Partida Rol por web

Resumen de equipamiento. 

21200
-700 chaleco Ángel
-4000 viajes para Saray y familia
-4500 documentación falsa
12000
Saray y sus abuelos se van con 12000 € a suramérica, que les durarán bastante si se administran bien.

Intento postear esta noche.
 

Fueron cuatro días movidos después del ataque a los chinos: Comprar accesorios para las armas, munición, equipamiento, pasajes de avión, carnets y pasaportes falsos, trucar armas, fabricar explosivos, explorar puntos adecuados de la autopista para la emboscada, y seguir controlando los movimientos de Gaga... Todo con la mentalidad de estar preparados para el lunes.

Se acercan las siete de la tarde, cuando el plan se pone en marcha. Dos vehículos, con Katia convenientemente preparada para lo que se iba a cazar.

En el coche, mientras se va al tramo de autopista adecuado, hay silencio en el grupo. Cada uno tiene un arma con silenciador, y una con una luz estroboscópica, además de un chaleco de Kevlar y bien un casco, o bien pasamontañas o ropa que les cubra la cara, y guantes que les cubran las manos.

Mirándose unos a otros apenas podían reconoer a aquél grupo que hacía exactamente cuatro días había atacado a lo loco, a cara descubierta y a plena luz del día un restaurante en plena zona turística, ahora empezaban a ser más profesionales. Más les valía, pues ahora se iban a encontrar con más resistencia, y si bien los mafiosos iban armados, el grupo objetivo, o al menos su líder, tenía una merecida fama de violenta. Uno no atraca bancos de esa manera y se lleva algunos guardias por delante sin la malvada predisposición de Gaga a hacerlo.

Llegaron al lugar, lo bastante lejos de la autopista como para que no se oyeran disparos, si alguno disparaba con armas sin silenciar, y a la salida del polígono. Esperaban que nadie llegase en sentido contrario que pudiera verless. Se empezaron a esconder entre los arbustos. Por supuesto, ésto iba a ser solo el aperitivo para lo que se echaba encima, y con suerte, uno o dos menos que encontrarse en el garaje.

Tendida la red, Katia tuvo que declinar la ayuda de algunos camioneros que se ofrecían a echar una mano. Gaga no tenía, que se supiera, ningún camión, pero por si acaso Tecnovirus tenía algunas fotos de sus vehículos y sus hombres en el portátil. 
Un hombre con una Ducati roja se paró pasado el coche de Francisco, como si fuera a bajarse a echarle una mano a la mujer, sin embargo, tras echar un vistazo (Probablemente asegurándose que estaba sola y la matrícula del coche) se marchó sin decir nada. Tecnovirus revisó las imágenes, y el hombre y la moto coincidían con uno de los cazadores de Gaga. Probablemente volviesen pronto a por el coche.

Como era de esperar, en veinte minutos, no más, llegó una pick up amarilla que se paró poco antes del coche de Francisco. De ella bajaron aprisa y con dos pistolas, dos tipos con la cara cubierta, uno con gafas de sol y el otro no, que apuntaron a Katia.

¡Apártate del coche, perra! -Gritó el de las gafas de sol- ¡Tu coche acaba de cambiar de dueño!

Agitaban las pistolas con nerviosismo, sin saber que tras unos arbustos, estaban los seis cachorros de esa perra... 

Has montado dos explosivos: Uno de ellos sabes que te ha salido de coña, el otro seguro que también muy bien, pero no tienes esa certeza absoluta del primero.

Uso el primer explosivo para la pared y el segundo para lanzarlo dentro despues con un detonador manual(tirar y lanzar) mara que sea mas dificil que falle

Bomba buena para entrar nosotros y la perfecta en la otra persiana(indico un poco a ciegas escribo desde el telf,no me va el pc)

"Guau, guau!!" susurra Xavier mientras apunta e impacta al más cercano de los agresores con una ráfaga bien dirigida de su nueva MP5.

Bajo del coche y espero junto a la autopista. En cierto modo me cuesta controlar mis nervios, teniendo en cuenta que voy vestida con una falda corta y una ligera blusa para meterme en un tiroteo. Echo de menos la protección del kevlar de la ropa de motorista y el casco que oculta mi rostro. Lo que está claro es que los cazadores de Gaga no van a salir de esta para tener la oportunidad de identificarme. De todas formas, es bastante verosímil que una persona a la que el coche ha dejado tirada en medio de una autopista esté relativamente nerviosa, así que esa preocupación sólo sirve para reforzar mi coartada.

Tras el paso de la Ducati, mis compañeros me avisan de que se trata de una de las motos de Gaga. El plan de Francisco parece estar funcionando, igual que la vigilancia a la que les hemos sometido para escoger este lugar en medio de sus rutas habituales.

Los dos tipos bajan de la furgoneta con las armas en la mano. Me acerco a ellos, como haría cualquiera que fuese a pedirles ayuda y a agradecerles por parar cuando me amenazan. Pobres desgraciados, pienso cuando escucho los movimientos de mis compañeros a mi espalda.

- ¡Por favor! ¡Llevaos el coche, pero no me hagáis daño! - digo mientras empiezo a separarme caminando hacia el guardaraíl de la autopista. Ya os lo hago yo a vosotros.

Los meses de entrenamiento con Sofía me ayudan a reaccionar. La pistola aparece en mi mano como si siempre hubiese estado ahí. Espero que los gadgets que nos recomendó Francisco funcionen tan bien como nos los había vendido, pienso mientras ilumino a los dos hombres de Gaga con la luz estroboscópica. Espero que no pase mucha gente por aquí en el próximo minuto, porque entre disparos y luces, vamos a provocar un accidente.

Aprieto el gatillo antes de buscar cobertura con el guardaraíl. Sin embargo, los nervios y la urgencia para quitarme de en medio me pasan factura, porque no es ni de lejos el mejor disparo que he hecho en los últimos tiempos. Lo importante es salir enteros y estamos siete contra dos...

Con paso firme paso por detras de Mark, le toco en la espalda para que marque al objetivo mas cercano de Katia, mientras rodeo el vehiculo amarillo para sorprender al segundo objetivo, le suelto una rafaga en las rodillas para que no muera y poder dejarselo a Francisco y su "don de gentes"

Tecnovirus no queria que hubiera disparos de represalia por parte de ninguno de los dos individuos. Katia no estaba tan bien protegida como el resto del grupo. 

El maton que estaba mas cerca de Katia, ya habia recibido muchos disparos, por lo que Javier no pensaba que necesitara mas atencion. Sin embargo el otro solo habia recibido disparos en las piernas, sus manos seguian estando utiles y eso significaba que podia dispararle a Katia. Paco habia dicho sacarlos de circulacion, y eso es lo que haria. Era la segunda vez que disparaba a una persona, pero no por ello le temblo el pulso.

-Miau!

El siempre habia sido mas de gatos que de perros. 

Francisco observó la situación y esperó a ver como se desenvolvían los acontecimientos. Después de las ráfagas de sus compañeros, no tenía mucho sentido añadir sus disparos al fuego cruzado, así que se quedó a la expectativa del resultado del tiroteo, para ver si al final era necesaria su intervención o no.

El tiroteo es breve y ruidoso. Cuando Katia saca el arma, pilla desprevenidos a los dos, que pese a tener las armas en la mano no logran ni efectuar un solo disparo. Primero el pistolón con luces de Katia hace un agujero en el estómago del tipo de los ojos rasgados, que después recibe otras tres balas de pequeño calibre de Xavier, haciéndole sacudirse de pie y quedarse apoyado en el faro de la pick up. Al menos hasta que Marc le remata contirtiendo el punto del puntero de su beretta en otro agujero en el pecho del tipo.

Al tiempo que disparan a muerte a su compañero, una 'tos' silenciada de la pistola de Tecnovirus hace un agujero en la cadera del de las gafas, que grita de dolor. Antes de que pueda reaccionar, Lázaro le dispara a las piernas desde detrás, haciendo que caiga al suelo. 
De los matorrales, saltando a través del guardarraíl, salen Ángel y Francisco, con sendos subfusil y escopeta de combate apuntando al matón.

 ¡Quieto, y las manos donde pueda verlas! Dijo con un buen deje de deformación profesional

El tipo de las gafas grita de dolor y tira el arma. En un principio intenta poner las manos donde puedan verse, pero el dolor le obliga a llevarlas a las rodillas, la cadera y los muslos heridos.

 AAAAHHHH!!! JO-DER!! ¡¡MIERDA!! ¡¡AH!!!! 

Apago la luz estroboscópica. Bastante hemos llamado ya la atención de cualquiera que haya podido pasar.

- ¿Perra? - pregunto dirigiéndome al tipo de rodillas en el suelo, repitiendo el insulto que me han referido a penas unos segundos atrás. Le golpeo en el rostro con la mano en la que llevo el arma, haciéndole un corte con la culata. No lo hago por mí, me han llamado cosas peores, sino por todas las mujeres a las que han tratado de la misma forma mientras les robaban sus vehículos.

Doy un paso atrás mientras vuelve a enderezarse.

- ¿Quién está ahora mismo en el taller de Gaga? - le pregunto directamente. Después de todo, él no va a salir de esta, aunque es probable que aún tenga algo de esperanzas. Pero si Gaga no está allí o, por el contrario, tiene alguna reunión con alguien que pueda proporcionarles algo de apoyo adicional, mejor saberlo antes de empezar el asalto al local.

¡¡Auch!! Dijo con el golpe, pero con el dolor de las piernas, lo del golpe en la cara era lo de menos, aunque le habían saltado las gafas de sol.

 ¿Quién está ahora mismo en el taller de Gaga? 

En otras condiciones, Gaga podría haber confiado en que este hombre aguantaría el interrogatorio, era un tipo fuerte y decidido, pero estaba MUY claro que esta banda iba jodidamente en serio, y que si quería salir de una pieza, si había una oportunidad, ésa era hablar.

Ghnnn... Creo que está to'l mundo... como mucho... como mucho falta uno, que sale a buscar coches en una Ducati... y... y creo que sí, los mecánicos, los guardias no salen a esta hora..., y, y... AGhhHHhhHH...

Se retuerce de dolor un poco y trata de no gritar. Tras morderse la lengua, coge aire y sigue

Y Gaga seguro que está con sus maromos, porque ésta tarde se le habían entregado unas cosas en una caja grande de madera, estará con eso, y luego por la noche pos sí que sale media banda a buscar coches, pero aún no, aún hay sol...

El tipo lagrimea de dolor cogiéndose las piernas y mira el cadáver de su compañero, tumbado en un creciente charco de sangre.

Yo os respondo tó lo que queráis, preguntarme que yo os digo, pero no me matéis.... Que yo nunca he matao a nadie joer... Que soy un chorizo vale pero no es pa' esto...

"Yo digo que lo atemos bien atado y al maletero de la furgoneta con él. Sería bueno dejarla en otro sitio, no vaya a ser que les extrañe la tardanza y vengan a investigar al sitio donde sabían que este y el fiambre de su amigo iban a robar el coche" comenta el policía mientras recarga su arma.

"Si realmente van a ir saliendo poco a poco a buscar coches, podríamos emboscarlos hasta que se enteren de lo que pasa y adelgazar el rebaño un poco más antes del asalto. Por otra parte, atacar directamente nos da el factor sorpresa. Ángel o yo podemos dirigir a nivel táctico el grupo cuando esto empiece, si a Francisco le parece bien..."