Partida Rol por web

Lazaro dolorido aun por el impacto de bala consigue golpear al sicario, no llega a darle como quisiera paro lo bastante para al menos distraer su atención y facilitar en la medida de lo posible a Marc.

El taladro ya me está molestando. Y si bien no ha hecho un daño masivo sobre mi, nada decía que la próxima vez no terminara incrustado en uno de mis ojos o en el cráneo. Así que haciendo uso del arte que poseo para el manejo de mi metálica amiga, apunto a pegarle en el brazo a mi contendiente para que tire el taladro y quede, dentro de todo, indefenso y me permita acabar con él de una vez por todas.

- Caete de una puta vez la concha de tu madre! - digo entre dientes tratando de ignorar el tirón que todavía molestaba en mi espalda.

"Cúbreme" susurra Xavier a Ángel. Permaneciendo agachado para hacer de sí mismo un blanco lo más pequeño posible, avanza hacia el segundo piso, cubriéndose con los laterales de las escaleras una vez más...

Cuando llega arriba, aparte del cadáver de la chica que liquidaron antes, de origen latino, no se ve nadie a la vista, aunque de nuevo hay puertas cerradas. Ahora puedes confirmar que loa ruidos de arrastre vienen del último piso, pues aún se oyen.

Al alcanzar el segundo piso y no encontrar enemigos a la vista, Xavier da la señal para que Ángel y Francisco avancen. Cuando se acercan, señala escaleras arriba.

"Seguramente estén preparando una barricada, sugiero que avancemos antes de que se atrincheren" susurra a sus compañeros.

Con un gesto, le indico a Tecnovirus que cubra la puerta cerrada de la derecha. Lo más probable es que lleve al baño de mujeres y que esté vacío, pero no tengo muchas ganas de encontrarme con nadie saliendo de allí para pillarnos por la espalda.

Por mi parte, adelanto al informático y abro la puerta del taller, dispuesta a echar una mano al mecánico. Prácticamente desde la puerta, sin adentrarme en el taller para no abrir el ángulo con la pared que me convertiría en un blanco fácil desde los pisos superiores, apunto con cuidado para no disparar a Marc.

Cuando tengo al tipo del taladro fijo en la mira de la pistola, aprieto el gatillo intentando llevarme por delante al tipo que está atacando a nuestro compañero.

-Maldita sea mi estampa. Una entrada al piso, y cuesta arriba. No hace falta ser un genio para saber que nos espera el lado malo de un arma al final de la escalera. Pero en una situación como esta, la duda sólo te lleva más rápido a la tumba.

Asiento brevemente a Xavi, tomo aliento y pegado a la pared y de perfil para ofrecer el menor blanco lateral, empiezo a avanzar despacio escaleras arriba. Mi índice está tenso sobre el gatillo. Afortunadamente, esto no es un asalto con rehenes. Al primero que asome la jeta, se la abraso.

Katia continua con adelante y ayuda a Marc, Tecnovirus por su parte, hace un alto en su camino hasta el generador y abre, con cuidado la puerta del aseo de mujeres.

Aprovechando que Katia no le ve, Javier mete una carta de los ases del talion en la boca del maton que acaban de cargarse y se la cierra.

Preparado para cualquier cosa y sin perder el aliento, Francisco vuelve desde la puerta de los lavabos y apoyando a sus dos compañeros cubre su avance por las escaleras subiendo detrás de los dos policías.

Desde luego era evidente que la situación distaba de ser idílica. El asalto no estaba yendo especialmente bien y varios de los ases estaban heridos, él entre ellos. Sin embargo, no podían bajar el ritmo ahora que tenían su objetivo tan cerca. Gaga era una prueba de fuego que tenían que superar si querían mas adelante aspirar a poder enfrentarse contra adversarios mayores y estaba claro ya de entrada que no iba a ser un paseo por el parque.

Aferrando la escopeta con fuerza se preparó para la confrontación que seguro que les estaba esperando en la siguiente planta.

PLANTA BAJA, TALLER

Entre Marc, Elena y Lázaro consiguen reducir al fin al correoso mecánico, que con otro par de golpes y un potente balazo en la espalda, al fin cae al suelo, aún agarrando el taladro.

Tecnovirus por su parte abre y registra el baño de mujeres, y salvo algunos insectos flasheados por la luz estroboscópica, nada se mueve por allí.

RELLANO SEGUNDA PLANTA

Xavier, Ángel y Francisco llegan al rellano, encontrando las puertas cerradas, y viendo en la parte de arriba de la escalera del tercer piso algunos trastos y muebles que deben haber puesto como parapeto.

Gaga grita desde arriba, pero sin dejarse ver.

Vale, capullos, habéis demostrado que tenéis armas gordas. Yo también las tengo, y tengo un parapeto y cuatro tipos aquí arriba. ¿Quién os manda y qué coño quiere? Aún podemos llegar a un trato sin que corran más balas.

Mientras seguía forcejeando, no me fije en mi entorno ni vi a mis compañeros ayudandome... Al menos no hasta que escuché el ensordecedor e inigualable sonido de un disparo. Con ello básicamente cerré los ojos y esperé ver sangre brotando de mí que no haya salido ya por las heridas del taladro.

Afortunadamente al abrirlos veo como mi contrincante se va desvaneciendo y cayendo lentamente al piso y alcanzo a vislumbrar a Katia y Lazaro.

- Gracias - digo mientras me apoyo contra una estantería a reponer un poco de aliento antes de comenzar a caminar hasta donde está el resto del grupo. - Esta perra si que esta bien equipada.

Tengo una idea,que baje el resto de gente, Katia y yo dispararemos hacia el techo, Marc amigo mio tu dispararas a las ventanas y lanzaras dentro garrafas de gasolina como grandes cocteles Molotov y el resto de los chicos que esperen en la escalera, los mataremos como a ratas a esos ladrones de coches, os parece?

Escucho atentamente las palabras de Lázaro, no eran una mala idea, para nada, al menos hasta escuchar los gritos de Gaga y me freno un poco en mis ansias de volarlos a todos al demonio.

- Esperemos a ver que dice Francisco. Hasta donde se no somos sicarios. - digo mientras comienzo a caminar. - Igualmente no esta mal prepararnos por las dudas. ¿Tienes los cocteles listos?

Lazaro mira a Marc incrédulo, y se rasca la cabeza, buena pregunta, bien… déjame pensar….necesitaré clavos y cinta americana, algo de gasolina y… uhmmmm cristal, necesitare unas botellas de cristal… chicos… que el equipo de Xavi mantenga a esos arriba, nosotros buscaremos abajo, con suerte encontraremos todo lo necesario abajo y con un poco mas de suerte aun si estos beben agua… quizás su dispensador de agua sea de esos de crista y hacemos algo gordo gordo!!

Tecnovirus sale del aseo y se dirige a la sala del generador. Ponerlo fuera de servicio pondra seguro bajo tenison a Gaga y sus hombres, que no veran lo que se les viene encima.

-El aseo de mujeres esta despejado. 

Dice a Katia.

-Dice que tiene cuatro tipos con ella arriba. O exagera, o se queda corta adrede. Lo que está claro es que yo en su lugar no diría la verdad. De todas maneras, con un parapeto así, intentar entrar es suicida. La idea de Lázaro es buena.

Me pongo apuntando hacia la única escalera de subida. Si quieren salir de ahí, o vienen por aquí o saltan por la ventana. Por la ventana de mi piso le saco el pulgar hacia arriba a Lázaro: "Cubierto por aquí"

-Vais a asaros como un pollo, mamones...

No me trago que haya cuatro personas ahí, si es así ¿por qué no han disparado desde las ventanas contra Lázaro y los demás?

A voz en grito, Xavier exclama:

-Gaga, vamos a explicarte cómo va esto. Si salís todos con las manos en alto, tus hombres podrán irse y tú viviras para conocer cómo son las cárceles de mujeres de este país por dentro.

Si os resistís, nos iremos y detonaremos el C4 que hemos plantado en los pilares del edificio de oficinas al salir. De cualquier forma estás acabada. Puede que tú y los hombres que te quedan queráis votarlo... Te doy 30 segundos para pensarlo.

Y una polla como la horquilla de una chopper, chaval, ¿Votar? aquí las únicas "botas" son las mías, y como le sigas tocando la moral a mi personal voy a adornarlas con tus pelotas como espuelas. Dijo bastante tranquila pese a todo. Si  es que tenía miedo, era lo bastante fría para no dejarlo ver en su tono de voz. Ahora que se habían cruzado más palabras con ella, se evidenciaba un acento extraño en ciertas palabras, difícil de identificar.

Además, vosotros sois de todo menos polis, o sea que no vais a mandarme al trullo. Hizo una pausa. No soy tan gilipollas, así que vamos a hablar en serio: Sois sicarios, de alguien a quien he jodido, o de algún enemigo de mi padre que quiere darle por el culo, sacarle pasta o lo que sea, y si me quisierais muerta ya habríais tirado el edificio, así que no me vengáis con ostias: ¿Quién me quiere, y cuanto quiere?