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The Black Company Chronicles: Rastrojo s Misantropy

Día 3 tras la DDE - Llegada a Puerto Rata

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15/01/2017, 22:26
Sabandija

Resultaba ahora que Sabandija no era tan poca cosa como para que el soldado que quedaba en pie no le prestase atención. Ni corto ni perezoso le atacaba a él, teniendo a Sacamantecas, un hombre mucho más amenazador, delante.

- ¡Aaaaah!- De nuevo las armas entrechocaban como si se tratara de un combate de entrenamiento, ambos combatientes precavidos, no lo daban todo para no bajar la guardia.- ¡Ahora!- Le indicó a Sacamantecas para que aprovechara la ocasión.

- Tiradas (2)

Motivo: Ataque con lanza vs soldado 4

Tirada: 1d10

Dificultad: 8+

Resultado: 1(+3)=4 (Fracaso)

Motivo: Pifia?

Tirada: 1d10

Dificultad: 8+

Resultado: 10(+3)=13 (Exito)

Notas de juego

Me parto...

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15/01/2017, 23:47
Sacamantecas

Aquello parecía un baile de torpes. Sacamantecas hacía eones que no se notaba tan torpe en una lucha, pero por fortuna su rival parecía manco también.

Cuando Sabandija entrechocó su arma con la lanza del guardia y ambos quedaron trabados, Sacamantecas vio una oportunidad y lanzó su machete contra el cuello del guardia.

Gruñó por el esfuerzo pero continuó su lucha particular... no podían perder más tiempo.

- Tiradas (1)

Motivo: Machete con intención hostil de matar al soldado 4

Tirada: 1d10

Dificultad: 8+

Resultado: 6(+3)=9 (Exito)

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16/01/2017, 09:25
Rastreador Ponzoña

Era como si la vida se le escapara. Tan solo la imagen de Khadea, grabada a fuego en su mente, lo mantenía aferrado a la vida. Pero sabía que era débil, qu cualquier movimiento bruco, que cualquier esfuero acabaría por matarlo. Era como un cachorro, como un león viejo que hubiera perdido sus colmillo y garras.

Se arrastró por el suelo hasta la pared más cercana y se quedó allí, las mano sobre las heridas del vientre, esperando a que la hemorragia, cada vez más lenta, cesara. Su mirada variaba de Sabandija a Sacamantecas y finalmente al enemigo sajado por el machete de este último.

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16/01/2017, 11:57
Bimbawa

El golpe de Sacamantecas se quedó corto, y golpeó la clavícula sin llegar al cuello. Sin embargo, había estado lo suficientemente cerca y había atacado con la suficiente mala intención como para que el Nyueng Bao se volviese más receloso por su vida.

El soldado dió media vuelta y salió corriendo por una trampilla abierta en la que unos escalones de piedra bajaban...

Necesitamos llevar a Ponzoña dentro de la casa, para que no le vean...-y ya si se tiene que morir, da igual, pero por lo menos que no nos descubran por su culpa-Y perseguir al soldado herido antes de que dé la alerta.

Bimbawa pasó agachada entre Sabandija y Sacamantecas y entró en la casa para registrar los tres cadáveres. Uno de ellos desplomado junto a la puerta impedía que se pudiese cerrar hasta que lo arrastrasen a una esquina.

¿Qué es esto? ¿Dinero?

Puf... estas monedas están defectuosas. Ni son redondas ni ná. ¡Ey! ¡He encontrado una llave!

Una vez hecho lo importante, se ocupó de las tareas menores, como rasgar las ropas de uno de los guardias para hacer vendas con las que tapar las heridas de Ponzoña.

- Tiradas (1)

Motivo: Vida

Tirada: 1d10

Dificultad: 8+

Resultado: 6(+3)=9 (Exito)

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16/01/2017, 17:34
Sabandija

La emoción de la presa herida que huye hizo a Sabandija no pensárselo dos veces y dejar el muerto, nunca mejor dicho, a Sacamantecas y él salir a toda velocidad a por el soldado que se fue por la trampilla. Tras la batalla que le había dejado el brazo atrofiado había decidido que haría lo posible por convertirse en el mejor cazador de la Compañía. Un cazador de hombres. Cual guepardo fue raudo y veloz a meterse por la trampilla, lanza en mano, con la esperanza de alcanzarlo antes de que pudiera dar la voz de alarma.

 

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16/01/2017, 23:48
Sacamantecas

Sacamantecas bufó cuando vio a la cobarde lagartija que les acompañaba desaparecer a toda velocidad. 

Miró luego a la puta rebuscar en los bolsillos de los muertos y finalmente pararse a tratar de cerrar las heridas de Ponzoña. El rufián la ignoró un rato largo mientras arrastraba los cuerpos amontonándolos en un rincón para que no se vieran desde la calle, y para que no fueran tampoco visibles a simple vista si alguien entraba allí.

Cuando acabó miró de nuevo a la prostituta.

- Dame esa llave y mantenlo con vida. - Dijo lanzando un vistazo a Ponzoña. - Matagatos no estará contento si dejamos que  muera... y probablemente luego Usurero me eche también una bronca. -

Acto seguido, Sacamantecas se puso a buscar qué abría la condenada llave. Quizá lo que abría era la puerta del pasadizo secreto que llevaba a las mazmorras del palacio... Justo lo que habían venido a buscar.

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17/01/2017, 08:34
Rastreador Ponzoña

Si los acompañaba, solo les retrasaría y supondría una carga. Lo sabía bien. Aun así, la frustración por no poder luchar y liberar a Matagatos le dolía más que las heridas de su cuerpo.

-Tened cuidado. Cerraremos la trampilla e impediremos que nadie entre por esa puerta. Cuando lleguéis de vuelta, golpea la trampilla tres veces. Así sabremos que sois vosotros. Suerte, Sacamantecas.

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18/01/2017, 10:23
Director

Unos escalones de piedra descendían por el hueco de la trampilla hasta un pasadizo oscuro. Por delante de él, Sabandija escuchaba el golpetear de las sandalias del Nyueng Bao, avanzando a tientas todo lo deprisa que podía. Sabandija no tardó en darle alcance. Lo lanceó por la espalda, a traición, como haría un Oscuro, obligándole a darse la vuelta para que le encarase. El hombre no tuvo tiempo a contraatacar, y Sabandija lo mató con un segundo golpe.

Cuando el cuerpo del guardia se desplomó, el K'Hlata vió la luz de las velas que portaban Matagatos y Preocupado, en el otro extremo del camino. La luz también mostraba que uno de los flancos de aquel pasillo estaba compuesto por los barrotes de una sucesión de celdas. Un prisionero Nyueng Bao habitaba una de ellas, frente a los dos Hermanos Juramentados, como si estuviesen hablando con él desde el lado bueno de los barrotes.

Les advirtió y los llevó de nuevo al puesto de guardia para que Matagatos pudiese atender a Ponzoña.

- Tiradas (6)

Motivo: Persecución: físico del guardia vs físico de Sabandija

Tirada: 2d10

Resultado: 10(+3)=13, 10(+3)=13 (Suma: 26)

Motivo: Persecución: físico del guardia vs físico de Sabandija

Tirada: 2d10

Resultado: 2(+3)=5, 8(+3)=11 (Suma: 16)

Motivo: Ataques: físico del guardia vs físico de Sabandija

Tirada: 2d10

Dificultad: 8+

Resultado: 2(+3)=5, 7(+3)=10 (Suma: 15)

Exitos: 1

Motivo: Vida

Tirada: 1d10

Dificultad: 8+

Resultado: 9(+3)=12 (Exito)

Motivo: Sabandija remata a guardia

Tirada: 1d10

Dificultad: 8+

Resultado: 2(+3)=5 (Fracaso)

Motivo: Ataques: físico del guardia vs físico de Sabandija

Tirada: 2d10

Dificultad: 8+

Resultado: 5(+3)=8, 8(+3)=11 (Suma: 19)

Exitos: 2

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18/01/2017, 10:38
Director

La llave que Bimbawa dió a Sacamantecas no abría nada en aquella casucha. La puerta no tenía cerradura, se abría y cerraba girando el pomo, y para casos de ataques desde afuera disponía de dos soportes para colocar una tranca que había tirada en el suelo. La trampilla tampoco disponía de cerradura. Un mecanismo simple hacía que el asadero se pudiese girar haciendo que una pieza hiciese de pestillo sobresaliendo hasta el interior de una ranura en el umbral.

La cerraron... esperaron... Y finalmente,

¡Toc, toc, toc!

Tres golpes. Y por lo liviano del sonido, lo más probable era que estuviese producido por una mujer, un niño o el brazo delgado de Sabandija.