Partida Rol por web

Hector simplemente te miraba y te sonreía. Se notaba que aún le hacía efecto aquel porro de la fiesta, pero no sabías si reía realmente por el colocón o por la situación en si. Te dejó caminar unos cuantos pasos sola, viendo como te alejabas y salió corriendo detrás tuya.

Al alcanzarte, te abrazó por la cintura y puso su cabeza sobre tu hombro. Ay mamita! Te exclamó con un marcado acento latino y te elevó un poco del suelo, lo justo para girarte 180º y dejarte mirando hacia el coche. Ves mi furgoneta, ¿verdad? Te dijo señalándola con el dedo. ¿Y esa calle que sube a su lado? Ahí arriba está tu casa.

Te besó en la mejilla. Regresemos al coche.. y que sepas que me debes una por no permitirte perderte a menos de cien metros de tu casa. Te dijo bromeando mientras te cogía de la mano para regresar al coche y por fin llegar a tu casa.

Jordan miraba inquieto hacia todos lados, más aún después de las noticias recibidas sobre Tommy y el resto de la pandilla.

Hey tío! Exclamó Jordan interrumpiendo por completo la conversación. Aquel de allí! Es Jay!! dijo dando un codazo a su colega Gus y señalando a los chicos recien salidos del bosque. Vamos! Debemos ayudarles!

Los tres chicos salieron corriendo hacia el grupo que llevaba a Tommy a cuestas. Visteis como se paraban un momento y como Diana y Bella relevaban a Shyl en la carga de Tommy.

Oísteis voces conocidas que os llamaban por vuestros nombres. Al mirar, visteis venir corriendo a Gus, Jordan y a Styles. Tras ellos estaban Jason y Amber.

¿Qué coño ha pasado? Preguntó Gus alarmado mirando a Jay inicialmente y luego a Tommy. Bueno, da igual... Jordan, Styles, ayudarme con Tommy. Dijo viendo los rostros cansados y alterados de todos. He venido con mi vieja pick up, nos sacará enseguida a carretera y de ahí al hospital. Os comentó mientras agarraba a Tommy.

Vamos chicos, no os quedeis mirando! Alentó a Jordan y a Styles, quien no dejaba de mirar a su hermana. Styles, sin mediar palabra alguna, se lanzó sobre ella y la abrazó con fuerza.

[color=#0000ff]Sabía que no te comerían los lobos.[/color]

Vamos Styles! Ya abrazarás a tu hermanita más tarde. Le exclamó Gus. Styles soltó a su hermana y agarró a Tommy junto al resto de los chicos. Comenzaron a caminar hacia la zona donde estaban los coches.

Quien quiera ayudar, que vaya abriendo paso entre la gente. Así tardaremos menos.

Os alejasteis del escenario, dejando atrás a aquellos hombres y cruzasteis por la multitud. A pesar de andar pendiente de ver a su hermano, Rylee no tuvo suerte alguna.

De pronto, cerca ya de los límites de la multitud, donde se podía caminar sin estar apretujado ni sentir los cuerpos ajenos rozarse con el tuyo propio, visteis venir a toda marcha a un grupo de jóvenes.

Unos iban apartando a la gente de enmedio mientras que otros cargaban con el cuerpo de un joven. Por los rostros de preocupación, debían ser amigos del chico que llevaban en una especie de camilla improvisada con sus chaquetas o camisetas y el joven debía estar muy grave, viendo la forma de correr hacia los coches y la prisa que llevaban.

Afortunadamente la treta funcionó.

No sabía si Rylee se lo había tragado igualmente, pero ya tendría tiempo de explicárselo detenidamente. Sin embargo me culpó a mi de la situación. Posiblemente debido a la frustración , pero no me podía creer que dijera esas palabras.

- ¿Que me aproveché de ti?- Dije cogiéndola por un brazo y acercándola para que me mirara a la cara y viera que iba en serio - ¿Crees que voy por ahí besando a todas o qué? Si lo he hecho es por que me gustas!

Solté a Rylee un poco molesto con su comentario, pero tampoco podía reprocharle nada. Sabía poco de las fiestas e igualmente de mi. Solo negué con la cabeza cuando preguntó sobre que hacer. Estaba en blanco. Si hubiera sido por mi ya nos habríamos ido hace mucho tiempo, pero la tozudez o tenacidad de Rylee me gustaba. Y era cierto, me gustaba...

Al poco, delante nuestra sacaron en volandas a un chaval que parecía mal herido.

-¿Viste si era el mismo?- Pregunté a Rylee - Esta fiesta se esta descontrolando Rylee. Deberíamos irnos. No veo que sea seguro y no quiero que te pase nada...

Estaba realmente cansado, tanto arrastrar a Tommy por el bosque en dirección a la zona de la fiesta. Me dolían las manos de apretar, la espalda por la incómoda postura todo el tiempo agachado para arrastrarle, y el flequillo se me estaba quedando pegado a la frente por el sudor, que además se ponía frío por momentos al contacto con la brisa fresca nocturna.

Al llegar y detenernos un momento a descansar, a petición de Shyl, aproveché para tomar aliento mientras Diana y Bella nos instaban a seguir. Me erguí para enderezar la espalda, y miré en la dirección que debíamos ir, que estaba abarrotada de gente totalmente desfasada. Iba a costar lo suyo, y sólo éramos...

¡¿Gus?! -De pronto, me llegaron voces conocidas. Me gire para ver llegar a Gus con Jordan, Styles, Jason y Amber. ¡Ayuda! Sonreí con cansancio, pues veía en ellos un buen rayo de esperanza- Lobos, tío, le han atacado unos lobos... -En seguida se hizo cargo de la situación, con ese arrojo que siempre tenía. Entre él, Jordan y Styles podrían llevar a Tommy hasta la pick up. Me quedé un instante parado, con los brazos en jarra, aún recuperando el aliento, y me pasé una mano por la frente, sudada y con el pelo húmedo, hasta que Gus pidió que fuéramos abriendo paso- ¡Oh, sí, claro! -Me adelanté a ellos, sin separarme, y me dispuse a encabezar el grupo pidiendo paso a todo el que estuviera en medio. Teníamos que llegar cuanto antes.

Bella se ofreció también a llevar a Tommy, con lo que podríamos continuar sin problemas, pero entonces unas voces nos alertaron. Reconocí algunos de los rostros, amigos de Jayden, y corriendo tras ellos también estaban Amber y Jason.

Uno de los chicos en seguida preguntó a Jayden qué había pasado, disponiéndose después a organizar todo para que pudiéramos continuar con nuestra ruta hacia el hospital. Nos indicó que quien quisiera ayudar podía ocuparse de abrir paso entre la gente, y en seguida me situé al frente del grupo, casi al mismo tiempo que Jayden; aunque este resultó ser algo más rápido que yo, y eso que había estado cargando con Tommy durante largo rato.

Miré entonces a Amber y a Bella, haciéndoles un gesto con la mano para que nos siguieran.

- ¡Vamos, chicas! – les animé a adelantarse para ayudarnos a facilitar el paso a quienes llevaban a Tommy.

De no ser porque estaba bastante colocada en ese momento, mi cabreo hubiera sido monumental. A mis padres se la había liado más de una vez por menos. Pero qué cojones, casi me reía mientras caminaba en una dirección que suponía mi casa.

Cuando Héctor me abrazó casi me da un ictus. Era un gesto muy cercano y cariñoso, algo a lo que no estaba acostumbrada. Sé que decían que los latinos eran sobones y con él nunca me había molestado, pero ahora no sabía qué pensar. Mi cabeza me decía en ese momento que quizás quiera algo más que un polvo esporádico. Eso era algo que no podía procesar, porque coño, Héctor era universitario y estaba bueno.

Asentí un par de veces, colorada como un tomate. –Vale… Sería una vergüenza que me perdieras tan cerca de mi casa sí- así me ahorraba decir que la vergüenza era que me perdiera sola en mi supuesto nuevo barrio. Volví a subir a su coche.

Seguíamos decidiendo que pasos seguir cuando aparecieron todos en la linde del bosque cargando con Tommy al que yo daba por muerto-joder, ¿pero está vivo?-me pregunté mientras me lancé en su busca junto con Gus y los demás a echarle una mano.

-Jayden ¿qué cojones ha pasado, cómo os habéis librado?-pregunté con cierto alivio, los daba casi por muertos, pero habían salido ilesos. Jordan, Styles y Gus cargaron con Tommy dejando a Shyl libre de la carga, miré al grupo, estaba agotados pero ilesos-Shyl ¿estás bien? ¿te han mordido esas bestias? ¿os han mordido a alguno?-pregunté preocupado, esperé la respuesta de Shyl, pero Gus organizó todo en un segundo con buen juicio.

-Venga Jay, te echo una mano-le dije decidido, corrí a su lado para abrir paso entre la multitud y así llegar lo antes posible a la pick up. Miré de reojo a Tommy, estaba muy jodido y necesitaba atención médica urgente.

Le gusto? En serio?

Mi mano saboreaba su beso en mis labios mientras trataba de asimilar lo que me decia. Podia ser mentira, podia ser una manipulacion, o no? Nadie me habia dicho o hecho esas cosas, no sabia que hacer o decir asi que simplemente me quede mirandole como ida.

- Irnos a donde? 

Y mi hermano? Que se joda? Bueno, seguramente podria cuidarse, al menos mas que nosotros y me quede paralizada viendo como traian a otro cuerpo, o estaba vivo?

- No lo creo Leo, creo que es otra persona!

Leo tenia razon, era el momento de irse. Todo sonaba a peligro y yo no sabia que hacer asi que simplemente lo tome de la mano para seguirle a donde quisiera llevarme.

- Vamos, te sigo! Susurre.

 Doy una calada y cuando veo a los chicos llegar resoplo el humo, emocionada. Tommy no tiene buena pinta, pero joder, esperaba que esto fuera a salir diez veces peor. - Vamos, vamos. - Asiento a Diana. Me pongo de pie y doy otra calada para contener la emoción del momento, de ver que están bien. Casi no puedo creérmelo, pero será cuando estemos fuera de aquí cuando podré desahogarme todo lo que quiera. - Sí, ¿Cómo estáis? - Insisto tras Jason, sin atreverme a preguntar directamente por Tommy. 

 Junto a Jayden y Jason, me adelanto para abrir paso entre la gente lo más rápido que puedo para que salgamos todos de aquí y Tommy llegue al hospital cuanto antes. Por otro lado, la policía aun está por venir, mientas nosotros nos estamos marchando... Vaya noche más larga nos espera. En cualquier caso, y a pesar de que lo más seguro es que mi padre me vaya a matar, creo que Jason ha hecho lo correcto.

¡Por fin! Dije cuando vimos a gente.  Joder si vienen esos lobos podrán comeros mientras escapamos. Buff y es que a mi el asunto de los Lobos gigantes de crepúsculo me parecía aterrador...Aunque me aterraba mas que alguno se transformara en un cachas inflado de clembu y dijera frases tan estupidas como: Cuando te veo desearía que el tiempo se detuviera para que este momento y tu belleza la cual me insufla vida fueran eterno y ​Puaj me dan ganas de vomitar...

​Pues contando unos chistes nos hemos librado... Respondi al lobito. No nos han mordido ya habían cenado la verdad... dije mirando al babeante y sangrante Tommy.

Viendo que gente se ofrecía para llevar el picadillo de Tommy me puse a la cabeza para abrir paso.

Bueno hora de hacer de heroina. Maximo esfuerzo. Y comencé a empujar a todo el mundo para que la comparsa pudiera pasar.

La tomé de la mano mientras sonreía.

Por dentro estaba mas serio. Toda esa extraña situación me mantenía tenso y un muerto... puede que dos, no era algo para tomarse a la ligera. Pero debía permanecer tranquilo por el bien de Rylee. No quería preocuparla ni asustarla.

Mientras caminábamos de la mano me gustaba esa sensación. Hacía mucho tiempo que estaba con una chica y ella me conseguía sacar una sonrisa. Algo que por dentro también hacia mucho que no sentía. La miré de reojo y tan solo ver el contorno de su rostro me hizo sonreir a pesar de todo.

Llegamos a donde había dejado la moto y la di el casco.

-Toma, póntelo tu ¿Donde te llevo, princesa? ¿Quieres ir a casa?- Pensé en su hermano. Menudo idiota. Seguro que la daría un guantazo al verla allí, y aunque tarde o temprano eso era algo que pasaría, prefería evitarlo.- Si quieres puedes venir a mi casa. Mis madres no están pero... bueno, si vienen seguro entenderán lo que ha pasado. Comenté encogiéndome de hombros.

Me puse el casco aunque una estaba nerviosa, al menos estaba feliz de irme de ese lugar. Estaba segura que mi proxima fiesta seria en un asilo de ancianos donde no ocurriese nada inesperado por por ahora debiamos salir de alli. A Ron le mandaria un mensaje de que me fui y bien si lo veia o no. Que se jodiese, estaba molesta con su actitud.

- Leo, mi padre no esta, y estoy segura que mi hermano llegara tarde pero debo estar en casa para cuando llegue o tendre problemas, solo sacame de aqui y podemos dar una vuelta si quieres y despues me dejas en casa.

Me sente en la moto aferrandome a su espalda y cerrando los ojos. Aunque confiaba en el aun me daba miedo el vehiculo y preferia no mirar.

- Tus mamas? Tienes dos mamas, o mas?

No acaba de entender.

Abriendoos paso entre la multitud, la cual estaba muy ida ya, lograsteis llegar a la pick up de Gus.

Bien, lo subiremos atrás y Jordan irá con él. Estará mejor que en un asiento, os lo aseguro. Dijo a las caras nuevas. Jay, saca del cofre de atrás la camilla de campaña y móntala. Ladeó el cuerpo de tal manera que dejó claro que las llaves del vehículo las tenía en el bolsillo del vaquero.

Subimos a Tommy a la camilla, luego a la pick up y tras asegurarnos de que no irá deslizándose por toda la parte trasera, iré directo al hospital. Dijo mientras Jay iba preparando todo. ¿Alguien sabe que le ha pasado? Os miró a todos uno a uno. ¿Shyl? ¿Jay?... Fue preguntando mientras la camilla ya montada, era colocada debajo del cuerpo de Tommy.

Vamos a subirle. Os dijo saltando sobre la parte trasera de la Pick Up para agarrar la camilla desde arriba. Joder, está frio... que alguno vaya a la parte delantera y busque bajo el asiento del copiloto la manta que guardo allí.

Una vez todo listo y Tommy asegurado atrás, Gus subió a la pick up. Organizaros como querais, pero no podeis ir todos al hospital. Jay, si dejaste tu coche más abajo, puedo llevarte hasta él.

Salisteis de la fiesta en la moto con la sensación de que dejabais atrás un lugar hostil y lleno de maldad. El hermano de Rylee no daba señales de vida.

No os encontrasteis ningún coche venir de frente, pero si pudisteis ver lo que parecían los restos de un accidente en un lado del bosque. Un jeep negro volcado y restos del vehículo a su alrededor. Una grua acababa de llegar y la policía os indicaba que siguieseis la marcha.

Estaba claro que hoy tendrían bastante lío en el hospital. Llegasteis a la zona residencial de Hill Valley sin muchos problemas. Ahora os tocaba decicir hacia donde seguir.

Al final, fuimos varios los que encabezamos el grupo abriendo paso. Unos con más delicadeza que otros, nos empeñábamos en ir apartando a la gente creando un pasillo para que llevasen a Tommy. Había gente que se lo tomaba mal, pero la mayoría se percataba en seguida de la gravedad de lo que pasaba y colaboraban apartándose sin problemas. No quise responder a Jason, ni a Amber, me quedé en silencio dedicado a la tarea, porque era consciente de que si decía algo podía resultar borde. Habría sido una recriminación por salir corriendo y dejarnos allí, y eso tampoco era justo. El miedo hace reaccionar a cada cual de una manera. En realidad, lo que habíamos hecho había sido una locura.

Llegamos a la pick up y, a petición de Gus, abrí la portezuela y salté a la plataforma trasera para abrir el cofre y montar la camilla.

N-no, no lo se, yo... Le encontramos así, con dos lobos sobre él. -Indiqué con nervios, terminando de montar las varillas y bajando apresuradamente con la camilla- No puedo asegurar que se lo hicieran ellos o sólo lo encontrasen. N-no lo se.

Izamos al herido y le subimos a la parte trasera, mientras Gus pedía la manta de debajo del asiento delantero y aportaba un poco de sensatez. No, no podíamos plantarnos todos allí de golpe, éramos casi una decena de personas. Pero la idea de no ir al hospital y asegurarme de que estuviera bien me helaba la sangre.

No te preocupes, Gus, marchaos ya y no perdáis tiempo. Yo iré hasta el coche andando. -Le dije, metiéndole prisa, ya que yo mismo estaba atacado de los nervios- Y dadme un toque cuando lleguéis, por favor. Tenedme al tanto, ¿vale? Nosotros... -Miré alrededor, a los rostros de todos los presentes- Llevas razón, es mejor que no vayamos todos, somos muchos y sería un jaleo. ¿Nos vamos a la cabaña? -Pregunté, buscando el parecer general. Después de aquello, y sin saber cómo estaría Tommy, tenía de todo menos ganas de fiesta. Sólo quería sentarme, tomar algo... y no estar sólo.

Entre Amber, Diana, Bella, Jayden y yo, conseguimos abrir un paso lo suficientemente seguro para que pasasemos todos, empujé a la gente sin cortarme, me daba lo mismo lo que me dijesen-¡Vamos joder, apartáos que llevamos a un herido!-gritaba desgañitándome, cesando el esfuerzo a los pocos segundos, entre la estridente música y lo colocado que estaba el personal, ni se enteraban de lo que hacíamos, a los pocos momentos llegamos a la Pick up de Gus y subimos a Tommy en la parte trasera lo más rápido que pudimos.

-Era algo muy raro tío, tenía dos lobos sobre él y luego apareció otro de repente mucho más grande, era terrorífico, yo creía que se lo estaban comiendo y que ya estaba muerto-dije mirando el rostro del desdichado chaval, aunque quizás ya lo estuviese, estaba helado, blanco como la cera y no respondía.

-Gus, déjalo, yo llevo a Jay al coche, vosotros iros echando leches al Hospital-le dije con urgencia, para luego mirar a Jayden y a los demás-el coche lo tengo aquí al lado y os puedo acercar-indiqué con el dedo la sombra de mi coche unos pocos metros más lejos.

Con las luces de la fiesta reflejadas en su carrocería parecía hasta un coche despampanante, pero en realidad era un Mustang del 69 de segunda mano, la carrocería estaba conservada, pero había perdido el brillo, ahora lucía un verde mate bastante pobre, perdía aceite, chupaba gasolina como un zippo y el motor chirriaba como una chica en una peli de miedo, pero era lo que me podía permitir, al menos no tenía que usar el abergonzante autobús.

-Sé que no es gran cosa-dije mirando de reojo la pick up con una punzada de envidia-pero os puedo llevar sin problemas, ¿dónde está esa cabaña Jayden?-le pregunté curioso.

Todos juntos logramos llegar hasta la pick up de Gus, unos llevando al pobre Tommy y otros abriendo paso, como era mi caso. Por suerte no tuvimos gran contratiempo durante el recorrido, pero la gran aglomeración de gente impedía que lo realizáramos mucho menos rápido de lo que nos hubiera gustado.

Al alcanzar el vehículo, ese chico, Gus, continuó tomando el control de la situación. Era increíble la sangre fría que era capaz de mantener, pero también era de agradecer, pues aquello posibilitaba que fuéramos mucho más rápidos y eficaces.

Me hice a un lado cuando Jayden terminó de montar aquella camilla y empezaron a subir a Tommy, no queriendo resultar un estorbo. Lo aseguraron y taparon en la parte trasera y Gus subió al coche, apuntando que no todos podíamos ir al hospital y que podía bajar a Jayden hasta su coche si quería.

Este rehusó la oferta, priorizando que Tommy llegara antes al hospital, y pidiendo visiblemente nervioso que le mantuvieran al tanto. Aquello me sorprendió, pues pensé que Jayden querría ir también al hospital, pero cierto era que como él mismo dijo aquello sería mucho jaleo y además allí tampoco podríamos hacer nada.

Y lo más seguro es que alguna enfermera acabara echándonos a nuestras casas.

- Sí, vamos. – respondí a la pregunta que nos hizo Jayden sobre si nos íbamos a la cabaña, acercándome a él, tras lo que me giré para mirar a Jason; quien ofrecía al resto acercarnos a los coches en el suyo, asegurando que podía hacerlo sin problemas. – Gracias, pero… - miré a los demás, no me salían las cuentas. - ¿Vamos todos? – si no me equivocaba, de ir todos seríamos siete, además, el coche parecía estar lo suficientemente lejos como para que nos mereciera más la pena ir andando. – Eso sería ir más que apretados. Además, podemos ir andando, ¿No? – dije encogiéndome de hombros, mirando a Jayden, e inclinándome ligeramente hacia él después. – Aunque igual prefieres ir apretado con tu primita. – bromeé en voz baja con la esperanza de que se animara, mostrándole tras ello una tenue sonrisa.

Pasamos despacio por el lugar del accidente.

Podríamos haber parado a decirle algo a la policía, pero era mejor callarse. Notaba el nerviosismo de Rylee cuando se agarraba fuerte a mi, y no podía evitar divertir por dentro. Era tan dulce...

-No te preocupes, seguro que ha sido algún borracho- comente para tranquilizala.

En el reformatorio los domingos había maratón de películas de terror. Me imaginé algo similar. Zombies saltando por encima del Jeep y haciéndolo volcar. Toda una fantasía.

Aceleré la moto para dejar aquel sitio y llegar a casa de Rylee cuanto antes. No quería separarme de ella , pero si deseaba que estuviera a salvo y tranquila.