la camiseta para tirarla al suelo y descubrir ahora un montón de moratones y más que alguna cicatriz, ella se aparta ligeramente y repasa con sus dedos alguna cicatriz.

¿Qué te ha pasado?, pregunta, sin poder evitar cortar un momento la situación.

Camino a una velocidad normal hacia la salida...en mi paseo encuentro a la pareja frustrada del interior.No me paro , siquiera dirijo una mirada.Continuo andando hasta la salida....

Al fin y al cabo.......somos humanos.....

Tras soltar el sujetador sobre el suelo. La pregunta cae como una losa. La expresion de mi rostro cambia totalmente, la tristeza cruza mi rostro.
-.Siempre quisiste saberlo...es la hora de que te lo diga.- Mi mirada vuelve a centrarse en sus ojos.
Siento como las suaves manos de Kat recorren mis cicatrices sobre mi torso desnudo.

Señalando una que recorre el pectoral derecho.
-.Esta es de una navaja que por suerte choco contra las costillas, por defender a un amigo.-

Señalando tres que recorren el abdomen hasta la cintura.
-.Estas tres, el chulo del novio de una amiga que le pegaba, y no me parecio bien.-
Cada cicatriz la señala no como una medalla sino como una derrota.
Deberia a ver sido mas rapido, mas agil, mas fuerte.Y no sufrir daño

Intento levantarme, a no ser que Kat me pare.

Kat sigue mirando las cicatrices mientras Nathan se lo explica, luego lo mira a los ojosm ¿Derrota...?, se pregunta, sus ojos dibujan una sincera sonrisa y sus ojos lo miran con ternura.

Éstas cicatrices... Y sus motivos... Hacen que me gustes más..., le susurra ella, sin dejar de mirarlo a los ojos, para que entienda que lo dice de verdad, estirándose un poco llega a la comisura de los labios de él, y los besa con suavidad y con dulzura, rodeando sus brazos alrededor de su cuello de nuevo.

Si en el fondo es un buen chico... ¿Será que empiezo a enamorarme de él...?

Una sonrisa aparece en mi rostro. Mis manos acarician su espalda desnuda bajando hasta la cintura.
Mi boca sigue sin separarse de la suya saboreando cada beso.
Le deslizo lentamente la ultima prenda que le queda.
-.Me alegro de que sea asi.-
Mi rostro se llena de felicidad.
Sabia que era la unica chica que veria mas alla de mi rebeldia.

Ahora Kat ya está desnuda ante Nathan, no deja de besarlo en ningun instante, acariciándolo aun, la espalda, las cicatrices, los brazos... Está fuerte y esto también le gusta. De un movimiento ágil, baja los pantalones de él y se lo queda mirando a los ojos sonriendo.

¿Y ahora qué...?, le pregunta, divertida y sonriendo maliciosamente.

Paro un instante mis caricias al oir su pregunta.
Al principio pienso.
Sera su primera vez.
Pero al ver la sonrisa maliciosa, me despojo de los boxers.Quedando desnudo tambien ante ella. Comienzo a besar sus labios a la vez que mis brazos la acercan hasta a mi lo mas posible. Casi puedo sentir su corazon latiendo. Sus pechos se aprietan contra mis pectorales y empiezo la penetracion. De forma suave.

Clava sus uñas en su espalda al mismo momento que él la penetra, y lo besa aún más apasionadamente que antes, sintiendo la oleada de placer que va y viene una y otra vez.

Ella gime, y de vez en cuando, susurra a la oreja de él: Nathan...

Kat se agacha, posando una mano encima de los pectorales de Nathan para apoyarse a él y besarlo en los labios largamente.

¿Quieres hacer algo más...?, le pregunta, devolviéndole la mirada y sonriendo maliciosamente, al mismo momento que se muerde el abio inferior.

Siento como se desliza Kat sobre mi. Sus labios me arrancan otro beso.
Y me pregunta con esa sonrisa que hace que mi corazon se ponga a mas de cien revoluciones por minuto.
-.¿Por que no me sorprendes con algo?.- Le digo mientras mis manos vuelven a su cuerpo.
Con caricias deslizandose por su espalda hasta llegar al tanga. que deslizo suavemente.
Y mis labios vuelven a su boca.

Vuelve a estar desnuda completamente, sonríe y se aparta de la boca de Nathan para mordisquear su oreja, lamerla, y juguetear con ella, baja hasta el cuello, donde repite el procedimiento, y a la boca, que lo besa con pasión y mordisquéandole el labio inferior, al mismo momento que se sienta en la cintura de él.

¿Qué te sorprenda...? ¿Cómo...?, pregunta inocentemente, pero con una sonrisa malvada y una mirada penetrante.