Partida Rol por web

The Legend of Zelda: The Land of Goddesses

Castillo de Hyrule y la ciudad

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08/04/2011, 11:50
Director

Los guardias asienten y dejan pasar a Eldar y a los invitados de la Princesa. Todos atraviesan las puertas que dan acceso a la habitación de Zelda.

No es que sea una habitación muy recargada, es más bien una habitación austera. La Princesa esta frente al ventanal de la habitación, mirando hacia el horizonte, como si no se hubiese movido desde la última vez.

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08/04/2011, 14:10
Eldar

Líderaba la marcha del grupo por el interior del Castillo. No era uno de esos guardias que daban las típicas órdenes de mandamás, por lo que dejé a los muchachos que se movieran con libertad, pero sin separse más de dos metros a la redonda. Explicaba cualquier detalle o duda que tuvieran, ya que el interior del palacio era un cúmulo de decoración lujosa. Y al fin llegamos, allí estaba ella. Con gesto preocupante como la ví cuando mandó mi presencia.

-Princesa. He traído a los muchachos.-

Incliné la cabeza cuando se dió la vuelta, satisfecho por cumplir con mi palabra.

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08/04/2011, 21:59
Princesa Zelda

La Princesa se gira para mirar a los chicos que acompañan a Eldar. Su rostro muestra una mirada y una sonrisa triste, como las de una persona que sabe cual es el futuro que depara al reino.

-Habéis llegado pronto, aunque mejor así... no podemos demorar más este asunto...

Camina hacia el enorme escritorio que hay al otro lado de sus aposentos, frente a otra cristalera. Espera a que los chicos se acerquen.

-La oscuridad está cada vez más cerca... los Templos han sido tomados y pronto intentarán abrir la puerta de los Cielos.

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09/04/2011, 15:18
Kururu

Caminaba por la calle, con paso pausado y disfrutando de las esplendorosas vistas. Hacía muchos años, casi era un crío entonces, que no visitaba la ciudad. Había sido en uno de los viajes con su abuelo, con las mercaderías. Su primer viaje como aprendiz del negocio. El abuelo Kuroko había accedido a llevarlo por petición de su padre para que conociese las inquinas y secretos de la compra y venta de los artículos más exóticos y demandados. Aún recordaba lo admirable y gloriosa que le había parecido. Un mundo nuevo de fantasía... y no había cambiado de opinión.

Kururu volvió el rostro hacia su compañera, a quien mantenía a su misma altura adaptando el paso.

-¿Por dónde entonces? -inquirió.

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09/04/2011, 16:26
Kara

Mira un momento a ambos lados de la calle y se queda un momento pensativa... hace bastante que no va a la ciudad así que está un poco desorientada.

-Creo que por aquí se llega a la plaza del pueblo y es ahí donde esta la entrada al castillo.

Comienza a caminar en dirección este.

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09/04/2011, 16:49
Kururu

Siguió a la muchacha, con las manos cruzadas a la espalda y la mirada danzante entre los edificios de deliciosa arquitectura. En su boca la sonrisa no perdía intensidad, a caballo entre su expresión ladina y otra un poco más cálida. Aquello le daba un aire contemplativo y distante, pero más hermoso de lo habitual.

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10/04/2011, 12:48
Eldar

Ante el silencio de los muchachos decidí ser yo quién siguiera la conversación. Aunque siempre trataba las conversaciones de la forma más directa posible, en ocasiones no entendía muy bien lo que la Princesa quería decirme. En aquel caso decirnos a todos. Sus palabras mostraban miedo, y oscuridad. Me daba la sensación, que tras aquellas palabras, había algo que se escondía.

Carraspeé, adelantándome un par de pasos y siguiendo con la mirada los movimiento de la Princesa.

-Y... ¿qué podemos hacer mi señora? Qué podría hacer un grupo como nosotros para impedir que esa oscuridad se levante.- Esperé espectante, como si nada más supiera el lugar en el que se escondía aquella oscuridad iría, acompañado de mis botas y mi arco sin dudarlo.

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10/04/2011, 13:07
Linnet

La verdad, no entendia nada. El resentimiento para contra eldar, se quedo apartado un rato. Primero, estaba impresionada, todo lo que pudiera decirse de la princesa era poco o sin palabras. Habia personas que tenian un aura, un no se que, un...algo, y sin dudas, la princesa lo tenia. Era un conjunto, su forma de vestir, su lenguaje no verbal... sus expresiones, algo casi "magico". No podia decir nada, solo estaba con la boca abierta.

Tampoco entendia sus palabras, le parecian cripticas...SI hubiera podido, le hubiera dicho que solo venian a traer un mensaje del Venerable Dekku y ya estaba...

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10/04/2011, 15:00
Yard DeLuclin

 

A Yard no se le dan bien las multitudes, y ya hay demasiada gente presente para su gusto. Además, la presencia de la mismísima princesa le impresiona, lo que aumenta su timidez. Simplemente observa y escucha con atención, prefiere dejar que sean los otros quienes hablen.

 

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11/04/2011, 12:10
Falare

Cuando mis ojos se cruzan un instante con la mirada azul de la princesa me quedo muda, sin palabras y asombrada por su imponente belleza, saber estar y esa luz de bondad que parece irradiar por cada poro de su cuerpo.
¿Nos esperaba... más tarde? Hemos venido lo más rápido que nos ha sido posible desade mi hogar... ¿Acaso sabe qué soy?

- Buenos días, princesa. - logro decir al fin tras el silencio que se hace desde las últimas palabras dichas por el guardia novato. Después dudo ates de pronunciar lo siguiente, pero al fin y al cabo ese guardia parece de fiar, o espero que así sea.- Mi nombre es Falare... y vengo... vengo desde el Bosque, el Bosque Kokirir. El Gran Árbol me envía, pero quizá ya lo supierais. Él nos ordenó venir a avisarla del gran peligro, aunque veo que estáis mejor informada de lo que esperábamos.

Me quedo callada un momento, miro a mis compañeros... y prosigo:
-Como comprendereis he arriesgado mi vida viniendo aquí, saliendo del Bosque, pero espero que se pueda aún hacer algo para impedir que ese mal consiga su propósito. Aunque me temo que no sé si podré estar presente dadas mis circunstancias.

Si alguien entrase ahora mismo en los aposentos de Zelda y escuchase a una niña hablando así... ¿llamaría la atención? Ya era tarde para pensar en ello pero no me convenía olvidar que a ojos de los hylians yo era tan solo una niña de unos 12 años.

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12/04/2011, 19:53
Princesa Zelda

Sonríe a la niña Kokiri. Abre un pequeño cofrecito que tiene sobre el escritorio y saca de el un pequeño broche. Indica a la pequeña Kokiri que se acerque y cuando lo hace, le hace entrega del broche.

-Con este broche estarás protegida de la muerte que os depara a los de vuestra raza cuando salís del Bosque.

Mira a los demás, ahora con seriedad, y mucha.

-Las noticias de que un mal, que la oscuridad, está invadiendo este mundo no me son desconocidas. Es posible que conozcáis las historias sobre el Heroe del Tiempo: un joven elegido por el destino, capaz de empuñar la Espada Maestra y luchar contra el mal cada vez que se ha presentado.

Abarca a todos los presentes extendiendo sus brazos y los mira uno a uno.

-Esta vez no habrá un héroe. Se que queréis luchar por esta tierra y por eso os pido que os embarquéis en la búsqueda de lo único que puede salvarnos. Desgraciadamente, ya es demasiado tarde para mí. Soy prisionera en mi propio castillo y sólo unos pocos, como Eldar, aun me son fieles y no han caído bajo la magia oscura.

Se acerca de nuevo al escritorio y se sienta en la gran butaca que hay tras él. Comienza a escribir sobre un pergamino.

-Podéis hacer preguntas, pero entended que hay algunas que no puedo contestar, pero, seguro, encontraréis respuestas.

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12/04/2011, 21:35
Linnet

Zelda era su princesa, la soberana de todos los hylians, que aplomo que presencia...pero ellos solo tenian que entregar un mensaje. No entendia porque les decia eso. No habria heroe del Tiempo y habia un gran mal. Linnet agradecio el gesto para con la Kokiri, una pequeña victoria, Falare no iba a espicharla. Reunio algo de valor y le pregunto, algo por lo que tenian que empezar:

-No lo entiendo, princesa, nosotros solo teniamos que entregaros un mensaje pero... no somos el Heroe del Tiempo, ni tenemos madera para ello... ¿de que mal hablamos?¿como se podria parar? Necesitamos mas informacion...

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15/04/2011, 16:57
Falare

Me adelanté unos pasos para acercarme a la princesa aunque tímidamente a principio. Acepté en silencio el presente, e broche que supuestamente me protegería del destino de ser lo que soy.
- Muchas gracias, alteza. - sonriendo aradecí el gesto y el regalo al alejarme de ella.

Después me mantuve junto a mis compañeros escuchándola, en parte asustada y en parte orgullosa de que la mismísima Zelda nos pidiera ayuda a nosotros, apenas uos críos, aunque no hay que olvidar que también el héroe del Tiempo fue un niño una vez.
Tras un silencio que daba a entender que todos nos habíamos quedado tan boquiabiertos y sorprendidos como yo misma, Linnet habló expresando en voz alta lo que mi mente ya estaba pensando. ¿Por qué nosotros? ¡Apenas sabemos defendernos!

Miré de reojo a Nyx, que estaba revoloteando contenta y al notar mi mirada se sentó en mi hombro. Sabía lo mucho que le gustaban las aventuras, era un fiel reflejo de lo que yo fui con muchos menos años. Sonreía alegre aunque preocupada a la vez.
- ¿Qué es eso tan importante que puede salvarnos y cómo sabremos dónde está? - Una pregunta, así de simple. Estaba dispuesta a intentar hacer lo posible para que el mundo que conocía, para que Padre y mis hermanos estuvieran a salvo.

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15/04/2011, 17:11
Princesa Zelda

La Princesa deja la pluma en su soporte y echa unos polvos desecantes sobre la tinta fresca, luego dobla el pergamino. Se levanta tranquilamente y se acerca a ellos.

-El Gran Árbol Deku ha puesto su confianza en vosotros, al igual que lo hizo en su día con uno de los Héroes del Tiempo. Para mí, es suficiente con eso. Significa que seréis capaces de luchar para salvarnos a todos.

Extiende el papel para que uno de ellos lo coja. Parece que es algo importante que no puede decir en voz alta.

-Os explicaré como funciona el mundo. Existen 6 Templos sagrados y en cada uno de ellos hay un Sabio que durante siglos han mantenido los sellos que han retenido al mal. A parte de ellos hay 3 hermosas joyas que abren la puerta al reino sagrado, oculto en el interior del Templo del Tiempo, donde yace la Espada Maestra, la única que es capaz de repeler el mal. Y dentro de este reino sagrado también se hallaba hace tiempo el poder de las Diosas, el Triforce sagrado, pero ahora son 3 personas las que portan ese poder.

Se acerca a las cristaleras, para mirar hacia el horizonte. Como para darle un poco más de emoción a la cosa.

-El Trifoce de la Sabiduria - les enseña la mano, donde comienza a brillar un pequeño triángulo dorado -, símbolo del poder de Nayru, Diosa de la Sabiduria; el Triforce del Valor, símbolo de Farone, Diosa del Coraje y el Triforce del Poder, símbolo de Din, Diosa del Poder. Pero no puedes llegar a la tierra de las Diosas ni con los Sabios, ni abriendo la puerta al Reino Sagrado ni uniendo el Trifoce de nuevo... 

Se gira de nuevo para mirarles, con mucha seriedad.

-Tres llaves son lo que hacen falta para abrir la puerta hacia los Cielos. Pero todo lo demás son las migas de pan que se deben seguir para alcanzar el lugar donde moran los Dioses y destruir la luz de este mundo. Yo no puedo hacer mucha cosa, pues estoy encerrada aquí, pero lo que si puedo hacer es daros consejos, a distancia.

Extiende las manos con las palmas hacia arriba. De éstas sale una luz dorada que va tomando forma en una pequeña hadita, un poco más grande que Nyx, pero con la forma de una pequeña Princesa Zelda. Ésta revolotea alrededor de Zelda y luego va hacia los chicos.

-Debéis marcharos ahora o no seréis capaces de salir.

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15/04/2011, 18:32
Kara

 Se gira para mirar a Kururu.

-Te gusta la ciudad? A que es bonita? Creo que aquí vivirías mucho más a gusto que en Ordon... Aquí hay muchos compradores... Aunque a mí me gusta más Ordon... está cerca del bosque.

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15/04/2011, 19:14
Kururu

La miró, conservando la sonrisa.

-Sí, lo cierto es que cuando herede el negocio quisiera venirme aquí y establecer mi propio sistema de mercaderías...

Kururu desvió la mirada hacia un lado, recuperando momentçaneamente su sonrisa retorcida.

-... en Ordon no podría prosperar ni el más astuto de los negocios... ¡Khu, khu!

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15/04/2011, 19:27
Kara

Lo mira un poco entristecida, pero luego vuelve a mostrar su sonrisa. Coge a Kururu del brazo y tira de el hacia la plaza y la entrada del Castillo.

-Si vinieses aquí, no nos verás más... seguro que acabas echándonos de menos.

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15/04/2011, 19:52
Kururu

Se deja llevar, sorprendido, por la impetuosa muchacha y por bien poco no perdió el equilibrio. La miró, dubitativo, víctima de sus palabras.

-Bueno, un mercader siempre está viajando en busca de nuevos productos... en el bosque hay algunas bayas bastante peculiares y seguramente debiera ir hasta allí para conseguirlas...

Al salir a la plaza el sol le dió de lleno en el rostro. Kururu, incómodo por la deflagración de luz, se cubrió rápidamente los ojos con una mano. Entonces vió el imponente castillo de la dama Zelda, soberana de todos. Su simple presencia lo dejó sin palabras.

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16/04/2011, 18:24
Eldar

Tenía la sensación que mi parte en esta historia ya había concluido. Me quedé un poco más retrasado que el resto, apoyado sobre la ventana más cercana, pero sin dejar de prestar atención mientras oteaba el horizonte. La princesa decía haberse quedado prisionera en su propio Castillo y, en cierto modo, me hacía responsable de ello, como si no hubiera puesto toda mi confianza en ella. A decir verdad, y me tentaba muchísimo compartir aquella aventura con los muchachos, no podía permitirme salir del castillo ni tampoco había sido galordonado por el gran Árbol Deku. Mi trabajo era vigilar, deseando que ocurriera algo en algún momento y rompiese el aburrimiento.

Para vencer a ese mal, no bastaba con presentarse a su puerta. Todo se resumía en la búsqueda de tres llaves para abrir la puerta de los cielos y derrotarla. Daba la sensación de ser un viaje largo pero interesante al mismo tiempo.

-No sé que decir Princesa... Todo este tiempo he puesto toda mi confianza en ti, prometí serte fiel siempre que estuvieras de acuerdo con la forma de manejar mi espada. Esbocé un sonrisa con la mirada en el suelo, recordando los primero momentos tan difíciles que me tocó vivir en el castillo pero qué un día -Zelda- me hizo ver la luz y me enseó que no todo debía de ser rencor o venganza.

Y... me sentiría como un inútil si ahora me marchara, dejándote prisionera en tu propio Castillo. ¿Qué he de hacer? Dime qué pasos he de seguir...-

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18/04/2011, 13:08
Falare

Al mencionar de uevo a Padre y el cómo él mismo puso su esperanza en nosotros me dan ganas de llorar, pero no es momento ni lugar para ello. Padre y todos mis hermanos pueden depender de lo que yo consiga hacer ahora que he podido salir del Bosque. Estaba acostumbrada a cargar con grandes responsabilidades allí de donde venía, por suerte, pensé.

Al escuchar las palabras del guardia novato... sentí pena. La Princesa estaba presa en su propio castillo y... ¿él? ¿él también debía estarlo con ella?
No quise meterme en esa conversación, al menos mientras no se me diese la palabra para opinar libremente, así que me dediqué a observar cómo Nyx y la hada que nos acababa de entregar Zelda se conocían y hablaban en esos susurros casi imperceptibles típicos de las hadas.