La joven noble estuvo atenta a las palabras del piloto, comprendiendo que el acercamiento a Felucia era complejo. Entendía por los gestos de los demás que Jennsar podía hacer aquél aterrizaje de urgencia en el planeta. No había visto en acción todavía al durosiano pero sí veía que sus dos compañeras no habían caído en el nerviosismo. No se habían dirigido miradas entre sí que anunciaran una falta de confianza. El propio piloto afirmaba ser capaz lo que era una buena señal.
- Seguro entonces que puedes hacerlo. Contamos contigo.
Miró al resto de los presentes indagando cómo reaccionaban a la frase pues ella estaba mostrándose como parte del viaje, sabiendo que la capitana anteriormente expresó sus dudas. Era por ello que prestó más atención a la Mirialana.
- Necesito saber si me van a aceptar en la tripulación. Como ya dije estoy dispuesta a ayudarles. No tiene porqué ser en un asalto armado, quizás haya otras formas de ayudar, aunque tampoco temo entrar en una base imperial.
Cayó entonces en la cuenta de que Lyloo podía estar temiendo que ella ejerciera de líder del grupo. Y cierto era que en algún momento podría ser necesario imponerse pero no iba pensando en interferir en el trabajo de los contrabandistas y los jedi. En todo caso creyó que su frase anterior ya explicaba con claridad que ella les ayudaría en lo necesario y no se dedicaría a organizarlos.
El jedi azul consigue enervarme –Esos santurrones, van por ahí cómo si sus pedos no olieran. –Mascullo entre dientes, reflotando viejos rencores anti-jedi y anti-republicanos que creía olvidados tras aniquilación y caída en el olvido de la orden y la república.
Han pasado muchos años, pero las palabras de Even han conseguido hacerme recordar la invasión, los bombardeos, la muerte de mi padre, el transporte de refugiados en el que escapé de Balmorra con mi madre… y aún fuimos afortunadas. Millones de personas cuyo único delito fue el de querer vivir mejor fuera de una república rancia, corrupta e ineficiente murieron en esa guerra.
Fue justicia kármica que todos los Jedis fueran aniquilados también durante la guerra… o casi todos.
El senador Organa me saca de mis cavilaciones, consiguiendo atrapar mi atención con la información sobre Varth - Un informante de las altas esferas imperiales...-Repito sus palabras pensando en voz alta mientras cambio el peso de un pie al otro. Bajo mi punto de vista un informante deja de ser útil en el momento en que lo descubren, aunque el hecho de que pueda delatar a sus aliados explicaría porque el imperio lo mantiene con vida y porqué urge rescatarlo.
Al escuchar la réplica del durosiano sonrío porque mis palabras han tenido el efecto deseado -Ese es el Jenssar que quería ver -Digo satisfecha, premiando su cambio de actitud con unas palmaditas en la espalda. -Ea, ea. Si hay que hacerlo, eres nuestra mejor opción, pero insisto en que hay muchas posibilidades de que acabemos convertidos en una mancha sobre la superficie del planeta- Comento con la sensación de estar repitiéndome, cómo el wasabi coreliano.
Por suerte los destructores imperiales no suelen ir por ahí disparando contra todas las naves que se les cruzan por delante ¿O acaso el destructor nos atacará en cuanto entremos en el sistema sin más? -Le pregunto a Torms, que presumo, sabrá más del tema- ¿Cómo reaccionarán los imperiales ante una nave de cazadores furtivos, un safari, o una expedición botánica que se dirija a la otra cara del planeta? -Le pregunto, aprovechando la información sobre la exuberante flora y fauna. -Cómo mínimo, nos preguntarán nuestro destino y nos conminarán a marcharnos antes de ponerse a disparar contra una nave civil. ¿no?
Si todo falla y no hay más narices, pues intentamos lo de entrar en atmósfera, pero antes de aceptar alegremente algo tan potencialmente peligroso, me gustaría estar segura de que es la única forma.
Al escuchar a Maya me froto los ojos en gesto de cansancio, está tía cansina no entiende un no por respuesta. – Ea, cómo quieras. Mientras que Jens o Dev no tengan nada en contra… -Comento aceptando sin ningún enstusiasmo, más por haberme quedado sin argumentos para no llevarla que porque realmente me apetezca.
En fin, de algo servirá, aunque sea de pienso para rancors.
–El problema no es lo que temas o no temas, sino como puede acabar–. Respondió Leenar a la noble. Pero lo que parecía una negativa, pronto se mostró como una matización– Pero como has dicho, no todo son asaltos. Personalmente no me importa que vengas. Cualquiera que quiera levantar la mano contra el Imperio, tiene mi apoyo.
De pronto a Leenar se le ocurrió algo. Aguien como Maya debía conocer, sin duda alguna, muchos lugares secretos donde poder llevar a cabo la idea que había confesado a Even. Pero antes, tenía que encontrar algo más. Un holocron, aunque impresionante, estaría más segura con ella...por el momento.
-Cómo mínimo, nos preguntarán nuestro destino y nos conminarán a marcharnos antes de ponerse a disparar contra una nave civil. ¿no?
–Bueno, ese no suele ser el estilo imperial ¿No? El Imperio se ha expandido muy rápido, pero no llevan suficiente tiempo en el poder como para "ser sutiles". Además, no me cabe la menor duda de que están al tanto de las expediciones que se organizan.
No han pasado ni dos años desde la purga ¿cierto?
El piloto prestó atención a la exuberante miriliana quien le realizaba una rápida sucesión de preguntas.
- A ver, ese planeta está en el borde exterior, inexplorado. Cualquier nave que se acerque como mínimo será capturada, si no destruída.
Se mostró un tanto compungido por tener que ser tan rotundo, pero qué otras opciones habían.
- Han llevado a un almirante allí, será para hacer algo muy sucio. Han colocado un destructor en órbita por si sus contactos quieren rescatarlo. Está claro que es muy gordo.
Se dedicó a explicar.
- A mi no se me ha ocurrido otra forma de llegar hasta allí que no sea la que os he dicho.
Maya dibujó una suave sonrisa en su sereno rostro, pensando que había logrado el pasaje en la Valkiria.
- Si no tienen nada en contra entonces estoy dentro. Es mejor que hagan caso a Toms. Se me ha ocurrido que podríamos suplantar a un noble de Coruscant, pero serían necesario muchos elementos diferentes para lograrlo. Ya no sólo una nave de lujo sino también códigos de identificación, naves escoltas y bien, demasiadas cosas.
Miró a continuación a Dev.
- Si alguien quiere podemos dar un paseo por palacio y por el exterior. Les gustarán las vistas y en unas horas podríamos partir hacia la misión. Conseguiré suministros para la Valkyria, en forma de alimentos de calidad. Yo necesitaré algún lugar donde ocultar mis ropas y a cambio vestiré de un modo más casual. Creo que tendré que hacerme pasar por una ingeniero.
Motivo: Tirada de pilotaje
Tirada: 4d20
Resultado: 18(+8)=26, 20(+8)=28, 4(+8)=12, 13(+8)=21 (Suma: 87)
Pues un 28 (20+8). Si tengo que interpretar algo avisa...
Even torció el gesto ante el ofrecimiento de la pelirroja. Dar un paseo por el palacio podía ser interesante desde una perspectiva social o, como mucho, arquitectónica. Pero él tenía otras prioridades. Otras mucho más acuciantes. Casi urgentes. Tanto así que se acercó a la muchacha y en voz baja le susurró:
- Yo necesito una ducha y ropa limpia... verás, he estado un año viviendo con los Chadra Fan. Y huelo a... en fin, a Chadra Fan.
Con aquellas palabras Even dio por sobreentendido el mensaje. Sin ánimo de ofender pero aquellas criaturas olían de un modo... extraño. ¡Demonios... viven en pantanos!
–Pues a mí me parece que hueles bien. A libertad, a exploración... y a no haber caído en cuenta de lavarte en la nave– azuzó a su amigo.– Creo que es mejor que nos ciñamos al plan original. Aterrizar y una vez allí, localizar la instalación oculta. Si Jenssar quiere, puedo ayudarle a localizar naves escondidas y, si tenemos mucha suerte, la instalación mientras aterrizamos.